Lo primero que voy a decir es que la idea no es mía es de Saminusessho97 ella me la dio, pero la historia la escribí yo, nada mas quería aclarar que la historia no es mía ni los personajes. Hay que agradecerle a Saminusessho97 por la historia

Se trata de una chica que tiene extrañas pesadillas y siempre son violentas y llenas de sangre, en la escuela a la que ella asiste de pronto llegan extraños hombres con trajes y lentes obscuros que van a investigar la muerte de una estudiante y la desaparición de otras 2 ,en secreto, entonces las chicas mientras dormían son secuestrada por un par de vampiros que son los culpables de las desapariciones de estudiantes, ellos resultan ser los gobernantes de su mundo pero necesitan la ayuda de ellas para evitar que acaben con su mundo

Extraños sueños que me acosan

Hola mi nombre es Kagome Higurashi tengo 17 años, últimamente he estado teniendo pesadillas en donde un hombre muy guapo de cabellera platinada, pálido, vestido totalmente de negro me persigue, diciéndome que le entregue algo llamado la perla de Shikon, pero yo no sé qué es eso, ni para qué sirve, estaba durmiendo cuando de pronto

-Kagome, despierta es hora de la escuela- Esa era mi mama Naomi

-mama, cinco minutos más por favor- seguía dormida

-claro que no tienes que ir a la escuela, despierta ya- empezó a zamarrearme de un lado a otro- llegaras tarde a la escuela Kagome

-está bien ya bajo- no había dormido por esa pesadilla de nuevo, últimamente he tenido la misma pesadilla todos los días, un hombre que me persigue extendiendo su mano con filosas garras y dientes, me persigue diciéndome quiero esa perla dámela o te matare, siempre que le estoy por preguntar qué es lo que quiere mi madre me despierta para la escuela, ella dice que no debo preocuparme por eso que al ser una sacerdotisa hay demonios que intentar destruirme en sueños por eso cuando me escucha removerme me llama para que no me hagan daño. Me vestí y baje a la cocina

-buenos días Kagome- ese era mi abuelo

-¿Qué tal hermana?- ese era Sota mi hermano menor

-buenos días, como siempre Sota esa absurda pesadilla no me deja dormir-

-ya te lo dije Kagome usa uno de los amuletos del templo- me puso delante de mi cara uno redondo

-¡claro que no abuelo!-

-te avergüenzas de tus ancestros-

-claro que no- susurre- son muy raros y no me gustan

-el desayudo está listo chicos-

-si mama- dijimos los dos a la vez

Empezamos a comer, cuando termino llego mi mejor amiga Sango a buscarme para ir al instituto

-buenos días Kagome ¿Cómo has estado amiga?

-mal no dormí nada Sango-

-ya veo, ¿Por qué?-

-tengo todas las noches la misma pesadilla de siempre-

-¿qué es lo que sueñas?-

-que un hombre de cabellos platinados me persigue diciéndome que le entregue algo llamado la perla de Shikon-

-es muy raro-

-¿podrá significar algo?-

-tal vez, la verdad no lo sé-

-en eso llegamos a la escuela- oye Sango mira por ahí, ese chico es muy lindo ¿será nuevo?

-sí creo que es nuevo- espero que no sean ellos

-Sango… ese chico- es igual al de mis pesadillas

-¿Qué pasa Kagome?- se congelo, el tiempo ha llegado, por Kami an venido por ella, pensé que este día nunca llegaría

-Sango… ¿no crees que se parecen al de mis sueños?-

-es cierto, es iguale ¿no lo crees?- que mala suerte

-si-

-algo en ellos no me agrada

-se verían mejor si se sacaran esa ropa deprimente

-tienes razón- están mirando a Kagome

-nos miran ¿Qué hacemos?-

-dirigirnos al salón lo antes posible-

-está bien-

Mientras allá a los lejos un par de chicos de negro hablaban

-hey InuYasha ¿no crees que esas chicas son lindas?- dije mientras las miraba que se iban

-si son lindas Miroku, pero no lo olvides que una de ellas es la portadora de la perla, debemos encontrarla antes de que Sesshomaru acabe con mi reino - soy InuYasha Taisho, hijo del legendario vampiro Inu no Taisho y de la princesa vampira Izayoi dueño de las tierras del Este y Oeste y legendario vampiro, busco la perla de Shikon junto a mi mejor amigo y sirviente Miroku Hoshi el también es un vampiro, la buscamos para salvar mi reino de las garras de mi perverso hermano Sesshomaru

-InuYasha ¿Qué te pasa amigo?, has estado raro desde que entrantes en los sueños de esa chica, a no, no me digas que te gusta InuYasha-

-tal vez, si me gusta, ¿que tiene?-

-nada es solo que quiero que recuerdes que ya tienes a Kikyo allá en tu castillo en el Este-

-no me importa Kikyo se acuesta con el que se le da la gana cuando yo salgo o no estoy con ella-

-me alegra que ya lo sepas-

-no hay problema de seguro ahora debe de estar con el traidor de Sesshomaru

-la verdad dudo que no tengas la razón-

-lo ves, si ella puede hacer eso yo también-

-sí, pero tú eres de la realeza, ella no-

-¿y?-

-que si te acuestas con cualquiera todos dudaran de tu nobleza InuYasha-

-y ¿Qué sugieres?-

-que termines con Kikyo de una vez y estés con la que te plazca-

-mmm, no es mala idea Miroku lo reconozco-

-¿entonces lo harás?-

-claro, solo es cuestión de convertir a alguien y que vaya a mi castillo a dar esa información-

-¡InuYasha! Sabes que no puedes ir por la vida convirtiendo a la gente-

-¿entonces qué hago?

