Sirviente del mar – Tsunami x Tachimukai.


Lo se, lo se, tengo fics que mirar, pero la verdad entre mis fics los que están por terminar son: Otro mundo, La venganza es una medicina poco aconsejable, ¿Bodas?, Cálido amor, Te salvare Kazemaru como sea, Escuela vampirica, asi que me he dicho, ¿Por qué no hacer un fic de esta pareja tan amorosa? Ya que es una de mis favoritas.

Y siento ser tan pesada TT^TT prometo que la semana que viene termino con esos fics, pero que tengo exámenes xDD soy estudiante todavía.


Capitulo 1: Días

Diario Día - : Después de instalarme en la recamara de las sirvientas todas han intentado obstaculizar mi trabajo, al parecer de lo que he oído por parte de Rika-san, tienen envidia de mi, aun no lo he entendido del todo, pero me dijo; "Esas perras te tienen envidia solo porque te encargaras de la habitación del señorito de la mansión, Jousuke-sama", me aterra tener que ocuparme solo de sus cosas cuando no esta, me pongo muy nervioso.

Con torpeza un joven chico con vestido de sirvienta un poco desgastado caminaba con prisa hacia la habitación de su joven amo, tenia que limpiarla, sobretodo por que después de tanto tiempo volvería a la mansión Tsunami, se encontraba nervioso, había escuchado rumores de que las sirvientas eran el juego tradicional del joven amo. En su cabeza solo rondaba una cosa: "No quiero ser descubierto", ya que solo las mujeres tenían que servir dentro de la casa, y por un tonto error la obligaron a trabajar de sirvienta siendo un chico, pero claro esta su aspecto de niña pequeña y dulce no le ayudo mucho que digamos hasta que se resignó.

-¡Tachimukai! –le llamó con voz melosa su amiga Rika-san -¡Ven por aquí cielo!

-¿Rika-san? Disculpa pero tengo que limpiar la habitación del señorito Tsunami –dijo jadeante, en verdad los pasillos eran largos, y la casa era inmensa parecía no tener fin –Si no lo hago, el señorito vendrá y se molestara –con manos sudorosas

-¿Vuelve Jousuke? –sin saber del asunto –Ya me parecía que todas estaban demasiado entusiasmadas –pensando con su mano en su mentón –Que lata entonces, bueno cuídate Tachi –despidiéndose de él.

-Que chica mas rara –pensó en su cabeza mientras una gotita recorría su mejilla, siguió con su mandato y sin vacilar se fue.

Por fin había llegado al lugar, abrió la puerta con lentitud, aunque no era la primera vez que limpiaba la habitación del joven, sentía una inquietud en su cuerpo, un sudor frio como una descarga eléctrica, para ser sinceros el joven sirviente nunca lo conoció, razón de mas para sentirse inseguro.

-Cada vez que vengo a este sitio, me pongo muy nervioso –dijo con voz baja al entrar por fin a la gran habitación que mas que un cuarto parecía una casa de plebeyos entera, con todo completo: muebles de roble hechos a manos con detalles, cuadros de buen ver, alfombras muy caras por sus tejidos y texturas, un suelo barnizado, paredes de colores claros, estanterías repletas de libros de todo tipo de categorías, grandes ventanales que dejaban pasar la tenue luz del sol, cortinas de terciopelo con hermosos detalles dorados, una gran cama de matrimonio-raro para una persona- de roble y sabanas de seda como todo lo demás, lo mejor de todo, era que tenia un baño completo, estudio, y da al patio y al jardín.

El joven no paraba de maravillarse, dejo de mirar el lugar como un bobo y se dispuso a limpiar, pero no noto en ningún momento la presencia de alguien.

-¡A limpiar! –se dijo a si mismo, alzándose las mangas de su vestido largo, con una voluntad de fuego.

Detrás suyo alguien respiraba en su blanco cuello fino y delgado, él asustado de que fuera un fantasma cogió la escoba con sus manos y se volteo a enfrentar al "fantasma", sin abrir los ojos.

-¡Atrás fantasma! No impedirás que agá bien mi trabajo para los señores Tsunami –dijo con voz temblorosa y sudando del miedo, con la escoba en alto, hasta que el sujeto que estaba con él, habló tranquilo y riendo.

