Bueno traigo una ni tan nueva historia, digamos que es el mismo capitulo solo que con unos cambios, el primero es que lo subi de clasificacion ahora es M.. ¿porque?.. obvio, hay lemon cortesia de Lullaby Sarahi y la trama es mas oscura( lo que un buen lemon puede hacer) igual y a muchos no les gusta.
Si sabemos que hay muchos fics de modelos.. bueno este no es la escepcion, pero lo que si les puedo decir.. es que este es diferente. (pura alta costura!!! NAA de victoria secrets... aqui solo jugamos a Valenciaga) humildemente les pido una oportunidad. Aunque no lo paresca.
Todo es de Tite Kubo.. y lo hago para mi satisfaccion personal.
pd: Un especial agradeiciemnto a Eleassar( pdn si no lo escribi bien) por regalarme el primer coment. y a Sarahi.. porque fue su culpa el que lo publicara y es su culpa.. que haya lemon.
¿Como se alcanzan los sueños?
Las 11 de la mañana en un nuevo bistro en Londres, lo acababan de abrir, por lo mismo era muy popular tanto que para entrar se hacia lista de espera aunque solo fuera para un almuerzo como hoy la "cousine de fusión" era lo mas in".
Entre las personas se podía ver a músicos, artistas, empresarios y todo el jet set londinense que ya había desfilado por ahí , todos absolutamente todos ataviados con el suficiente glamour que puede requerir unas paginas de Faces, y ahí en la terraza entre todo eso había una pequeña figura que desentonaba, de complexión pequeña, se podría decir que no pasaba los 20 años pero ya tenia 25 y pronto cumpliría los 26, tez blanca nariz respingada, labios delgados y rosas con unos clásicos lentes tipo aviador, enfundada en skiny jeans con calf boots color vino y, una sencilla camiseta blanca cuello redondo complementada por el cabello oscuro algo largo y despeinado. Esa mujer extraña con toda la flora y la fauna de alrededor, tomaba su teléfono y veía la hora, mientras solo ordenaba agua mineral, había viejos vicios de su antiguo trabajo que no podía dejar. Y aun en ese atuendo apropiado para ir al súper mercado, parecía atractiva e irreverente.
Un hombre de aproximadamente unos 25 a 26 años, jeans oscuros, camisa blanca y un saco marrón, lentes oscuro mucho mejor vestido para la ocasión, ocupó la silla frente al chica, Su nombre Uryu Ishida, y era una de los diseñadores jóvenes mas importantes de la casa Hueco Mundo:
-Lamento el retraso…-
-Hace tiempo sin verte-
-Unos 3 años creo-(escribía un mensaje mientras contestaba)
-¿Leiste mi mail?,
-Si..¿Quieres ordenar algo?..-
-Tiene café orgánico tostado francés-
-Si, sr- Respondía el mesero recogiendo el menú que Uryu nole había permitido darle.
-Entonces me trae un americano, solamente, y para la señor.. la ensalada capri solo con balsámico y algunos pepinos en conserva por separado-
La chica se soltó a reir.
-No pensé que fuera tan, monótona, tanto tiempo sin vernos y recuerdas perfectamente lo que almuerzo-
-Rukia… Sera Paris, Tokio o Karakura.. simpre pides lo mismo…-
-Si, Karakura…hace mucho q no voy a Japón- volteo y lo dijo con nostalgia
-Entonces ¿que pensaste? …-
-Que acepto (la chica estiro la mano para sellar el trato), hace tiempo que no viajo .. y Kai no necesita una madre gorda como una vaca-
-JAJAJAJAJA, Ishida se carcajeo y la vio de arriba abajo, Rukia tu nunca podrías engordar aunque lo quisieras, y tiene Exactamente 5 años, de tu auto exilio.. las cosas han cambiado mucho-,El diseñador le dio un trago al café y soltó un suspiro.
-Me imagino, aquí los días pasan día tras día igual, me hace falta trabajar aunque también creo q ya soy muy vieja, solo espero que pueda servirte de algo , y ¿Porque mas vienes?
Al otro lado del mundo, un cirujano peli naranja dejaba el condominio de una de sus clientes, ya no se sentía mal en hacerlo, sabia que no la volvería a llamar, pero había valido la pena. Vio su reloj, mientras entraba en su Acura, ya eran mas de la 1 de la mañana, aunque quisiera no llegaría a tiempo con Inoue Orihime, su novia con la que vivía desde hace un año, llego a su apartamento se quito la camisa y se hecho en la cama, estaba solo.
