La historia original que dio origen a esta versión y los personajes pertenecen a S.M, lo demas es todo mio :)
Era nueva en Forks. Odiaba eso. Odiaba la humedad, la lluvia, el frio. Odiaba ser el centro de atención por ser la nueva en el pequeño pueblo de Forks, en el estado de Washington, tan solo con una población de 3.120 personas. Era el lugar más lluvioso de los Estados Unidos, estaba cubierto de verde musgo, árboles, bosque. Simplemente lo odiaba.
Eh vivido junto a mi madre en Phoenix toda la vida y solo venia por temporadas de vacaciones a lo de mi padre – Charlie. Al casarse mi madre nuevamente con Phil decidieron comenzar de nuevo en otro lugar, Phil viajaba mucho debido a su trabajo y yo no podía vivir haciendo nuevos amigos, de hecho no recuerdo tener amigos, por lo que decidí pasar una temporada con mi padre hasta acabar el instituto, sería bueno mejorar mi relación con él, ambos éramos suficientemente solitarios y silenciosos, nos parecíamos bastante en eso, y nos queríamos mucho, a pesar de no demostrarlo a seguido.
Mis primeros días en Forks fueron buenos, no había nada nuevo, me juntaba seguido con Jacob el hijo de Billy que vivía en la reserva, eran miembros de la tribu Quileute. Jacob era un joven de 16 años con el cabello largo, tez morena y muy hermoso además de ser un buen amigo. Mi padre me regalo una camioneta-bastante vieja pero por extraño que parezca, perfecta para mí- que se la compro al papá de Jake. Jacob por su parte solía arreglar motocicletas y las usaba constantemente, me llamaban la atención y me gustaba la adrenalina y la velocidad asique solíamos salir en su moto a dar largos paseos.
El día más temido llego, comenzar el instituto a mitad de semestre. Al llegar todos me miraban como si yo fuera el juguete nuevo- en parte si lo era. En la hora del recreo unos chicos con los que había comenzado a hablar me llevaron a su mesa en donde había otras chicas. Se presentaron como Ángela y Jessica, siendo los chicos Tyler, Mike y Eric. Todos parecían muy amables exceptuando Jessica, es decir, también era amable pero parecía algo envidiosa, creo que era porque yo equiparaba toda la atención al ser nueva.
De repente vi entrar a la cafetería a cinco jóvenes realmente apuestos, llamaban la atención de todo el instituto, eran dos chicas y tres chicos, todos blancos pálidos como la nieve, y extremadamente hermosos y esculturales, con los ojos dorados. Eran simplemente hermosos.
-¿Quiénes son esos?- pregunte curiosa
- Son los Cullen, hijos adoptivos del Dr Cullen y su señora- dijo Jessica- lo extraño es que exceptuando Edward, el de pelo cobrizo alborotado, los demás están en pareja entre ellos, Edward es el único soltero, y aparentemente ninguna chica es lo suficientemente buena para él- dijo con cierto resentimiento.
-¿Andan entre ellos?- pregunte sorprendida.
- Si Bella, es raro, no se relacionan con otros porque son de verdad raros, pero después de todo no están emparentados asique no es tan malo–dijo Ángela sonriendo, ella sí que me caía bien.
- La rubia es Rosalie, anda con Emmet, el musculoso- dijo Jessica, luego continuo- la duende, como le decimos nosotros, es Alice, ella es realmente rara, y anda con el rubio que parece que está sufriendo, Jasper... el otro ya te dije, es Edward... no pierdas el tiempo con ellos Bella.
- No planeo hacerlo- conteste insegura.
Me quede mirándolos, eran muy extraños, toda la situación era extraña. Cuando llego la clase de biología me toco sentarme al lado del famoso Edward Cullen, quien me miro de manera asesina durante toda la clase, sin omitir ni un sonido, ni un movimiento, parecía como que no quisiera estar allí, me pareció muy extraño, comenzó a darme miedo. Al tocar el timbre fue el primero en salir, aparentemente no era mentira que eran raros, y que no se juntaban con nadie, parecía que yo lo hubiese molestado.
Al llegar a mi casa me puse a hacer mis deberes y espere hasta que llegue Charlie, cuando este llego prepare la cena y le pregunte sobre los Cullen.
- Papá, ¿Qué sabes de los Cullen?- pregunte mientras tragaba un pedazo de carne.
- Los Cullen eh- dijo y se pauso un momento, tomando una cerveza- son buenos chicos, hasta ahora ninguno trajo problemas o algo similar, son hijos del Dr Cullen.
- ¿Son adoptados no?
- Eh sí, el Dr Cullen es una excelente persona y doctor, ¿Por qué el interrogatorio? ¿Te hablo alguno en clases?- pregunto intrigado.
- Oh no, simple curiosidad- conteste y seguimos comiendo, en silencio, habitual entre nosotros.
Al pasar los días note que Edward había dejado de ir al instituto, y cada vez que miraba a sus hermanos estos me miraban extrañados, no sé qué clase de personas eran, pero debía enfrentar a Edward, saber por qué ese comportamiento conmigo.
