I still remember
Capítulo 1: Él
¿Cuánto tiempo ha pasado desde la primera vez que nos vimos¿20 años tal vez? NO, deben hacer sido menos. O tal vez, haya sido el dolor que no ha dejado que el tiempo cumpla su deber, y me haya dejado varado en ese lugar, en ese segundo, en tu mirada. Dos décadas han pasado desde aquel primer día en que te vi, en que sin saber nada, me sonreiste con toda esa frescura e ingenuidad, que con el tiempo nunca se borró. Pero también, con toda esa dulzura y madurez que siempre te caracterizó.
"Libro Reglamentario de Hechizos I". Eso te encontrabas leyendo distraída en una calle de Londres, cuando chocamos. Lo llevabas camuflado con la tapa de otro libro muggle, para no llamar la atención de ninguna persona, y así poder estudiar mientras hacias compras. Recuerdo que eso me dijiste, y que comenté que me parecía muy inteligente de tu parte. Te llamó la atención que hubiese un mago por allí, y te notaba muy emocionada con la idea de hablar con otra persona que supiese "el secreto". No pude irme, jamás he podido separarme de ti. Hablamos largo rato, me contaste sobre tu maravillosa madre, tu talentoso padre artista, tu tonta hermana que nada entendía, sobre ti, y cómo llegaste a recibir la carta que cambió tu vida. La lechuza, los gritos de Petunia, del susto de tu madre desde la cocina, de los libros, de la vicedirectora que deseabas que no fuese como la de tu escuela muggle. Y de luego contarme tus 11 años de vida, recordaste no haberme mencionado tu nombre. Nunca me importó saber el nombre de nadie, porque nunca nadie me parecio lo suficientemente especial como para recordar. Pero luego de todo tu monólogo, que escuché mas encantado que si hubiese sido yo hablando con cualquiera de mis vasallos, recordar tu nombre junto a todo ese hermoso momento que pasé, era lo que más deseaba. Sonreíste por lo tonta que habías actuado, y me pediste disculpas por ocupar mi tiempo, y me dijiste, con esperanzas de que no fuese cierto, que seguramente tendría otras cosas que hacer que escucharte decir chiquilinadas, y que yo ya había pasado por todo eso. Recuerdo haber sonreído, por primera vez en mucho tiempo y sin ningun dejo de ironía, que no creía haber escuchado ninguna chiquilanada, y que era normal que uno se emocionara por estudiar en Hogwarts en su primer año, y enterarse que tenía algo mas dentro suyo. Mi respuesta te complació, y me extendiste tu mano. "Lilian Evans¿y usted?". "Vold-..Tom Riddle, mucho gusto". Y te extendí mi mano. No pude decirte quién era. Nunca me avergonzé de mi poder, pero por alguna razón, no podía decirte. Estabas por entrar en Hogwarts, e ibas a enterarte de todas las cosas que había hecho. Ibas a odiarme, como todos. Quería que ese momento nunca se acabara, y quería aún más no ser quien era. Eramos tan diferentes...yo tenía la edad para ser tu padre, pero pasando de ese problema, yo iba a ser probablemente lo peor que conocieses en tu vida. Hablamos un poco más, y me dijiste que debías irte. Casi muero en el instante en que me dijiste "Adios". ¿Nunca más volveremos a vernos?. No, no podía preguntarte aquello. Yo era el Gran Lord Voldemort...un mago oscuro en ascenso. Y tu Lily Evans. La pequeña, que apesar de ser de familia muggle, tenías la sangre y el alma más pura que he conocido.
Te diste la vuelta y te retiraste. Cuando estaba por hacer lo mismo, volviste corriendo. "Sr. Riddle! Cree que lo volveré a ver algún día? Usted es el primer mago que conozco, y me agradó hablar con usted..tal vez.."
Durante los próximos tres años, mi gente y yo no hicimos ningún movimiento brusco. Todo bajo sombras, muy bien escondido. El Ministerio estaba volviéndose loco buscándome. Desastres, matanzas, robo de archivos. Todo eso era reconfortante, ya que estaba cada vez más cerca de llegar a la cima. Y tambíen estabas tu. Durante esos tres años nos estuvimos encontrando muchas veces. La escuela te sentaba muy bien, y aún no sabias nada sobre mí, y estabas muy contenta con todo lo que veías y aprendías. Como la primera vez que nos vimos, así eran todas las veces. Parecías no perder tu frescura nunca, y estando contigo olvidaba quién era, que hacía, que debía hacer. Contigo, todos los días eran como el primero.
