¿Sí o no?

Hola yo aquí trayendo para ustedes esta nueva historia que bueno se me ocurrió mientras me daba un baño.

Quiero comentarles también que estoy muy triste porque hace algunos días en los que estuve de ausencia total por las redes y esta hermosa cuenta, mis cuentas fueron víctimas de un hacker, las recupere pero aquí fue donde la cosa fue mas dolorosa. Esa persona borro mis archivos para la continuación de "Nuestra Soledad" y 6 historias nuevas que tenia en proceso... La verdad que estoy muy triste por ese suceso porque no tenia los archivos en otra parte, los guardaba todos en mi cuenta porque siempre descompongo mis aparatos electrónicos. Haré lo mas posible por estar mas activo esta vez.

NARUTO Y SUS PERSONAJES NO ME PERTENECEN, ESTOS SON OBRA Y CREACIÓN DE KISHIMOTO Y COMPAÑÍA.

/\/\/\/\/\/\/\/\/\/\/\ inicio y fin de recuerdos

Bueno pues disfruten de la lectura.

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Las cosas entre ellos había iniciado de una manera muy extraña, se conocieron de una manera extraña, esos encuentros accidentales en lugares nada comunes para encontrarse. Pero lo mas extraño en todo eso fueron los sentimientos que se albergaron en sus corazones y en un poco tiempo pasar de desconocidos a algo mas.

El primer encuentro accidental fue el que los unió de manera instantánea, fue algo que unió dos vidas de manera linda y porque no hasta divertida.

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Caminaba de manera lenta sobre el pasto, vistiendo un vestido color blanco el cual llegaba hasta sus rodillas, su rostro lucía hermoso y sereno, no había maquillaje en el, sólo un poco de brillo labial. Ese día era la fiesta de cumpleaños de Sasuke y todos habían planeado hacerle una fiesta sorpresa al azabache.

—Espero mi vestido no sea demasiado atrevido...—un rubor cubría sus mejillas, haciéndola aun más encantadora.

Su tartamudeo la había de cierta forma abandonado hacia tiempo atrás, y digo de cierta forma porque cuando en verdad algo la avergonzaba ese detalle de ella salía a la luz, pero al final si no lo hiciera fuese como ver a otra Hinata.

—¿Por que tuviste que hacerles caso Hinata?—se preguntó a si misma.

—Ellas pueden ser muy muy muy molestas si no obedeces.

Él, sino que son algo walk-concurso tan embarazoso Hinata.

—Mmm... Supongo que si.

—No sólo es de suponerse—suspiró y siguió caminando—No hay forma de librarse de ellas dos cuando se trata de una fiesta.

—Supongo.

—Pero la próxima...—entonces cayó en cuenta que ella iba caminando sola, desde que había salido de su casa ella no estaba siendo acompañada.

Y entonces lo recordó, recordó que por esa parte de la aldea habían surgido un par de secuestros antes, se tensó un poco y sin voltear a ver a su "agresor" antes de actuar, le dio con su jūken haciendo que el sujeto se alejara un par de metros.

—Mmm...—se levantó mientras se sacudía el polvo de su ropa, su piel lucía perlada y su rostro (o lo que se miraba de el) sereno y su cabello… de tonalidad grisácea.

—¿Kakashi-san?—estaba un tanto aturdida pero definitivamente era él, ¿quién mas tenia el cabello grisáceo?—¡Y-yo... Lo lamento!—hizo una reverencia mientras cerraba los ojos con fuerza—Es sólo que... yo venía sola y...—su rostro estaba completamente rojo.

—Mmm...—Kakashi la miró detenidamente mientras se "acomodaba" un poco el cabello, mas bien lo alboroto dándole un toque atractivo—Si hasta hablabas conmigo.

—Yo...—el rostro de Hinata enrojeció más—Pe... Pensaba que era... Mi conciencia—confesó completamente avergonzada.

—¿Con voz de hombre?—Kakashi sonrió ligeramente—Contigo ya poco sorprende.

Y era cierto sus encuentros siempre terminaban de una manera en algo gracioso, siempre ocurría algo cuando se encontraban, era como si Kami-sama se empeñase en que él hablara con ella aun más, porque si bien era conocido el Hatake por ser una persona extremadamente seria que se la pasaba leyendo su librito porno por todos lados sin el menor pudor, argumentando que era un libro bastante interesante y educativo.

—¿Usted también viene a la fiesta de Sasuke-san?—preguntó ella mientras sonreía con un ligero rubor adornando sus mejillas.

