LOS PERSONAJES PERTENECEN A LA MARAVILLOSA STEPHENIE MEYER (que creo al guapo de Edward Cullen) Y LA HISTORIA ES MIA ^.^
HUMM… NUEVA HISTORIA :D
Espero que les guste :)
NOS LEEMOS ABAJO
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BPOV
Mi cumpleaños número 17, sí, hoy…y el día está igual que en mi cabeza, gris y con unas nubes negras que salpican agua, maravilloso…
Mi madre está mirándome desde el cielo, y mi padre está muy sumido en su trabajo como para recordar que día es hoy, 17, nada nuevo, hace horas tenía 16, no noto el cambio a pesar de un número, me miro en el espejo, sigo igual que ayer e igual que hace un año, mi reflejo sigue igual, 1.63 de estatura, cabello indomable (debo recordar no dormir con el húmedo), flacucha y sin curvas, nada, a excepción de la pequeña curvatura que muestra donde se supone esta mi cintura, mis senos son pequeños, y mi trasero no es relleno, suspiro, todas las chicas del instituto a esta edad están lo suficientemente desarrolladas para hacer que los chicos babeen por ellas, creo que mi cuerpo se ha retrasado, parezco una niña de 15, quizás alguna niña de 15 sea más desarrollada que yo, suspiro y cierro la cremallera de mi chaqueta, me pongo mis anteojos, son de un marco negro y cuadrado, son grandes pero no las considero feas, ahora mi vista se arregla, trato de disimular mis ojeras cubriendo con mi cabello, no funciona, salgo a la calle sin haber tomado desayuno, una barra de cereal quizás no cuente como ello, sigo mi rutina como siempre, ¿qué caso tiene hacer algo nuevo si alguien lo arruinara?, cuelgo la mochila en mi hombro y me encamino bajo la lluvia, mi camioneta se descompuso y a mi padre no le interesa. Pasan autos, muchos de ellos, logro distinguir entre ellos uno, parpadeo para quitar el agua de mis pestañas, era un volvo plateado, sí, el nuevo vehículo de Edward Cullen, los siguen varios más, nadie se detiene a llevarme, siento que el agua está entrando a mis calcetas a través de mi converses, al igual que en toda mi ropa, mi cabellos se pega a mi cara por la lluvia, lo intento quitar sin lograrlo, me resigno y sigo mi camino.
Entro al instituto, todos están perfectamente secos, me miran como un bicho raro por lo mojada que estoy, estoy acostumbrada, bajo mi cabeza y camino en dirección silenciosa al baño, debo hacer algo con mi cabello que no deja de escurrir agua, siento frio, creo que resfriare, no quiero tener problemas hoy, camino los más rápido que puedo entre los alumnos vigilando a mis pies para no tropezar, no funciona…mi frente choca contra algo sólido, el golpe duele, me deja aturdida, siento a alguien gruñir, levanto mi cabeza y lo veo…Oh no!, es él, estoy en problemas, mi frente duele por el choque que tuve contra la espalda de Edward, espero que no me diga nada hiriente esta vez, la última vez que lo hizo casi no aguante las lágrimas, no quería que me vieran llorar, eso me hacía ver más débil y seria la carnada perfecta. No me importaba la crueldad para decirme las cosas de los demás, pero me dolía cuando Edward lo hacía, éramos vecinos y compañeros en clases, mi amor secreto, quise pensarlo mi héroe, soñaba en que algún día me defendería del resto y me juraría amor eterno, pero no, era quien me decía las cosas más crueles, preferiría que me golpearan en la cara a escucharlo hablarme así, sus gritos me asustaban, hacía que me volviera un diminuto insecto al que todos podían pisotear.
-Fíjate por donde caminas perra!-Tanya, la nueva novia de esta semana de Edward, la rubia enterró su dedo índice en mi pecho recalcándome lo que decía-O acaso necesitas que te arregle la vista estúpida?!-levanto solo un poco la mirada, ella está furiosa, Edward solo me ve desde su posición despectivamente, para el no valgo nada, Tanya levanta su mano de pronto para golpearme cierro mis ojos apretándolos fuerte, siento el sonido y el ardor en mi mejilla izquierda, mis ojos se llena de lágrimas de furia, vuelve a levantar su mano y vuelvo a cerrar los ojos, esto es humillante, a Edward le parece gracioso que Tanya me golpee, apretó lo más fuerte que puedo mis parpados esperando el golpe, su mano no llega a mi rostro, lentamente abro mis ojos, Edward está tomando la muñeca de Tanya, el me salvo…
-Tanya, no gastes tu tiempo en ella, lo estúpida no se le pasara-eso dolió, siento que millones de agujas taladran mi corazón, salo humillada ahogando mis lágrimas, entro al baño lo más rápido que puedo, muerdo la manga de mi chaqueta mojada luchando para que mis lágrimas no caigan, Edward vio como Tanya me golpeaba, el ardor de mi mejilla no se parecía al dolor de verlo reír de mi desgracia, quiero gritar, desparecer, nadie me quiere…nadie siente algo de cariño por mi…nadie se preocupa de mi…la única persona que lo hizo está muerta, mi madre me amó…ella me cuido hasta que el cáncer acabo con sus vida, me dejo, mi vida se apagó.
