Y sí, prometo mucho, cumplo nada y hago cualquier cosa, esa soy yo.
Sentía que debía dejar algo de Rivetra, es una ship que extraño.
Disclaimer: Shingeki No Kyojin obviamente pertenece a Hajime Isayama, yo sólo uso a sus personajes por...joda (?).
Día 1º: Sacrifice (Sacrificio): "Otra oportunidad."
Podía recordar con nitidez todas las veces que estuvo cerca de la muerte.
Podía recordar también a las personas que vio atravesar el umbral entre la vida y la muerte delante de sus ojos.
Incluso podía acordarse perfectamente de las expresiones de cada uno, escuchar sus gritos y sus silencios.
Había visto a muchos compañeros morir. Algunos rogando, pidiendo clemencia; otros llorando pidiendo disculpas, estaban los que gritaban de rabia y dolor. Luego estaban los que se quitaban la vida antes de siquiera hacer algo y, finalmente, estaban los que no pudieron reaccionar a tiempo. Aquellos que parecía que nunca se enteraron que dejaron un cadáver.
Nadie en su sano juicio deseaba perder la vida.
Sin embargo, todos se unían finalmente a la milicia por una misma razón:
Ya no tenían nada más que perder.
Y aunque muchos dijeran que se unían por "querer ayudar a la humanidad", "vengar a un ser querido", "hacer lo correcto", "por honor".
Todas mentiras.
Él podía afirmar que más de la mitad de aquellas frases trilladas eran falsas. En su mayoría se unían porque no tenían nada que perder.
Porque él era uno de esos casos. Cuando tuvo a sus amigos se unió a la milicia casi por capricho del destino, luego fue por venganza. Y, finalmente, tuvo un por qué, un propósito. Y aquello se lo debía a Erwin.
Sin embargo cuando conoció a Petra supo de unas nuevas razones.
Ella decidió no aceptar una vida perfectamente planeada para unirse a la Legión, ni siquiera aspiró para ir a la Policía, para Levi ella quería suicidarse de una forma que pareciera digna.
Como varios, quienes necesitaban el empujón.
Prácticamente su decisión fue un sacrificio.
Recordaba las primeras veces que la vio, a pesar de estar contenta de que él mismo la pusiera en su escuadrón muchas veces con los ojos rojos y la respiración agitada. Cuando creía que nadie más la vería.
Apretando un papel arrugado entre sus manos a la par que la escuchaba por lo bajo, insultando.
Y un día decidió confrontarla.
Ese día lo podía recordar como si fuera hoy, ella estaba con una taza de algo que parecía té en sus manos, que según él era un insulto llamarlo propiamente té, y una carta en sus manos.
La vio allí, en la oscuridad del comedor, apenas iluminado por unas velas sobre la mesa mientras ella lucía un vestido gris, sencillo. Su cabello largo en una trenza (aunque varias veces le recomendó que se lo cortara). Él, en cambio llevaba puesto unos pantalones oscuros y una camisa blanca.
—Oi, Petra. Tira esa mierda y ve a preparar dos tazas de té negro —le dijo sentándose él en la silla del comedor, apoyando apenas su codo sobre la mesa.
Petra le miró confundida, y con una expresión casi de molestia, ignoró aquel gesto y se concentró en los ademanes que hacía. Como si aleteara sobre la alacena.
—El té está abajo, azúcar te puedes poner sólo una cucharada. Yo no quiero.
Le indicó, cuando ella finalmente terminó la tarea de preparar el té él tomó la taza que le correspondía y bebió un sorbo.
Petra en cambio se encontraba taciturna. Aquello no le gustaba. No parecía ella.
—Petra, explícame.
Ella parecía estar de vuelta en tierra porque lo miró. Apenas escuchó un "Disculpe, Sargento".
—¿Por qué mierda tienes esa cara como si hubieras inhalado alguna mierda tóxica durante las noches?
Petra se quedó enmudecida ante esa pregunta, y en la forma en cómo se la dijo, que sólo se le quedó mirando. Con sus ojos tan abiertos de la impresión; carajo, Levi no recordaba lo grandes y expresivos que eran.
Y ella rió.
Ahora fue su turno de mirarla, consternado.
—No dije eso para que te rieras.
—Lo sé, lo sé —ella rió suavemente, limpiando una lagrimilla que amenazaba con salir de sus ojos. —Es sólo que me ha sorprendido su pregunta, y respondiéndosela: no. No he estado tomando, ni fumando, ni inhalado nada.
—¿Entonces qué te pasa? —preguntó él, ya de manera brusca.
Ella se encogió de hombros y sonrió, aunque para el mayor fue una risa extraña.
—Nada, simplemente he perdido una oportunidad y he tomado otra. Sólo me da nostalgia, es todo.
—¿Seguro que es éso? —ella asintió como toda respuesta.
Él realmente no estuvo satisfecho sin embargo prefirió no insistir, a fin de cuentas seguía siendo la vida de ella, no la suya.
Ella bebió el té, ya sin inmutarse. Él hizo lo mismo.
Pasó el tiempo luego de aquella conversación. Cuando él perdió a todo su escuadrón y el padre de Petra fue hablarle...no estaba siquiera concentrado en aquellos momentos.
Las palabras del Señor Ral...aún las tenía grabada en su cabeza.
Fue aún peor cuando revisó las pertenencias de Petra, y un dibujo.
Un dibujo de ella tomando del brazo a un joven alto, ambos sonriendo.
Leyó la letra ilegible y borrosa que decía detrás de aquel dibujo.
Sólo decía un "Te amo, ahora y siempre. A pesar de todo."
Sabía que no era la letra de ella, la letra de Petra era redondeada y fina, y aquel escrito parecían garabatos.
Fue entonces que decidió leer aquellas cartas. Sabiendo que estaba mal, lo sabía pero joder, ¿qué importaba? Ya había pasado una semana de la muerte de ella, ¿qué más iba a esperar? Ella ya no estaba allí.
Se sintió en la cama bien extendida y empezó a leer en un mudo silencio.
Una vez terminó de leer aquellas pocas cartas que tenía en sus manos se levantó con parsimonia, cerrando sus ojos. Caminó con pesadez y arrugando apenas un poco las cartas comenzó a guardarlas.
Ella...ella iba a casarse realmente, ella iba a formar una familia, lejos de toda esta mierda.
Ella realmente sacrificó una buena vida, ¿por qué?
No tuvo más tiempo para pensar (y pensar le daba escozor), chasqueó la lengua mientras las voces de Erwin y Hanji reclamaban su presencia.
Una vez se alejó del cuerpo de su ex-subordinada pudo darse cuenta de lo grande que al final era su pequeño dormitorio y de que ya no sentía el olor a jazmines que solía percibir.
Ahora sólo olía a humedad y polvo, y aquella fue una de las pocas veces que no tuvo deseos de limpiar.
.
Notas de la Autora:
No sé si podré participar en los siguientes #RivetraWeek, ya que ando ocupada en esta semana, sino...edito el #RivetraWeek 2018 y que sean serios de drabbles/one-shots sin sentido (?)
