Disclaimer: Hetalia Axis Power le pertenece a Estudio Deen y a Hidekaz.

Advertencias: AU, Historias de gatitos, Personajes OC, Inocencia Extrema.

Aclaraciones: -No habrá pairing entre los personajes, o tal vez sí, pero de forma inconsciente. Nada oficial.

Hola a todos, Aishiteru-sama al habla. Ha pasado un tiempo desde la última vez que escribí sobre los hermanos británicos, ¡ya los extrañaba! Y aunque se trata de un AU, las aventuras no se terminan~ estoy realmente feliz por tratarlos de nuevo siendo adorables –y temperamentales- gatitos. Por tanto no habrá nada complicado, solo una serie de viñetas para pasar la tarde y con la esperanza de que los haga sonreír un momento.

Sin más que decir, espero lo disfruten.

Owari~


"¡Gatitos al Ataque!"


Prólogo


Cuando salió aquella mañana a recoger el periódico afuera de su puerta, esperó todo, menos eso.

Miró a un lado, miró al otro.

Ninguna persona estaba cerca, como si a las 7:00 am de un tranquilo martes todo el mundo hubiese decidido desaparecer. Solo algunas aves cantando y motores de automóviles a la distancia le acompañaban en ese momento, donde miraba una caja de cartón justo frente a él.

Fue fácil pensar en mil posibilidades del origen o del contenido, pero cuando comenzó a moverse casi cerraba la puerta de golpe.

… sin embargo conservó la calma, inhaló un momento y se inclinó hasta que sus rodillas tocaron el suelo.

La caja no tenía los bordes asegurados así que pudo abrirla fácilmente.

Entonces los vio.

Cuatro gatito despertando de una siesta, tal vez recién nacidos a juzgar por su tamaño y porque al escucharlo, apenas podían abrir los ojos.

Él, Glen Kirkland, soltero de 28 años y con una vida más bien controlada y minuciosamente rutinaria, con una personalidad poco apremiante, no se le cruzó por la mente ignorar a esos felinos que estaban solos frente a él, en una caja de cartón vieja.

Aunque parecía un hombre sin emociones ni grandes aspiraciones, realmente era una persona cálida y compasiva.

No hubo que decidir nada, los animales se quedarían con él a partir de ese día.

Entró a casa con la caja, con cuidado, y los llevó a la sala.

El pelaje de cada uno era de tonos distintos: uno era pelirrojo, dos de un tono cobrizo oscuro, y el más pequeño era rubio. Sus ojos también eran de diferentes tonos de verde, mas al notar que se frotaban entre ellos y maullaban amistosos, supo que se trataba de una familia realmente.

Aunque, cuando las miradas fueron clavadas en él, tuvo la sensación de que nunca fue observado con tanta cautela.

— Soy Glen — los felinos eran muy inteligentes, estaba seguro que comprendían sus palabras — Estaban afuera de mi casa, dentro de esta caja. No sé quién los dejó conmigo, pero si ustedes quieren pueden vivir aquí. Voy a cuidarlos, lo prometo.

Las cuatro criaturas lo observaron, y fue un poco extraña tanta solemnidad… pero cuando maullaron y comenzaron a asomarse por los bordes del cartón, entendió que comenzaba una nueva vida para todos.

Les llevó agua y leche, aunque tendría que ir por comida y otras cosas que los gatitos necesitaban. Tener 'mascotas' no era sencillo, requería de muchos cuidados, atenciones, tiempo juntos, visitas al veterinario… y en cuanto volteó y vio que esos pequeños ya habían tirado varias cosas, supo que por algo el universo lo dotó de mucha paciencia.

Esto iba a ser más interesante de lo que pensó.

Por otro lado, faltaba lo más importante.

— No soy bueno con los nombres, pero creo que necesitan unos verdaderos y no solo palabras graciosas para que los demás se rían de ustedes… así que aquí voy — suspiró mientras corrían hacia él luciendo sus ojos brillantes con curiosidad.

Fue de ese modo como Scott, Bryan, Ryan y Arthur comenzaron a vivir con él.

Tenía el presentimiento de que, así como sus nombres, cada uno sería muy diferente del otro. Entonces, era imposible predecir qué pasaría entre un hombre solitario y unos gatitos que exploraban todo el lugar.

Sin duda era el inicio de una vida más complicada de lo que imaginó.

Y a la vez, de una más entretenida.