—Amm... Si—dio dos pasos y le ofreció su brazo, el cual ella aceptó gustosa—Será así mejor... Para llamarse puño suave si da fuerte—ella rió un poco y siguieron caminando.

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Pero bueno en veces aunque parece que las cosas van de maravilla, no son tan así, es como cuando enfermas, lo haces de un momento a otro, no puedes elegir cuando porque es imposible -a menos que estés fingiendo- en un momento estas bien pero al otro ya no, es una acumulación acelerada de malestares y ocurre casi lo mismo cuando te enamoras.

Pero y que cuando te enamoras de la persona que menos los esperaste en toda tu vida y si en otro momento de tu vida te lo hubiesen dicho lo primero que hubieses hecho fuera reír como loco.

—¡Hinata te vez muy linda!—gritaba Ino mientras le ponía una peineta—¡No habrá hombre que se te resista en este baile!

—Ino...—ella negó con la cabeza mientras reía—No cambiaras nunca, ah y por cierto...—un rubor cubrió sus mejillas—Ya tengo una cita para el baile.

—¡¿Qué?!—gritó con todas sus fuerzas—¡No puedo creerlo yo aun no tengo cita, todos los hombres guapos ya la tienen y otros son demasiados perezosos como para invitarme!

—Ino no digas eso, eres muy linda y te aseguro que cuando vayas al baile alguien como...—Ino sonreía como tonta mientras miraba por la ventana pasar a Sasuke junto a Sai—Tal vez como él.

—¡Pero él ni siquiera me considera para el baile!—un aura negra rodeaba a Ino de manera algo excesiva.

—Ino y si...—entonces un grito por parte de la Yamanaka la interrumpió.

—¡Oh Hinata eres una genio!—le beso la mejilla mientras tomaba su bolso y luego corría a la puerta a todas prisas—¡Me has dado una increíble idea, nos vemos en el baile!—y se fue dejando a una desconcertada Hinata.

Después del momento de desconcierto se levantó y caminó de manera lenta hasta la ventana, el cielo estaba de un hermoso color azul oscuro y las hermosas estrellas hacían de el un gran espectáculo digno de observar.

Una sonrisa se apodero de sus labios, se sentía muy feliz. Todo en su vida había dado un giro tan radical que en un principio la asusto demasiado, no sabía como serían las cosas o si podría hacerlas bien alguna vez; pero aun con toda esa incertidumbre de si podría o sólo se quedaría en algo que jamas pudo hacer, intento hacer las cosas bien a toda costa y ahora la vida le sonreía de manera magistral.

Las cosas con su padre eran mas llevaderas, ella no era la heredera al clan Hyūga lo era su pequeña hermana Hanabi, pero tampoco le colocaron el sello del pájaro enjaulado de la segunda rama de la familia y ahora vivía en un lindo apartamento en el centro de Konoha, desde ahí siempre se podían ver los fuegos artificiales en las festividades de Konoha.

Sí, esa era la vida que había soñado desde hace muchísimo tiempo, la forma en que lo había admitido fue una trampa de Ino y Ayame pero eso le dio la felicidad que tanto había soñado.

Un toque en su puerta la sacó de sus pensamientos, su mirada se dirigió a la misma y caminó de manera lenta para abrir la puerta, sabía quien debía ser.

—¡Hola Hinata-chan!—y ahí estaba Naruto vestido de traje color azul marino, sus ojos resplandecían.

—Naruto-kun adelante—la visita de ese chico rubio era desconcertante, lo imaginaba corriendo detrás de la pelirosa para que aceptara ser su cita en el baile.

Naruto entró sin despegar la mirada de ella, se veía hermosa era la verdad.

—Bueno, Hinata-chan... Yo... Quisiera—estaba nervioso y jugaba con sus dedos—¿Podrías ser mi pareja para el baile de invierno?

Ella lo miró sorprendida mientras Naruto jugaba con su cabello en busca de un alivio desesperado, esa pregunta era lo que menos se esperaba al abrir la puerta, ¡realmente ni se esperaba que Naruto fuera el que llamaba a su puerta!

—Naruto-kun.. Yo—Hinata se sintió avergonzada y un tono rosado apareció en sus mejillas, Naruto sonrío—Lo lamento... Ya tengo cita con alguien mas...—ella en un acto de vergüenza se reverenció y la sonrisa de Naruto sólo pudo caer.

El ambiente se tornó tenso en la habitación hasta que Naruto se decidió a hablar.

—¡Bueno bueno, debo ir a correr a tratar de encontrar alguna cita!—gritó Naruto mientras sonreía.

