Hola este es mi primer fanfic, y la primera vez que intento algo así y este fue el resultado.

Nota: Los personajes no son míos, pertenecen al troll de Gorila-sensei :D

—-—-—-—-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

Era una mañana tranquila en Kabuki-cho, hasta que, en cierto piso, se escucharon gritos y golpes aquel sitio, que parecía un lugar de locos, había un letrero que enunciaba las siguientes palabras "Yorozuya de Gin-chan". Semejante alboroto era común para cualquier que conociera a este grupo.

La yorozuya constaba de tres miembros, Pachie los anteojos rosas que usan a una humana, Kagura un chico pelirrojo, un amanto de uno de los clanes más poderosos del universo, los Yatos, aunque, este apuesto joven, es todo un tesoro, creo que sabemos por que... (Decidi dejar a kagura cómo un joven, algo así cómo kamui)

Ambos jóvenes trabajan para la mujer más hermosa y bien formada de Edo, esta lindura de ojos rojizos y un hermoso pero corto cabello plateado, es la dueña de esta Yorozuya, así es amig s míos, nos referimos a nadie más, ni nadie menos, que a Sakata Ginko.

Hemos de dejar claro que nuestra linda heroína, es toda una joyita, vale, más bien una enorme caja de sorpresas y unos que otros extraordinarios secretos.

El ajetreo de hoy era debido a que Ginko y Kagura peleaban, por el último pedazo de comida, mientras que nuestra tierna y fastidiosa pachi intentaba detenerlos, lo más que podía, claro, era una tarea inútil vencedor fue Kagura, que disfrutaba de su victoria insultando a nuestra querida perdedora.

- Wua ja ja, no puedes derrotarme-aru, solo eres un anciana perezosa-aru

- A quién crees que llamas anciana? pequeño mocoso, deberías ir a molestar a tu novia esa, la ladrona de impuestos, que te compre de comer.- dijo una molesta Ginko, mientras se cruzaba de brazos y miraba a un sonrojado Kagura-

- Cl-claro que no! , esa estúpida sádica no es mi novia-aru,-contesto un acalorado pelirrojo, que no sabía, si su sonrojo era por el enojo o porque lo emparejaban con la sexy, capitana del shinsegumi Okita Souko -además, porque no vas tú y te consigues un esposo-aru, eh, consigue a uno que te mantenga-aru -contesto un sonriente kagura-

-Vamos chicos tranquilos -comento una pachie nerviosa-

-¡Tu cállate! -expusieron los dos que discutían-

- Ahhh, por que me molesto -pensaron los anteojos, y una gota de sudor apareció en su cabeza-

- Además quien eres tú para decirme que me casé, eh?, aún estoy en la flor de mi juventud - mientras hacía poses, para mostrar su punto-.

- Eso dices-aru, sabemos que lo dices porque nadie quiere casarse con una perezosa y ebria como tu-aru. -repuso un poco triunfante-

- Arggg... eso es porque yo, yo... ah, este...

- Ginko, yo me casaré contigo, y haremos muchos hijos! -Grito emocionado un ninja peli violeta que salía de su escondite, lanzando se hacia Ginko-.

Ginko lo pudo evadir gracias a sus buenos reflejos, quedando aquel ninja pervertido con el rostro estampado en el piso

- Retiro lo dicho, solo atraes a tipos raros y pervertidos-aru -comento un kagura riéndose-

- Argg... tú que sabes! -exclamo una Ginko molesta por su derrota- ¿¡Hey, tú idiota, que crees que haces aquí¡?, ¿¡no tienes mejores cosas que hacer?! -Grito molesta mientras miraba a aquel ninja pervertido que ahora le tomaba fotos-

-No hay nada mejor, que mi querida Ginko... ahora, vamos ponte esto y golpea me fuertemente -contesto un ninja extasiado y sonrojado, mientras le daba a Ginko, una ropa de cuero ajustada, cómo la del anime/manga-

- ¡¿Crees que soy alguna desquiciada de tu clase? claro que no, estúpido de mi***a, ahora largo de aquí -tomo a nuestro querido Ayao y lo lanzo por el balcón los más lejos que pudo, se escucho un grito de Ayao diciendo- Esa es mi linda Ginko-

Ginko solo suspiro de alivio, cuando entro de nuevo a la Yorozuya, se encontró con Zura y Elizabeth, bebiendo el Té con Kagura y Pachie.

