Aún hay una oportunidad Chapter 1: Recuerdos de desdicha, a naruto fanfic

Aún hay una oportunidad.

Resumen completo:

Sakura resulta gravemente herida en batalla, y casi al borde de la muerte, es salvada por la persona menos esperada. En este reencuentro Sakura acompañará a Sasuke en su viaje. Durante su aventura se desarrollarán sentimientos que la pelirrosa creía perdidos, ¿Serán correspondidos? , pero más importante aún, ¿Podrá traerlo de nuevo a Konoha... su verdadero hogar?. Se había presentado una oportunidad, y ella iba a aprovecharla. SASUSAKU. La mayor parte del la historia, será desde el punto de vista de Sakura.

Géneros: Romance, Drama y Humor.

Descargo de responsabilidad: Naruto y sus personajes no me pertenecen, lo único mío aquí es esta historia.

Capítulo 1: Recuerdos de desdicha.

Hola, soy Sakura Haruno, tengo diecisiete años y actualmente me dirijo a Konoha, mi aldea natal. Estaba de misión, lo cual consistía en recibir un pergamino de parte del Kazekage de Suna, o sea Sabaku no Gaara o simplemente Gaara.

No sé realmente de qué se trataba el pergamino, ni debo saberlo, debe de ser algo muy importante que sólo los Kages pueden saber, bueno, eso es lo que pienso yo, ya que mi buen amigo pelirrojo me pidió que cuidara con mi vida de aquel rollo.

Sentía las ramas partirse en mis pies, uno de mis mechones rosas de mi cabello calló frente a mi rostro; el clima era agradable y todo estaba tranquilo, lo cual era extraño. Me estaba asustando, sentía que algo me asechaba, que me atacaría en cualquier momento o lugar.

Negué con la cabeza, alejando aquellos malos pensamientos- Si pienso en ello podría pasarme de verdad- me dije. Tal vez se trate de ANBUS, no, no lo creo, yo le pedí con todo respeto a Tsunade-shishou… ¡digo!, Hokage-sama que no asignara a ANBUS para escoltarme en mi misión, yo puedo cuidarme perfectamente sola. Hokage-sama no estaba muy convencida, pero lo dejó pasar y aceptó sin réplica.

Ya estaba cansada, y decidí que era el momento de parar y descansar, porque ya estaba atardeciendo- Tal vez debería acampar- me dije en voz alta. Llegué a un claro, y me dispuse a preparar todo, pero seguía teniendo ese mal presentimiento.

Una rama se partió… y luego se escuchaban pisadas en las hojas secas de los árboles que se encontraban en el suelo. Miré con cautela, yo ya estaba preparada, quien fuese que estuviese allí, debe dar la cara.

Fue todo muy rápido…

En menos de un segundo alguien estaba detrás de mí, con un Kunai firme en mi garganta.

-Entrégame ese pergamino- dijo una voz fría, lo cual envió escalofríos por mi espina dorsal. El cuchillo en mi cuello estaba asquerosamente helado. Tragué duro y me atreví a preguntar- ¿Quién eres?

El hombre se rió, no era agradable, me estaba poniendo nerviosa. Aquella persona podía matarme en cuestión de segundos, ¿Pero por qué no lo ha hecho aún?

-¿Responderás o no?- lo desafié, y esperaba no tener que arrepentirme luego. Mi enemigo dejó de reír, y me respondió con aquella voz espeluznante- ¿No me conoces?- se burló. Una vena se hinchó en mi frente, este tipo me estaba enojando, ¿Quién demonios se creía que era?

-Claro que no te conozco, ¿Por qué te preguntaría entonces?- yo secamente le respondí. De inmediato me di cuenta que, eso al enemigo no le gustó y apretó el kunai en mi garganta con más fuerza.

Envié Chakra a la planta de mis pies, si aquél hombre me iba a matar, al menos procuraría dejarlo sin descendencia antes de que lo haga.

Sin previo aviso lancé mi ataque, pero me sorprendí, ¡El muy desgraciado lo había esquivado!, ¿Cómo era eso posible, si él se encontraba detrás de mí?, ¿Cómo se dio cuenta?.

Todo eso ya no importaba, porque en un movimiento rápido fui tirada al suelo. Fue doloroso, pero no era momento para llorar cómo un niño que se hirió la rodilla mientras jugaba, me estaba enfrentando a un enemigo que al parecer, estaba muy enfadado.

Levanté la vista, y vi a un hombre, alto, con una capa negra y con nubes rojas, y tenía una máscara de color naranja, la dicha tenía un solo agujero por el cual ver, y se podía notar su Sharingan. ¡Ese tipo era un miembro de Akatsuki!, ¡Y también es un Uchiha!

-¿Quien demonios eres y que quieres de mí?- le pregunté de nuevo. No sé como es que sabía qué él era un Uchiha, ese Sharingan podría ser robado, pero no lo creo.

