¡Hola, hola! Una nueva traducción. Esta es autorizada por legallyblained. Espero les guste :)

Disclaimer: Nada me pertenece más que los errores en la traducción ja'. Klaine pertenece a la mente creativa de Ryan Murphy y la historia es de legallyblained.

¡Disfruten la lectura!


'Voy a necesitar un inhalador, porque me acabas de quitar el aliento'

'Tú flor del desierto, yo pluma grande, nos conocemos pronto'

'Bueno, holaaaaa…'

Kurt sonrío. Sabía que esto era una mala idea. Sólo Dios sabe porqué dejó a Santana convencerlo. Ahora tenía una bandeja de entrada llena de mensajes extraños y no se sentía ni siquiera un poco menos soltero. Oyó un crujido e inmediatamente cambio las ventanas en la pantalla.

"Hola, dulzura. ¿No puedes dormir?"

La niña en camisón amarillo negó con la cabeza.

"Tuve un sueño feo".

Suspiró. Podría haber estado soltero, pero estaba lejos de estar solitario. Se dirigió hacia su hija.

"Oh, cariño. Ven acá, cuéntame".

Ella trepó a su regazo y él la abrazó fuertemente.

"Ya no lo recuerdo. Estaba asustada".

"Conozco el sentimiento. Bueno, no te preocupes, ahora ya te tengo".

Ella cerró sus ojos, se inclinó sobre el pecho de su padre, aferrándose a su brazo mientras él la mecía lentamente, cantándole su canción de cuna favorita. Le acarició el cabello suavemente. Kurt ya no pensaba acerca de estas cosas. Era el único que podía detenerla de tener miedo. Él era su padre. Sólo ellos dos. Esta era su vida.

"¿Papi?"

"¿Sí?"

"¿Qué es eso?"

Estaba apuntando a la pantalla.

"¿Porqué no me dices tú?"

Se quedó mirando la pantalla, llena de espirales verdes y amarillos.

"Mai…tiene…seis. Pero Papi, yo tengo cinco".

"No por mucho tiempo. Dentro de tres semanas, vas a tener seis. ¿Puedes mostrarme seis?"

Ella frunció el seño, contando sus dedos antes de levantar cuatro y dos pulgares. Kurt hizo lo mismo.

"Así es, cariño, ¡esos son seis! ¿Sabías que seis es el número perfecto de dedos para…hacer cosquillas a las niñas pequeñas?"

Acarició su cuello usando su nariz, para después atacar sus costillas con sus manos, haciéndola retorcerse.

"¡Estás haciendo trampa! ¡Estás usando más de seis, eso no es justo!"

Dejó de hacerle cosquillas y sólo la sostuvo fuertemente. Besó su cabello. Ella volteó a verlo.

"¿Qué pasa?"

"Nada, sólo quería abrazarte. ¿Eso está bien?"

"Sí. Te amo, Papi".

"También te amo. Ahora hay que volver a la cama, pequeña".

Pensó en discutir. Lo pensó mejor.

"Bueno".

La cargó sobre su hombro, haciéndola reír de nuevo, y la llevó a su habitación. Era verde, cómo ella quería que todo fuera últimamente, su peluche de cebra esperando por ella sobre la cama. Kurt la bajó para que así pudiera apartar las sábanas y meterse debajo de ellas. Se arrodilló junto a la cama.

"¿Tienes a Steve ahora?"

No era el nombre típico para una cebra, pero ella lo había elegido como si fuera la opción más obvia para todos menos para su padre. 'Muy bien, entonces es Steve'.

Ella asintió, acomodando la cabeza de Steve a un lado de la de ella por debajo del edredón.

"Bien. Ahora, si tienes alguna otra pesadilla me avisas ¿de acuerdo?"

Ella asintió de nuevo.

"Perfecto. Ahora necesitas ir a dormir. Tienes un largo día mañana. Dame un beso".

Le dio un beso en la boca

"¡Muak!…Buenas noches, Papi".

"Buenas noches, pequeña. Te quiero mucho".

"Yo te quiero más".

Sonrió y salió de la habitación, apagando la luz al salir.

"Imposible".

Se tumbó en sobre la silla de su oficina de nuevo, abriendo de nuevo la tan temida página. Había un nuevo mensaje.

"Hola. Probablemente estás lleno de mensajes, pero pensé en decir hola. Dos veces. Solo me preguntaba si te gustaría ir al cine en algún día".

Sonaba casi cuerdo. Kurt hizo clic en el nombre de usuario (B-Warbler, un poco raro pero al menos no había un 'caliente' o '69' en el) y leyó la información.