Un día, como cualquier otro, apareciste especialmente brillosa. Especialmente feliz. Te pregunté la razón de tanta sonrisa, me moría de ganas de saber porque, y no tardé en saber la razón. Deseaba no haber preguntado.
- Un chico...
- Oh...un chico eh..- Mi voz me delataba, pero estabas muy feliz como para notarlo
- Si...James Potter es su nombre..¿Lo conoces?
- Potter..Potter...No..no lo creo- dije conteniendo mi melancolía
- Oh..es una lástima..es tan maravilloso Hoy se ofreció a llevarme mis libros, y he escuchado por ahi que está interesado en mi. Es encantador, inteligente, dulce..es perfecto nn
- Uhm...que interesante- dije con ironía, de la cual me arrepentí porque sentí que te dolió.
- Lo siento..debo estar ocupando tu tiempo con tonterías...Mejor hablamos en otro momento, adios- dijiste friamente.
- Adios- Lo dije, dolió, pero lo dije. No podía pedirte como la primera vez que te quedaras, no podia...ibas a lastimarme.
Luego de ese día, pasó mucho tiempo hasta que te vi. Estabas en aquella misma calle de Londres en la que te vi por primera vez. "Qué casualidad!" dijiste. No, no lo era. Desde que habías empezado tus vacaciones, había pasado la mayor parte de los dias allí, con la esperanza de verte, de encontrarnos, de que me sonrieras y me dijeras "que casualidad" y comenzáramos a hablar, como solíamos hacerlo. Me había vuelto más cruel desde el día en que nos despedimos. Solo por refugiarme del dolor que me causaba no ser James Potter, solo por no ser quien merecías, solo porque sabía de memoria que luego de ti, no iba a haber nadie más. Me causaba un dolor tremendo verte, que me sonrieras, todo en ti me lastimaba. Pero eres como la fruta del arbol prohibido. Aún más tentadora, aún más deliciosa. Me hacías mal, pero no podía dejarte...aunque perdiera todo por ti. Todo lo valía, porque con todo el poder que podría tener, tu eras lo que había estado buscando siempre.
- Cuentame, que ha sido de tu vida..-Te pregunte. Me tentabas a hacerlo, y preguntar siempre fue un error si tu eras la persona de la que se trataba
- Bueno...no t rias, pero estoy saliendo con alguien..James¿sabes?..
- Oh...T ves muy feliz, se nota que ese chico te gusta..-Si iba a tratar de borrarte de mi mente, sentirme feliz por ti, era un principio.
- Si...Creo que estoy enamorada...apenas salimos hace dos meses, pero el...es tan especial...
- Uhm..especial¿eh?- Sonreí forzadamente. Él no puede ser especial, TU eres especial. Él es solo un idiota que te alejó de mi. Que me trajo a la realidad.
- Si...Tom, creo que es hora de que te diga la verdad...
- ¿Cómo?- Dios..por favor dime que me amas a mi...que Potter es un invento tuyo...que sabes todo sobre mi, que sabes quien soy..y que me quieres aún asi.
- La última vez que nos vimos, yo creía que Potter no era más que un niñito...me molestaban todos sus actos. Era una mosca que no dejaba de revoletear a mi lado.
- ¿Y que cambió desde entonces?- Dime que me quieres a mí. Dimelo. Quiéreme. No me dejes.
- Recuerdas que peleamos..¿verdad? Bueno..No es nada..Tal vez haya sido solo de mi parte.- Estabas un poco nerviosa. Me daba gracia, ya que tu nunca te comportabas de esa manera.
- No fue una pelea. No tenía tiempo, y tu te ofendiste. ¡Mentira. Si fue una pelea. La peor de mis peleas.
