Ok aquí vamos; esta es una extraña colección de drabbles de una historia que probablemente jamás escriba, así que su opción es leer y dejar volar su imaginación.
Gracias a lina-dhlover por su ayuda como Beta Reader. Te quiero peke.
Advertencias: AU (demasiado AU), sin orden cronológico, slash, algunas escenas lime.
Declaimer: Harry Potter no me pertenece, etc, etc...
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Tom amaba ser un Slytherin; se enorgullecía de ello especialmente por tres razones. Primero, los Slytherins se caracterizaban por ser leales y decididos; no eran cursis o empalagosos como los estúpidos Gryffindors; al contrario eran astutos y calculadores.
Segundo, los Slys no mostraban sus sentimientos gritándolos a los cuatro vientos; no expresaban su ira alzando la voz, no derramaban lágrimas de tristeza, ni daban saltitos de emoción; las serpientes helaban con la mirada, podían transmitir todo un pensamiento, opinión o una gama de emociones distintas con movimientos de cejas y sonrisas de lado, las cuales habían perfeccionado hasta tener miles de formas distintas de hacerlas.
Y por último, había tan pocos magos capaces de ser una serpiente que Tom no debía compartir su habitación con nadie. Lo cual le daba privacidad para hacer lo que quisiera en su dormitorio, sin que sus compañeros pudieran molestarlo. Sin embargo, lo que le agradaba más de tener una habitación propia es que le daba la oportunidad de arrastrar a Su cursi, tonto y emotivo León a su cuarto cualquier noche que se le ocurriera.