Hola! Cómo están? Este es el primer fic que me atrevo a publicar, a si que desde ya pido disculpas por cualquier error en la ortografía/puntuación/narración.
Espero que lo disfruten!
Disclaimer: "South Park" y sus personajes no son de mi propiedad, por otro lado, la historia si es mía.
Ese era el tercer Jack Daniel's* de la noche.
Damien dejó los papeles a un costado mientras bebía de su trago, al terminarlo, se estiró en su silla haciendo crujir los huesos de su espalda, denotando que había permanecido en la misma posición durante demasiado tiempo.
¿Quién pensaría que un lugar como el averno conllevaría tanto papeleo? Cualquier persona supondría que todo sería fiestas y rock pesado, aún mas siendo el heredero de Satán, pero no, todo lo contrario.
Ese maldito lugar era igual a Disney Company, pero con más ajetreo.
Cada alma pecadora tenía su propio archivo, sin contar, los cientos de expedientes que pertenecían a los demonios ambulantes. Y todo eso debía ser registrado. ¿Y de quién era ese trabajo? Del Anticristo, ya que "como futuro heredero, era su responsabilidad aprender como se regía el Infierno y bla bla bla", a ese discurso se lo había escuchado miles de veces a su padre, luego, éste se iba de vacaciones con su novio.
El pelinegro miró la hora. Todavía faltaban 45 minutos para la medianoche. Era raro que Pip no estuviera detrás de él molestándolo con que ya era muy tarde para estar trabajando, su paseo se había alargado más de lo esperado.
Estaba a punto de volver a los papeles, cuando su celular empezó a sonar por una llamada entrante. Al ver el identificador, sus ojos brillaron.
-Pip.
-…
-…
-Perdón Damien.
-¿Dónde estás?
-No sé, parece ser una zona industrial, hay un descampado.
-Mmm...ya sé dónde es. Estaré allí en 30 minutos.
-Gracias –minutos de silencio- ¿Damien?
-¿Qué pasa?
-Te amo.
El pelinegro se levantó de su escritorio y tomó las llaves del auto.
-Yo también.
El Anticristo disminuyó la velocidad del automóvil para buscar al rubio; lo encontró pocos metros más adelante en un sitio baldío. Estacionó y se acercó a su novio lentamente.
Usualmente, para él, Pip le era una persona muy atractiva, con su cuerpo menudo y su cabello dorado enmarcando el rostro. Sin embargo, el verlo así, tenía que usar todas sus fuerzas para controlar su deseo y evitar echársele encima.
Sus rasgos angelicales se volvían más angulosos con el brillo anaranjado del fuego, la sangre seca manchaba toda su pechera y se extendía por ambos brazos, la navaja que le había regalado por uno de sus cumpleaños se encontraba aferrada a su mano derecha, los ojos vacíos miraban como el auto se consumía lentamente por las llamas, y todo eso, se adornaba con la sonrisa macabra que Damien estaba seguro no sabía que tenía.
Al llegar a su lado, el rubio volvió en si y lo abrazó escondiendo la cara en su pecho.
Es normal que dos personas, luego de mucho tiempo juntos, se le contagien las manías del otro. Ejemplo era que Tweek le haga una seña obscena a quien lo moleste o que Kyle se tome el puente de la nariz cuando la situación lo supera. A Damien también se le habían pegado varias costumbres de Pip, se acostumbró a tomar té, tenía una mejor comunicación con su padre, incluso pedía disculpas cuando tropezaba con alguien.
Con respecto a Pip...bueno, digamos que el gusto por el fuego de Damien no fue lo único que se le pegó.
*marca americana de whiskey
Pido disculpas si algún fan de Disney ha leído esto, yo también lo soy, pero justo estaba viendo la película de los Simpson y apareció la parte de Bart imitando a Mickey mouse, me reí demasiado con esa escena, debía poner esa referencia.
Espero que les haya gustado, cualquier comentario es bien recibido; háganme saber si sirvo para esto o mejor vuelvo a mi cueva.
Besos y abrazos.
