1- "Naf"
¿Cuántos universos existen?... si respondes que solo uno, te equivocas, existen miles, millones o inclusive infinitos universos, cada uno existe fuera del nuestro y a la vez, todos habitan en este que habitamos tan cómodamente. En este universo tuyo, mío y nuestro, existen aquellos que pueden ver lo que sucede en otros universos; universos donde los superhéroes, guerreros y magos existen con el propósito de defender sus hogares, puesto ellos son los más grandes iconos de la justicia, la nobleza y el honor. Estos que escriben el futuro de los héroes serian conocidos como "profetas" en esos universos, en el nuestro, solo son dibujantes de comics o mangakas, como quieras decirles al final son lo mismo.
Si, suena muy estúpido, pero estos sujetos han escrito el destino de cientos de universos y es muy probable que fuesen los causantes de la creación de estos también. Así que es muy válido preguntarse… ¿Por qué Dios, los dioses o quienes estén al mando, no se han interesado en esta bizarra situación en la que un mortal con un lápiz y un borrador obtiene el poder para crear miles de personas y los destinos de estos?... bueno, esta pregunta tiene una respuesta, si se interesa.
Uno, solo uno de los pocos entes que habitan nuestro universo en los escalones más altos del poder baja a la Tierra y se dispone a investigar esta extraña situación. Su nombre es sinónimo de voluntad inquebrantable respaldada por años sin vida, su mente es un colectivo de ideas absurdas e ilógicas en las que intenta imponer un orden, su cuerpo es grande y gordo como 4 costales de mantecas dentro de masa para galletas y su piel parece el hule, pero hule repleto de manchas de aceite y protuberancias de color amarillo, su cabeza tiene un cabello esponjado y grasiento de color negro y peinado al lado derecho. Este ente solo ha tomado la forma de aquellos que siguen el camino de la profecía y ahora se dispone a leer los primeros números de sus mangas y comics favoritos de los aficionados que visitan esta tienda.
Entra en una tienda llena de cosas extrañas y con aroma a queso hamburguesas en todos lados porque los dueños son demasiado pobre para pagar un extractor de aire. El ente toma un comic, un manga y los lee tranquilamente, después tomo otro y otro y otro, con cada lectura se da cuenta de la gran injusticia cometida, del gran valor de estos héroes, ya fuese el hombre araña luchando por rescatar a un amor destinada a morir o a un guerrero pelirrojo sacrificándolo todo con tal de salvar a su país de un hombre momificado, todos luchaban por el bienestar de los demás, por la justicia y el honor, algo que lentamente está desapareciendo en este universo. El gerente mira al sujeto confundido y dice:
- ¿le puedo ayudar en algo?
- No, es solo que estos extraños productos de papel y tinta me han dado una idea- responde el ente cósmico.
- ¿Qué?
- Me llamo "Naf" y prepárense para que este universo se llene de héroes- responde "Naf" con un brillo verde en sus ojos.
Naf levita ante la atónita mirada del vendedor y todos los comics a su alrededor flotan en círculos hasta que sus páginas se arrancan por la fuerza centrífuga y lentamente se crea un tornado de papel que rodea a Naf y a los pocos segundos unos extraños relámpagos verdes surgen de los ojos brillantes del ente superior. Uno de los relámpagos salen disparados de sus ojos y todas las páginas que rodean a Naf acompañan al relámpago en su ascenso. Más allá del cielo, las nubes revientan en truenos, huracanes y tormentas en los siete mares y los cinco continentes. Los noticieros de todo país reportan desastres naturales por doquier y varias víctimas que no pueden llegar a numerar, varios de los humanos que habitan este planeta temen que sea el tan famoso apocalipsis y que los cuatro jinetes bajen para condenar a la humanidad. Ahora el relámpago verde y sus compañeras de papel salen del planeta y al mirar hacia abajo se ve como la magnetosfera empieza a forjar un escudo alrededor del planeta para evitar la energía del relámpago haga más estragos en la Tierra, dejando entrar algunos rayos gama del sol.
- Que haya héroes- dice Naf desde la tienda de comics.
Y de inmediato un flash de luz cegó a todo el mundo, literalmente hablando. Cada ojo en el planeta Tierra, humano, animal e incluso aquellos que no tenían ojos, fueron cegados por un resplandor que más que una energía se trata de una orden divina. Y es aquí que la historia comienza.