—Encontrarás a alguien que te haga excelente compañía—afirmó Hinata sonriente.

—Eso espero—Naruto hizo un sello de manos y sonrió de nuevo—Por cierto... Luces hermosa—y desapareció en una nube de humo.

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Las personas estaban llegando lentamente al nuevo y gran salón de eventos de Konoha, había mujeres realmente atractivas platicando en sus respectivas mesas con sus amigas, todas con vestidos escotados y maquillaje cubriendo sus rostros, una poca cantidad no mostraba ni una gota de maquillaje y se miraban muy bien, parecían divertirse.

—¿Por qué los hombres no pueden ser puntuales?—bufaba Ino aparentemente molesta.

—Vamos cerda no es tan malo, relajate un poco quieres?—Sakura estaba jugando con su vaso de refresco.

—¡Lo dice la amargada que está bebiendo soda!—replicó Ino.

—¡Yo mañana tengo misión!—gruñó Sakura—Ademas prefiero beber una un poco mas tarde.

—¿Una? ¡Una no es ninguna mi joven discípula!—Tsunade se había sumado a la platica al llegar sabrá Kami como.

—¡Tsunade-sama será mejor que no se exceda, mañana tendrá resaca y recuerde que tiene una junta con el Kazekage!—Shizune estaba detrás de ella como de costumbre, rogando que no bebiera tanto.

Y luego Tsunade se fue a la mesa vecina a seguir su recorrido mientras retaba a un ya un civil un poco pasado de copas.

—¡Hey chicas!—Lee habia llegado—¿Qué les parece si juntamos su mesa y la nuestra para poder convivir mejor y arder con la llama de la juventud?—haciendo una pose como las de su sensei y con el pulgar en alto.

Las chicas estaban consultando entre ellas, parecía un debate de argumentos.

—A mí me parece bien, será más entretenido—Tenten y Hinata sonreían en aceptación—Vamos chicas, será divertido.

—¡Bien, hay que juntar las mesas!—Ino gritó y tanto como Lee y Gai corrieron a acomodar las mesas unidas.

—Bueno, ¿quién más vendrá?—preguntó Hinata un poco avergonzada ante la mirada de Kiba.

—Pues aquí estamos nosotros—Neji cerró sus ojos mientras meditaba—Kakashi, Yamato, Sai, Sasuke... Mmm... Iruka y Asuma.

—¿Kakashi-sensei viene?—Sakura se sorprendió, Kakashi no era conocido por salir a lugares muy concurridos.

—¡Sí,mi eterno rival tendrá un reto conmigo!—Gai gritaba con llamas de fuego en los ojos.

—Gai-sensei... Kakashi-sensei aceptó venir sólo si usted se mantenía al margen con los retos—Lee le recordó a Gai un tanto dudoso de hacerlo.

—Cierto...—y cascadas en sus ojos surgieron.

—Pero Gai-sensei, ¡la llama de la juventud seguirá viviendo dentro de nosotros!—y una puesta de sol estaba detrás de ellos, ambos llorando pero sonriendo—¡Porque ese es nuestro camino, iluminar el de los demás!

—¡Tienes razón Lee, vayamos a gastar un poco de nuestra energía a la pista de baile!—y ambos corrieron a la pista mientras en la mesa, Sakura, Ino, Tenten, Neji, Kiba, Naruto, Shikamaru, Chōji, Kurenai y Hinata se quedaban con una cara de confusión masiva.

—Mmm... Que problemáticos—Shikamaru se aplastó en su asiento y se tapó los ojos con sus manos.

—Eres un flojo—Sakura lo señaló acusadoramente.

—Tú eres fea y nadie te lo dice—el rostro de Sakura paso de sereno a cabreado en un instante, su cabeza al estilo el exorcista giró a ver a ese hombre pálido, no venía solo pero a ella poco le importó—No me mires así te ves aun más fea—Sai sonreía y Sakura se cabreaba más.

—Hmp...—Sasuke encontró una silla y se tiró sobre ella—Que molestia.

—Buenas noches—Yamato vestía un traje color negro azul que le sentaba muy bien, todos sonrieron de vuelta a su sonrisa.

Kakashi y Asuma sólo levantaron la mano simulando un saludo.

—Ya veras es sólo cuestión de tiempo para que venga a retarte—Asuma y Kakashi parecían tener una conversación algo entretenida.

—No voy a aceptar su reto—Kakashi y su ojo inexpresivo estaban presentes.

