Basado en la canción: Truly, Madly, Deeply.

La felicidad de la señorita Hooper.

¿Estoy despierta, estoy dormida, o algo más?

No puedo creer que allá pasado, no puedo creer que estés a mi lado dormido.

Volteo a ver al otro lado de mi cama y ahí estas.

¿Es un sueño?

¿Una ilusión?

Me acerco a ti y paso mis dedos por tu cabello.

Suave, despeinado y rizado.

Tu cara es preciosa. Tallada por los dioses del Olimpo.

Me acomodo en mi lugar y me sonrío con triunfo y orgullo.

Todo es como un cuento.

Todos los días, semanas y meses he intentado entrar en tu palacio mental. Probarte, darte mi corazón y que mis noches de insomnio por ti, terminen.

Nunca me imagine esto.

Yo solamente era tu ratoncita, débil y entrenada.

Y ahora, ahora no me avergüenzo de cómo estamos.

No me avergonzare en demostrarte de nuevo lo tanto que te quiero junto a mi, de nuevo, a mi lado…entrelazados.

Estoy en verdad atraída por ti, totalmente callendo.

Y de alguna manera, cediste.

Así que amor, no te vayas. Mantente aquí, junto a mi.

Haz que mi corazón se sienta feliz como esta mañana.

Estoy enamorada de ti.

¿Debo de levantarte?

¿Debo de traerte café y desayuno?

¿Te gustara la granola?

Por ti, te daría el cielo.

No te vayas, corazón.

Quédate aquí, junto a mi.

Me gustaría poder congelar este momento y hacerlo pintura para presumirlo a los demás como una obra de arte.

Revivirlo cada día que lo vea.

Pero lo trágico es que… es que lo más seguro es que tú me regañes, me digas lo tonto que es.

Y mi corazón se desmoronaría si tú lo dijeses.

Espero no ser una víctima más de tu forma de ser.

Que no te levantes y te vayas.

No quiero que eso pase.

Eres mi todo.

Me levanto y camino hacia la puerta, te miro.

Doy una sonrisa y te dejo dormir más, para poder hacer que este recuerdo quede en mi cama, en mi.