Capítulo 1
Abrí los ojos y me encontré con una casa desconocida. Estaba desnuda y un fuerte brazo estaba alrededor de mi cintura. Mi cabeza dolía como la mierda y no recordaba nada de lo que había pasado la noche anterior.
Me levanté con cuidado y mire al chico con el que probablemente o más bien había tenido sexo. "Es bastante lindo" pensé. Salí de la cama y busque mi ropa. Una vez ya vestida busque mi bolso y salí de la casa. Me maldije a mi misma por hacerle caso a Hailey, una de mis mejores amigas, y no traer mi auto.
Despues de caminar aproximadamente la peor hora de mi vida bajo la mierda de sol, llegue al gran edificio de apartamentos donde vivo con Hailey. Entre por la gigantesca puerta de vidrio y fui directo al elevador. Una vez adentro presione el pequeño botón plateado con el número 9, el cual al presionarlo provoco que el elevador comenzara a subir. Esperaba impacientemente, escuchado la mierda de música que ponen en los elevadores, llegar a mi piso. Después de los 5 minutos mas largos de mi vida, el cubo metálico en el que me encontraba se abrió. Camine rápidamente hasta llegar a la puerta blanca con un 269 puesto en negro en la parte superior de la misma. Abrí la puerta y entre cerrando la puerta detrás de mi. No había señales de Hailey por ningún lado, asi que camine hasta la puerta de su habitación la abrí lentamente. Ella seguía dormida con su castaño cabello tapando le todo el rostro. Sonreí maliciosamente y camine hasta su cama con un vaso de agua fría en mis manos y se lo vacíe encima.
-Ahhhhhhhh , eres una idiota! -grito ella mientras yo no podía parar de reírme.
-Buenos días- le dije riéndome. Ella simplemente rodó los ojos de una forma bastante divertida.
-¿Donde estabas te estuve llamando toda la noche?-
-Por ahí -
-La verdad nose para que pregunto si ya se que estabas en la cama de un hombre que no conoces-
-Vaya que inteligente eres- dije con sarcasmo.
-Deberías conseguir a un hombre el cual ames no ha cualquiera que esté dispuesto a acostarse contigo una noche y ya- aquí vamos de nuevo con eso.
-Ya hemos hablado de eso millones de veces y sabes que yo creo que el amor es la cosa más estúpida del mundo, además no hay cosa mejor que el sexo sin sentimientos-
-No se ni para que me esfuerzo en cambiar tu forma de ser- dijo Hailey rodando los ojos. Estaba apunto de decirle algo hasta que el timbre sonó. Hailey camino hacia la puerta y la abrió. Escuche la masculina voz de Harry, el novio de Hailey.
-Hola _- dijo Harry sonriendo.
-Hola- le dije y entre a la cocina. No me caía mal Harry sólo que a veces creo que se trae algo entre manos y si el lástima a Hailey se las verá conmigo.
Era de noche de nuevo estaba alistando me para otra noche fuera de casa y entonces Hailey entró a mi habitación.
-No salgas hoy y quédate con tu mejor amiga- dijo haciendo puchero.
-Tengo una mejor idea sal conmigo y así no te quedas sola-
-Sabes que odio salir a esos lugares llenos de personas ebrias-
-Oh, vamos Hailey será divertido, además te conviene salir y dejar de quedarte aquí-
-Yo si salgo-
-Si solo con Harry. Vamos será divertido. -
-Creo que tu y yo no tenemos la misma definición de divertido-
-Tu no tienes una definición de divertido-
-Si claro como digas-
-¿Vas o te vas a quedar aquí abuelita?-
-De acuerdo tu ganas voy contigo-
-Toma- le dije dándole un vestido negro que llegan a a la mitad del muslo.
-¿No crees q es muy corto?-
-No abuela así que apúrate o me voy sin ti-
-Que amable eres- dijo rodando los ojos.
Llegamos al elegante bar donde habían varias personas ya ebrias y otras apunto de tener sexo en una mesa.
Fui directo a la barra y Hailey fue detrás de mi.
-Dame lo de siempre- le dije al barman, el miro Hailey y ella permaneció en silencio.
-Dale a ella lo mismo, Jack- el chico asintió y nos dio un par de vasos con nuestras bebidas.
Caminamos a una mesa vacía donde tomamos asiento.
-Creo que le gustas-
-Tengo novio-
-Si claro Harry- dije rodando los ojos. -Su nombre es Jack Gilinsky por si lo quieres saber- estaba creando un plan en mi mente de como hacer que Hailey se olvidará un poco de Harry y saliera con Jack, hasta que un chico alto rubio entró entró al bar tenía unas hermosos ojos azules que se podían ver a kilómetros de distancia y en sus rosados labios había una pequeña y pervertida sonrisa. Mordí mi labio al ver sus brazos marcados por pequeños aunque visibles músculos.
-Cuidado se te sale la lengua- dijo Hailey despertando me de mi sueño. Rodé los ojos y sin decir nada me levante de mi asiento y camine hacia la barra donde estas el chico rubio.
-Jack dame otro por favor-
Note como los ojos azules del chico me veían de pies a cabeza.
-¿Te gusta lo que ves?-
-Si- dijo de la forma más relajada posible. "Hora de poner mi plan en marcha" pensé. Di media vuelta y empecé a caminar a la mesa, donde se encontraba Hailey hasta que la mano del chico tomó mi brazo y halo de el acercándome más.
-Soy Niall-
-Espero que seas soltera- dijo sonriendo pervertidamente.
-Lo soy- dije devolviendo le la misma sonrisa.
-Me alegra escucharlo ¿Sabes? Mi apartamento no queda muy lejos de aquí-
-¿Eso es una invitación?-
-Talvez-
-Bien entonces que hacemos aquí-
