Puede que no haga falta decirlo pero:
" cursiva"=Sueños o recuerdos
OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoO= cambio de escena (no me deja poner asteriscos T.T)
DISCLAIMER: Ni Fairy Tail ni sus personajes me pertenecen. Su creador es Hiro Mashima
En una de sus habitaciones de la posada de Fairy Tail se encontraba Juvia revolviéndose en su cama con gran agitación. Estaba teniendo una horrible pesadilla:
"Se encontró con Gray quien estaba montado en un caballo blanco y tenía el típico traje de príncipe. La peli-azul con un sentimiento de euforia le llamó.
-¡GRAY SAMA!
- Oh, hola ¿Estabas aquí? –habló Gray de forma seductora- He estado mucho tiempo buscándote Juvia…
- ¡Kyaaaa! –chilló emocionada Juvia- Estoy tan feliz de verte Gray-sama. Mira ¡te he hecho galletas!
De la nada sacó una cesta con galletas de chocolate, de aspecto apetitoso de los que se notaba que estaban recién horneados. Gray quien por una extraña razón no tenía camiseta cogió una galleta.
- Oh ¡Realmente delicioso! Pero no podemos perder tiempo –avisó Gray.- La boda que vamos a celebrar en nuestro palacio real está esperándonos.
Juvia se fijó como en la lejanía estaba el típico palacio de cuento de hadas resplandeciente y centelleante. Sin poder guardar bien las emociones gritó:
-¡Aaaah! ¡Gray-samaaa! –abalanzándose sobre él. – ¡Vivamos juntos y tengamos muchos hijos!
-¡Sí! ¡Hagámoslo, Erza! –respondió sonriente Gray.
-¿Eh? –visiblemente confundida –¿Qué?
Apareció Erza por arte de magia en los brazos de Gray. Ambos estaban felices y sonrientes cual pareja de enamorados que están a punto de declarar su amor por siempre, mientras una pobre Juvia contemplaba y escuchaba la escena.
-¡E-esperad un momento! –exclamó asustada Juvia. – ¡Esto no puede ser! ¡Esto no puede estar pasando!
Para su desgracia la pareja de tortolitos, montados a caballo, no despegaban la mirada del uno y del otro. Era como si sólo ellos dos estuviesen en esa playa sacada de cualquier novela romanticona y como si la presencia de Juvia se hubiese evaporado.
-¡Erza! ¡Siempre te he amado!
-¡Yo también, Gray!
-¡Vivamos juntos lejos de todo y de todos!
-¡De acuerdo!
-Esto…yo… -Juvia intentando meter baza . –Juvia no entiende bien la situación pero…¿No se supone que Gray-sama me estaba pidiendo matrimonio a mí?
Un frio aire de total desinterés se dio a ver en el ambiente. A pesar de que tanto Gray como Erza la estaban mirando la observaron de una forma vacía como si ella sólo fuese una loca que se había colado en el momento más bonito de sus vidas. Con una cara que reflejaba hastío (lo que viene a ser una mezcla entre cansancio y disgusto) Gray le dirigió la palabra:
-Pero eso fue en el pasado ya hace mucho tiempo…No puedes seguir en el pasado –remarcó moviendo la mano indicando que la situación carecía de importancia.
-¿Ha-hace mucho tiempo? –preguntó sorprendida y confundida Juvia.– No puede ser…
-Venga ¡Vámonos Gray!
-¡Allá vamos! –gritó Gray a la par que espoleaba a su caballo quien, sin mayor explicación, salió volando.
Echándose a correr Juvia empezó a clamar y a llorar repitiendo el nombre de su amado traidor que le abandona por otra quien no era otra más que Erza, una de sus "eternas rivales" en el amor. Poniéndose de rodillas y con la cara empañada en lágrimas y alzando el puño hacia ellos, gritó:
-¡Maldita! ¡Yo te maldigo!
A la vez que gritaba esto ve como una sonrisa malvada asomó por los labios de Erza los cuales parecían decir "Gané" "
De golpe y porrazo, como suele pasarnos a todos cuando tenemos pesadillas, se reincorporó en la cama entre sudores ¡Que pesadilla más horrible!
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Vagando de un lado a otro como alma en pena iba y venía Juvia. Tenía unas ojeras muy marcadas y unos ojos inyectados en sangre. Mientras caminaba por el gremio de esa forma tan pesarosa Lucy se le acercó.
-Hola, Juvia ¿Te encuentras bien?
-No…Juvia no ha podido dormir bien esta noche. –contestó Juvia.
-Ooh…¿Ha sido por el insomnio?
