DISCLAIMER

Los personajes pertenecen a Thomas Astruc, el escrito fue inspirado por la canción cover de Moira dela Torre: Take Her to the Moon For Me. Créditos al respectivo autor de la imagen. Es un song-fic.

CLASIFICACIÓN

T

SUMMARY

Intentaba alejar cualquier presentimiento negativo de su relación con Adrien. Las cosas entre ambos habían estado decayendo. ¿Qué pasará?

No importa lo que haga, sigo sintiendo que regresas a mí.

Miraba la luna, su cuarto ahora completo por imágenes en las que estaba junto a la persona que amaba y por la cual, se suponía era correspondida, parecía un engaño completo.

No miraba las fotos, pero tenía presente, mientras cerraba los ojos, cada uno de los recuerdos que representaban aquellas fotografías; esas sonrisas, las caricias, el amor que destilaban. Parecía mentira.

¡Cuánto extrañaba a Adrien! Él que la miraba de frente, causándole un revuelo de mariposas mientras él mismo le decía: "Adoro ver tu rostro, my lady".

El Adrien que la llamaba en cuanto obtenía un pequeño receso de su apretada agenda. Se recordaba riñéndole que no era necesario mientras ahogaba su emoción de oír de nuevo su profunda voz, y él tan sólo respondiéndole "¿Cómo qué no es necesario mi dulce Mari? Siempre ansío escuchar de nuevo tu hermosa voz"

El Adrien que la saludaba con un beso en cada encuentro.

Sin embargo ahora tenía al Adrien que daba largas cada que llegaba tarde a una cita.

Al Adrien que en vez de pedirle verse después de acabar con un akuma para celebrar, le decía que iría a continuar con algún estudio que había dejado pendiente.

Al Adrien que en cuanto llamaba para intentar escucharlo le respondía por medio de su contestadora "Ahora mismo estoy ocupado, si eres Mari, en cuánto pueda te regresaré la llamada".

La pequeña kwami al despertar vio a su portadora sentada en la silla de trabajo mientras miraba fijamente a la luna. Negó con la cabeza, había visto el nacimiento de la relación de ambos y el cómo paso a pasito de caracol se había estado alejando Adrien, se lo comentaba bajita la mano a su portadora, pero ella hacía oídos sordos, hasta que habló aquella tarde con su amiga morena, quien le planteó las cartas del asunto seria.

—¿Te estás convenciendo de que lo que te dijo hoy Alya es verdad? —cuestionó mientras se sentaba en su hombro la pequeña mota.

—Podría entender su actitud distante en caso de que estuviéramos en periodo de exámenes, o por el ingreso a la universidad, pero ya acabamos el parcial y para lo de prepararse para la universidad aún falta un año; Tikki, lo extraño mucho, ¿por qué será su alejamiento?

—La verdad saldrá a la luz tarde o temprano Marinette —soltó su kwami.

—No soy una persona impaciente y lo sabes, pero la duda me carcome por dentro, Tikki —agregó mientras se acomodaba cabizbaja en el escritorio.

—Marinette, tranquila. No pienses más en ello, mejor ve a dormir; mañana tienes clases temprano, a parte de que tienes que exponer en el primer módulo, ¿o no? —La aludida no pareció importarle mucho ese hecho, Adrien últimamente faltaba a los dos primeros módulos y ni ella sabía con certeza el por qué de su ausencia. –Recuerda que no puedes quedarte dormida en medio combate contra un akuma, lo Chat Noir la pasaría muy mal sin su compañera.

Finalmente giró el rostro a su kwami.

—Sólo dame unos minutos más —Tikki la miró seria—. ¿Por favor? —suplicó.

La mota suspiró —Sólo un minuto más, Marinette.

En el minuto que le concedió la kwami, Marinette cerró los ojos intentando despejar su mente de cualquier embrollo, precisamente intentaba alejar cualquier presentimiento negativo de su relación con Adrien. Medio segundo después cayó en el mundo del sueño. Esa noche se quedó dormida en su escritorio pensando en que quizá mañana recibiría una llamada de Adrien resolviendo cualquier incertidumbre.

Eso no ocurrió.

Ni en la mañana, la tarde o la noche del día siguiente.

Ni tampoco al que proseguía.

No hubo llamadas ni explicaciones en los posteriores días.

Hola, vengo con un fic, de capítulos cortitos. Espero entretenerlos un poco.

¿Review?