- Bueno...de todas maneras...No importa
- Lily, no des más vueltas. Si me importa lo que vayas a decir, lo sabes
- Bueno bueno! Ese día estaba dispuesta a decirtelo...Te dije lo de Potter para darte celos. Quería ver como reaccionabas, y como no te importó, pensé que no era más que ilusión mía. Que nunca ibas a fijarte en mi. Iba a decirte que me gustabas..pero...todo salió mal. Y peleamos!- Estabas totalmente afligida. Oh...¿Qué hice? Lily...¿Qué hago?...Lily...Tu..- No t pongas nervioso, por favor. Te conté los hechos en pasado, como verás. Jaja, mirate..hasta estás transpirado. Ese día, cuando volví, James vino y me consoló. Nunca había notado cuán especial era hasta ese momento. Él no es para nada molesto..él no es una mosca. James es una de las personas mas tiernas que conozco..y se preocupa por mí, me quiere. Cuando ví que no tendría oportunidades contigo, decidí darle una oportunidad a James. Asi que por favor, no te pongas nervioso por mi. Yo lo superé, y no quiero que cuando nos veamos, las cosas cambien y dejen de ser como lo eran.
- Lily...-No podría decir nada. ¿Qué había para decir? Me quisite, dejaste de hacerlo. Me cambiaste. ¿Y todo por qué? Por mi culpa. Nunca creí poder odiarme tanto, pero lo hacía. ¿Por qué no te dije la verdad¿Por qué no te abrace y te rogué que no salieras con Potter? Claro, era Lord Voldemort, jamás podría hacer eso.
- No pretendo que digas nada, enserio...Solo quiero decirte que se que debo ser solo una niña para tí, pero que para mí tu has sido como un hermano...un padre. Me has enseñado tantas cosas y me has escuchado como nadie. Te quiero, realmente. Te quiero muchísimo. Apesar de que ya no me atrae salir contigo xP Asi que no te preocupes, mis planes de dormir contigo se acabaron! Jajaja- Es una lástima..¡¿Pero qué estoy pensando! Encima de hechizero oscuro soy un pervertido abusador de menores? Dios...me estoy enfermando estando a tu lado.
- Lily..creo que esta es la última vez que nos veremos..
- Co-m-mo? Pero...ya te he dicho que no me siento atraída...no t enojes, por favor...Yo solo quería..
- Lo se..pero no me voy por tu comentario, pequeña..Me voy por mi trabajo. Me han dado una propuesta para trabajar en Francia, con el Ministerio..Supongo que es hora de decirnos adios, definitivamente.
- Pe-ero...¿Por qué? Si quieres, aún tendremos oportunidad de vernos¿no crees?- La ilusión en tu voz hacía que todo eso fuese una horrible agonía. Tuve que terminarlo allí.
- No..Lily...iré a vivir allí¿sabes?. Londres me trae malos recuerdos, e iré a empezar una nueva vida en Francia...Si nos volvemos a ver, es porque tu irás allí..por que..Creo que nunca volveré.
- Tom...Pero...¿Y yo?
- Tienes a Potter¿recuerdas? El te cuidará. Ahora que tienes un novio, ya no me necesitas..- Niégalo, por favor...Dime que no es así.
- Tal vez...Pero la relación que tenemos James y yo es muy diferente a la que tengo contigo...Me harás mucha falta..- No supe si sentirme contento por ser importante para ti, o sentirme afligido porque todo apuntaba a una despedida.
- ¿Por qué tanta tristeza, pequeña? Hagamos una cosa..Festejemos! Por tu relación..por mi nuevo trabajo...y por que conozca a una hermosa francesita¿eh¿Qué tal?- Pretender que todo era perfecto. Que no me dolía despedirme. Que me alegraba por nosotros. Esa fue la mejor actuación de mi vida. Aún no se como pude hacerlo..
- Trato. Pero vas a mandarme cartas y regalos¿verdad?
- Claro - Era mentira. Lo siento...te mentí otra vez. Pero...no podíamos volver a comunicarnos, era un hecho.- Bueno, Srita Evans, me retiro. Debo ir a arreglar unas cosas para el viaje. Suerte en todo...y... - No me olvides. Nunca. - Adios...
- Adios...Tom..Espera..! No t retires..no sin antes decirlo.
- ¿Qué cosa?
- Me llamaste Srita Evans...no quiero que el último trato que me des sea tan frío...Tom...por favor...
- Mi pequeña...- Nunca entenderás el dolor que me causaste. No tendrías que haber dicho nada. Me tendrías que haber dejado ir. Tu siempre fuiste así. Y lamentablemente, por eso te quería.
