Antes de nada, sé que es muy corto para lo que lleváis esperando. Lo sé, en serio. Pero me está costando muchísimo empezarlo, y probablemente en el primer capítulo veréis por qué. Esto es lo único que tengo claro del principio, así que bueno, por lo menos es algo xD. Confío en que con vuestros reviews me vaya animando y me venga la inspiración, je je.
Esto es una precuela de mi fic, La Caja de los Secretos. Si no lo has leído antes, te recomendaría hacerlo, por el orden. Pero realmente daría igual, porque cosas que pasan aquí son explicadas más tarde en la Caja.
Así que que cada uno decida cual leer primero! xD
OMG como siga así la introducción esta mía será más larga que el prólogo en sí xD! A leer!
Ira... ira... ira...
Mi corazón estaba roto. Nunca imaginé que podría pasarme algo así, tan triste y cruel. Las tan poco deseadas lágrimas acudieron a mis ojos y comenzaron a bajar por mis mejillas.
Odio... rencor... angustia...
Corrí a través de aquel enorme jardín, en el que tantas veces había jugado con ellos, cargando con las pocas pertenencias que tenía. Las emociones se arremolinaban en mi interior, queriendo salir, pero no lo permití.
No quería darle ese placer.
Crucé la valla sin mirar atrás, dejando allí todos los recuerdos que tenía de aquel hermoso lugar, en el que había sido acusado, traicionado, y en el que me había sido arrebatado todo lo que quería. Ya no iba a tener nada más que ver con todo aquello.
Y así comenzó mi verdadera vida; dejé atrás el pasado para centrarme en mi futuro. No volvería a confiar en nadie, jamás. Tampoco volvería a depender de nadie. Estaba solo, y así debía ser desde aquel día.
13 de julio del año de la XIII Luna.
Por cierto, el que habla es Ike, este es justo el momento en el que se va del palacio de los Lowell después de... bueno, las que hayáis leído la Caja sabréis a qué me refiero.