Hermione bufó molesta, por primera vez en su vida caminaba en dirección a la biblioteca sin ganas. Esa tarde su lugar favorito se transformaría en una sala de pesadillas. El profesor Severus Snape les había encomendado un proyecto por parejas, ella no tuvo oportunidad de elegir a su compañero. Una pelea con su archienemigo fue razón suficiente para que le asignan a su compinche como castigo.

—Llegas tarde.—Una grave voz captó la atención de la castaña que rodó los ojos.— No soporto la impuntualidad.

—Por favor Malfoy, solo me retrase por 35 segundos.—Le contestó arrastrando una silla para sentarse a su lado.— Estoy impresionada de que supieras dónde está la biblioteca.

El rubio como respuesta también rodó los ojos para volver la vista al libro que leía, debían investigar algunos temas, hacer un reporte y presentar una poción relacionada con los tópicos. Hermione sacó un par de pergaminos, descubriendo que su compañero ya había elegido algunos libros relacionados con la investigación. Quedó sorprendida por el compromiso demostrado por esa serpiente. La mujer mordió su labio inferior tratando de encontrar las palabras para iniciar una conversación.

—He doblado las páginas donde podemos sacar información.—Nuevamente el rubio habló sin apartar la vista del libro que leía.— Deberías comenzar por echar un vistazo y decidir si nos ayuda o no.

—No vuelvas hacer eso.—Le gritó entrecerrando los ojos, tomó el primer libro. Draco por primera vez apartaba el objeto de su vista.—No maltrates los libros.

Draco observó como esa castaña sacaba una cajita con separadores de colores, arreglaba las hojas dañadas y colocaba esos plásticos de colores. Aquella maldad fue hecha a propósito, ya anteriormente escuchó a la castaña regañar a la comadreja por maltratar los pobres libros. Sus ojos se enfocaron en esos labios rosas," debería dejar de morderlos va volver a lastimarlos".

—¿Qué te ha parecido mi pre investigación?.—Cuestionó sin mucho ánimo, odiaba a esa castaña pero en lo más profundo aceptaba que era muy inteligente.— Si quieres puedes ir a buscar más libros.

—No, está muy bien.—Lo interrumpió exaltada, todos los textos elegidos por Malfoy eran buenos eso acortaría su reunión.— Deja terminar de leer los textos y voy a comenzar a escribir un borrador del esquema del reporte.

La mujer sacó un pergamino para iniciar un pequeño diagrama. Draco entonces continuó observándola fijamente, su cabello castaño seguía siendo un arbusto desastroso, la puberta comenzó a ser amable con ella, no era una belleza andante como algunas chicas Slytherin pero tampoco estaba mal. Sin darse cuenta pasó más de 10 minutos admirando, registrando cada una de las facciones de ese rostro.

—¿Cómo nos vamos a dividir el reporte? .— Le cuestionó la chica levantando la mirada, este movimiento causó que Draco, quien maniobraba con la silla estuviera a punto de caerse.— ¿Malfoy?

El rubio se puso de pie para arrastrar su silla y acomodarla a un lado de la chica, estaba muy cerca es lo que pensó Hermione al sentir como sus hombros chocan, el olor a esa cara colonia llegaba a sus fosas nasales. De reojo observo ese perfil, "Diablos" se repitió a si misma, cuánta razón tenían sus compañeras de casa, Draco era muy guapo.

—Me agrada el esquema del reporte.—Nuevamente el chico asustó a la castaña quien bajó la cabeza sonrojada.— Vamos a intercalar las secciones, será una participación equitativa..—El hombre estiró la mano para señalar el pergamino.—Yo inicio con esta arte y tu continuas con la siguiente ¿Te parece?

—Esta bien ¿Quieres que te vaya dictando? .—El rubio asintió con un movimientos de cabeza para sacar un nuevo pergamino, un par de veces el dorso de su mano mano rozó con la de la castaña.—Comencemos.