Hoy era su gran noche, después de mucho intentarlo, era su primera vez modelando para una casa de alta costura, aunque solo fuera joyería , Cartier lanzaba una nueva línea en Japón y ella había sido elegida: salió a la pasarela en un ajustado vestido negro, largo, con el cabello recogido en un moño y antifaces de encaje cubriendo su rostro, en su espalda cargaba con 2 diamantes azules engarzados en platino de 45 kilates cada, uno, esa era la pieza mas cara de la noche. Todo estaba saliendo como lo esperaba ella era la estrella, y con la mirada buscaba a su acompañante, recordaba perfectamente que le había dado la invitación y no debería fallar esta noche... No, le suplicaba internamente.
Salió a la fiesta despues del fashion show y lo busco con la mirada aun no llegaba, pero se entretenía saludando, hoy era muy importante muchos diseñadores, directivos de agencias y productores estaban ahí, así que tenia que lucir con una enorme sonrisa agradable y sobretodo elegante.
Inoue Orihime nunca había querido ser realmente modelo, pero la vida la había llevado por ese camino, hasta que encontró su motivación, la alta costura. A lo largo de los años había pasado a ser una modelo bien pagada, de trajes de baño, lencería, perfumes, ropa casual, pero nunca alta costura ¿porque? si ella tenia todo, era alta, grandes ojos grises, cabello marrón largo, labios carnosos y una pequeña nariz su rostro inocente, juvenil, un hermoso cuerpo y ese era su problema, era una talla muy grande para hacer alta costura, todas las chicas debían ser delgadas, pequeñas y con porte muy elegante. Siempre era lo mismo, cuando la llamaban para un casting: Muchas gracias nosotros le llamamos. Pero hoy era su noche.
Sintió un brazo que la sacaba de su ensoñación y vio a un hombre de traje blanco, cabello castaño extenderle el brazo invitándola a salir con el. Ella sabía que tal ves se arrepentiría pero era lo que tenia que hacer.
Todos te animan a cumplir tus sueños …
Salio de la fiesta una limosina los esperaba un penhouse, en un edificio en una de las partes más apartadas a las afueras de Shijiku. No habían hablado nada en la limosina, ni siquiera se habían visto el uno al otro. No era necesario. Los dos lo sabían. Sólo estaban pagando una deuda, había sido el trato desde un comienzo después de todo. Al entrar en la sala elegante y con decoraciones clásicas, muebles de caoba y pinturas de piccaso y dali decorando las paredes. Él camino hasta la sala principal, allí se sentó en un mueble grande. Aizen se aflojo la corbata y quedo viendo a Orihime que estaba parada frente a él sin saber qué hacer.
-¿Qué esperas? Quítate la ropa…- le dijo.
Ella dijo que si con la cabeza y se bajo rápidamente el zipper del vestido.
-No tan rápido…- le dijo Aizen con una sonrisa en su rostro. – Hazlo lento. Quiero disfrutar la vista…
Ella se mordí el labio. "Sólo es para cumplir mi sueño… tengo que hacerlo si quiero llegar a ser alguien…" se dijo a sí misma. No podía evitarlo. El sabor amargo en la boca y la sensación de vacío. Escondiendo el rostro entre su cabello se fue bajando poco a poco el cierre.
-Date la vuelta.- le dijo Aizen. En realidad disfrutaba más verla pelear contra ella misma que verla hacer ese torpe striptease. Ya había tenido a muchas modelos antes, unas con cuerpos más hermosos que el de Orihime. Para él eran simples negocios, pero disfrutaba romper a las personas, le hacía sentir ese poder que crecía entre sus manos. Ser capaz de decidir quién sería alguien y quién no. Le recordaba lo que estaba logrando. Sonrió al verla darse la vuelta.
Orihime dejo caer el vestido en el suelo. No llevaba sostén porque se miraría en el vestido de tirantes delgados que llevaba, se dio la vuelta para verlo y levanto la mirada. Lo vio sonreír fríamente mientras se bajaba el interior. Se levanto y cuando comenzó a quitarse el collar de diamantes que aun llevaba del fashion show, él la detuvo.- No te lo quites.- dijo levantándose de donde estaba por fin.
Aizen se le acerco y agarrándola de los glúteos la levanto colocándola sobre la mesa. Esta dejo escapar un quejido. Él sonrió sin decirle nada. Le agarro unos mechones del cabello que caía sobre los hombros de la joven y los jalo para que esta moviera el rostro para un lado. Orihime apretó los ojos. Le había dolido. Aizen bajo su rostro y comenzó a besarle el cuello, mientras con la otra mano le tocaba los muslos. Colocandose entre las piernas de esta comenzó a darle mordidas en los hombros y besos en la clavicula. Orihime se mordía la lengua para no dejar escapar gemidos. "No puedo disfrutar esto" pensó para si misma "Esto sólo es un pago " se repitió a si misma.