-Y ustedes que mie***s hacen aquí? Como rayos entraron? - una exasperada Ginko, se llevaba una de sus manos a la cabeza y otra a la cadera-

- Zura ja nai, Zurako da -contesto molesta Zurako, joven hermosa, pelo largo y negro, un pecho un poco plano, claro nadie supera la belleza de Ginko- además, no era nuestra intención importunarte con tu novio, vine a pedirte que te unas a nosotros, a los patriotas Joui

- Nadie te llamó Zura ! Y ese ninja pervertido, no es mi novio -suspiro- , y cuantas veces tengo que decirte, No!, no me uniré a ti y a tus estúpidos Joui

-Pero en el pasado luchamos juntas, junto a Shinsko y Tatsuko, porque ahora no? (nota: decidí en hacer a los 4 mujeres obviamente sus apodos seguirán igual con variantes pequeñas)

Antes luchamos por el país y su libertad, no eras la temible Shiroyasha, que lo hace distinto ahora? -miraba una suplicante y serie Zurako-

-Nunca me ha interesado proteger este país, solo protegía y sigo protegiendo lo que me es importante -suspiro- además eso es pasado, ya no me interesa eso, perdimos, ahora todo es distinto - se giro hacia la venta detrás de su escritorio, con una mirada profunda y melancólica, al igual que su voz, les daba la espalda, así que nadie noto el peso con que su rostro indicaba que parecía cargar- es mejor seguir y olvidar todo... - siguió mirando el cielo, pensando o recordando algo-

-Gin-chan -expreso un preocupado kagura, que su "madre adoptiva" se comportase así era algo que no entendía, hizo acción de querer acercarse a ella. A lo que zurako reacciono deteniéndolo- Líder, creo que no es oportuno... - dijo tomando le la mano-

- Como sea, yo iré a fuera... no sé cuanto tarde no me esperen -hizo un ademán de despedida y se marcho-

-Zura, tu sabes que le sucede a Gin-chan? -aru. -pregunto kagura-

-Zura ja nai Zurako da! -exclamo molesta la terrorista- hoy es el aniversario de.. de sensei -miro un poco triste al vació, se levanto e igualmente inclino su cabeza como ademán de despedida- lo siento líder hoy es un día un "poco " especial para nosotras tres... no es mi deber decirlo yo, me despido por hoy, líder, Pachie -y se marchó, junto Elizabeth-

Ginko, iba caminando por las calles de Kabuki-cho, recordando a su sensei y en la promesa que hizo aquel día, proteger a sus compañeros, ella soltó un bufido y un intento de sonrisa se mostró. Iba tan ensimismada en sus pensamientos, que solo pudo sentir que choco contra algo, o más bien alguien, y ese alguien era nadie más que la temible vice-comandante del Shinsegumi, la comandante era hermosa y delgada (me apiade de Hijikata y la he dejado cómo en los fanarts x3), claro no como Ginko, pero se le acercaba a un poco a su nivel de belleza, la comandante, se giro molesta, ante aquel idiota que choco contra ella.

-Mira por dónde vas! ! Ah, eres tu maldita adicta al azúcar, que haces por aquí?

