Mi primer escrito sobre el mundo de Danny Phantom, inspiración de media hora, y tal vez una introducción de un nuevo proyecto.

Es una escena perdida de Enemigos Públicos, la cual tiene como protagonista a Dan Phantom.

Los personajes pertenecen a Butch Hartman y Nickelodeon, yo solo lo uso como vía de escape a mis ideas y pensamientos y lo doy a conocer sin fines lucrativos.

Su trama es propiedad de la autora y no doy permiso a que se publiqué en cualquier otro sitio.

No al Plagio.

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Confesiones bajo la Luna

Aunque me deshice de mi parte humana y todos esos sentimientos inútiles, no he podido olvidarla cada noche veo su rostro reflejado en la luna, que llena espera y guarda cada uno de mis miedos, mis remordimientos y sentimientos, ella es mi confidente y consejera mis ganas de matar y atormentar a esos viles humanos desaparecen cuando la contemplo y mis recuerdo, como pesadillas vuelven.

Lo único que vale la pena al mirarla es que recuerdo cada uno de los momentos que pase con ella, sus palabras y su aroma. Su aroma, mi memoria lo reproduce como si fuera real, como si estuviera a mi lado aconsejándome y dándome ese apoyo incondicional que malinterprete como fraternal; a veces he llegado a pensar que, sí ella siguiera con vida, sí hubiera sobrevivido no me habría convertido en esto, en este ser sin sentimientos que solo deambula por esté mundo, solo, cuyo único placer es hacer de la vida de los demás un reflejo de la mía, que sepan lo que yo estoy sintiendo ahora, lo he estado sufriendo por tanto tiempo.

Daría todo, todo por verla una vez más, por sentirla cerca de mí, por sentir su aroma y sus latidos, por escuchar sus reclamos y consejos, daría lo que no tengo, soy capaz de dejar esté mundo como estaba antes solo para saber que está con vida y terminaría así esté martirio que solo he creado…y que ahora es mi único consuelo, mi único compañero.

Donde quiera que estés, espero que seas feliz y que no veas en lo que me convertí, porque sé lo decepcionada que estarías y no quiero que olvides que te sigo amando como el primer día que te conocí, como el primer día que lo negué y aunque haya mutilada mi lado humano, mis sentimientos, por alguna extraña razón, carente de lógica alguna, siento amor por ti y es lo que más me atormenta lo que me hace desear una muerte que nunca llegara; por eso mató, por eso destruyo, para quitar y aniquilar cada parte de este sentimiento, de estos recuerdos que solo la Luna es capaz de ver, y a la que cada noche le confieso mi amor por ti.

Aunque sea oscuro, aunque sea cruel donde quiera que este espero que el viento, mi fiel mensajero, te lleve estas palabras de amor por ti, porque no importa los años, no importa que la Luna me deje, yo a ti te amé, te amo y siempre te amare.

Sam, mi amiga, mi confidente mi amor, te amo.

Bajo el cielo hoy despejado, se puede ver una figura flotando y acercándose sigilosamente a aquella estatua, la cual adornada de diversas flores como cada año, no refleja el paso del tiempo pero si el dolor y la amargura. La persona deja una rosa roja bajo la imagen de Samantha Manson y junto a ella un cristal de hielo en forma de diamante, el cual nunca se derretirá.