Buen día, gente!
Aquí les caigo con un drabble... O oneshot, mejor dicho, con varios de nuestros queridos personajes de Assassin's Creed, aunque aquí hemos de agregar a algunos invitados especial ;-). Este fic surgió una mañana y me avine a describirla.
Ojalá lo disfruten.
Saludines!
Vicka.
P.d: Assasisn's Creed, Tintin y cierto programa de TV no son míos,son de sus dueños respectivos.
Una tarde de... ¿Terror?
- ¡A LA MIEEERRRDAAA! – gritaba Ezio mientras que él y Connor se abrazaban mutuamente al ver en la pantalla de la televisión cómo un tal Slenderman mataba a una pobre mujer aterrorizada.
- ¡PUTA MADRE, ESO YA ES DEMASIADO! – exclamó Tintin, quien hasta saltó del sofá y se fue a esconder detrás.
- ¡DESMOND, APAGA ESA COSA! – exclamaba Altair demasiado aterrorizado - ¡APÁGALA, QUÍTALA, LO QUE SEA!
- Chicos, es sólo un juego. No sean payasos – replicó Desmond con tranquilidad.
- ¡Cabróoon! – exclamaba Ezio - ¡Me estoy orinando de miedo con esa cosa matando a todo lo que se esté moviendo! ¡Per l'amor di Dio!
- Creo que ya me hice – susurró Leonardo muy sonrojado.
- Oigan, chicos, es sólo un mito urbano- trató de calmarles Desmond -. Nada de eso es verd-
Desmond se quedó mudo y palideció enseguida.
Los demás, extrañados, se volvieron en dirección hacia donde estaba mirando el chico Miles… Y éstos se quedaron paralizados al ver a un monstruo sin rostro de complexión delgada y con varios tentáculos saliendo de su espalda.
Todos gritaron aterrorizados al ver que se trataba de la mortífera leyenda urbana Slenderman en persona y salieron corriendo de la casa.
El supuesto monstruo, al ver la casa vacía, se echó a reír y se quitó la máscara diciendo:
- ¡Al fin! ¡Hey, chicas! ¡Resultó!
Un cuarteto de chicas acechó y, riéndose, se sentaron a ver la televisión.
- ¡Pobres de los chicos! – comentó Rita.
- ¡Sí! – replicó Cristina mientras terminaba de quitarse el disfraz– Me dio risa la forma en que salieron corriendo. Parecían niñitas asustadas.
- ¿Crees que regresarán, Cristina? – inquirió una pelirroja.
- Nel pastelón, Sofía –respondió la aludida mientras se quitaba el traje -. Se han de estar cagando de miedo.
- Jajajajaja, ¡estuvo genial, Cris! – exclamó Maria.
- Sí… Hasta les tomé foto con la cara que pusieron – comentó Lucy -. Jajajajaja…
- Sólo espero que se les pase el mega-susto – comentó Aveline -, aunque... Oigan, ¿han pensado en dónde se podrían esconder?
- No - respondieron todas.
Aveline se cuadró de hombros y se unió a sus amigas para ver una película romántica que Rita había rentado así como entrarle al chisme durante toda la tarde.
Mientras, en alguna parte del bosque… O mejor dicho, en casa de alguien…
- Esto no es lo que tenía en mente cuando dije que sería una tarde de videojuegos– dijo un chico pelinegro de 12 años muy molesto mientras que sus amigos, un pelirrojo, un rubio y un castaño observaban como 6 varones de unos 19 años estaban temblando de miedo en la cama muy bien tapaditos-, ni mucho menos ver a mi primo Desmond y a sus grandulones amigos en mi cama temblando como niñitas asustadas.
- ¡Cállate, Stan! – exclamaron los varones mayores.