Divorciado recientemente. Padre de dos. Amo la música, el teatro y creo que podría confesar que soy un adicto anónimo a los Reality Shows. Tratando de tener una mente abierta con todo este asunto de las citas en línea.

La foto era linda. Cabello negro, ojos cafés, una nariz que no debería de funcionar pero lo hacía de todos modos. Era agradable ver a alguien tan sonriente aquí. Todos siempre se veían tan serios.

Podía oír la voz de Tana en su cabeza, diciéndole que fuera por él, pero Kurt ya tenía las manos llenas con Mai. No quería correr el riesgo de tener que ocuparse de los niños de alguien más, también. Y recientemente divorciado no sonaba muy bien. Se movía sobre el botón 'responder'. Cerró la ventana. Cerró la laptop.

No hoy. No ahora. Tenía un largo día mañana.

Lololo

Probablemente debería haber intentado mandarle un mensaje a más de un chico. Tal vez no debería haber dicho 'divorciado'. Tal vez no debería haber mencionado a los niños. O los Reality Shows. Podía dejar de verlos sí es que tenía que.

No, no podría.

De todas maneras no tenía esperanzas ni siquiera manteniendo todo en secreto. Y no quería que los niños fueran un secreto. Pero eso no significaba que quisiera enterarlos de lo que estaba haciendo. Intentó no pensar en la falta de respuesta mientras intentaba de salir de otra cena incómoda.

"Kitty, cariño, a penas has tocado tu comida. ¿Está todo bien?"

Su hija de diecisiete años empujaba su brócoli alrededor del plato.

"No me gusta".

"¡A mí sí, Papá!" dijo Zach con la boca llena de vegetales. "¡Es mi favorito!"

Blaine le sonrió, deseando que Kitty tuviera once de nuevo.

"Ya sé que lo es, campeón, ¡es por eso que lo cociné! ¡Necesitas la suficiente energía si es que vas a patear traseros hoy!"

"¡Sí!" el pequeño gritó, dejando caer su tenedor para chocar los cinco con su padre.

"Mamá lo podría haber hecho mejor".

"Mamá ni siquiera cocina, cabeza de chorlito".

"Púdrete, tonto"

"Chicos, su madre es una increíble cocinera. A mí sólo me gusta hacerlo".

Kitty resopló. Blaine se volvió hacia ella.

"Cariño, ¿es eso lo qué vestirás esta noche? No habrá nadie a quien impresionar ahí".

"Vaya, papá, ¿estás seguro que los amiguitos de Zach no tienen ningún hermano sexy? ¿No quieres crear un vínculo conmigo hablando de chicos?"

"Kitty-"

"No, vamos, Papi, a lo mejor habrá unos cuantos padres ardientes con los que puedas dormir".

"Papá es demasiado grande para las pijamadas".

"Eso no es lo que Mamá me ha estado diciendo".

"Cariño, tu mamá está molesta conmigo. No puedo decir que la culpo. Pero lo que sea que te haya dicho, no tiene nada que ver con ustedes dos. Aún los queremos mucho".

"No soy una niña. No puedes alimentarme con esa basura, así como no puedes alimentarme con esta". Aventó su plato. "Y no iré a esa patética obra escolar hoy. Voy a ir a una fiesta. Y me quedaré en casa de Mamá".

La cara de Zach se arrugó.

"Kitty, tu hermano ha estado trabajando muy duro para esto. Vamos a ir a apoyarlo. No podemos dejar que ese manto tecnicolor se desperdicie, ¿o sí, amigo?"

"No. Lo prometiste. Dijiste que vendrías. Voy a cantar".

"Ha estado practicando, y es increíble. Cantó para mí la noche pasada y lloré".

"Por supuesto que lo hiciste".

"Claro, tonta, ¡porqué soy muy bueno y es una canción triste!"

"¡O quizás es porque tu precioso papá es un cursi marica!"

"Kitty, ve a tu habitación".

"Pensé que se suponía que eras agradable con tus hijos cuando te divorcias-"

"No voy a permitir esa palabra en mi casa, jovencita, ahora ve a tu habitación y luego iremos a esa obra como una familia. Vas a ir a apoyar a tu hermano porque lo amas y porque lo digo yo que soy tu padre".

"Dices un montón de cosas, Papá. Como, 'Hasta que la muerte nos separe', 'en la salud y en la enfermedad' y 'bueno, hasta que un linda polla llegue, luego me voy de aquí'- espera, nunca dijiste eso en voz alta, ¿o sí, Papi? "

"Kitty. A tu cuarto. Ahora". Se quedó mirando a la mesa, respirando lentamente, mientras que ella iba escaleras arriba. Zach tomó un pedazo de pollo con su tenedor.

