[Fanfic de Natsu Dragion y Lucy Ashley]

Sin bragas

-Demonios, no voy a ir-decía yo mientras me dirigía a la barra del gremio.

-¿Qué ocurre Lu?-me preguntó Juvia, mientras intentaba quitarse de encima a Gray.

-Me... invitaron a ir mmmrag...-le respondí mientras mordía un pedazo de carne.

-No hables mientras comes.

-Ah, a un baile de caridad o algo así.-le dije claramemte.

-¿Y eso qué tiene de malo?

-Odio ir a cosas así.-dije para luego empezar a luchar un poco contra Levy.

Luego de un rato llegó Natsu, qué bien, lo estaba esperando.

-¡Oye Dragion!-le grité para luego dirigirme hacía él.

-¿S-sí Lucy-san?-me preguntó, mientras cómo siempre se empezaba a poner nervioso.

-¿No me saludas?, que descortés...

-Ah, L-lo siento mucho, Lucy-san!

-Bueno no importa, y te eh dicho que dejes de agregar el "san" a mí nombre, idiota.-dije mientras me contenía las ganas de gritarle más fuerte.

-O-ok, Lucy-sa... Lucy.

-En fín, te quería decir que irás conmigo a un baile esta noche.

-¿U-una cita?-me preguntó él, lo que hizo que me dieran aún más ganas de golpearlo.

-No, grandísimo torpe, es un baile de caridad o algo así, necesito llevar a un acompañante, y tú eres el indicado.-dije mientras lo empezé a abrazar un poco, rozando mis pechos contra él, agradecía a mi contraparte por haberme enseñado estas tácticas de presuación.-¿O acaso no quieres ir conmigo?

Que gracioso, Natsu parecía un pequeño tomatenervioso debido al gran sonrojo que lo estaba invadiéndo en ese momento.

-Y.. yo, p-por supuesto que iré con-contigo.-me respondió él mientras al mismo tiempo asentía.

-Bien, porqué dudo que tuvieras otra opción, si te negabas te iba a torturar.-dje para luego irme hacía mi casa a prepararme.

Llegué a mí casa y rápidamente me dirigí al armario a buscar algún vestido, tenía que ser algo provocador, al estilo la ropa que usaba mi contraparte, que envidia, apuesto a que esa chica debe tener cientos de vestidos para ocasiones así.

-¡No tengo ni uno!-prefecto ahora tendré que ir a comprarlo.

Tomé dinero y me fuí a la tienda más cercana de ropa que encontré, había muchos vestidos elegantes, no soy de ese estilo, luego de probarme exactamente 14 vestidos -quién sabe cuánto tiempo perdí por probarmelos- encontré uno bastante lindo, era rojo, no era muy largo, apenas cubría mis rodillas, era sin mangas y con un escote un tanto pronunciado, me sentí bastante femenina, no tenía otra elección era el único que no odié, así que lo compré.

Al llegar a casa recordé que tenía toda mi ropa sucia, así que la llevé a la lavadora automática y mientras estaba lista me fui a dar un largo baño, creo que estuve en la ducha por 40 minutos, cada vez más sentía que me volvía cómo mi contraparte, al imaginarme siendo igual que ella me asusté un poco, "no quiero ser igual a nadie"-pensé, así que rápidamente salí del baño, y me dirigí hacía la lavadora, al llegar a ella noté que... toda mi ropa se encogió... ¡Qué pésima mala suerte!, y justo tenía que pasarme ahora, por suerte no tiré el vestido nuevo a la lavadora, pero toda mis demás ropa sí, incluso mi ropa interior.

Pero ya no era tiempo para estarme lamentando, de un momento a otro vendría Nat...-sonido de bocina de automóvil-Natsu...

Le hice una señal desde la ventana para que aguardara, tenía que apresurarme a arreglarme porqué estando en su auto se vuelve muy inpaciente, me puse el vestido, desgraciadamente sin ropa interior, me sentía tan extraña e incómoda, esto sin duda es una tortura, creo que le pondré un vestido y le quitaré la ropa interior a Natsu cuándo lo quiera torturar.

Fuí lo más rápido que pude, sin correr, hacía el auto de Natsu, y me acomodé bien el vestido al llegar ahí para que él no notara mi falta de bragas.

-Tardas demasiado... ¿todo listo?-me dijo él.

-Sí, todo listo...-le respondí.

El baile estaba bastante concurrido, había muchas parejas, y estaban bailando una danza que hacia que los vestidos de las demás mujeres se movieran mucho... -"Mierda..."-Natsu y yo levamos un baile lento y calmado, agradecía que el poseyera ese trastorno de personalidad en este momento, sí estuviera con el mismo Natsu que es en un automóvil el baile sería diferente.