-¿Que no fui claro?, quiero ese pergamino que llevas, y no te diré quien soy, al parecer no pudiste deducirlo con sólo mirarme- el maldito se burló. Grr cómo quería romperle esa maldita máscara que llevaba puesta, el muy bastardo, ahora si que lo sé, él era un Uchiha, al tener esa actitud arrogante que siempre llevan.

De un salto me puse de pie, como si nada hubiese pasado, reuní Chakra en mi puño, ese tipo iba a morir.

-¡SHANNAROO!- exclamé y corrí a él... pero de nuevo no lo podía creer, aquél enmascarado lo había esquivado... de nuevo. Ahora me encontraba en el centro de un gran cráter.

-Umm, tengo que admitir que eso podría haberme matado, que suerte la mía- ¡Ahg!, ¡Maldito idiota!, seguía haciéndolo, seguía burlándose de mí -¡Y definitivamente odio eso!- corrí de nuevo hacia él.

De un golpe derribé un árbol, y el siguiente, el siguiente del siguiente, y de nuevo... el siguiente, y el siguiente también, ¿y por qué no?, el siguiente.

Reuní todo el Chakra que podía de nuevo en mi puño, haré todo lo que pueda para que ese imbécil no llegue a su casa sano y mucho menos con ese pergamino, ya que no creo poder matarlo.

El tipo saltó del árbol en el que se encontraba, se quedó de pie allí, como esperando que lo atacara, ¡Ja!, si cree que podrá esquivarlo, está muy equivocado, eso no se repetirá.

Comencé a correr hacia él, pero este no se movió, y lo golpee... Esperen, ¿Lo golpee?, no... ¡Pasé a través de él!

-¿Pero que demonios fue lo que pasó?, ¿Quien diablos es este tipo?- aquellas preguntas que rondaban en mi cabeza, fueron interrumpidas por una fuerte patada en mi espalda, lo cual me mandó a volar hasta chocar dolorosamente contra un árbol. Mi furia aumentó, esto no se quedará así, ¿Cómo pude distraerme ante mi enemigo?

-Niña, tú no podrás ganarme, entrégame ese rollo si aún quieres conservar tu vida- me dijo, mirándome fijamente y con los brazos cruzados.

-Ja, ni en tus sueños- le respondí. Él gruñó, y de repente, no lo entendía, pero parecía estar absorbiéndose a sí mismo utilizando su Sharingan.

Y desapareció... ¡Desapareció!

-¡El maldito huyó!

-...¿Quien ha huido?

No pude evitar dar un grito, ¡Apareció detras de mí!. Me tomó del cuello se mi camisa, y de repente me entró el pánico. Se las arregló para quitarme el pergamino y sacó un kunai. He fallado, no pude proteger el rollo, cerré los ojos y sonreí- Si voy a morir... al menos debería saber tu nombre, creo que es lo justo- yo dije con amargura, aún que no me agrade la idea de ya no estar en este mundo, morir en manos de alguien quien ni siquiera sé su nombre, bueno... a mí por lo menos, no es que me guste mucho.

Casi lo sentí sonreír- Yo soy... Madara Uchiha...

-¿Que...- sentí su kunai atravesar mi pecho, una ola de dolor se apoderó de mi cuerpo, era repugnante, doloroso, y sentía que mi corazón estaba por explotar. Escupí sangre, el frío metal del cuchillo podía sentirlo dentro de mí, mi vista se nubló. Retiró el kunai de mi pecho y me dejó caer al suelo.

-Con que... Madara Uchiha, ¿eh?

Ahora todo era oscuro, pero pude oírlo decir -Yo, cambiaré este pútrido mundo de Shinobis, de esta forma ya no habrá guerras, nadie morirá, nadie matará a nadie, tódo sera paz.

Hn... que ironía...

-¿Crees que esté muerta?

-No lo sé, ¿Tú que piensas?

-Si, tal vez lo esté.

Poco a poco abrí mis ojos color jade, y un inmenso dolor se apoderó de mí.

-Mira, sí está viva- oí, miré a un lado y vi a tres personas paradas allí, mirándome fijamente. Uno de ellos era una mujer con el cabello de color rojo y utilizaba gafas, a su lado se encontraba un joven, delgado con el cabello blanco, medio azulado y ojos morados, tenía que admitir que era un bonito color, y por último, un hombre alto con el cabello naranja y parecía tener alguna especie de capa o algo así de un color morado, parecía fuerte a simple vista.

-¿Quienes son ustedes y que quieren de mí?- exigí saber.

-Cálmate pelo de chicle, deberías agradecernos, te hemos salvado de una muerte segura- la pelirroja me respondió. Miré hacia abajo y noté que estaba mi herida vendada y también que me encontraba en una especie de cueva, suspiré, tenía razón, no fui muy amable, si no fuera por ellos yo estaría muerta- Si, lo siento- yo me disculpé.

-Yo soy Karin, el pelinaranja de allá es Juugo y este idiota a mi lado se llama Suigetsu- me dijo mientras señalaba al peliblanco.

