Era de noche, Kakashi escuchó golpes en la puerta de su casa, un poco somnoliento fue a abrirla. Lo que vio al abrirla le sacó todo el sueño. Era Sasuke.
_Sasuke_ dijo Kakashi sin dar crédito a sus ojos de lo que estaba viendo.
_Sen-sei yo…_ dijo sin poder mantenerle la mirada, parecía totalmente avergonzado.
_Entra_ le ordenó Kakashi cerrando la puerta tras él_ siéntate.
Kakashi seguía recordando el enojo, decepción y sobre todo tristeza que tuvo cuando este se marchó. Seguía recordando cuantas veces se había recriminado por no ser un mejor maestro para él, no haber podido detenerlo, no haber podido convencerlo para que se quedara en la aldea.
_Hn_ exclamó Sasuke, no le gustaba que le dieran órdenes, sin embargo obedeció.
_Sasuke _dijo Kakashi sin poder evitar el tono, lo único que faltaba, ya iba a rectificar a ese muchacho. Se sentó al lado de él sin dejar de mirarlo fijamente a los ojos, sin embargo Sasuke no miraba más que a la mesa. Kakashi lo tomó de la barbilla para que lo mirara_ ¿por qué te fuiste de Konoha?
_Para cobrar venganza_ dijo haciendo esfuerzos que le parecieron imposibles para mantenerle la mirada.
_De acuerdo_ dijo soltándole la barbilla y rascándose la sien, notablemente molesto_ por lo cual no escuchaste mi sermón y a la noche del mismo día que te lo dí abandonaste la aldea.
El rostro de Sasuke se puso ligeramente rosado cuando asistió.
_Sin mencionar que te uniste al asesino del tercer hokage_ Sasuke no pudo seguir manteniendo la mirada de su antiguo profesor y volvió a mirar a la mesa.
Parecía un niño pequeño que no sabe dar una respuesta coherente a su padre.
_Además intentaste matar a Naruto_ volvió a sujetar su barbilla con más fuerza que la anterior vez.
Sasuke jamás pensó que su antiguo sen-sei, siempre bromista y de buen humor, pudiera ponerse tan enojado. No podía dejar de recriminarse interiormente por todas las estupideces que había hecho.
_Yo…_pero Sasuke fue interrumpido nuevamente por Kakashi.
_ ¿Valió la pena?
Sasuke negó con la cabeza.
_Mátame, por favor_ le pidió Sasuke entregándole su espada y cerrando los ojos, esperando el impacto.
Kakashi desenvainó la espada mientras Sasuke cerraba los ojos con más fuerza.