Respiro profundo y salgo de mi escondite, tengo mi primera clase con Ángela, mi única amiga, ella está esperándome en mi casillero, me siento mal, por mi culpa no se le acercan los populares, dice que no le importa.
-Feliz Cumpleaños Bella! -me saluda con su característica sonrisa, ella se acordó, se lo agradezco en silencio, intento imitar su sonrisa, pero como siempre, otra vez no funciona.
-Hola Ángela
-Lista para matemáticas?-me pregunta y asiento
-Ben pasara por mi hoy, quiere que te llevemos a casa?
-No te preocupes-intento sonreírle y camino en silencio a su lado mientras ella me habla, Ben debe amarla, mucho, demasiado, es muy romántico con ella, se preocupa por ella, la envidio, pero no malintencionadamente, yo quisiera que alguien se preocupara siquiera un tercio de lo que Ben hace a Ángela.
Paso el día como siempre, lento, me dirijo a mi última clase luego de sacar los libros de mi casillero, intento pasar desapercibida, no funciona, alguien pone su pie en mi camino y tropiezo, mis libros caen regados por todas partes, estor de rodillas y manos en el piso, mi rodillas arden, eso seguro dejara alguna huella, mi piel blanca es propensa a hematomas, escucho risas y levanto mi cabeza, frente a mi esta Edward mirándome con una mueca de arrogancia en su cara, luego se ríe, apilo mis libros humillada entre risas de los demás, me doy cuenta de que Mike fue quien hizo que me tropezara, no importa, mi cuerpo está acostumbrado a recibir golpes, me levanto tambaleándome, hago una mueca de dolor por mis rodillas, tiemblan, me doy cuenta de que una de ella tiene un líquido rojo sobre mi pantalón, no es agua precisamente, arde, miro a Edward otra vez, él está riendo con su perfecta boca, es se está riendo de mí, se ríe de mi dolor como los demás, lo miro dolorida e intenta ahogar sus risas, pero eso solo aumenta sus carcajadas, humillada mas que antes quizás, salgo de ahí, camino lejos, y lo más rápido que puedo, cada paso es una tortura para mi rodilla, el roce durdo de mis jeans duele, pero sigo mi camino.
Biología, ultima clase, debo sentarme junto a Edward, sé que a él le desagrada la historia, se sienta con cara de dolor junto a mí, me pregunto si huelo mal, disimuladamente olfateo mi cabello, mi ropa, nada, me he bañado como todos los días y mi cabello olía a fresas gracias al shampoo, igual que mi ropa por la colonia, me gusta ese olor, quizás a él le desagradan las frezas, no lo sé.
Edward no me habla, ni siquiera me mira, escucho que se burlan otra vez de mí a mis espaldas, cierro los ojos y visualizo a mi madre, ella me da la fuerza para seguir, cada vez falta menos, solo unas semanas más, iré a la universidad, estudiare medicina y comenzare de nuevo. Las horas se hacen eternas pero por fin tocan el timbre, Edward no se ha movido, está buscando algo en su mochila, quiero salir, pero si él está aquí se dará cuanta de que mi rodilla sangra un poco, me humillara más, lo veo despedirse de todos los chicos que pasan por su lado, pronto en el salón solo quedan algunas personas cierro mis ojos con fuerza y suspiro, me levanto apoyándome en el respaldo de la silla, ahogo un gemido de dolor, solo necesito llegar a casa y vendarme la rodilla rasmillada, eso duele, meto con cuidado mi silla en su lugar junto a la mesa, y luego cuelgo la mochila en mi hombro, miro a mi compañero de asiento para cerciorarme de que no me viera…su atención ya no estaba en la mochila, sus ojos verdes están abiertos como platos mirando mi rodilla, su boca semi abierta, mira mi cara enrojecida quizás para decirme algo, automáticamente saco mi mochila de mi hombro y la pongo sobre mis piernas obstruyendo su visión, salgo de ahí.
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NUEVA HISTORIAA! ESTOY EMOCIONADA Y ESPERO QUE LES GUSTE, NO ME ODIEN POR LA TRAMA, PERO ES LA UNICA FORMA DE QUE LA HISTORIA SIGA SU CURSO :D
PD: Sé que debería actualizar mi otra historia 'Edward, mi problema personal', pero a mi computadora alguien le borro la historia y lo quise asesinar ¬¬ broma jejejeje O.o, pero si me enoje bastante, ahora tendré que recordar que debía escribir y me estoy demorando bastante, la inspiración se fue….. :/ y espero que vuelva \^.^/
Reviews?
Nos leemos…
VaaleCullen :3