El baile no duró mucho, una hora y media máximo, al terminar me sentí aliviada, nadie notó mi falta de bragas, y mucho menos mi falta de sostén, estaba tan contenta que me descuidé cuándo me subía al auto de Natsu y me lanzé de un sólo salto, lo cuál provocó que mi vestido se moviera...

Pude notar el gran sonrojo en Natsu, es un gran pervertido incluso se quitó las gafas para ver mejor!

Me sentía tan avergonzada, no podía verlo, yo y mi estúpido entusiasmo.

-Lu-Lucy...

-¡Cállate Dragion!, finje que no vistes nada y cállate.-le dije intentando cubrir mi rostro con mis manos.

-¡¿Porqué no estás usando bragas, acaso quieres provocarme!?-me preguntó mientras con sus manos apartaba las mías de mi rostro.

-Provocarte... -apenas entendí... "¿¡Yo lo provoco!?"-grité en mi interior, me sentía feliz por provocarlo, confundida porqué no sabia que él sentía eso por mí y estaba avergonzada por lo qué vió.

-Sí, Lucy, te pones una vestimente muy reveladora todos los días y ahora estás en mí auto con un vestido corto y sin bragas, sólo falta que me digas que tampoco andas sostén para que te intente seducir... y luego violarte-¿acaso me morí?, ¿en serio él dijo lo que creo que escuché?

-Bueno... -dije mientras rodaba mis ojos.

-¡¿No traes?!-me gritó él sorprendido.

-No, toda mi ropa interior se encogió y yo... -dejé de hablar al ver la mirada de natsu hacía mí, era un poco intimidanete, ¿en serio me iba a seducir y luego violar?-¿Q-qué te pasa?-le pregunté a lo que él contestó con encender el auto y conducir lo más rápido posible a quién sabe qué lugar.

Me llevó a una calle cerca de un valle, se veía bastante desolado, ¡Demonios el iba en serio!

-Listo aquí nadie nos verá. -me dijo mientras empezaba a acorralarme.

-¿Na-Natsu a qué te refieres?, ¿yo en verdad te gusto?-le pregunté esperando un "no, sólo quiero hacerte esto", pero lo que me dijo fue...

-Sí, Lucy, me gustas mucho, desde hace tiempo, puede que no lo demuestre mucho... pero tú... me encantas... -todo eso me lo susurró al oído de una forma tan seductora que hizo que se me saliera un pequeño suspiro. Empezó a tomar mi rostro entras sus manos y de forma delicada me depositó un beso en la comisura de los labios,-Ha... -sacó otro suspiro de mi boca, tenía que decirle lo que yo también sentía por él, pero me daba verguenza, todos esos pensamientos se fueron al momento que empezó a besar mi cuello, bajando hacía mi clabícula, y luego besar el borde de mí escote.

Con sus manos empezó a tocar mis pechos por encima del vestido.-Lucy... -escucharlo decir mi nombre con ese tono tan sensual sólo hacía que me sonrojara más, empezó a apretarlos levemente, se sentía tan bien.

Él se dirigía a besarme mientras empezaba a bajar la cremallera que estaba por detrás de mis vestido, lentamente, cuándo estuvo a unos centímetro de besarme... abrí los ojos y estaba en la ducha, ¡¿fue un sueño?!, el beso, la declaración, ¡¿todo fue un sueño?!...

-L-Lucy... -escuché la vos de Natsu y al voltear a ver a la derecha pude notar que estaba de pie frente a mí viéndome con los ojos abiertos de par en par y sonrojado hasta las orejas-¿P-Porqué decí-as m-mi nombre en tú.. tú sueño?-me preguntó. ¡¿Oh, me escuchó?!

-¡P-Por nada imbécil, largo de aquí!-le grité mientras me iba a levantar pero recordé que estaba desnuda-¡Espérame en el auto!

-Sí, c-cómo tú d-digas.-me respondió él para luego irse corriéndo.

-Mierda, estúpido sueño... -dije mientras me dirigía a vestirme, justo cuándo iba a tomar mi ropa interior pensé:"Talvez lo pueda hacer realidad... prepárate Natsu Dragion!"

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¡Feliz viernes! Mi primer fanfiction usando a las contrapartes de Natsu y Lucy. Decidí escribir sobre ellos ya que me di cuenta de que no hay muchos fanfics teniéndolos cómo protagonistas.

Espero con ansias algún review, un favorite o un follow.

P.D. intentaré sacarle continuación pero por el momento está completo.

Fairy tail y los personajes usados en este fanfic pertenecen al Sr. Hiro Mashima, sólo la trama del fanfic sí me pertenece a mí.