"¿Papá? ¿Estás bien?"

Blaine forzó una sonrisa.

"Seguro. Perdón por los gritos".

"Tú no gritaste tanto cómo ella. ¿Qué significa esa palabra? ¿Marica?"

Blaine se estremeció con sólo oírla.

"Bueno, es cómo cuando los niños le dicen apodos a otros niños. ¿Recuerdas lo que te dije acerca de mí? El hecho de que soy-"

"Gay. Síp".

Zach metió un pedazo de pollo a su boca no dándole importancia. Blaine sonrió

"Bueno, esa palabra que Kitty uso es una horrible palabra para gente como yo. Sería como si yo la insultara por ser rubia. Es algo que ella no puede cambiar".

"Podría teñir su cabello. Aunque se vería extraña".

"Sí, lo haría. Justo como lo era el estar casado con tu mamá, porque yo no estaba siendo sincero acerca de quién era. Lamento que las haya hecho enfadar tanto, pero tengo que ser honesto".

"¿Entonces estabas mintiendo antes?"

Blaine frunció el ceño.

"Sí, un poco. Porque no me gustaba ser así. Pero si nunca me hubiera casado con tu mamá, entonces no los tendría a ustedes, y yo los amo más que nada en este mundo".

"¿Incluso a Kitty?"

Blaine intentó no sonreír.

"Sí, incluso a Kitty. Estoy molesto porque uso esa palabra, pero aún la amo".

"Está bien. Yo estoy molesto porque mamá está molesta, pero aún te amo".

"Genial. Bueno, deberíamos terminar aquí o vamos a llegar tarde. ¿Tu traje sigue colgado?"

Zach estaba a punto de contestar cuando se estremeció al oír a Kitty bajar las escaleras.

"¡Kitty! ¡Te dije que no ibas a ir a esa fiesta! Hiciste un compromiso".

"¡No! No tienes ningún derecho de decirme que hacer nunca más, okay, ¡tú fuiste el causante de que ésta familia se separara, no yo! ¡Volveré cuando me de la maldita gana!"

Tiró los platos en el fregadero y corrió tras ella, agarrándola del brazo al momento que abría la puerta. Cerrando la puerta de un golpe.

"¡No me hables de esa manera! ¿Tan siquiera tú madre sabe de esta fiesta?"

"Ella sabe que estaré en su casa en la mañana. Ella, de hecho me deja tener un poco de libertad".

"¿Libertad? No, no, debes ganarte tu libertad, Kitty, debes dejar que tus padres sepan dónde estarás, para que así sepamos que estas a salvo, y podamos creerte que no harás nada peligroso".

"Qué, ¿algo peligroso cómo divertirme? ¿Cómo no querer matarme del aburrimiento en una estúpida obra escolar? Mira quién habla de sinceridad, Padre, quien sale en busca de jovencitos mientras su esposa espera por-"

"No voy a volver a hablar de esto. No iras a la fiesta".

Ella lo miró. La mano de Blaine se mantuvo apoyada firmemente sobre la puerta.

"Si no abres esta puerta, me iré. Y no sólo me refiero a esta noche. Me iré a vivir con Mamá, y no me volverás a ver. Tal vez podría llamar a servicios de protección de menores, decirles que el pervertido de mi padre me tiene encerrada".

Blaine soltó su muñeca de inmediato.

"Kitty, eso no es divertido".

"No, lo que sería realmente divertido sería que se llevaran a Zach también. Al único al que de hecho le caes bien. Entonces nosotros esteremos con Mamá, y tu estarás en prisión".

"¿En serio crees que así funciona esto? La corte te dejó conmigo. Peleé por ti. Éste es tu hogar".

"La casa de Mamá es mi hogar. Tú a penas eres mi padre".

Blaine se quedo ahí, sin palabras, mientras ella salía de la casa, azotando la puerta al salir.

"Está bien, papá. A mí sólo me importa que tú veas la obra".

Blaine se paso los dedos por el cabello y respiró hondo antes de volverse hacia Zach.

"Cariño, te gusta-" Vivir conmigo, ¿cierto? No. No puedes preguntarle eso. No es justo. "tu vestuario, ¿verdad? ¿Es de tu talla?"

"Uh-huh. Es increíble. Los demás solo pueden vestir de un color".

Blaine sonrío débilmente.

"Bien. Vamos, hay que irnos. ¡Es tiempo para el gran debut!"


Aún no tengo un horario planeado para las actualizaciones. Creo seran "sorpresa" ;)

Gracias por leer :) xoxo