La ciudad de Metropolis, uno de los lugares más importantes para la Tierra de otro universo, un concepto difícil de entender y no espero que lo entiendas del todo. Esta ciudad en este planeta en este particular universo, se encuentra en el estado de Kansas a kilómetros de distancia de Smallville, la cuna del motivo para que esta ciudad sea tan importante para la Nueva Tierra. No se trata de su gran industria tecnológica y militar (después de todo es la sede de Lex Corp), tampoco se debe a que sea la más parecido a una ciudad del futuro en el siglo 21 o que sea uno de los centros de comercio más importantes del mundo (siendo su bolsa de valores tan importante como la de Nueva York) , no, el motivo para el que el mundo vea con ojos de envidia esta gran ciudad, es un rayo azul y rojo que recorre el cielo como un centinela que la protege de todo mal… ese motivo, ese rayo azul y rojo, ese centro de atención ambulante, es Superman.
Rasca cielos tan grandes que pareciesen las torres de Babel en manos de hombres "malos" como Lex Luthor que frenan sus ambiciones por la gracia y fuerza de este superhombre. Él es la más clara representación de ese sentimiento de impotencia que todo ser humano vive en su vida ante las guerras y las matanzas, es el deseo de intervenir y traer paz aun si fuese usando las propias manos, él es la impotencia transformada en justicia y esta es a prueba de balas. Pero Superman no siempre es Superman, el símbolo descansa en la persona de Clark Kent y vive una vida tranquila y lo más normal que puede, la justicia se transforma en lo monótono y no importa de qué lado lo veas, ese es el ideal que nuestro planeta desea… Naf lo sabe y por eso está decidido a traer al icono que trabaja en el Diario el Planeta.
El periodista mira su computadora y se ajusta sus anteojos, finge que el brillo del monitor molesta sus ojos, lee unos cuantos artículos de otros periódicos, no muy interesantes sobre crímenes menores en el corazón de Metrópolis y más cosas extrañas con los revoltosos del medio oriente. Para Clark esto realmente resulta un tanto estresante, sabe que a pesar de moverse más rápido que la luz no puede estar en todos lados, no es omnipotente por más que sus fanáticos asi lo piensen y en cierta forma, aunque no lo entienda del todo bien, le estresa. Apaga el computador y se pone de pie, Lois le ha mandado un mensaje de texto, está en el lobby del edificio esperando su llegada para irse juntos a casa y a pesar de lo terca que esta mujer puede llegar a ser, es realmente mejor que leer los sin fin de extraños comentarios que piden su ayuda ante el desastre.
El hombre se pone de pie, camina hacia el elevador, ya es de noche en la gran ciudad y la hora de dormir se aproxima. Perry White se despide de él y este con una sonrisa amable le devuelve el "adiós" cortésmente, toma el elevador y escucha la tonta música de este, tan calmante y ligera que de hecho causa enojo en los seudo indefensos trabajadores del diario. Al llegar al piso indicado, una campanilla suena y las puertas se abren, Lois saluda a Clark y este le da un beso en la mejilla, ambos hablan del día que han tenido y se quejan de ciertas cosas estúpidas del oficio, mas conforme se acercan a la salida, algo muy raro llega al oído de Clark súbitamente.
- ¿sucede algo, querido?- pregunta Lois preocupada.
Clark no responde, solo escucha los gritos de terror que se encuentran a kilómetros de distancia, alaridos proclamando su presencia con un tono de miedo solo comparable con los aullidos de los esclavos Apokolips y al siguiente instante una explosión tan fuerte como si hubiese sucedido justo a su lado.
- Lois… te veré en casa- dice Clark con su mirada fija en el horizonte.
- Muy bien, ten cuidado- responde Lois.
Los siguiente que sucede es como un respiro, tan rápido como una simple bocanada de aire. En una exhalación Clark Kent viaja varios cientos de kilómetros y antes de tomar una segunda bocanada de aire, Superman con su traje azul y capa roja se encontró en Africa en solo cuestión de segundos. El héroe levito por encima de un gigantesco cráter y miro la destrucción con algo de calma, pero cerrando sus puños demostrando que a pesar de su pasiva mirada, si encuentra al causante de esto le haría saber lo que piensa.
- Jejeje
Superman mira a su derecha y encuentra a un extraño monstruo de piel rosada y con un traje rojo con un rombo azul en su pecho, sus pantalones bombachos son extraños y blancos, como si alguien los hubiese inflado con helio, lo más extraño de este ser no es su ropa o su extraña piel rosa, es su cabeza con un extraña protuberancia tentacular saliendo de esta y pequeños agujeros de donde sale vapor. El monstruo sonríe y come un pedazo de chocolate, Superman cierra sus ojos y baja al nivel del suelo para entablar una conversación con el bizarro ser.