Aizen comenzó a acariciarle más las piernas. Le jalo más fuerte el cabello obligándola a reclinarse un poco más en la mesa. Ella se mordió el labio para no dejar el quejido que se formaba en sus labios salir. Aizen movió su mano entre las piernas de Orihime y le introdujo dos dedos de una. Se sonrió a si mismo "Esta húmeda… lo esta disfrutando a pesar de estar tan callada" dijo. Orihime no podía más. Comenzó a respirar más entrecortado cada vez a medida que los dedos de Aizen ganaban más ritmo. –Ahhhh- dejo un gemido salir. Aizen dejo una risa solitaria salir de sus labios. Sacando su pene lo introdujo en ella con fuerza. Bajo la cabeza y comenzó a lamerle los senos mientras entraba y salía. Orihime cerro los ojos para imaginar que esta con otra persona. Quería pensar que estaba con Ichigo. Si lo disfrutaba como lo estaba haciendo se sentiría más culpable, no sabía si sería capaz de verlo a los ojos. –Ahhhh- no aguantaba más. Las manos de Aizen recorrían su cuerpo. Ya había dejado su cabello ir y se sentía más relajada. Sin pensarlo esta levanto los brazos y lo jalo de la camisa hacia ella. Este aparto la cara. No le había gustado. Eran negocios y él era quien dominaba.
Detiendose, la empujo contra la mesa. Orihime abrió los ojos. Los ojos de Aizen eran diferentes, tan fríos, calculadores, vacios… de repente sintió algo de miedo. Este salió de ella y le dio la vuelta con cierta fuerza no dejándola pelear. Le jalo ambos brazos a la espalda evitándole movimiento. "Te enseñare quien manda aquí" pensó Aizen. Apretandola contra la mesa con fuerza Orihime sintió un poco de dolor pero no dijo nada. Agarrandose el pene, Aizen lo coloco en el ano de esta y con fuerza lo empujo adentro. Orihime cerro los ojos y grito de dolor. Era más doloroso que su primera vez. Aizen cerro los ojos de placer. Era estrecho y al entrar podía sentir como lo apretaba aun más cada vez que salía y poco y volvia entrar, no estaba siendo delicado. Comenzó a salir y entrar con fuerza mientras abria los ojos para ver el rostro de Orihime que ahora estaba bañado con lagrimas. Se mordía los labios para no dejar más gritos de dolor salir. Aizen lo disfrutaba aun más. Verla asi delicada y débil haciendo lo que él quería. Asi siguió por un rato hasta que no aguanto más y termino dentro de ella. Al hacerlo la apretó de los glúteos y dejo un gemido salir de su boca. Luego de terminar salió de ella. Con una voz monótona le dijo. –Limpiate, hay un baño de visitas en el pasillo, un auto te recogerá en 15 minutos, y deja el collar, en el comedor. Luego vete.- le dijo y se fue al baño de su habitación donde se baño.
Orihime se quedo sobre la mesa por unos minutos terminando de llorar su dolor. Se sentía violada. Pero sabía que no lo había sido. Era parte del trato, él podría hacer lo que quisiera. Se quito las lágrimas amargas y se fue al baño. Luego de limpiarse se puso su ropa y caminando adolorida salió del penhouse. Aizen seguía en el baño. Ella podía escuchar el agua correr. Sin decir nada salió del lugar. Abajo en la recepción del edificio ella suspiro "No llegaré lejos sólo estrechándole la mano a la gente… esto es parte de los sacrificios que tengo que hacer" se dijo. Apretando los puños como para no dejar lo último que le quedaba de dignidad írsele de las manos se paro recta y salió del ascensor. Nadie sabría de esa noche, no lo hablaría con nadie.
Era lo que tenía que hacer después de todo.
Todos te animan a cumplir tus sueños ….
Pasaba una esponja con crema de desmaquillante por su rostro y sus labios.
Pero nunca te dicen.. que hay que sacrificar…
La chica de ojos grises se ponía un camisón negro de seda para acostarse al lado de su el se levantaría y no tendría que contestar ninguna pregunta.
Notas de la autora: Como se daran cuenta es una historia presumo algo madura, el mundo no es rosa ni negro.. y los sueños no son gratis..
2) Para imaginar a los personajes, todos oscilan entre los 25 y 26 en vueltos en un mundo porq no decirlo superficila, Rukia tiene en lugar de un estilo glam, es digamos una chica indi... y Hime es la clasica modelo de agencia (antagonista)
3) parejas... de todo un poco.
Muchas gracias por leer, y espero comentarios de todo tipo.
