Título: La intrusa.
Nota: ¡Heterotalia 2p! (?) Distintas historias de parejas hetero de los Second Player, que serán las siguientes:
Belarus: con Lituania / Estados Unidos
Liechtenstein: con Suiza
Hungría: con Prusia
Vietnam: con Estados Unidos.
Ucrania: con Polonia
De momento, el primero que puse es el principal con el que saldrán, con los demás también habrá capitulos. Son capitulos sueltos, algunos pueden tener relación xD.
¡Podéis pedir las parejas hetero que queráis! Incluso si son crack, da igual, y no solo con las chicas que he puesto aquí, con cualquiera.
Pareja de este capítulo: LietBela.
Advertencias: Second Player. Insultos, groserías... muy mal lenguaje por parte de 2P Lituania, y algo de violencia.
OXOXOXO
Oh, no.
No no no no no no.
¿Cuánto llevaba ella en su casa? ¡Por favor, que se fuera! ¡Que le dejara en paz! ¡Que todas las ventanas estuvieran bien cerradas!
-¡Liiiiiiiiiiit! -La chillona y aguda voz le llegó desde el piso de abajo. El lituano sintió un escalofrío y musitó unas maldiciones en voz baja. Maldita niña loca.
Se preguntó desde cuando estaba ahí, ya que le acababa de despertar con el ruido de lo que fuera que le estaba haciendo ahí abajo. Lituania sintió su estómago rugir de hambre.
La escuchó subir hasta la habitación, su voz se le clavaba en la cabeza como cuchillos, tenía una horrible resaca de la noche anterior. Maldito Polonia, si no hubieran empezado esa estúpida competición para ver quien aguantaba más bebiendo, ahora no parecería que le había pasado un camión por encima de la cabeza.
Se incorporó lentamente y giró la cabeza para verla. Ahí estaba, maldita sea. Como si fuera un rayo rosa, la bielorrusa estuvo a su lado en un nanosegundo, y se subió a la cama de un salto, sentándose a su lado
-Mierda. ¿Qué cojones quieres? ¿Y quién te ha dado permiso para entrar? -Espetó tajante el lituano, al ver que ella parecía tener pensado quedarse desde el primer momento. Eso había que evitarlo.
-Oh, estás de mal humor. -Dijo ella mientras ladeaba un poco la cabeza, sonriendo dulcemente. -¿Necesitas algo?
Lituania frunció el ceño. Le irritaba esa actitud tan... inocente, y dulce, demasiado dulce. Iba a vomitar arcoiris a ese paso.
-Necesito que levantes tu culo de MI cama, que te largues, y, con un poco de suerte, tropieces por las escaleras y te abras la cabeza.
Ella soltó una suave risa.
-Que gracioso. Pero no pasa nada, he venido a cuidarte. Oh, incluso te has acostado vestido... ni siquiera te has quitado los zapatos.
-¿Qué? Estarás de broma. Lárgate, cosa rosada, vas a pegarme la estupidez. ¿Y a ti que te importa cómo me acueste? -La empujó de la cama rápidamente, consiguiendo tirarla al suelo. Ella ahogó un gritito, cayendo al suelo de culo. -Vete, me haces perder el tiempo, y tengo hambre.
-¡Eh! Eres muy bruto... -Protestó. -Por eso Pol dice que no me vaya contigo.
-¿Qué dice ese idiota? -Chasqueó la lengua, molesto, y se levantó para acercarse a ella.
Bielorrusia se olió el peligro y retrocedió, aún sin levantarse, hasta que se chocó con la pared. Le sonrió de manera nerviosa.
-Nada.
Lituania frunció el ceño y se detuvo frente a ella, pisándola una mano, con fuerza, formando una leve sonrisa al escucharla gritar.
-Te he hecho una pregunta. Contesta. -Hizo más presión en la mano de la rubia, que empezó a gimotear. -¿Me has oído?
Oh, le encantaba verla de aquella manera. Era sádico, si, y cruel, pero le gustaba.
-Para... por favor... -Gimoteó ella.
Lituania chasqueó la lengua y dio un fuerte pisotón. Escuchó sus dedos crujir bajo su bota militar, y ella volvió a gritar.
-Agh... deja de gritar, me duele la cabeza. -Chasqueó la lengua y dejó de pisar su mano. Ella la apartó rápidamente, sollozando.
-Lo siento.
-¿Eh? -El lituano arqueó una ceja, agachándose para quedar a su altura. Ella se encogió, temerosa. -¿Qué dices?
Bielorrusia negó con la cabeza, mientras un par de lágrimas rodaban por sus mejillas.
-Contesta. -La agarró del pelo, obligándola a levantar la cabeza.
Pero ella no dijo nada, simplemente siguió llorando.
Lituania chasqueó la lengua con cierta molestia y la soltó bruscamente, haciendo que la cabeza de la chica de ojos rosas golpeara contra la pared. Él se sentó en el borde de la cama tranquilamente y encendió un cigarro, mientras sacaba su móvil del bolsillo.
Marcó y esperó a que contestaran.
-¿Polonia? -Dijo con sequedad al recibir el "¿si?" del otro lado de la línea. -Llévatela de mi casa, ya, antes de que la mate del todo. Y... -Le dirigió una breve mirada a la bielorrusa. -Prepara vendas.
Colgó antes de que el polaco pudiera replicar a eso. Se llevó el cigarro a la boca y se acercó a Bielorrusia.
-Ya viene el otro idiota a salvarte el culo.
Soltó el humo en dirección a la cara de la chica, que empezó a toser.
Minutos después, Polonia entró por la puerta, con su habitual desarreglado cabello y ropa, parecía que acabara de despertarse y se hubiera vestido con lo primero que había cogido de su armario.
-¡Pol! -Exclamó la bielorrusa, alegre.
-¡Joder! ¿Se puede saber por dónde demonios entráis a mi casa? ¿Es que no sabéis llamar a la jodida puerta? -Protestó el lituano.
Polonia le lanzó una mirada de odio, que fue respondida, y se acercó a Bielorrusia.
-Oh, Bela... -Soltó un suspiro, cogiendo la mano de la rubia con delicadeza. -¿Otra vez?
-¡Fue culpa mía! -Dijo ella rápidamente, algo nerviosa. Se levantó con ayuda del polaco, que salió de ahí lo más rápido que pudo, no soportaba a Lituania y prefería no estar cerca de él.
Ella se giró hacia Lituania antes de salir por la puerta, siguiendo al polaco. Le dedicó una dulce sonrisa.
-Te dejé unos blinis* en la cocina, Lit.
oxoxoxoxoxo
*Blinis: Dulce ucraniano, son como unas tortas que pueden rellenarse de chocolate, miel, o de lo que quieras.
¡Fin del primero! ¡Papeles invertidos, la que acaba con los dedos rotos es ella! Muahahaha (?) Pobre Bela.
En fin, me gustaría que propusieran alguna pareja hetero para el próximo cap, cualquiera que os guste o simplemente quieran ver como queda xD
