DESCARGO DE RESPONSABILIDAD: Skip Beat! no me pertenece, Nakamura sensei no vende los derechos de autor…

Línea temporal: Justo al final del número 252.


MENTIROSA

La mentira es mi vieja compañera… Aprendí a mentir desde bien niña para no quedarme sola, para caer en gracia, para no ser dejada atrás…

Vivía escondida tras mi mentira, como si fuera una máscara, con mi falsa sonrisa en mi falsa alegría, revestida de amabilidad, pero uno a uno, todos me fueron dejando atrás… Me abandonaron…

Me mentí a mí misma durante mucho tiempo, viviendo mi vida como si fuera un personaje, fingiendo ser lo que no era, llamando por otros nombres lo que sentía mi corazón…

Hasta que… En fin… Enfrentarme a mi verdad en voz alta una sola vez fue suficiente, gracias, Takarada-san…

Y hoy, también le miento a ella, a mi adorada Moko-san, porque soy incapaz de afrontar la verdad de mi corazón.

Miento porque los viejos hábitos son difíciles de romper…

Miento porque tengo miedo, miedo de decirlo en voz alta una vez más.

Miento porque no quiero que ella también me deje atrás…

Por lo visto, también soy una cobarde.

Pero… ¿Cómo reaccionas cuando escuchas la verdad de otros labios? ¿Cómo se supone que debo sentir si jamás me he permitido sentir de verdad?

Porque Morizumi Kimiko no es Ella.

Y Morizumi-san no lo ama. No-lo-a-ma…

Y mi mundo se recompone una vez más, hecho de pedazos de ilusiones rotas, de sueños que nunca llegaron a nacer, de anhelos ocultos bajo mis mentiras…

¿A quién ama entonces Tsuruga-san?

Miéntete, Kyoko, o salta al abismo de la esperanza.