Estúpida úpido Sikowitz ¡ESTÚPIDOS TODOS!¿Porque demonios la estúpida de Vega no podía aprenderse el guión?¡PORQUE!Ahora por su culpa son casi las ocho y todavia estoy en Hollywood Arts.

-Jade.-Me llamó Vega caminando detras ignore y me diriji a mi casillero.

-Jade.-Me volvío a llamar enfadandome más.

-¡JADE!-Me grito jalandome del brazo que al instante aparte.

-¿Que demonios quieres Vega?¿No has tenido suficiente con la caida que ahorita quieres mis tijeras clavadas en tu cranéo?-Trago saliva sonoramente y se alejo de mi a una distancia molesta y volví hacia mi casillero decorado con tijeras.

-Lo siento.-Se diculpo la mitad latina con la cabeza agachada como si fuese una niña pequeña siendo regañada por sus padres.

-Disculpas no aceptadas Vega.Y ahora mismo desaparece de mi vista.-Le ordene poniendo la clave y abrir la puerta del a meter los libros en el casillero hasta que un carraspeo hizo que me girase hacia atrás encontrandome con...¿Adivinen que? í a mi labor otra vez hasta que otro carraspeo se escucho por el la morena no era ya que la voz era más grave que la de ella pero se notaba que era de una mujer.

-Aqui arriba.-Dijo una voz encima de mi con rapidez mi cabeza encontrandome con una chica de cabellos castaños oscuros y ojos almendrados.-¿Porque eres tan cruel con la pobre chica?-Pregunto con el ceño una ceja soprendida de que aquella chica que nunca había visto se hubiese subido encima de los casilleros y estaba tumbada en ellos como si fuese una cama.-¿Que te cuesta ser amable?-

-¿Y a ti que te cuesta irte a molestar a otra persona?-Le pregunte evadiendo su pregunta aunque me importaba muy poco.

-Oh que modales los me llamo Clara.-Extendio su mano derecha hacia mi y yo en un acto de diversión para mi y de dolor para la chica estreche su mano y la jale hacia atras provocando que la chica se cayese.

-Jajajaja.-Comenze a reirme como una loca al ver a la chica que aparentaba tener no más de quince años rodar por el suelo tapandose el rostro con las manos y gemir de dolor.

-¿Jade de que te ries?-Me pregunto Vega mirandome confundida.

-¿Estas ciega o que?-Detuve mi risa a causa de la falta de oxigéno y por el dolor de mi estomágo.

-Pues claro que no,es solo que no entiendo de que te ries.-Frunci el ceño hacia la chica de antes pero me soprendio de que no estuviese ahí.

-¿Y a ti que te importa?-Cerre con fuerza el casillero y me diriji hacia la entrada/salida.

-Jade espera.-Me volvío a llamar Vega un poco tarde ya que estaba a unos cuántos metros de mi auto,sino fuese por Vega me abría llevado mi novio y estariamos en una sesión de besos sin mitades latinas en medio ni chicas raras que aparecen encima de casilleros.

Abri la puerta del piloto y me senté dejando mi café casi vació en el porta el auto y saolí de allí viendo como Vega se subiá a su motocicleta.Sí por fin se saco la licencia para poder conducir una moto.

Conducía por las calles de L.A en total tranquilidad y de fondo se escuchaba la canción Y Want To Break Free de cansada,detuve el auto en un semaforo en rojo y cerre los ojos un momento en busca de paz y tranquilidad.

-Dificílmente lo conseguiras.-Di un respingo al escuchar una voz en mi oido el rostro encontrandome con unos ojos almendrados y una sonrisa divertida.

-¡Como demonios entrastes en mi auto!-Saque mis tijeras afiladas que escondia en la cintura sujetada por mi mis tijeras enfrente suya e con una velocidad sobrehumana me arrebato las tijeras tirandolas al asiento contigüo.-¡Mi tijeras!-Saque otras de un de mis boptas y volvío a repetirse la misma escena de antes.

-¿Cuantas más te quedad bonita?-Pregunto volviendo a lanzar las tijeras pero está vez las lanzo por la ventanilla del copiloto.-El semaforo se puso en verde.-Los pitidos se escucharon por toda la un poco más la ventanilla sacando la cabeza por ella y con todo mi mal humor les grite a los conductores.

-¡CALLENSE DE UNA PUTA VEZ!-Grite instante se dejaron de escuchar pitidos,volví a meter la cabeza y por el espejo retrovisor pude ver a aquella chica con una de mis tijeras en la mano jugando con ellas.

-Que poderío...-Susurro divertida dejando de jugar con las tijeras y me miro por el espejo al igual que miradas se cruzaron y sentí un escalofrío recorrer mi espalda haciendome temblar un poco.-Vayamos a por un café y te lo cuento todo.-Le hice caso y continué mi camino desviandolo hacía una cafetería aún sin dejar de mirar por el retrovisor a aquella chica que estaba muy tranquila mirando por la ventanilla...