Disclamer. Los personajes le pertenecen a Hajime Izayama & Kohske.

Capítulo 1. INICIOS

Los alfas y omegas han existido desde el principio de los tiempos, sin embargo en los últimos años el número de ambos ha crecido considerablemente. Pero ¿Que son los alfas y omegas? Bien, los Alfas tienen un mayor número sobre los Omegas. Los Alfas poseen células demasiado efectivas para dejar en cinta a los Omegas, estos por su parte tienen la capacidad de engendrar vida, ya que cuentan con los órganos necesarios para hacerlo.

Del mismo modo, los Omegas entran en celo por lo menos dos veces al mes. Ellos comienzan a secretar un olor dulce y únicamente es perceptible para los Alfas. Los Omegas, para evitar q su periodo de celo sea demasiado fuerte, deben de tomar una fuerte dosis de supresores y así poder mantenerse a salvo de los Alfas y evitar engendrar una nueva vida.

Bien, es el distrito Ergastulum en el año 2000. El orden entre Alfas y Omegas esta a cargo de los Benriya y La Legión, es por ellos q los segundos hicieron uso de los "tags" para diferenciar a un Omega de un Alfa. Los "tags" no son otra cosa q un par de placas de metal q deben de estar colgadas de su cuello y a la vista...SIEMPRE. Estos contienen el nombre, edad, rango y tipo de sangre de los Omegas.

Los Benriya, son un par de hombres encargados de distribuir supresores a aquellos Omega q no cuentan con los recursos para obtenerlo y también brindar apoyo a los mismos en caso de que lo necesiten.

Era una mañana de invierno, las actividades comenzaban para La Legión, el itinerario: Limpieza del cuartel. Levi, acomodaba por cuadrillas a los soldados para q cada quien limpiase una parte del cuartel en especifico. Una vez q las cuadrillas estuvieron listas, tomaron sus implementos y fueron a limpiar.

Levi, era un hombre de 34 años, tez blanca, rasgos finos, 1.60cm de estatura, delgado pero fuerte al mismo tiempo, mirar grisáceo y cabellos azabaches, su compañero de limpieza: Eren Jaeger, un chico de 20 años, piel canela, mirar esmeralda, cabellos castaños...un Alfa.

—Hey, maldito mocoso..Deja de holgazanear y vamos a limpiar la biblioteca..-dijo Levi mientras tomaba sus implementos de limpieza e iba a la biblioteca.

—Ya voy...heichou..-el castaño tomo sus cosas y siguió al mayor hasta la biblioteca.

Uno limpiaba una parte del lugar y el otro la otra, el silencio reinaba entre ambos. Sin embargo el castaño se atrevió a romper aquel silencio:

—Levi, sobre lo q le dije aquella vez..¿Que ha pensado?, preguntó el castaño mientras se giraba para ver a su superior.

—Que estas idiota...-respondió el otro mientras quitaba unos libros de la repisa y limpiaba la misma.

—Vamos Levi, por favor...

—Tch...ya te dije que no...Eres un mocoso, te llevo 14 años...Estas pendejo si crees q te voy a corresponder...

—Levi...por favor..-el castaño dejo sus implementos de limpieza y se acercó al mayor para abrazarlo por detrás de la cintura- Vamos, solo piénsalo...-suplicaba el castaño, pues apenas unas noches atrás se había confesado ante su superior.

—Ya te dije que no, imbécil...-el mayor le dio un codazo en el estómago al menor- y mas te vale que dejes de estar hablando pendejadas si no quieres que te muela a golpes de nuevo..¿Entendiste, idiota?

El menor asintió mientras yacía en el piso mientras recuperaba el aliento. Levi, comenzó a sentirse mareado y al mismo tiempo comenzó a sudar:

—Mierda...-pensó el azabache sintiendo como el calor recorría su cuerpo y sentía sus mejillas sonrojadas- Termina tu de limpiar este desmadre..-sentenció al castaño mientras él aflojaba su pañuelo y abriendo su camisa, al tiempo sentía que su entrada de humedecía, y dilataba además de que su entrepierna comenzaba a crecer.

Salió rápidamente de aquel lugar para dirigirse a su habitación, mas sus pasos eran bastante torpes y su habitación estaba en la otra ala del cuartel. Caminaba lo mas normal que podía y que su entrepierna le permitía, sin embargo estaba tan distraído que chocó de frente contra el Comandante Smith.

—Ah..Smith, lo-lo siento..-se disculpó el azabache mientras se sostenía del brazo del rubio.

—Levi...¿Te encuentras bien?, pregunto el hombre rubio de 1.80 de estatura, mirar azulado y rasgos finos, duros al mismo tiempo, sin embargo amables.

—¿Ah? S..Si...estoy..estoy bien...Si me disculpas...-se soltó del brazo del rubio y siguió caminando a su habitación mientras sentía como el sudor hacia que su tag se pegaba a su cuerpo- tch..es asqueroso...-se quejaba mientras por fin llegaba a su habitación y la cerraba con llave- ¿Donde mierda están..? ¿Donde?..

El azabache volteó su habitación buscando aquel frasco naranja, hasta que lo encontró en uno de sus cajones. El bote de pastillas solo tenía su última dosis.

—Mierda...tengo que..Hablar con ese maldito tuerto de mierda..-tomó su dosis y se tumbó en la cama- pero..primero necesito una ducha, estoy pegajoso..y es asqueroso...

El azabache se levantó de la cama y comenzó a desnudarse para entrar a la ducha, quito su camisa, pantalón y zapatos, dejando su tag sobre la cama y entro al baño solo con su ropa interior puesta.

Abrió el grifo del agua caliente y esperó a que se calentara un poco, una vez que estuvo caliente comenzó a ducharse con calma y relajando su cuerpo, los supresores lo debilitaban y lo dejaban varios días en cama.

Salió de la ducha con una toalla amarrada a su cintura y otra su cabello, secándolo mientras bostezaba.

—Ah..lo detesto...-se sentó en la cama para vestirse, usando solo un pantalón holgado y una camiseta mas o menos ajustada, peinó sus cabellos y colocó su tag en su cuello.

Acto seguido se recostó en la cama para comenzar a quedarse dormido, sin embargo se levantó y tomó el teléfono de su habitación y marcó aquel conocido número, el teléfono sonó un par de veces para luego ser descolgado y escuchar la voz de un hombre al otro lado de la línea:

—Buen día, gracias por llamar...Benriya al habla..