-Ahh, pero si es Hijikata-chan.¿Que las perras del bakufu, no tienen nada que hacer, más que arruinar mi lindo sábado?. ¿Porque no mejor te vas por ahí a robar impuestos, eh?! -Miro desafiante a la Hermosa vice-comandante-

- Ohh! Perdóname por que mi sola existencia, te moleste - hizo una pantomima como de preocupación - y un carajo crees que me importa! -Grito la temible Vice-comandante-

-Claro que te perdono, pero no te podemos culpar, por ser así, pobrecilla, no es así Souko? -miro a la joven que apuntaba con su bazooka a la chica con trenzas-

-Ahh? Si, si claro, la pobre no tiene la culpa de ser tan miserable, pero podemos hacer nos el favor de ya no ver la... Muere estúpida Hijikata -apretó el gatillo, lanzando el misil a la pobre Hijikata-

La hermosa chica de trenzas, logró esquivar el misil con un poco de dificultad, pero no por nada era la vice-comandante del shinsegumi, miró molesta a esas sádicas bastardas que tanto disfrutaban molestarla, pero en vez de gritarles, sonrió triunfante e hizo una pose "sexy ", ambas sádicas la miraban con una evidente confusión.

-Porque sonríes y posas como idiota, eh? , Maldita ladrona de impuestos? - Souko solo asintió, confirmando que preguntaba lo mismo-

- Ohh! , vamos no hay razón por la que fingir

_... -miraban confusas Ginko y Souko a Hijikata-

-Solo tienen envidia de mi belleza -replico con una sonrisa y mirada triunfante-

- ...

...?

-Wua jaja, crees que eres hermosa, ja, en realidad eres graciosa -contesto una molesta y sonriente Ginko- Souko a que es tierna la pobre..

-Sí pobre tonta. Te haré el favor de terminar con tu agonía delirante. Muere Hijikata -la voz monótona de la chica, quedo atrás por el misil disparado-

-Mie**a - dijo la chica de ojos azules y la peli plateada-

Rayos este día es un asco! -quejo la peli plateada, marchándose del lugar de la explosión, dejando atrás al shinsegumi- debí quedarme en casa y leer mi jump -suspiro exasperada-

Durante su trayecto sin rumbo, se encontró con el viejo que le pidió la renta del mes, a lo que Ginko reacciono corriendo cómo alma que lleva el diablo. Después un mocoso le derramo helado encima. Tropezó con una yakuza choco con ella y le tiro el cuento de que debe pagar, claro no fueron nada contra Ginko. Y un pervertido le toco el trasero, dejando al pobre idiota sin la posibilidad de tener descendencia.

Aún así decidio seguir caminando sin rumbo, esperando que su terrible día terminará, para su sorpresa su Stalker personal apareció de nuevo, se lanzo de nuevo a Ginko, esta vez, logró su cometido, atrapo a la hermosa peli plateada en sus brazos, la estrujaba con felicidad y frotándose en ella, Ginko solo podía quejarse y tratar zafarse del ninja pervertido

-Suéltame! -gritaba mientras lo golpeaba, para liberarse de su agarre-

-Ohh! , si Ginko, sigue golpeándome, pero usa esto por favor -de nuevo le mostró la misma ropa de esa mañana, mientras disfrutaba con éxtasis los golpes de su amada-

-Que diablos?! -la peli plateada se sonrojo ante la respuesta del ninja- te he dicho que me sueltes! -Ayao seguiría abrazando a su linda "S" de no ser, por que unos brazos potentes le tomaban del hombro y a su Ginko por la cintura,para así separarlos. El dueño de aquellos brazos expreso con un enfado no bien disimulado -Sarutobi, vamos, deja ya a la pobre, vale? - una sonrisa se mostró en los labios del hombre, aunque una vena salió en su frente, negando su acción-

-Tsukuo, lárgate de aquí, íbamos a llegar a la mejor parte, ¿no es así Ginko? -miro a la peli plateada, esperando la afirmación de la mujer con un éxtasis, considerablemente notorio-