—Bueno... Ah y respecto a lo otro—Kakashi lo volteo a ver, pero esta vez con curiosidad—Sólo hazlo, tiene que responder algo.

-Mmm ... Kakashi que Sento Junto a remolque e Ino.

—Bueno ya estamos todos aquí—Iruka estaba llegando con una botella de sake y les estaba sirviendo a cada uno en sus respectivos vasos—Bueno, brindemos por una bella noche.

—¡Por una bella noche!—dijeron todos al unísono, bueno, Kakashi y Sasuke solo elevaron su vaso con un característico "Hmp"

- "Ven a bailar Ino-algo se aceleró!.

—Bueno, a las mujeres que no son feas se les debe seguir—Sai le ofreció su mano a Ino mientras le sonreía a Sakura.

—¡Maldito paliducho!—gruñó Sakura.

Y asi la mesa se fue vaciando lentamente, se levantaban de a poco de la mesa mientras sonreían y se tiraban sonrisas de complicidad, así hasta que sólo quedaron Hinata, Sakura, Sasuke y Kakashi.

- ¿En Iras bailar preguntar desinterés Sakura fingiendo-Sasuke?.

—Mi cita aun no llega—Sakura lo miró y luego giró su vista a Hinata y le sonrió.

—¿Tienes una cita?—el tono de Sasuke parecía diferente, como si estuviera molesto.

—Sí, la tengo—contestó tajante.

Kakashi giró sus ojos y negó con la cabeza, Hinata sólo atinó a soltar una risa leve atrayendo así la atención del peligris, ella lo miró y él a ella, ambos sonrieron.

-Hmp ...

—Sasuke... ¿Por qué no la invitas a bailar ya?—Kakashi soltó fingiendo aburrimiento—Ella no tiene una cita.

Ambos se sonrojaron y se dirigieron miradas torpes.

—Vamos...—Sasuke fingió recuperar la compostura y caminó a la pista seguido de Sakura.

Hinata le dio el último sorbo a su vaso y comenzó a jugar con sus dedos. Ambos se mantuvieron en silencio, queriendo aparentar no notar que estaban solos.

—Luces bien—Kakashi fue el primero en hablar—Realmente bien.

—Gra-Gracias...—estaba sonrojada y avergonzada—Tú... También luces bien.

—Al menos valió la pena pasar a 10 tiendas distintas con Kurenai, es muy inconforme—Hinata rió por lo bajo—Tú sabes como es.

—Sí—la tensión entre ellos había desaparecido—Lo se muy bien.

—¿Te diviertes aquí?—Kakashi la miraba realmente interesado.

—Yo, la verdad me gusta bailar pero...—volteo a ver a todas las personas—No frente a tantas personas.

—Podrías cerrar los ojos y fingir...—se quedó callado y Hinata volteo a verlo.

—¡Hey vamos a tener un reto mi eterno rival!—y ahí estaba Gai queriendo obtener un reto.

Mmm ... No, DIJE-Kakashi con el contexto del tono indiferente.

—¡Volveré!—gritó el de traje verde mientras se alejaba bailando.

—Mmm..—Kakashi negó con la cabeza y volvió a ver a Hinata.

—¿Siempre ha sido así?—le preguntó Hinata sin poder evitar una risilla traviesa.

—Mm... Sí, de hecho la segunda ves que lo vi ya había comenzado a retarme—él le sonrió—Tenía 5 años y él 7.

—Ya veo, debió de ser algo estresante en un inicio—Hinata sonreía de manera nerviosa.

—Sí, no podía comer, bañarme o ir al baño sin que él apareciera para retarme—Kakashi negó con la cabeza—Sólo cierra los ojos e imagina que estás sola.

- ¿Ah?

—Para poder bailar, sólo cierra los ojos e imagina que estas sola—Kakashi curvo su ojito para indicar una sonrisa.

—No me funcionó hacerlo...—susurró avergonzada.

El silencio se hizo presente de nuevo, ninguno decía nada, sólo permanecían callados mientras miraban a los demás bailar en la pista y divertirse.

Hinata miró a Naruto teniendo un reto con Lee y sonrío, Sakura bailaba con Sasuke y para su sorpresa él sonreía, Kurenai y Asuma bailaban muy juntos y ocasionalmente se daban un beso rápido, Ino estaba realmente divirtiéndose con Sai. Todos estaban divirtiéndose, inclusive los hermanos de la aldea de la arena estaban divirtiéndose.

—Hinata... Ven conmigo—Kakashi la miró sin ninguna expresión que fuera visible, se levantó y le tomó la mano para comenzar a caminar lejos de todas las personas.