-Silencio fosforito- le atacó él. Yo me reí de ese pobre Suigetsu mientras era golpeado, pero era extraño, por cada golpe recibido, parte de su cuerpo se dispersaba como si fuese agua.

Al terminar de casi matarlo, Karin se aclaró la garganta -Y cómo te decía... juntos somos el equipo Hebi (serpiente)- ella me dijo.

-¿Hebi?, ¿Y en qué consiste ese equipo?- pregunté curiosa y Karin se quedó pensativa- Ne, no lo sabemos- Suigetsu dijo. Una gota de sudor calló por mi nuca- ¿No lo saben?- esto era estúpido, ¿Forman un equipo sin un propósito en especial?

-No estamos muy seguros- Karin dice, acomodando sus gafas. Parpadee un par de veces y luego negué con la cabeza- Dejando de lado el tema... ¿Cómo me encontraron?- pregunté.

-No lo hicimos- Juugo dijo, y eso logró confundirme- ¿Eh?, ¿A qué se refieren con eso?

-Sasuke-kun lo hizo- dijo Karin y se sonrojó al pronunciar ese nombre.

-Sasuke... kun... ¡¿Que?!- yo grité casi sin darme cuenta, los demás se cubrieron sus oído por mi grito ensordecedor- ¡¿Sasuke-kun?!, ¡¿Sasuke-kun me encontró y me trajo aquí?!- yo pregunté incrédula.

-Ouch, ¿Cual es tu problema?, Sasuke te encontró gravemente herida en el bosque y te trajo aquí para que te curemos, es más generoso de lo que pensamos, y no lo parece- dijo Suigetsu.

-Oye, no hables así de Sasuke-kun- oí a Karin decir.

No lo sé, pero aún no podía creerlo. Iba a decir algo, pero fui interrumpida- Él te conoce, porque si no fuese así, te hubiera dejado desangrándote en aquel bosque, y wow... ese agujero en tu pecho no estaba muy lejos de haber sido en tu corazón- me dijo ese peliblanco- Entonces... ¿lo conoces?

Yo lo miré- Si... yo lo conozco- dije mientras intentaba ponerme de pie- Él era mi compañero de equipo, no era muy social, siempre estaba serio, pero eso a mí no me importaba... era un amigo... y yo lo amaba... yo creía que... algún día de mi patética vida... se fijaría en mí... no lo hizo, pero traté de seguir adelante... yo era una estúpida niña que era parte de un estúpido club de fans, lo cual tambien estaba formado por niñas estúpidas como yo... yo era una inútil, que lo único que hacía era llorar y pedir ayuda cuando estaba en problemas... él y Naruto, ellos siempre me ayudaron... luego llegó ese día... el día en que Sasuke se marchaba de la aldea... intenté detenerlo pero no pude hacerlo... le pedí a mi amigo Naruto que lo trajera de vuelta, se lo supliqué y él aceptó... siempre salia herido en sus intentos de traer a Sasuke a casa, pero él siempre con una sonrisa, levantaba el pulgar y me hacía una promesa "Yo traeré a Sasuke de vuelta, y yo nunca rompo una promesa, ese es mi camino ninja". Me sentía impotente, al exponer su vida y no poder hacer nada para ayudarlo, yo era débil... pero seguí adelante... un día Naruto se marchó para entrenar con Jiraiya-sama, y yo hice lo mismo, entrené con Tsunade-shishou, con la esperanza de volverme fuerte. Aprendí Ninjutsu Médico, y también utilizar la fuerza monstruosa de mi Sensei... hasta ahora Naruto lo está buscando, y yo aún no puedo hacer nada... ni siquiera pude proteger ese pergamino... soy un fracaso.

-Bueno, bueno, no tienes fe en ti misma, te estás insultando demasiado y no creo que sea necesario- Suigetsu trató de consolarme- Sasuke siempre fue un idiota, se cree mejor que yo, un día le romperé la cara...

-¿A quién le romperás la cara...?

Levanté la vista, esa voz es de...

-S-Sasuke-kun...

N/A: Holaa!, lo sé, tendría que estar escribiendo el siguiente capítulo de mi otro fic, pero no pude evitarlo, cuando se me viene una idea a la cabeza tengo que aprovecharla, ya que no dura mucho tiempo jeje.

De todas formas, no abandonaré el otro fic, y esta historia... no sé muy bien a donde llegará, es más bien un fic sin importancia, lo cual lo usaré para, como se dice... practicar un poco acerca de cómo escribir el romance y el drama, y cómo ya lo he dicho antes... no soy buena escribiéndolo.

Bueno, es algo que pienso yo, porque en realidad nunca lo he hecho je.

La verdad no tenía deseos de involucrar al pobre Tobi (Obito) en esto, pero no se me ocurría otro enemigo, jeje, pobrecito, Tobi es un buen chico XD

Bien, eso fue todo, espero les haya gustado. Háganme saber lo que piensan de esta historia, se los agradecería muucho :)

Bye...

Espera anciósamente sus reviews...

Miss Haruno...