Hermione fue dictando la primera sección del reporte, la letra de Draco era hermosa, escucho entre sus compañeras que los pura sangre como la familia Malfoy tienen institutrices desde niños, aprenden muchos temas antes de entrar al colegio. La leona también se percató que desde el año pasado el rubio la dejó de atacar por su origen, la continuaba molestando pero no la insultaba como en un inicio. Sus bromas eran un estilo más infantil, como aquellas que los gemelos le hacían a Ron o Ginevra.

—No tienes mala caligrafía para no haber comenzado a escribir con plumas desde niña.—Agregó Draco observando a su compañera.—Los muggles no escriben con pluma ¿Verdad?

—No, usan otros artículos, la pluma está pasada de moda para ellos.—Contestó sorprendida al notar el interés de la serpiente por costumbres muggles.—Al inicio me costó trabajo pero en los veranos trataba de acostumbrarme, deberías ver la letra de Ron, parecen insectos aplastados.

La chica soltó una ligera sonrisa. Draco la miró tímidamente. Ambos continuaron conversando sobre algunos temas, relacionados con las malas prácticas de sus amigos. Descubrieron que ambos odiaban a las personas con mala caligrafía, ya que significa ser irresponsable y flojo. Hermione aprendió que Malfoy era capaz de reír honestamente, el sonido le pareció maravilloso. El tiempo transcurrió y el reporte llegó a su final. Ambos lo leyeron quedando satisfechos por el buen trabajo.

—Hacemos buen equipo—-Confesó el rubio girando su rostro y observar fijamente a la chica.—Ya no tienes tantas pecas.

El hombre llevó los dedos al arco de la nariz para acariciar esos puntos cafés, existía una razón por que ya no la insultaba, solo la molestaba con bromas inocentes, le prohibió a sus "amigos" ofenderla, esa tarde llevaría a cabo lo que se propuso desde inicio de curso.

—Actúas raro.—La chica saltó fuera de su lugar.— No sé qué pretendes pero debo irme.

—Espera.—El chico rápidamente la alcanzó para tomarla del brazo y arrastrarla a un alejado pasillo.— ¿Te han besado?

Hermione automáticamente negó con la cabeza pero al notar su inocente movimiento trató de separarse, a Malfoy que le importaba saber sobre su vida personal. Trato de huir pero entonces el chico la sujetó de los hombros para acercar su boca, el beso fue amable, dulce e inocente. Sutilmente sus labios se unieron, sabían a menta.

—¿Estás jugando conmigo?.—La chica lo alejó mirando a todos lados, entonces descubrió que la biblioteca estaba vacía.—No entiendo ¿Qué haces?

—Quiero que cuando seas vieja y estes casada ya sea con la comadreja o cara rajada recuerdes que yo fui tu primer beso.—Dibujo una melancólica sonrisa.— No quiero que me recuerdes como la serpiente que te insultaba, deseo ser el primero en algo importante.

Hermione trato de encontrarle algún significado a esa confesión ¿Malfoy estaba enamorado de ella? No, él no le confesó amarla, solo deseaba que lo recordara como su primer beso ¿Qué lógica tenían su palabras? Observó cómo el chico entrelaza los dedos con los suyos, acercaba nuevamente esos fríos labios para besar sus pecas, sus mejillas hasta regresar a sus labios.

—Promete que me recordarás como tu primer beso.—Sus palabras eran dichas con un tono melancólico y cargado de súplica.—Hermione, ¿Lo prometes?

—Lo haré.—Soltó hipnotizada por esos orbes grises, no necesitaba explicaciones solo esos labios sobre los suyos.— Draco siempre te recordaré como mi primer beso.

El mencionado dibujo una mediana sonrisa. En verano su padre le contó sobre los motifagos, su plan para apoderarse del mundo mágico, en la guerra que dentro de poco se liberará esa chica y él pertenecerán a trincheras contrarias. Ambos pelearían en bandos diferentes, mucho tiempo en su total estupidez creyó que ellos podrán ser algo pero no. Los Malfoy estaban malditos, eran los villanos de la historias por eso se propuso ser un dulce recuerdo para su primer amor. Ella siempre lo llevaría en su mente, aún cuando la guerra terminará. Porque el sabia que ella sería una héroe y sobreviviente. Mientras quizá él no llegaría con vida al final.