(Tormenta)
Era una noche lluviosa en el Shin Sekai. Todos los mugiwaras estaban aburridos. Estaban reunidos en la cocina, esperando a que la cena estuviera lista. Unos leyendo, otros hablando de cosas triviales y otros simplemente viendo a la nada pensando en las cosas de la vida.
Namiii... - dice Luffy en un quejido - ¿Cuando dejara de llover? Me aburrooo! Con esta lluvia no puedo jugar en la cubierta.
¿Y tú crees que nosotros no nos aburrimos? - dice Nami - ya te dije que no se despejará hasta el amanecer así que aguanta te!
Para suerte de todos justo en ese momento el cocinero termino de preparar la cena, dando le fin a las molestas quejas de su capitán.
Ya terminada la cena cada quien salió a su camarote ya que no tenían nada mejor que hacer en esa lluviosa noche. Los chicos se fueron al suyo y las chicas al de ellas. Nami se estaba cambiando la ropa para ponerse más cómoda y acostarse a dormir, mientras Robin leía acostada en su cama. No podía evitar dar pequeños vistazos al cuerpo de la navegante, como soñaba con tocar esas curvas y sentir su piel con la yema de sus dedos.
Robin! - dice Nami llamándole la atención a Robin y sacándola de sus pensamientos - ¿Que te paso?
Nada, nada navegante-san - dice Robin volviendo a la realidad - ¿se te ofrece algo?
Te decía que si, ¿podrías apagar la luz cuando termines de leer? - dice Nami con su sonrisa - es que no puedo dormir así y menos con esta lluvia...
No te preocupes, navegante-san, ya mismo la apago - dijo Robin dejando su libro en su mesita de noche y apagando la luz.
Eran como las 1:00 am cuando comenzaron a sonar truenos. Uno de estos hizo despertar a Nami.
Kyaa! - grita Nami del susto - solo fue un rayo - soltó un suspiro
¿Estas bien, navegante-san? - pregunta Robin que se despertó por el grito de su nakama.
N-no es nada solo que no puedo dormir tranquilamente con esta tormenta - dice Nami.
Nami se volvió a acostar pero no puedo pegar un ojo... Esa maldita tormenta le quito el sueño.
Robin... - susurro Nami.
¿Si? - dice Robin.
¿Puedes dormir?
Si, navegante-san, ¿y tú?
No... - dice Nami - etto... Me preguntaba si... ¿Puedo dormir contigo? Solo por esta noche! - dice nerviosa.
Robin sorprendida por la petición de su nakama pregunta:
¿A que viene eso?
Es que como tú puedes dormir placenteramente con este diluvio, me preguntaba si dormir contigo me haría dormir - dice Nami avergonzada de esa petición - aunque si no quieres no impor-
Si puedes - la interrumpe Robin.
Nami se levanto de su cama y se dirigió a la de Robin. Levanto la sabana y se metió debajo de ella.
Gracias, Robin. Buenas noches - dice Nami acurrucándose al lado de la arqueóloga.
Robin no pudo evitarlo y la abrazo de una manera protectora. Por fuera parecía estar ejerciendo el papel de una hermana mayor cuidando de su hermanita. Pero por dentro era la persona que gustaba de ella y haría cualquier cosa por su bienestar. Robin sintió las curvas de la akage por encima de su pijama. No pudo evitar sonrojarse y aplicar una leve fuerza en el abrazo para a traerla más hacia ella. Nami dándose cuenta de este acto, abrazo a Robin y pego su cuerpo al de ella. Alzando la vista vio el rostro de su nakama. Se quedaron así varios minutos hasta que Robin dijo:
Buenas noches, Nami.
Y le dio un corto beso en los labios. Para así ambas volverse a acurrucar.
Nami pensó que esa después de todo esa "maldita" tormenta no era tan mala al parecer...
~FIN~