-Es cierto Ginko? -pregunto un Tsukuo, con un enfado, no muy bien disimulado y sin darse cuenta apretó un poco su agarre en la cintura de la chica- Si quieren los dejos y me voy -iba a soltar a la chica, pero esta lo abrazo inconscientemente, para utilizar el cuerpo del rubio cómo un muro de protección,pero igual el rubio sintió una felicidad inexplicable a la acción de ella-

-No! espera, no te muevas! -miro al rubio con una cara suplicante, por la cual al rubio se sonrojo ligeramente, haciendo que este fantaseará un poco- y tu idiota claro que no! Qué clase de parte te refieres? vete a la mi***a -miro la chica a su stalker personal, soltó al rubio, haciendo que este volviera a la realidad, se acerco a Ayao, y le puso una de sus piernas en la cabeza, presionando cada vez con más fuerza, el enojo en su rostro era más que evidente y hubiera continuado de no ser por que escucho los gritos de felicidad o eran de éxtasis?, del ninja de pelo violeta. -Ginko...

- Dime... -una Ginko nerviosa y atemorizada, por la reacción del ninja, contestaba-

- Creo que no deberías de seguir...-un Tsukuo preocupado, la tomaba por los hombros y la alejaba de aquel ninja masoquista-

- Espera! A dónde vas con mi Ginko! -tomo a la chica de sus piernas- maldito pervertido que le harás? no te dejare, que te la lleves a Yoshiwara!

La inestabilidad y el peso de Ginko, hizo que cayeran ambos, una Ginko aturdida yacía sobre el apuesto líder del Hyakka, claro este ultimo estaba más bien...encantado sobre su posición actual y seguiría así de no ser por cierto acosador que decidió quitarle de encima la chica, para tomarla en sus brazos al estilo princesa y sonreír le triunfante al rubio.

-¡Hey! ¡Detente, bájame! -exclamaba una molesta peli plateada, mientras golpeaba al hombre en el pecho-

-No, y por favor sigue golpeando -miro a la mujer en sus brazos con un sonrojo notorio y una expresión seria, a lo que Ginko reacciono con una hermosa cara de "WTF", mientras un molesto Tsukuo lanzo un lluvia de Kunais, claro Sarutobi, como buen ninja lo esquivo, saliendo que Ginko, no corrió con la misma suerte, terminando con una kunai en la frente.

-Maldito idiota mira lo que le has hecho -un Ayao preocupado acusaba a un Tsukuo ahora un poco avergonzado-

-Eso fue tu culpa si no fuera porque te moviste, no le hubiera pasado nada

-Si las hubiera lanzado yo, no las podrías haber esquivado y nada le hubiera pasado -sonrió con aires de grandeza, haciendo que Tsukuo se molestase más-

-Enserio? por qué no lo pruebas?-esto molesto a Sarutobi, que por la emoción, olvido que cargaba a Ginko y sin más la soltó, ella aún aturdida, no pudo más que caer de golpe, ni Tsukuo ni Ayao, recordaban su presencia, iniciando de nuevo, su pelea y lluvia de Kunais, con la pobre peli plateada en medio.

-Ves sigo ileso -sonrió Sarutobi-

-Digo lo mismo imbécil -sonrió el líder del Hyakka aún molesto-

-Pero que demo..? -la chica recién espabilaba y se daba cuenta de lo que sucedía, cuando otra kunai, le pasa por su mejilla, dejándole una pequeña marca. Ni Sarutobi, ni Tsukuo la vieron. Una Ginko enfurecida, se ponía de pie y mientras emanaba un aura asesina, tomo su Bokuto en mano y se acerco al par de idiotas que aún peleaba-

-Anonee -hizo su tono de voz usual, al femenino que a veces solía usar, mientras se acercaba por detrás de ellos y les sonreía, al mejor estilo Kamuiko que pudo- Onii-chans, me podrían hacer un favor?

Ambos ninjas se giraron, molestos pues alguien interrumpía su pelea, pero al ver de quien se trataba y su estado de "mujer dulce" faceta, que hasta cierto punto y en ocasiones a Tsukuo le parecía un tanto macabra y a Sarutobi fascinante.

