Disclaimer: Harry Potter le pertenece a J. K. Rowling. Yo no recibo dinero por escribir en Wattpad fanfics con sus personajes (aún).

N/A: Quería ocuparme en algo y encontré la lista… Encontré con qué matar mi cerebro. La lista de palabras/prompts es la del Fictober de Motín Fanficker. De modo que casi la mitad del crédito les pertenece. La otra mitad a mi insomnio.


1 - Delirio. (493 palabras)

Hermione peina sus encrespados cabellos hacia atrás con nerviosismo, sus dedos delgados temblorosos en ansiedad que no le pertenece, proyectando el malestar de su moreno amigo en sus movimientos de poca paciencia, sin saber cómo podrían reaccionar los dos hombres en aquella pequeña y hogareña sala.

Harry se remueve, incómodo por sí mismo y por los movimientos impacientes de Hermione, con sus ojos verdes detrás de las gafas vagando una y otra vez desde la alfombra tejida hasta la sombra de rubor molesto bajo sus pecas, y ambos amigos esperan la respuesta de Ron. Es claro que Hermione lo ha sabido desde antes, desde hacía varias semanas atrás. Los signos eran obvios viera por donde viera, las miradas que se compartían en los pasillos, las sonrisitas disimuladas detrás de las tazas de té de hierbas, el buscarse mucho más a menudo que de costumbre, y peleando mucho menos de lo que todos acostumbraban a verlos…

A Hermione no le ha parecido raro, en lo absoluto. Pero Ron Weasley es Ron Weasley, y Harry espera impaciente su respuesta haciendo temblar su pierna, su rodilla huesuda asomándose por el agujero deshilachado del pantalón.

Ron parece encontrar algo más que confusión en su mente. Su rostro es una oda a la tragicomedia, y no se distingue si está a punto de echar a reír o echar a llorar. Harry teme que lo juzgue, que lo odie, teme con todas sus fuerzas que Ron decida abandonarlo como tantas veces antes. Sólo espera, y muy dentro de su alma anhela, que Ronald no se deje llevar por sus prejuicios antes de hablar, porque no sabe si esta vez y por este motivo será capaz de perdonárselo.

—Esto… es un poco… ¿Como un delirio? No lo creo… —los labios resecos de su amigo se abren, dudosos, balbuceos y preguntas sin sentido mientras Harry lo observa. Nunca ha visto sus ojos azules tan desconocidos, y nunca ha sentido tantas ganas de golpearlo como en ese momento.

—¿Necesitas que te lo repita? —siente sus manos temblar—. Ron, estoy embarazado, y es obvio que es de Draco.

Ron inhala y exhala. Lo siguiente que escapa de sus labios consigue que Hermione suelte una carcajada histérica por la tensión contenida y Harry sonría como si hubiera sido el blanco de un hechicero de felicidad.

—Sí tío lo sé, ¿Pero que al menos el hurón te propuso matrimonio o algo así? Vamos Harry, ya llevan dos años juntos, ¿No sería lo correcto ahora que le vas a dar un mini-Malfoy?

Harry deja que la sonrisa se transforme en carcajada y se lanza a abrazar a Ron. Revuelve sus cabellos y deja que su amigo le palmee la espalda en alegría y apoyo. Su pelirrojo amigo ya no es el mismo que era, y su madurez está en ese abrazo afable y ese suspiro lento. Ron no habrá estado en todas, pero siempre estuvo cuando lo necesitaba, y ese momento no sería la excepción.


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