Riendo –Tranquila, solo soy Tsunami Jousuke –diciendo su nombre con voz suave, el otro abrió con miedo su ojo derecho para verificar si era verdad o no.

Lo único que puedo verificar: "¡Es un pervertido, no puede ser el señorito!", pensó internamente, al verlo todo mojado y solo en toalla cubriendo sus partes viriles, al joven sirviente, sin razón aparente, se sonrojo mucho al ver su fornido cuerpo moreno alto y fuerte, con esos ojos tan imponentes y penetrantes a la vez, negros como el carbón mismo, con su cabellera rosada que tan bien le quedada al señorito Tsunami, no pudo evitar tener un derrame nasal, y que su rostro se pusieron muy rojo.

-¿Es-estas bien? –le preguntó preocupado el joven moreno

-¡Ah! Estoy perfectamente, por favor no te me acerques –rogaba dando un paso atrás, con un pañuelo que tenia en su vestido se seco la sangre de la nariz.

-Ven aquí, debes obedecerme –le ordenó ya molesto –Soy el heredero así que hazme caso –le cogió de las manos y con lo llevó al baño –Lávate la cara mujer, no me gusta ver a nadie sangrar de esa manera –riendo, el otro obedeció sin mas –Iré a vestirme, y después te dejare sola para que dejes todo esto limpio, ¿Quedó claro? –saliendo del baño

-Hai… -respondió cuando el señorito se fue del lugar.

El joven sirviente, nervioso, decidió empezar a limpiar el baño mientras el moreno se vestía para salir.

Pasado un cuarto de hora, el joven señorito salió de la habitación, Tachimukai sabia que era su momento para limpiar lo demás, pero después pensó en algo… ¿Cuándo había llegado a la mansión?

-Por cierto –dijo el joven moreno -¿Cómo te llamas? –curioso acomodándose los gemelos de las mangas de su camisa de color blanco.

-¡Eh! –sorprendido, se asusto tanto que cayo dentro de la bañera, el de los ojos negros fue a socorrerlo -¡Lo siento mucho! He hecho malgastar su tiempo en mí –con un leve sonrojo

-Olvídalo –dijo en suspiro –Eres muy lenta –tocando su castaño cabello –Bueno, ¿Este pequeño polluelo tiene nombre? –en un tono de burla.

-"¿Polluelo?" –pensó -¡Ah! Soy Tachimukai Yuuki, encantado…digo ¡Encantada de servirle mi joven amo! –en reverencia.

Ríe por debajo –Eres muy graciosa, a la vez que dulce, me agradas –saliendo del baño –Cuídate polluelo intenta sobrevivir –riendo.

-¡Disculpe joven amo soy T-A-C-H-I-M-U-K-A-I! –dijo casi en grito con el ceño fruncido.

Se para en seco –Pero eres como un polluelo, pequeña y frágil, aun menos tienes el cuerpo desarrollado –riendo al imaginarse al chico como un pollito –Hasta otra Polluelo –saliendo, Tachimukai molesto casi le tira la escoba en la cara: "Calma Tachimukai, aguanta hasta reunir dinero" –pensando. Y así volvió al trabajo.

Su tranquilidad no aguantaría mucho, su molesto amo, volvió a entrar.

-¡Una cosa mas polluelo, no le digas a nadie que me has visto, ni a mi madre! –dijo todo muy rápido y salió dando un golpe a la puerta.

-¿Eh? –con una aura de agresividad -¡Ah! Que molesto es el joven amo.

El día del joven sirviente pasó muy lento, pero no le importaba, quería hacer las cosas bien, y acabar el día con una sonrisa, como siempre, no tenia motivaciones, solo reunir dinero e ir donde su hermana mayor Touko Tachimukai, la echaba tanto en falta, su única compañía –las cartas que enviaba –en sus días de soledad y tristeza.

Tras terminar su turno, fue directamente a la recamara a descansar un poco para después ir a darse una relajante baño en compañía de Rika una joven muy vigorosa.

-Hoy ha sido un día muy raro –termino de escribir Tachimukai en su pequeño diario de color marrón con un lacito rojo en el centro con su nombre; "Yuuki". En suspiros.