-envía a un mensajero-

-está bien-

-o si te parece mejor llámala, tiene celular ¿cierto?-

-cierto- eso hare la llamare y cortare con ella – eres brillante Miroku-

-gracias-

-vamos a clases

-de acuerdo-

A mí me toco sentarme con esa tal Kagome para que me ayudara a incorporarme en las clases y a Miroku con la tal Sango, Kagome me hablaba con suma confianza como si me conociera de toda la vida

-¿Cómo te llamas?-

-no te importa-

-que grosero- bueno tampoco seas grosero-

-entonces no molestes- demonios odio tener que ser así, tan frio, malo, demonios detesto lo que soy

-lo siento- no pude evitar soltar unas lagrimas

-¿qué te pasa?-

-yo… no quiero ser una molestia… solo trataba de ser tu amiga-

-yo no te lo pedí-

-lo siento- me gustas y planeo conquistarte asique será inútil que te resistas

-no importa-

Me seque las lágrimas –otra vez lo siento mucho, pero ¿no me dirás tu nombre siquiera?-

-InuYasha , ¿feliz?-

Asentí -mucho-

-bien- el resto de la clase transcurrió muy aburrida, debes en cuando le echaba una mirada, admito que era muy linda, cuando termino la clase me dirigí con Miroku a nuestra casa

-oye InuYasha ¿por qué hiciste que esa chica llorara?-

-Keh, yo no hice le nada a esa chiquilla tonta, ¿Cómo te diste cuenta?-

-daah olfato de vampiro, pude oler sus lágrimas pero entonces ¿por qué lloraba?-

-porque no quise decirle mi nombre-

-¿y porque no se lo dijiste?-

-para no encariñarme con ella-

-pero si tú mismo me dijiste que te gustaba-

-tú sabes mejor que nadie que Naraku y Sesshomaru están en mí contra, bien podrían lastimarla, de todos modos se lo dije igual-

-pero ¿y la señorita Kikyo? ¿Ella no te preocupa?-

-la verdad es que nunca la quise, es demasiado mala y es muy cruel con mis sirvientes en especial con Rin-

-eso es porque la tratas muy bien-

-¿y qué esperabas?, Sesshomaru la ha embarazado y no lo acepta, la dejo en cuanto lo supo, lo menos que podía hacer era darle un techo y comida-

-sí y fue muy generoso de tu parte InuYasha, pero también hiciste que Kikyo sintiera celos-

-eso también, ¡es que acaso no confía en mí!-

-es difícil en estos tiempos InuYasha, tu sabes que muchas parejas se separan en estos tiempos-

-sí pero, yo le deje muy en claro que la quería-

-no sé, la verdad es que nunca me gusto esa mujer para ti-

-ya lo sé Miroku, ni a Ayame ni a Kaede ni siquiera a Myoga que le cae bien todo el mundo la quiere-

-entonces ¿Por qué estas con ella?-

-no lo sé Miroku. En un principio creo que sentí algo por ella, pero ya no, no tenemos nada en común, no desde que la vi con Naraku en nuestra cama-

-ah ¿fue por eso que mandaste a quemar la cama y desterraste a Naraku y a Kikyo por una mes?

-si a Naraku lo desterré para siempre de mi reino no sin antes sacarle sus poderes de vampiro y a Kikyo por un mes para que aprendiera la lección y las consecuencias de sus actos

-de todos modos creo que fuiste un poco cruel con ella, dijo que Naraku la había obligado-

-no lo recuerdas ella es una sacerdotisa que puede hacer campos de fuerza Mirokues capaz de oponerse su haci lo deseara, pero no lo hiso y fue desobediente-

-si lo pones así creo que tienes razón InuYasha

-siempre la tengo Miroku, tú más que nadie lo sabe-

-tengo una pregunta para ti InuYasha-

-¿cuál?-

-¿qué aras cuando todo esto termine?-

-supongo que restableceré la paz en mi reino y buscare una esposa que me merezca-

-ya veo… ¿esa chica seria Kagome?-

-no lo sé, si ella me acepta-

-tienes que tener fe InuYasha-

-¿y tú Miroku que aras cuando esto termine?-

-no lo sé, supongo que buscare a alguien para pasar la eternidad juntos-

-te recomiendo que entonces no seas tan pervertido y libidinoso, ¿entendiste?-

-si amo InuYasha-

-¿desde cuándo me llamas amo?-

-no lo sé amo-

-de acuerdo Miroku deja las formalidades para cuando estemos en el palacio, ahora somos solo amigos-

-de acuerdo, tengo curiosidad por el reino InuYasha, ¿qué tal si vamos uno de estos días?-

-de acuerdo-

-bueno abre es portal de una vez-

-de acuerdo- puse mis manos juntas y levante los dedos índices juntos- que el reino del legendario InuYasha se abra ante nosotros- en eso se abre un portal redondo de color negro-

-vamos-

-si- saltamos en el