- ¿en qué puedo ayudarte?- dice la creatura rosa tras tragar el chocolate masticado.
- Te lo preguntare una vez y solo una vez… ¿eres el causante de esto?
- ¿y que si lo soy?... no es realmente una perdida que una ciudad tan pobre y asquerosa desaparezca de este mundo, sea cual sea… además fue un buen sacrificio, son excelentes chocolates
- ¿chocolates?
El monstruo levanto sus dedos y a sus espaldas se levitaron varios chocolates con formas de humanos gritando en dolor. Superman al ver esto se enfureció lo suficiente como para darle un puñetazo en el estómago y obligar a la creatura a caer de rodillas y vomitar todo el alimento injerido hasta el momento.
- ¡Desgraciado, te atrevez a atacar al gran Majin Buu!
Buu levanto su mano y la puso justo en el rostro de Superman, disparo una ráfaga de Ki que consumio todo el cuerpo de Superman en un rayo de energía de cientos de metros cuyo esplendor se podía ver a lo lejos en los países limítrofes y por cuyo poder destructivo causo que los gobiernos de todo el continente africano se asustasen y contactasen a la Liga de la Justicia, puesto un ataque de "una fuerza misteriosa" ha hecho temblar a todo el continente. Una vez que el rayo de ki desaparece y la gran nube de polvo de kilómetros de extensión se disipa, Buu sonríe al no encontrar a Superman, probablemente reducido a polvo.
- ¡Ja, eso es lo que te mereces infeliz!- grita Buu en señal de victoria.
- ¿eso es todo?
Al siguiente instante, delante de Buu y con total tranquilidad, surge Superman con su ropa rasgada más sin un solo rasguño. Buu se enfada y un chorro de vapor surge de los comicos agujeros en su cabeza.
- ¡¿Te estas burlando de mí?
- No, solo pregunto
Al siguiente instante Superman sujeta a Buu de la cabeza y le envía un rodillazo directo al rostro, el impacto es tan fuerte que las corrientes de aire a su alrededor salen volando por doquier formando una presión que a su vez forma un vacío en el mismo punto que están Superman y Buu. Tras el rodillazo en la cabeza, Superman tomo el extraño tentáculo de la cabeza de Buu y lo arrojo en dirección al sur, haciendo que Majin Buu recorriera varios kilómetros hasta chocar con una montaña en cuya superficie se formó el cráter en el cual Majin Buu esta incrustado con su cabeza enterrada en la tierra.
Buu saca su cabeza de la tierra y mira enfurecido la dirección de donde le arrojaron, mas vapor sale de sus agujeros. Sin perder más tiempo, Majin Buu mira el cielo y detecta el ki de Superman.
- ¡Ahí estas!
Como si de un proyectil se tratase, Buu sale disparado del suelo hacia el aire e intercepta a Superman en pleno vuelo y seguido comienza a descargarle oleada tras oleada de golpes, cada uno más fuerte que el anterior y cada uno lo suficientemente poderoso como para hacer temblar toda una ciudad como Metropolis. Superman recibe un par de impacto y uno de estos le da en la quijada, mandándolo a volar hasta chocar con varios árboles de la jungla, dejando un sendero de destrucción como si se tratase de un meteoro. Buu junta sus manos y dispara un Kamehameha tna poderoso que prácticamente el sector de la jungla rodeando a Buu comenzó a quemarse por su intensidad. Superman se puso de pie y al ver el ataque de cerca, calcula que de ser impactado por este la mitad del continente volaría en pedazos, así que toma aire y da un soplido congelante que consigue transformar el Kamehame de Buu en nada más que vapor que cubre el aire.
- ¡Esto debe terminar, Buu!- grita Superman furioso.
- Estoy de acuerdo y tu eres muy fuerte
Al instante que Buu habla, Superman lo encuentra justo a su lado y un manto del extraño material rosa del que Buu está hecho, se eleva por encima de él y se arroja contra Superman. Buu sonríe como nunca antes lo ha hecho, una sonrisa llena de satisfacción y placer.
- ¡Te absorberé, tu poder será mío!
