La promesa de una Lovelace.

Por Cassiopeia Druella Black.


Disclaimer: TID asi como sus personajes le pertenecen a Cassandra Clare.


Ella ya se había acostumbrado a observarlos en silencio sin que nadie se percatara de que estuviera allí.

Porque Jessamine siempre había allí, cuidándolos contra todo mal, esperando por el día en que pudiera entrar al instituto de Londres de nuevo, y poder ver de nuevo su cuarto, que debería estar igual a como lo había dejado hace tantos años.

Después de todo, Will se lo había prometido.

Le había prometido que cuando ella pudiera volver a su cuarto, lo encontraría tal como estaba el día en que ella murió.

Y ella le creía a Will.

Siempre le creería, porque él era como ella.

Él lo había perdido todo al igual que ella.

Y aunque el luego hubiera recuperado todo lo que había perdido gracias a Jem y Tessa.

Ella sabía que Will siempre sería igual a ella.

Y que cumpliría su promesa.

Pero mientras tanto, ella se encargaría de cuidarlos, de cuidarlos a todos.

Porque era una Lovelace, y cumpliría su promesa.

Los cuidaría a todos, hasta que ya no necesitaran de ella.