Bueno, aquí con una historia... un Harmony para no perder la costumbre, espero que sea de su agrado.
Desclaimer: Ningún personaje me pertenece, todos son propiedad de JK.
¿Por qué estamos así?
A sus ya diecisiete años, Harry, aun no lograba entender. Y es que su cabeza era un lio enorme, todo era complicado, las decisiones que había tomado esos años podría decir no eran muy buenas, casi podía asegurar que eran un tanto desastrosas, pero sin duda lo único que lo consolaba era el hecho de saber que por muy desastrosas que fueran, eran correctas ¿Cierto?
Y ¿Cuál era la razón de esta confusión que día a día cobraba más fuerza? La respuesta era simple: su corazón. Porque por algún motivo su corazón siempre le decía una cosa y una voz extraña le decía todo lo contrario, y él siempre le hacía caso a esa voz misteriosa, ¿Por qué? No lo sabía, pero siempre le hacía caso, era como si esa voz tuviera cierto poder en él. Dejarse llevar por ese extraño poder lo había llevado a un punto tal que todas sus decisiones le estaban cobrando factura.
Un suspiro escapo de sus labios mientras el pensamiento de dar lo que fuera por averiguar que era exactamente ese poder llegaba a su cabeza, en ese momento y tratando de calmar un poco sus pensamientos levanto la vista, el lago de Hogwarts fue lo primero que vio, no pudo evitar sentirse en paz al verlo, todo porque ya no había amenaza, Voldemort había muerto. Aún no estaba seguro de cómo había derrotado al mago más tenebroso de todos los tiempos, los recuerdos de esa pelea eran aun difusos, se perdió sólo unos segundos en el pasado para después sentir como alguien se sentaba a su lado.
— Bello día ¿Verdad, Harry?
Al escuchar esa voz supo inmediatamente de quien se trataba, ella era la principal razón por la que sentía su mundo estaba de cabeza, levanto lentamente la vista y trato de sonreírle a aquella chica.
— Hermione.
— ¿Por qué estás aquí? Todos te buscan, Ginny, no deja de gritar.
No pasó desapercibido para él, el hecho de que la castaña sonrió con amargura después de informarle el ultimo berrinche de su novia, casi podría jurar que estaba un tanto triste, al ver esto lo sintió de nuevo, su corazón quiso hablar, quiso decirle a Hermione tantas cosas que llevaba tiempo escondiendo, cosas como que ya no le importaba si Ginny, se la vivía gritando, llorando o pataleando, para él las cosas habían cambiado a tal punto que sabía la castaña era la mujer que él más quería, pero apenas quiso abrir la boca para decirle aquello a Hermione, la voz, apareció de nuevo.
"Ginny, debe estar con Harry"
"Harry, ama a Ginny"
"Hermione, es su hermana"
Sacudió la cabeza con fuerza tratando de ahuyentar aquellas palabras, aquellas estúpidas oraciones que más bien parecían reglas, estúpidas reglas dictadas por una persona que no lo conocía, que no sabía lo que él quería.
Supo que Hermione, había notado su gesto y lo veía con preocupación, él sabía que últimamente su amiga se la vivía preocupada por él ya que al parecer era la única que notaba algo no iba bien.
— ¿Estás bien?
— Si, pero de nuevo esa voz…
— ¿Voz?
Notó como la preocupación en Hermione, aumentaba de manera considerable. No pudo evitar el pensamiento de que aun preocupada su amiga, era hermosa.
"Harry Potter, debe amar a Ginny Weasley"
— ¡Ya basta!
— No te dije nada.
— No, tú no, esa voz, esa maldita voz que no me deja hacer lo que yo quiero, Hermione… esa voz me controla.
No le importaba el hecho de que su amiga lo tachara de loco, la verdad ya no podía más, tenía que contárselo a alguien y sabía no había mejor confidente que Hermione, después de todo, siempre fue ella.
— ¿Te controla? ¿Harry, estás bien? ¿Quieres ir a la enfermería?
— No.
Con el rostro lleno de preocupación, Hermione, se acercó a él y le tomo la mano, al sentir este contacto sintió una descarga eléctrica recorrer su cuerpo, fue entonces que de nuevo su corazón quiso hablar, pero por supuesto aquella voz, no lo permitió.