-No exactamente, ha sido por una horrible pesadilla…Gray-sama me abandonaba por otra justamente cuando me pedía matrimonio…
Lucy se quedó a cuadros. No sabía que decirle a Juvia exactamente para animarla y eso…pero, se sentiría internada en la misma locura de Juvia si le respondía "Oh ¡Que mal! No te preocupes por eso Juvia, sólo es una pesadilla ¡Ya verás cómo conseguirás el amor de Gray en la vida real!"…a pesar de eso tampoco podía dejarla así. Sobre todo a sabiendas de lo mucho que amaba a Gray…a pesar de que eso implicase crearse rivales por que sí y molestar a Gray de forma que roza el acoso (a quien pretendo engañar era acoso directamente).
-Sólo es un sueño –sonrió Lucy nerviosa esperando haber acertado con la respuesta.
-¡No sólo es un sueño! –exclamó Juvia alterada. –Juvia nunca ha tenido un sueño en el que no se quede con Gray….
-Tran-tranquila Juvia ¿No crees qué estás exagerando?
Juvia agarró las manos de Lucy y con una mirada de decisión dijo:
-No me voy a rendir, pase lo que pase ni tú ni especialmente Erza os saldréis con la vuestra.
-¿Eh? ¿Cómo? –preguntó Lucy muy confundida.
Al momento de haber dicho eso se vio despidiendo a Juvia quien iba con paso decidido dispuesta a arreglar las cosas y nada mejor que hacer eso dirigiéndose a una vidente.
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El ambiente estaba muy tenso en la sala. Una y otra vez las miradas de Gray y Kana se cruzaron. La mirada de la morena estaba llena de confianza y la del pelinegro de inseguridad disfrazada de valentía. Estaba más que claro que ninguno de los dos quería perder en el duelo que habían emprendido: un duelo de cartas. Sin embargo, como era evidente, la balanza se inclinó a favor de Kana quien con una sonrisa mostró sus cartas.
-Gané
-¡AAAAAHHHH! –gritó Gray. -¡no! ¡Dime que no!
Mirajane, quien estaba viendo el duelo junto con otros, tocó su hombro de forma amable y condescendiente. Ese gesto le valió a Gray más que mil palabras
– ¿Bien? ¿Qué es lo que tengo que hacer? –preguntó Gray suspirando
-Quiero que bebas todo el alcohol que te quepa
-¿¡A ESTÁS HORAS DE LA MAÑANA!? –exclamó sorprendido Gray.
-¡Nunca es pronto para beber! –sonrió divertida Kana mientras le ofrecía una jarra grande.
-Maldición…
Empezó a beber todas las jarras que le ofrecía hasta que llegó un momento en el que aconsejaron a Kana que dejase de darle tanto o si no acabaría en un coma etílico. Sin dejar de hipar Gray no se dejaba ayudar asegurando que podía mantenerse sólo en pie (lo cual en cierta parte era verdad).
-Ya veo que estáis despiertos –se escuchó la voz de Erza por detrás de Gray.
-Buenos días –le contestaron excepto Gray.
-Mira *hip*quién viene aquí *hip* ¡La que se cree la reina de Fairy Tail!*hip* -dijo Gray a la vez que se le acercaba.
-¿Oh? Gray ¿estás bien? –le preguntó Erza.
-Estoy muy harto de tu actitud…*hip* te crees la reina abeja de esta colmena *hip* sobre todo porque puedes equiparte con armas…
- ¡Chst! La estás haciendo enfadar…-le advirtieron con miedo los que veían la escena.
-¿Y sabéis lo peor de todo? Que eso es una tontería…¡Cualquiera lo puede hacer!
-¡Iiiiiih! –chillaron con nerviosismo todos al ver que no hacía más que empeorar las cosas.
- Ah… ¿Sí? –"preguntó" Erza amenazante.
-¡Sí! ¿Sabes qué? *hip* ¡Te reto a un duelo de armas!
-Oh…¿de verdad? – dijo Erza con una sonrisa que anunciaba una futura lluvia de sangre.
-¡Sí! Y para darte muestra de mi buena fe… ¡No usaré mi "Ice maker"!
Eso ya se daba por sentado si le estaba retando en el propio campo de Erza. En fin, incoherencias de borracho.
-…Interesante…Acepto el duelo…
"¿De verdad que está aceptando el duelo de un borracho?" Pensaron todos a la vez por pura coincidencia.
-Elige el arma –ordenó Erza amenazante.
-Lan… ¡lanza! –escogió de forma aleatoria y sin pensárselo dos veces.
-Excelente…pues te esperaré a ti y a tu lanza mañana por la noche en mi habitación ¿Entendido?
-*Hip* ¡Entendido!
Dicho esto se dieron la mano mientras saltaban chispas a la par que los demás iban haciendo plegarias deseando que eso le fuera leve a Gray.