Él la llevo de la mano hasta estar completamente apartados de los demás que disfrutaban de la fiesta, pero no se dio cuanta de que cierto rubio los había visto salir tomados de la mano.

Ella nerviosa y sorprendida y él temeroso de su actitud. Cuando ella estaba cerca todo su comportamiento cambiaba, se volvía un pequeño cachorro necesitado de amor, un pequeño cachorro asustadizo que sólo buscaba el calor y la protección de alguien mas.

Era una lluvia de emociones y sentimientos que no son fáciles de controlar que desean salir de cualquier forma y no les importa la forma sólo quieren salir a la luz, dejar esa celda en la oscuridad para demostrar lo que son realmente.

—¿A dónde... A dónde vamos?—el salón de la fiesta había quedado atrás, pero la música aun se escuchaba.

—Hinata...—Kakashi le había soltado la mano en cuanto ella habló, inhalo aire y lo contuvo en su pecho—¿Quieres bailar conmigo?

Sus ojos perlados se abrieron un poco mas de lo normal, él estaba frente a ella y la luz de la luna en su cabello le daba una increíble sensualidad.

Ellos ... S-seguro, sin embargo.

Ella estaba sonrojada y este aumento cuando él lentamente se acercó a ella pasando un mechón de su cabello detrás de su oreja, su mano comenzó a descender lentamente por su rostro, su cuello, sus hombros, sus costado y así hasta detenerse en su cintura.

—Luces increíble—soltó en un susurró mientras posaba su otra mano en el otro lado de su cadera.

Ella comenzó a subir torpemente sus manos hasta el cuello de él, él se movía suavemente, la música parecía estar al ritmo de sus pies, su único ojo visible la miraba de una forma que ella no sabia descifrar.

Pronto su cabeza estaba recargada contra su pecho, la música había dejado de ser la melodía para sus oídos, los latidos del corazón de su acompañante se habían vuelto en una dulce melodía que era completamente una fascinación de escuchar.

—Tú eres alguien muy especial—la voz de él interrumpió los latidos de su corazón—Hinata...

Ella volteo a verlo, su mirada encontró la él y todo se perdió en ese momento, sus rostros comenzaron a acercarse al del otro lentamente, los labios de ella rozando la tela de la máscara y ocurrió lo inevitable, se besaron sin importar la tela que estorbaba, el movía sus labios de manera lenta y ella seguía su ritmo, pero él quería sentir más.

Alejando su rostro lentamente, tomando las manos de Hinata las llevo al borde de su mascara y mientras cerraba su ojo ella subió sus manos un poco mas quitando el otro trozo de tela que cubría su ojo izquierdo, sus manos descendieron de nuevo y de manera torpe bajo la máscara dejando al descubierto sus facciones masculinas, su piel, sus mejillas y sus labios.

Sin ser consciente de que detrás de un árbol a unos cuantos metros estaba cierto rubio hiperactivo cabeza hueca observando la escena, paso sus manos por cada espacio de su piel, sobre su cicatriz, haciendo que el abriera sus ojos temiendo que se apartara, que la suavidad de sus tacto desapareciera.

—Hinata...—acercándola lo más posible a él unió sus bocas en un desesperado beso.

Un anhelado y dulce contacto que desde hace tiempo descubrió que deseaba más que nada, un deseo que estaba volviéndole loco.

Y cuando estaba por desistir de ese contacto que tal vez ella no deseaba, sus labios no se movían, justo cuando se daba por vencido,los labios de ella comenzaron a ceder.

Sonrió, ella le devolvía el beso .

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Y bien? Que les pareció?

La idea surgió de manera alocada como ya les dije y dije, vamos sube algo y anímate un poco.

Espero que me den su opinión, criticas o lo que sea que estén dispuestos a compartir con este pobre chico :)

Les deseo un lindo día, noche, tarde, madrugada, cumpleaños o festividad que puedan estar celebrando.

Nos leeremos mas pronto de lo que se imaginan muajajaja, trataré de subir a más tardar en una semana :)

Nos seguimos leyendo.

*Ya editado porque al subir xD me equivoque de archivo y subí el que aun no revisaba en cuestión de faltas ortográficas Dx y bueno no soy perfecto con la ortografía hago lo mejor que puedo :) ah y también hemos puesto (mis dedos y yo) el recuerdo en cursiva :3 Lu siento no haber leído el formato antes, como ya leíste este supongo que me disculpare en el próximo capitulo :3

AndrewHatate