"Hermione, era como su hermana"
— ¡No es mi hermana!
— ¿Harry?
Sabía que no le estaba diciendo mucho a su amiga, era por eso que no lo comprendía, tal vez era momento de contarle aquellos terribles sueños, hablarle de esa maldita voz que no lo dejaba vivir.
— Hermione, te voy a contar algo.
— Sabes que me puedes contar todo, estoy aquí.
Le agradeció sin palabras, como muchas veces lo había hecho, acaricio la mano de Hermione con ternura y sintió como su corazón se aceleraba, fue entonces que lo pudo escuchar claramente, fue tan fuerte que incluso supero a aquella voz de su cabeza.
"Ama a Gi…"
"Tú amas a Hermione Granger"
"Ella no es tu hermana"
"Ginny sólo es la hermana de tu mejor amigo"
— Eso es cierto.
— ¿Qué es cierto?
Miró con intensidad a su castaña amiga, la verdad era que no sabía por dónde empezar.
-OOOoooOOO-
Tenía que aceptarlo aquella situación ya le estaba asustando, dio un vistazo a Harry, su amigo le sonrió un poco y esto basto para que su corazón diera un brinco, de esos que desde hace ya mucho tiempo le regalaba cada vez que estaba al lado del moreno.
"Hermione, ama a Ron"
— ¡Eso no es cierto!
— ¿Hermione, qué dices?
— Nada.
Mordió su lengua para no hablar, y es que por más que quería sincerarse con su amigo algo se lo impedía, ¿Cómo decirle que llevaba años escuchando una voz? Una voz que le dictaba que hacer cada segundo de su existencia, una voz que por alguna razón no podía desobedecer, recordó una de las muchas veces que había llegado a escucharla, el hacerlo logró que un estremecimiento recorriera su columna.
Era un suceso que todos esperaban, aun así verlo le sorprendió, era en verdad increíble que Harry, por fin se hubiera decidido, Harry, su amigo besaba a Ginny Weasley en la sala común en presencia de todo el mundo. No pudo evitar sentir como su corazón se desgarraba, su alma agonizaba… todo porque últimamente a Harry, no lo veía igual, cada vez que estaba cerca de él sentía como sus piernas flaqueaban, por muy extraño que aquello se escuchara algo le decía que comenzaba a sentir algo más que amistad por su gran amigo. Todo esto la llevaba a aquel momento, dónde quería gritarle a la menor de los Weasley se alejara de su amigo, quería… lo deseaba pero no pudo.
"Debes de sonreír"
"Eres feliz"
"Eso no es cierto, me duele"
"Sufro, quiero llorar"
"Así debe de ser, tú eres como su hermana"
"SONRIE"
Fue en ese instante que Harry, busco su mirada y por alguna razón ella le sonrió radiante, como si en verdad estuviera feliz por lo que él había hecho, cuando se dio cuenta de lo que había hecho era demasiado tarde, ahora Harry, veía con cierto nerviosismo a Ron, no entendía, no comprendía… ¿Por qué había sonreído?
Parpadeo volviendo a la realidad, aquel había sido el inicio de todo, ahora cada vez que estaba con Harry, esa voz aparecía con mayor frecuencia, y por más esfuerzos que ponía de su parte simplemente no podía desobedecer.
— ¿Hermione, estas bien?
— Si, no es nada, mejor dime que me querías contar.
Un silencio fue lo que le siguió a sus palabras, para ella fue claro que Harry, no encontraba la manera de iniciar aquella confesión, así que para darle un poco de ánimo acaricio la mejilla de su amigo y este por fin se decidió a hablar.
— No quiero que pienses que estoy loco Hermione, pero cuando estuve en cama por lo de Voldemort, yo… bueno tuve visiones.
— ¿Visiones? ¿Qué clase de visiones?
— Bueno, no eran visiones en sí, eran sueños… o al menos eso creo.
— ¿Qué es lo que veías Harry?
— Hermione, esto es extraño pero yo me veía a mí.
— ¿A ti? ¿Harry, qué tiene eso de extraño?
— Era yo pero, era más bien como si yo fuera un personaje de un libro…
Bien, esperaba que aquello fuera una broma.
