Él quería un futuro. Quería tener hijos, un buen trabajo y un patio y un perro, quería libertad, tomar mi mano, besarme sin culpa. Yo quería Nueva York. Y Londres. Y quizás Tailandia por un año o dos.
Yo quería cantar y vivir en un apartamento lujoso no enamorarme de forma tormentosa.
Ambos pedimos una pizza, y nos sentamos en su carro a comer
"Algo no está bien", le dije.
"¿Te dieron la salsa equivocada?", me preguntó
"No. No la pizza, nosotros", dije.
Entre lágrimas, se sentó en el carro haciendo promesas que no podíamos mantener, con nuestra pizza fría y sin comer en el suelo.
Quizás en algunos años, todo será diferente nos prometimos mutuamente y podamos ser libres
"2 años más" le dije
Me aferré a esa idea por mucho tiempo, más del que debería.
Era mi justificación para meterme en su perfil en las noches, cuando estábamos lejos, yo creaba mis sueños y el lloraba en casa, solo quería saber cómo estaba, me decía a mí mismo.
"Me pregunto si consiguió pasar la semana" me explicaba.
"Me pregunto si sus papás están bien de salud, si está de buen ánimo; si pudo estar sin mí"
Siempre tenía una razón para volver a su lado, siempre tenía una sonrisa cuando volvía; siempre me decía que el saber que volvía a él, le era suficiente... pero podía ver en sus ojos que no era feliz
Su primera fotografía juntos fue en una fiesta.
Por lo menos puedo asumir que fue en una fiesta por el vaso rojo que ella tenía, y la sonrisita de tomado de él, la misma con la que yo solía bromear. Sus dedos abrazaban su cintura, mientras yo veía la pantalla y trataba de no pensar sobre cómo me sentía al ver esa fotografía
A lo mejor son solo amigos. ¿Él la conocía? ¿Su nombre me era familiar? ¿Porque su sonrisa era tan genuina? ¿Era el alcohol? No había peso en sus hombros ni timidez en su rostro...era realmente él, esa chica había sacado en una noche de él, algo que yo no había visto en meses
Cerré con fuerza mi laptop. Estaba cansado de torturarme por una noche. Cuando me quedé dormido, soñé con él.
Soñé que me dejó, que se iba de mi lado, recuerdo ese sueño porque desperté con frío, buscándolo en mi cama, llorando y con mi corazón a punto de salirse de mi pecho.
El pánico me invadió; se iba de mi lado me dejaba sólo; realmente se estaba dando por vencido conmigo al fin me veía con los mismos ojos que me veía yo, imperfecto, asfixiante, ya cansado de mí.
Quise correr ir a buscarlo, quitar la mano del costado de esa chica y rogarle que me abrazara; pero sólo pude llorar abrazado a mi cobija, vulnerable y sintiéndome ridículo.
Ese breve momento tras despertar fue el peor. Ese momento cuando sentí que el sueño era realidad, como si ya me hubiese dejado. Ese momento cuando me obligué a volver a dormir, deseando devolver mi mano a su pecho. Ese momento me obligue a recordar cómo se sentía amar y ser amado y que esto, aún no se había acaso.
Tomé mi teléfono de la mesa de noche y comencé a revisar su Twitter. Necesitaba estar con él, en cualquier forma que pudiera. Mientras leía las palabras en mi pantalla, podía escuchar su voz claramente, esa vos adormilada y lenta.
Me lo imaginé riendo de su propia broma antes de publicarla, siempre tuvo un sentido del humor tonto e infantil, y sonreí de solo pensarlo. Podía escuchar su voz tan fácilmente que por un momento mi habitación ya no se sintió tan vacía.
volví a casa ansioso de ver su rostro de nuevo; decirle que lo amaba; que lo extrañé como nunca, quería demostrarle que lo amaba, me sentía desesperado; la chica a mi lado sonrió y me pidió que me calmara "todo estará bien cielo, te ama" me dijo dulcemente.
Todos siempre lo decían; cuanto me amaba, a un punto embarazoso... yo me sentía orgulloso de eso, me recordé que no había que temer y el viaje a casa fue tranquilo, sin embargo al llegar no estaba allí, preguntándome como estuvo mi viaje, si lo extrañe y que se alegraba de verme volver a su lado.
Mi corazón se fue a mi estómago, lo llamé y no contestó ¿qué hacía que no me contestaba? nunca había pasado a una llamada mía...oh...eso se sentía, sentí un horrible sentimiento y quise pedirle perdón por todas las llamadas que ignoré.
No quería perderlo sin embargo, algo me decía que ya se había iniciado un viaje sin retorno.
En cuanto lo vi le dije que lo amaba y él me lo recordó también, sentí que estaba completo de nuevo y él río de mi enojo cuando le reclame que no me contestara sin embargo, estaba brillante, feliz y tranquilo lo que me hizo sentir inseguro, él me recordó que era parte de su trabajo y traté de comprender, al fin de cuentas yo venía de París.
Los próximos días fueron horribles, su Twitter era una cámara de torturas, no lo quería ver pero no me podía detener, ella era inteligente, bella, con un humor peculiar y extrovertida, bromeaban juntos y lo podía ver reír genuinamente a las publicaciones que ella le hacía "es trabajo amor" me recordaba día a día, pero en un punto sus palabras parecían más estar dirigidas a sí mismo que hacia mí y eso me produjo un dolor enorme, un vacío en el pecho y ganas de dejar todo tirado ... él quería evitar sentir esto, podía ver la confusión en su rostro cuando corría a su celular y la manera que se reprendía sí mismo cuando la veía con añoranza en nuestra televisión , él no me quería dañar sin embargo me estaba matando.