La masa se pega a la espalda de Superman y comienza a asfixiarlo y a reducirlo lentamente, dejando en claro la capacidad de absorción de Buu, mas algo con lo que Buu no cuenta es que su oponente tiene la palabra súper en su nombre por algo. Un rayo de energía rojo destroza la masa rosa hasta desaparecerla por completo, reduciéndola a menos que polvo. Buu mira sorprendido, mas no puede reaccionar a tiempo y al siguiente instante recibe un golpe en el estómago que lo traspasa por completo, otro en la nuca que entierra su cabeza completa nuevamente y una patada que mando a volar al monstruo directo a la atmosfera del planeta.
Una vez que Buu se quita los trozos de tierra de su cabeza, grita enfurecido y más vapor sale de su cabeza, el monstruo gruñe furioso y en su rabieta lanza una esfera de Ki de su mano derecha y sin recorrer un centímetro de distancia, Superman sale de la nada y sujeta la esfera de Ki con su mano izquierda y la aplasta con solo apretarla.
- ¡Suficiente, al diablo, al diablo contigo y tu maldito y asqueroso planeta!
- ¿Qué?
Buu lanzo una sola esfera de energía de dedo índice izquierdo, Superman lo sujeto con ambas manos pero la esfera lentamente se torna más pesada y más grande, dándole mayor dificultad a Superman de sujetarla. Una risotada malévola y loca sale de la boca de Buu, el cual a su vez se pone a dispararle bombas de ki a Superman con la intención de hacerlo perder la concentración y soltar la bola gigante de energía.
- ¡Muere, muere, maldito infeliz, muérete con todo tu planeta de insectos!
- ¡Cállate!- le responde Superman con sus ojos iluminados en rojo y furia.
Superman sujeta la esfera con toda su fuerza y la carga a su espalda, lanza su aliento congelante dejando a Buu congelado y cayendo hacia la biosfera. Con ese problema resuelto, Superman sujeta la gigantesca esfera y con un gran esfuerzo, empuja la esfera destructora de planetas de Buu por el espacio, más allá del sistema solar, hasta llegar al espacio oscuro y una vez ahí, le dejo explotar causando un brillo tan fuerte que le cegó por un par de segundos, pasado el efecto Superman regreso a la tierra viajando más rápido que la luz y sujeto al congelado Majin Buu antes de que tocara la tierra.
- No sé qué seas, pero no te matare… no soy un demonio como tu
En cuestión de segundos Superman viaja de África hacia el polo sur, se introduce en el océano antártico hasta llegar al fondo, donde el agua es tan fría como para mantener al sujeto en hielo, por alguna razón tiene el presentimiento de que hay algo bueno en su interior, aunque eso aún está por verse. El punto en el que lo deposita es un lugar específico que solo él podría encontrar en caso de necesitarlo y es el único lugar donde no corre el riesgo de que otra fuerza lo use para sus propósitos.
Con toda distracción fuera de su vista, Superman se dirige a su hogar, sin mayores heridas y pensando en este extraño oponente. Su capacidad para emanar energía era ridícula, sus rayos de "ki" tenían niveles de poder demasiado altos, no para él, sino para el mundo en el que viven, una pelea prolongada con un ser así terminaría causando desastres en todo el planeta y hablando de desastres. Superman se detiene de golpe al contemplar un relámpago gigantesco que del cielo cae y al golpear el suelo causa suficiente poder destructivo como para generar un domo relampagueante de kilómetros de extensión. Cuando los rayos dejaron de danzar, Superman encontró a un hombre de armadura antigua negra con círculos plateados en esta, capa roja, mallas de metal en sus brazos y un casco con alas en sus costados que cubre su cabellera rubia. En el suelo al lado de este hombre se encuentran una persona más y al verlo con mayor detalle, Superman es incapaz de reconocer al ser verde y de orejas puntiagudas que yase muerto. Al notar el ojo de Superman, el hombre levanta un martillo que está a su lado y vuela a su encuentro.
Al estar cara a cara, los dos se miran como si se hubiesen conocido antes, de alguna época, momento o realidad, como si alguien les estuviese jugando una broma cósmica en la que olvidan las identidades de ambos, en las que reconocerse es imposible, pero a su vez sumamente familiar. Superman se aclaró su garganta tomo la palabra.
- ¿Quién eres?... ¿Qué le has hecho a esa cosa?
- Mi nombre es Thor, hijo de Odin cuyo ojo os mira desde Asgard, mortal
- ¿Qué?... ¿de qué hablas?
Mas no hubo más charla, ambos se detuvieron y al mirar el cielo encontraron con a sus atónitos ojos algo que no sucede todos los días. Por encima de las nubes, por encima de la propia atmosfera, dos planetas flotaban al lado de la Tierra, más no son simples planetas, son otras Tierras.
- ¡Por Odin!