-El joven amo ha venido, ¿Cómo podre sobrellevar las cosas en su presencia? –con la mirada perdida en la luna.

Afuera de la mansión en el jardín se podía oír música, gente reír, y niños como no, nunca podía faltar los niños en la gran casa de la familia mas rica del país, la familia Tsunami, no era de esperar, celebraban la vuelta de su primogénito, Jousuke, quien volvía de terminar sus estudios en el extranjero, un día muy importante para su joven madre quien tanto amaba a su hijo, pero a la vez regañaba, había oído rumores de sus cuantiosos amoríos en alta mar.

Muchos de los presentes eran familias amigas, o amigos del joven amo, pero su picardía era tanta que tuvo que presentar disculpas ante los padres de muchos de los amigos de su padre, por intentar llamar la atención de muchas doncellas hermosas e hijas.

-Eres un caso perdido hijo mio –dijo su madre con una dulce sonrisa en sus labios carmesí, una mujer noble de cabellos rosados y de tez muy blanca, de ojos negros, llevaba un vestido largo y de color rosado, con un abanico de color rojo en mano –Pero me alegra tanto de verte hijo –le da un fuerte abrazo –Espero por tu bien que no hayas tenido un hijo en mi ausencia, por que tu pobre y vieja madre se pondría a llorar.

-¡No me ahogues madre! Y no eres vieja, y no tengo hijos por ahí, sabes que me cuido respecto en ese tema –dijo el joven casi asfixiado.

-Más te vale hijo –soltando por fin a su hijo.

A la mente del joven amo le llego la imagen de la sirvienta a la que llamaba "Polluelo", sonrió de solo recordar su torpeza y sencillez, pero algún mas por que no como muchas de las sirvientas, se le había echado encima insinuándosele.

En la recamara de Tachimukai tras una ducha bien relajante se dispuso a dormir al lado de Rika.

-Buenas noches Rika-san –dijo con su voz de niña pequeña

-¡Si mi querida! –le dijo con un gran abrazo, le adoraba mucho y apreciaba.

En mitad de la madrugada, sobre las 4 de la mañana, toda la gente se había marchado con anterioridad a sus hogares, aunque varios de los invitados se quedaron a pasar la noche, el primogénito deseoso por poder probar a sus muchas de sus sirvientas fue al cobertizo a saciar sus ansias de tener relaciones, y así fue.

Con ganas de sed el joven Tachimukai se levanto de la cama, adormilado y con frio, vago sin rumbo por la cocina hasta parar al cobertizo sin saber como, y pillo al joven amo sin querer.

-¡Perdóneme mi joven amo! –en reverencia asustando a la criada.

-Estúpida Yuuki –dijo en molestia la criada que se cubría con su vestido.

El joven se subía los pantalones mientras el otro salía corriendo -¡Espera! –le gritaba –Tu quédate callada –le ordeno a la criada.

-¡Mierda, el joven amo me echara por espiarle! –se maldecía –Un momento…¿¡Si yo solo pasaba por casualidad! –se dijo de nuevo, pero para su desgracia alguien tiro de él, cayendo al suelo con su joven amo encima jadeando.

-Para ser un polluelo eres muy escurridizo –cogiendo aire –Dime, ¿Qué hacéis por ahí?

-Quería… -dijo con voz ahogada –Quería agua, y estaba dormido y yo…yo…lo siento, no quería espiar, solo que me perdí –dijo con lagrimas húmedas queriendo salir.

-Levanta –dijo el chico de pie dando la mano al otro –No tiene importancia, veo que no me mientes –dijo con una bonita sonrisa, baja un poco la mirada y ve que el "polluelo" tiene sangre en su brazo derecho –Ven te limpiare esa herida –dijo el joven agachándose y lamiendo la herida, el otro se ruborizo y lo aparto de una patada.

-¡No importa! Lo are yo –corriendo –Hasta mañana mi joven amo. –muy sonrojado. EL otro chico se quedo en el suelo sentado tocando su mejilla del golpe que le dio, pero su mirada cambio, nunca se había encontrado con alguien tan peculiar.


Capitulo 2: Libro

NOTA; En este fic Touko sera la hermana de Tachimukai Yuuki, ya vereis por que lo digo.

¿Reviews? Please