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Juvia se encontraba delante de una tienda con un rótulo que oraba así: "La vidente"… muy poco currado la verdad ella se esperaba un título más resultón, pero al menos no engañaba a lo que se dedicaba. Se adentró en el local el cual estaba decorado con lo típico que alguien se solía encontrar en este tipo de tiendas, una luna y un sol fusionados… el zodiaco…algunas cartas astrales… y delante de ella estaba la vidente que debería ayudarla en su odisea amorosa.
-Bienvenida –saludó la vidente.
-Hola.
-Tome usted asiento por favor…-pidió la pitonisa.
Juvia obedeció en seguida a esa petición. Sus manos sudaban como un pollo y temblaban como un flan. No sabía muy bien que iba a salir de esta aventura.
-Y bien…¿Qué es lo que te atormenta? ¿Algo relacionado con el amor?
- Sí
-Hmm ya veo…¿Te leo las cartas? ¿Te interpreto algún sueño?
-Quiero que me interprete un sueño, por favor
La vidente escuchó con gran atención el sueño que había tenido y a medida que iba avanzando el relato más iba moviendo la cabeza con pesar.
-Está más que claro…el caballo blanco que vuela, el príncipe que se va con otra…una petición de matrimonio truncada… siento decirle que eso indica que su amor no podrá hacerse realidad por culpa de otra mujer.
-No puede ser… ¿Es una broma? –se asustó Juvia.
La vidente negó con la cabeza.
-Creo que los astros han sido muy claros contigo.
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Habían pasado varias horas desde que a Gray le habían dejado en su habitación. Cuando vio la hora eran las seis de la tarde se sorprendió ¡Sí que había dormido! Miró a su alrededor desorientado "Tengo muy seca la garganta" y a continuación se echó el aliento
-¡Que mal huele! Debo de haber bebido…pero ¿por qué?
Poco a poco fue recuperando la memoria: el duelo de cartas perdido, Kana le obligó a beber…demasiado, y después… ¡Retó a Erza!. Ante eso ahogó un grito de miedo ¿¡Cómo pudo ser tan estúpido cómo para retar a Erza!? ¡Y encima en su campo! Es cierto que siempre había deseado retarle… ¡pero no a sabiendas de que podía perder! (obviamente). Fuera como fuese, conociendo a Erza debía ir en el momento acordado. O si no sería muchísimo peor...
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Continuamos en la tienda de la vidente. Ahí Juvia estaba tapándose la cara con gran disgusto y con una gran congoja en su interior. Seguía sin poder creérselo.
-Por favor dime que es broma –dijo sollozante Juvia –debe de haber algo que me ayude a que eso no pase.
-…siendo sincera… el sueño no dice de forma rotunda que sea imposible…simplemente que necesitarás de darte mucha prisa y de una ayuda extra…que sólo yo puedo proporcionarte…
La cara de Juvia se iluminó a más no poder ¿En serio que ella sería quien le daría la ayuda que necesitaba? ¿Sería ella su salvadora?
-¡Dime, por favor! ¡Juvia quiere saber!
-Vale, pero, antes, mis honorarios…
Con rapidez Juvia desplomó una bolsa de Jewels sobre la mesa que la vidente abrió y empezó a contar hasta asegurarse que estaba toda la cantidad requerida para sus servicios.
-¿Y bien? –preguntó impaciente Juvia.
-Hmm … has de tener en cuenta que las estrellas no te están siendo favorables en este asunto…normalmente en este tipo de situaciones deberías rendirte…pero, has tenido la enorme suerte de que se ha inventado algo para solucionar tu problema…
-¿Qué es?
-Un libro de "Como conquistar al chico que te gusta" –contestó a la vez que se lo mostraba. –por desgracia no te saldrá gratis…
-¡Da igual! ¿Cuánto?
- 100.000 jewels –respondió la vidente
Ni la menor protesta se oyó de los labios de Juvia porque tal era su desesperación que toda cosa era poca. Sacó de su bolsillo otro saco con Jewels el cual contó para comprobar si tenía todo el dinero y se lo dio tras sacar de él unos pocos jewels. Tras despedirse de la vidente Juvia miró decidida hacia delante.
-Sólo espera Erza ¡No te saldrás con la tuya! ¡Muajajajajajaja!
¿Qué les pareció? Si les gustó dejen un comentario ^^ y si no les gustó o les pareció "extraño" déjenme una crítica constructiva para ver en que puedo mejorar ;)
Por mi parte he intentando hacer una lectura que sea ágil y que les saque al menos una pequeña sonrisa. Espero poder seguir escribiendo.
¡Hasta luego! ^^
