Este compilado participa en el #Drabblectober con una tabla que me hizo mi esposa TanitbenNajash, que está pensada para ser usada con los mortífagos (porque yo se la pedí así). El #drabblectober consiste en escribir, diariamente, un drabble de entre 100 y 500 palabras, así que esperen actualizaciones diarias por acá.
Resumen: Ella le descubrió todo el potencial. Él estuvo perdido desde siempre, buscando romper todas las ideas que la gente tenía de él, buscando hacer exactamente lo contrario a lo que la gente esperaba de él.
Personajes: Barty C. Jr. & Bellatrix L.
Prompt: Verde y azul
Ser la muerte
Starting from here, let's make a promise.
You and me, let's just be honest,
we're gonna run, nothing can stop us,
even the night that falls all around us
Not gonna get us, t.A.T.u
«Tienes que sentirlo».
Los gritos. El sufrimiento. Las súplicas pronunciadas ya casi sin voz. «Mátame a mí, pero déjalos vivir, déjalos vivir». Todos pedían por alguien. Por sus hijos, sus padres, sus parejas. Todos tenían algo que perder. Y Barty siempre se los arrebataba todo. A veces Bellatrix lo veía y se sorprendía viendo a alguien que podía entenderla. Le sacaba nueve años al mocoso y de todos modos, desde la primera vez que lo había visto en acción, había decidido que era alguien digno de su compañía.
También le gustaba jugar con las presas antes de devorarlas.
Ella lo llevó al señor Tenebroso cuando él llegó haciendo demasiadas preguntas. Lo hizo probarse a sí mismo cuando era todavía un mocoso de dieciocho años recién salido de Hogwarts. Lo había pulido, poco a poco. Le había preguntado todo sobre él.
Era un ex Ravenclaw. Buen actor. Doce TIMOS. Hijo del jefe de la oficina del ministerio que los estaba persiguiendo. Dispuesto a cualquier cosa con tal de destrozar todas las ideas que la gente tenía de él.
«Tienes que sentirlo».
—¡CRUCIO! —La voz de Barty retumba mientras Bellatrix lo mira, apoyada en la pared. Sonríe de lado, con esa sonrisa que todavía le queda de adolescente rebelde mientras lo mira torturar a alguien. Un muggle. El nombre y la víctima no importan, no en realidad. Lo que importa es Barty y la sonrisa que pone cuando ve los resultados de su maldición, cuando los gritos les perforan los oídos.
Es lo que merecen, se dice Bellatrix.
Pero más que justicia contra aquellos que los han forzado a esconderse, ya es pura y simple diversión.
«Tienes que sentirlo».
Se acerca un poco a Barty. Ve los cuerpos desperdigados por toda la sala. Han matado a toda la familia, miembro por miembro. Uno de los hijos era mago. Se lo merecía, se repite Bellatrix, por sangre-sucia. Pero ya no se trata de lo que merezcan o no merezcan sus víctimas, se trata de que quiere hacerlo y de que puede hacerlo.
Los gritos de apagan con la maldición de Barty. El hombre se derrumba. Oyen sus sollozos apagados, lo ven temblar en el suelo.
—Es como ser La Muerte misma —dice Bellatrix. Alza un pie para obligar al hombre al que se dé la vuelta, a que los mire para obligarlo a mirar su propia muerte a la cara. Cuando lo ve indefenso, se siente como si fuera una deidad que llevara la muerte en la punta de su varita. Se agacha sobre el cuerpo y voltea a ver a Barty—. ¿Lo haces tú o lo hago yo?
—Tuve mi diversión —responde él. Se pasa la lengua por los labios, como si estuviera cansado—. Hazlo tú.
Bellatrix coloca la punta de su varita en la sien del hombre.
—Avada Kedavra.
Y de repente, la luz de sus ojos se extingue. Ella se pone en pie y finalmente, los dos miran el resultado.
Barty es el que alza la varita:
—¡Morsmordre!
Notas del drabble:
1) Ambientado en 1978.
2) En mi headcanon, Barty Crouch Jr. fue a Ravenclaw. Para mí, después de leer el Cáliz de Fuego, encaja perfectamente que esa haya sido su casa. Además de que me aburre un montón que todos los mortífagos sean de Slytherin. Como si no hubiera gente de mierda en otros lugares.
3) Aunque los libros digan que tiene el pelo pajizo, en mi mente, Barty siempre será David Tennant.
Andrea Poulain
a 1 de octubre de 2018