Siguieron pasando los días y Mike me invitaba a salir todo el tiempo, y yo ya me cansaba de rechazarlo, solo quería que seamos amigos, no quería ganarme a Jessica como enemiga. Edward seguía sin aparecer y cuando finalmente me rendí fue cuando se digno a aparecer.
Me senté a su lado en biología, un poco insegura, nerviosa y algo asustada, él me saludo como si nada hubiera pasado, y se presento amablemente.
- Hola, soy Edward Cullen, ¿tú debes ser Bella verdad?- dijo sonriendo de costado, era muy hermoso y seductor, me ruboricé por completo.
- Emm sí, soy yo- dije pestañeando varias veces- discúlpame, ¿acaso te caigo mal?- pregunte luego de un rato, un poco nerviosa.
- A ver... caerme mal- dijo dubitativo y luego río fuerte- ¿Por qué lo dices?- pregunto divertido.
- Se que es raro y ni siquiera nos conocemos, pero me diste esa impresión la vez pasada, y porque desapareciste durante varios días...
- Oh, no lo tomes personal, son solo cosas mías- dijo sonriendo y esquivando la mirada.
Hablamos un poco sobre nuestras vidas, en realidad hable más yo que él. Me parecía alguien bastante extraño, despertaba en mi una sensación de seguridad y temor a la vez, me atraía todo hacia él, pero también quería alejarme lo antes posible, ¿acaso era real?
Ese mismo día a la salida del instituto yo me encontraba en el estacionamiento al lado de mi camioneta mirando hacia Edward Cullen, del otro lado del estacionamiento, este también me miraba, y en un santiamén oí rugir la van de Tyler y vi que se dirigía hacia mí a toda prisa. Era mi final.
Lo último que recuerdo es que desperté en el hospital. Tenía un grave dolor de cabeza y sentía que tenía mi brazo enyesado. Al lado mío se encontraba Charlie bastante preocupado.
- Papá ¿Qué es lo que sucedió?
- Bella despertaste- dijo serenamente- tuviste un grave accidente, estas viva de milagro.
- ¿Qué sucedió?- pregunte nuevamente.
- La camioneta de Tyler estrello contra la tuya, el pudo frenar a tiempo pero aun así logro golpearte y fracturar tu brazo provocando que caigas y te golpees fuertemente la cabeza, pudo haber sido peor- dijo alterado.
-No fue para tanto, estoy bien, veras que en unas semanas ya estoy completamente sana- dije optimista.
- No lo sé Bella, iré a hablar con tu madre.
- ¡Le avisaste! ¡estará histérica! ¿está aquí?
- No, descuida, pero deberé llamarla y mantenerla al tanto, es tu madre Bella- dijo y de repente entro a la habitación un muchacho alto, rubio o más bien con cabellos dorados, bien formado, extremadamente blanco y pálido, con los ojos dorados y una sonrisa y a la vez mirada picara.
- Hola Isabella, soy Carlisle, tu doctor- dijo amablemente.
- ¿Se pondrá bien?- pregunto Charlie.
- Ya esta despierta, es todo un logro- dijo Carlisle mirándome de reojos.
- ¿Eres el padre de Edward?- pregunte, me extrañaba el gran parecido entre ellos a pesar de no ser parientes de sangre.
- Sí, calculo que lo conoces ya- comento esquivando mi mirada.
-Oh, solo un poco.
- Iré a hablar con tu madre Bella- dijo mi padre yéndose de la habitación, dándole la mano a Carlisle en lo que me pareció un gesto muy amistoso.
- Bueno Isabella- continuo Carlisle- permíteme revisarte.
- Por favor, dígame Bella- inquirí delicadamente.
- De acuerdo, Bella- dijo y sonrió acercándose a mí para revisarme, tomando su pluma luz linterna para revisar la dilatación de mis ojos.
- ¿Cuándo podre irme de aquí?- pregunte mordiéndome los labios, a lo que él sonrió.
- Deberás quedarte por unos días más, debes recuperarte bien Bella, me encargare de eso- dijo Carlisle acariciando mi rostro de manera gentil. Sentí su piel extremadamente fría, como si del hielo se tratase. Temblé ante su tacto, sentí como si una corriente eléctrica me dominara, como si hubiera habido un corto circuito. Calculo que él también lo sintió porque saco su mano de inmediato esquivando mi mirada, y no sé por qué, pero de inmediato tome su mano para que no la sacase, me sonroje por completo por mi actitud y él me miro sorprendido. Nos quedamos en silencio por unos segundos en donde me quede perdida en sus profundos ojos dorados y el interrumpió el singular momento dándome un beso en la frente y diciendo "debes descansar Bella, mañana temprano pasare a verte" luego se marcho de inmediato como queriendo escapar.
Lo que sucedió fue un tanto extraño, pero no extraño como con Edward, extraño de una manera linda, tenía la sensación y emoción de quererlo volver a ver...
Es un capitulo corto lo sé, solo que no sé como tomaran esta historia. veran que tomo mucho del libro y de la pelicula, porque es la base de la historia, pero toma un giro diferente luego, a medida que pasen los capitulos tal vez hayan algunas perlitas de los libros y/o pelicula :P
espero que les guste, dejen sus reviews para que yo sepa si continuar o no ! muchas gracias de antemano ! espero que les guste :)