Lo siguiente fue confuso. Corriste, lloraste y me abrazaste. "Te quiero..te quiero mucho". Esa fue mi sentencia. No se si había sido el peso de las palabras, los sollozos entrecortados, las lágrimas, o todo eso lo que me afectó. Pero te abrazé. Y por más que me contuve, me quebré. Siempre tuviste ese efecto en mi¿sabes?. Lograste que sacara por lo menos 10 años. Me sentí libre, liviano. Feliz.
5 años despues
"Mortífagos al Poder". Es fue el titular de ese día. Me daba gracia...Creía que todos debían mantener la calma, y después de todo, eran los magos mismos que sembraban su propio pánico.
Dumbledore se estaba metiendo conmigo. Te protegía a tí y a James. Insolente. No sabes la angustia que se apoderó de mí cuando presentí que sabias todo, y al parecer, me temías. Estaba claro, lo sabias. ¿Desde cuándo?. Luego de nuestra separación, seguramente. Querias protegerte. O tal vez James quiso protegerte. ¿Cómo se atreve a pensar que cabría la mínima posibilidad de que te pudiese lastimar? Él jamás te quiso como yo, pero él si pudo tenerte. ¿Y ese inútil pensaba que iba a matarte¡Cómo se atreve!. Había soportado suficiente...5 años...¿Durante ese tiempo qué sucedió? Realmente esperaba que él no te cambiara. Tu nunca fuiste como él...pero nunca se sabe. Te creías enamorada.
Con el tiempo, me enteré de cosas aún peores. Tenían un guardían. Seguramente era ese tal Sirius Black. Mis hombres averiguaron todo sobre ti...lo siento, pero tenía que saber como estabas. Ese tal Black era el mejor amigo de tu...esposo. Y según parece, no es nada tonto. Demasiado predecible. Él no es el guardían. Estaba el otro tal Lupin, pero ninguno de ellos era. Tenía un presentimiento. Había uno debilucho..un tal Pette...No recuerdo su apellido ahora. Una rata miedosa, según lo vi en ese momento. Lo amenazé, y me contó todo. Me dijo que tu les habías contado de nuestra "relación", y que Potter temía que me acercara a ti y a tu familia, y fue por eso que tuviste que esconderte. Lo sabía, tu no me tenías miedo. Solo era ese Potter.
Lo que te contaré ahora, es la parte de la historia que tu nunca supiste. El día en que nuestra historia cambió, y nunca más pudimos remendar.
Pude averiguar el lugar en donde estaban. Mi mente se blokeó ese día. No sabía nada, no entendía nada. No queria entender. Me acerqué a la ventana, y Potter me vió. Te dijo algo al oído, sonreíste y te retiraste al otro cuarto. La mirada de tu esposo era fría, calculadora. Pero lo se...él tenía miedo. Fue muy tonto de su parte querer hacerse el heroe. Jamás habría pasado lo que pasó si él no hubiese hecho nada. Se preparó, quiso discutir conmigo. No iba a mostrarme debil, lo sabes. Pero tampoco quise matarlo...solo quería ver como estabas. Me dijo que me fuera, que si te quería, que me retirara. Lo provoqué, lo se, pero Potter no tenía ningún derecho a darme ninguna recomendación.
Flash Back de la escena
- Lily...
- No digas nada! Se lo que sientes por ella...Cuando se despidieron, ese día, hace 5 años...Pude verlo...Nunca te vi tan sentimental, VOLDEMORT...¿Asi que Tom Riddle, eh? Ella ya lo sabía¿cuánto querías esperar antes de que viese la verdad? No mereces ni haber conocido a alguien como Lily...El hecho de haberlo hecho, ya tendría que hacerte un ser muy afortunado...¿Por qué vienes a buscarla ahora? Ella es feliz...y tu eres una rata inmunda que nunca la mereció...Déjala en paz...Si quieres la sangre de alguien, que sea la mía...Pero que quede claro, que voy a luchar antes de que toques un pelo de mi Lily..
- Avada Kedabra!- Estaba enojado, no lo voy a negar. Pero no por que Potter fue siempre un insolente, sino por que tenía razón. Que derecho tenía de venir a buscarte...si eras feliz...No podía soportarlo. La verdad. No podía. Torturarlo fue como torturarme. Mientras él más sufría, mejor me sentía conmigo. Y cuando todo acabó, cuando ví su cuerpo sin vida...el alma dejó un vació, que superó al sentimiento anterior. Podía haberme ido, podía haber acabo con todo y comportarme como lo que había sido los últimos años: Un mago oscuro que mataba sin pestañar, sin valores, sin culpa. Sin nada. Pero no pude, quería verte. Mientras mi instinto me decía que me fuera, mi corazón rogaba que acabara con todo y te fuese a buscar. ¿Pero como podría?. "Hola, he matado a tu esposo, pero te amo." Eso habría sido muy gracioso. Claro, si no fuese real.