-Claro el que me ordenes! -emocionado contesto el peli violeta-

- Supongo que ¿sí? -mientras de brazos se cruzaba, el rubio respondió-

-Enserio? -con su tono "dulce" preguntaba- pues verán me preguntaba si alguno de ustedes... pues.. -miraba al piso, como una chica tímida y tierna. Los dos hombres miraban a la mujer- pues... están listos para su FIN!? - con cada palabra su verdadera voz volvía y su aura asesina hasta ahora oculta, salía a flote. Los hombres solo pudieron esperar su fin.

Ginko cumplió su palabra, y dejo a los idiotas con varios moretones, pero sin duda le dejo mas al peli violeta, el rubio, no sufrió tanto daño, se sentó mientras miraba a la mujer aún molesta devolviendo su bokuto a su lugar, cuando termino noto que ahora el rubio estaba consciente y la miraba divertido.

-De que te ríes idiota?

- Ja... ja ja ja, creo que ni yo ni sarutobi esperábamos tu ataque, con semejante... emmm como decirlo, táctica? -mientras de pie se ponía y a la mujer se le acercaba, ella rodó los ojos-.

-Pues esa era la intención de mi... como lo llamaste? - mientras adoptaba una posee pensativa, con su mirada donde hace unos momentos dirigió, provocando que no notase que él se le acercaba a una distancia considerablemente cerca, digamos solo unos centímetros les separaban- ah, si mi interesante táctica - se giro, pero al no saber de su alarmante cercanía y la posición del rubio,cuando se giro el hombre le tomo de la barbilla y la hizo mirar hacia arriba-
- Interesante marca tienes -mientras con sus largos dedos acariciaba la cicatriz que le quedo en su mejilla-

- ehh? ah esto - toco la cicatriz- pues fueron ustedes idiotas - le mostró su lengua cual infante, haciendo con esto que el rubio sonriera y notará su cercanía, que si bien admitía le encantaba-

- Deja me ayudarte, yo la sanaré por ti - le sonrio-
- ¿Y cómo planeas hacer eso? ¿eres doraemon? no veo que tengas algún kit de primeros auxilio y además es solo un rasgu...-pero la mujer no pudo continuar por que el rubio le beso la mejilla donde yacía la cicatriz. Se separo para ver el rostro de la peliplateada, encontrando a una Ginko sonrojada-

-ehh? Que haces idiota!? -la peli plateada sonrojada indignada pregunto-

-Yo? pero si fuiste tú,quien seguí cerca de mí a una distancia alarmante -dijo mientras le soltaba el rostro fingiendo un tono de inocencia-

-Espera... que yo qué?, tu... para empezar.. Tú eres el que sostenía mi rostro -sonrojada le incrimino-

-Pero te pudiste alejar. Cualquier chica lo hubiera hecho, o será que quieres trabajar en yoshiwara y me mostrabas que no te importa que cualquier hombre se te acerque

- Y ¿ahora que diablos dices? no soy unas de tus prostitutas - su sonrojo ahora era de molestia. La chica de ojos rojizos hizo acción de golpearlo, pero este tomo su mano y le deposito un dulce beso, mirando a la chica se sonrojaba-

- Ma, ma, sólo es una broma -le sonrió, levanto su mirada a la chica, que ahora arrebataba su mano de él-

- Este yo...yo recordé que tenía algo que hacer..erm... adiós -con un ademán de despedida corrió una sonrojada Ginko. El rubio solo se quedo sonriente y se marcho de nuevo a Yoshiwara, pensando en cierta peliplateada.Y el peli violeta? pues aún seguía inconsciente en la calle-.

-.-.-.-.-.-.-..-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-..-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-..-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

-Yey mi primer fanfic. Lo dejaré como Oneshot a no ser que quieran más x3
Lamento si hay faltas de ortografía o que mi narración sea mala...
Espero sus reviews :'D