Este fanfic comienza en medio de la saga del shinigami perdido, más o menos en el capitulo 454 del manga o el 354 del anime, a partir de ahí ya no lo sigue.

Mi motivación para escribir este fanfic es, llanamente, matar personajes y sacar Ichiruki. Como de costumbre prometo drama, traiciones y muertes, muchas.

Disclaimer: Bleach no me pertenece, yo sólo quiero matar a sus personajes.


Capitulo 1: Razones

La ciudad de Karakura se veía sombria de nuevo.

¿A dónde ir? ¿En quién confiar? Los actos valientes parecerían crímenes absurdos. A los ojos de sus amigos el enemigo era un amigo, un familiar, un arraigo en el corazón y el equipo.

- Debemos matarlo – dijo Ichigo tragándose el nudo de la garganta.

- No sé si eso haga que los demás vuelvan a la normalidad – respondió Ginjou

- Pero… ¡esto es muy peligroso! No sabemos qué es lo que quiere.

- La última vez…

El silencio se apodero de los dos amigos. Si, la última vez los había matado a todos para absorber sus poderes.

Es muy fuerte – reclamo Ichigo- debemos tener un plan si queremos que funcione.

Deberemos alejar a los demás si no queremos que nos detengan, debemos matarlo en secreto – el rostro de Ginjuo se torno obscuro- debemos de planear un asesinato.

La palabra asesino resonó en la cabeza naranja, se recordó gritándola en una fiera batalla. Esas batallas… que distantes parecían ¿en verdad ocurrieron? Tanto había pasado, tenía tan pocas pruebas, sólo su palabra y sus recuerdos, justo como sus amigos, atrapados en un recuerdo falso que los hacía dudar.

¡Ichigo! – llamó Ginjou

Él volteo ante el grito.

- No te pierdas en tu mente – el fondo detrás de Ginjou parecía confuso, de repente Ichigo no distinguió si estaba en su casa, o la calle o un escondite, un parpadeo y la luz clara volvió.

- Lo siento, me distraje

- Si estas cansado todavía

- ¡Estoy bien! – dijo soltando la mano que se acerco a ayudarle – Maldición, hay que hacernos cargo de lo importante.

Ichigo se alejó decidido, caminando lo más erguido posible, orgulloso para parecer valiente.

- Aunque supongo que tú debes estar feliz – dijo Ginjou detrás de él.

Volteó con confusión.

- Recuperar tus poderes, supongo que lo que querías era enfrentar nuevas batallas, volverás a ser útil, Ichigo.

Una palmada en la espalda y Ginjou siguió caminando.

- Sí, todo volvía a la normalidad, él pelearía por sus amigos y ganaría, después de todo derrotó a Aizen, dentro de él tenía la fuerza para vencer a Tsukihsima. Tanto tiempo, tanto tiempo deseando ser normal y llevar una vida apacible y ahora desear lo contrario. La vida parecía un reloj preciso que cambiaba cada que él estaba a punto de enfadarse de todo.

- ¿Qué haremos si tus amigos intervienen?

- ¿De qué hablas? – respondió Ichigo aun un poco ensimismado.

- Creo que ya hemos comprobado lo fuertes que son, la ultima vez esa chica pudo detenerme sin hacer mucho esfuerzo.

Chad, Orihime e Ishida eran realmente fuertes, Ichigo no estaba seguro de la magnitud de sus poderes en este momento.

- De no haberlos alcanzado el ataque de Tsukishima incluso ellos hubieran podido hacerse cargo –dijo Ginjou.

Ginjou insinuaba más de lo que sus labios decían. Sus ojos clavados en los ojos de Ichigo eran insipientes agujas que llegaban hasta su conciencia.

- Di lo que tengas que decir – reclamo con fuerza mientras sus manos se cerraban en puños.

- ¿Por qué aceptaste todo esto? ¿Querías volver a luchar? ¿Si el mundo está en peligro crees que eres el único que podrá salvarlo? ¿Te carcome el ego que tus amigos tengan más poder que tú?

- ¡Ya basta! Eres tú el que me ofreció recuperar mis poderes.

La camisa de Ginjou colgando de los puños de Ichigo, con sus pies colgando ante la amenaza del hombre aturdido. Los dos pares de ojos encontrados, dos amigos.

- Solo quiero saber si tu razón tiene nombre y cuerpo.

El semblante cambio y las manos lo soltaron.

- Tus poderes no eran sólo para pelear, eran para ver y sentir. En tu camino encontraste personas, amigos y enemigos. ¿Cuál de ellos es el que te está llamando a hacer todo esto?

Volvió el nudo en la garganta.

- ¿Fue por nostalgia? – pregunto al final Ginjou.

- No, sólo quería dejar de sentirme inútil.

La batalla es la batalla, el dolor las consecuencias, siempre hay consecuencias. La vida diferencia a los que están dispuestos a aceptarlas y a los que no.

Caminaron los dos hacia donde podrían encontrarse con Tsukihsima, lo atacarían de frente, cómo sabían hacerlo. Ichigo volteo detrás suyo, en un acto reflejo heredado de sus días como shinigami sustituto, esperaba… siempre esperaba que la pequeña persona que antes lo seguía estuviera ahí, aunque él ya no pudiera verla.