Demasiado tarde. Me viste. Saliste de tu casa, con un bebe en las manos y me viste. Sentí que todo daba vueltas. Me mirabas a mi y al cuerpo de Potter. Y yo te miraba a ti, a Potter y al que parecía ser tu hijo. ¿Qué hice? Arruiné tu vida..me prometí que jamás iba a volver. Me traicioné a mí, y te lastimé a ti. Tenias tu vida hecha. Un hijo...Dios...Eras feliz. Y yo...yo arruiné todo.
Lo siguiente superó mis espectativas. ¿Qué podría ser peor: Tu, la mujer de mi vida llorando y abrazando el cuerpo de tu esposo, quien yo maté; o nuevamente tu, corriendo y alejándote de mi por que me temías¿Hay diferencia alguna? Me odiabas. Lo entendí.
Mi primera sensación fue tristeza. Comprensible. La siguiente fue totalmente irracional y estúpida: Rencor. "Pensé que me ibas a querer, aún sabiendo quién era". Eso pensé. Era tonto, lo se. ¿Cómo podrías querer a alguien quien arruinó tu vida, y que posiblemente habría matado a muchos de tus amigos¿Cómo podrías querer a alguien tan desquiciado como yo?. Para muchos, yo era el gran mago oscuro. El mejor de todos los tiempos.Pero para la gran mayoría era una rata, como dijo Potter. Prefería la primera opción, ya que eso era lo que buscaba. Pero..ante ti, nada de eso tenía sentido. No lo quería. Mis logros no eran tan maravillosos ante tus ojos. Para tí, hasta hace 5 años, era Tom. Un mago conocedor, dulce y considerado. Un amigo, hermano y hasta padre. Tu primer amor. Y en ese momento, seguramente habrías deseado nunca haberme conocido. Y yo también lo desee. No por mi, por que de nosotros nada me arrepiento. Sino por ti, porque el miedo en tu mirada, y la manera sobreprotectora en que abrazaste a tu hijo te delataba. "No...a Harry no, por favor!". Lily...mi pequeña...Jamás te haría daño, y tampoco a alguien que salió de tus entrañas. Pero como podría prometerte eso, si ya no sabía lo que hacía. Tal vez fue la soledad, la angustia, el fresco aroma que te rodea siempre y me hiso recordar tiempos hermosos. Pero una extraña sensación me rodeo. Y el resto, ya lo sabes.
Seguramente tienes curiosidad por saber que me sucedió. Un niño de 1 año es incapaz de matar a un poderoso mago. Y no, no lo es. Pero un poderoso mago es capaz de autodestruirse. Cuando te vi...cuando dejaste este mundo...y todos los sentidos me aseguraron que me abandonaste para siempre..por mi culpa. Cuando entendí que nunca más iba a poder verte venir corriendo, escuchar tus relatos fantásticos sobre la vida cotidiana, sentir tu risa y tu angustia. Cuando la pequeña Lily Evans ya no existía mas que en mi recuerdo. Todo se había acabado. Estuve por hacer algo extremo, pero algo me llamó la atención. Tu hijo. Esa maravillosa criatura que tenía aun algo tuyo. Pero luego recordé algo...Para que yo muriera, él también tendría que hacerlo. Todo fue nubloso. Intenté asesinarlo, pero el hechizo volvió hacia mi. Creo que fue una acto incosiente.
Nada justifica lo que hice. No sabes cuanto lamento el dolor que te causé. Desde ese día, no he dormido bien. Te recuerdo. Recuerdo todo sobre ti.
Si pudiese, habría regresado desde ese día 5 años atrás. A nuestra despedida. En la cual no sabias nada, y me abrazaste diciéndome que me querías mucho. Te amé demasiado, lo confieso. ¿Recuerdas que me pediste que enviara una carta?. Nunca la recibirás, pero almenos esta promesa quería cumplirla.
Me extendiste tu mano. "Lilian Evans¿y usted?". "Tom Riddle, mucho gusto."
