Los personajes pertenecen a Stephenie Meyer. La trama es mía.

Esto es un especial para Little Hope. Gracias por tu apoyo y amistad.


SENTIMIENTOS Bella POV

Todos nos quedamos quietos por una milésima de segundo, contemplando cómo mi hija y Amún forcejeaban en el suelo del jardín, de repente - y de manera sorpresiva, incluso para un vampiro - todos entramos en acción. Los Cullen, junto con los Denali, apartamos a Renesmée de Amún, el cual no dejaba de lanzar golpes a diestra y siniestra con intención de alcanzar a mi hija, quien tenía una fuerza enorme, incluso para un vampiro.

Arrastramos, no había otra palabra para describir lo que hicimos, a Nessie hasta la sala de la casa grande. En cuanto nos aseguramos de que no iba a salir corriendo para seguir atacando a Amún, la volteamos a ver de manera reprobatoria o enojada con una excepción: yo.

El que desató la tensión de cada persona en la habtación fue mi esposo, como hablando por todos.

- Renesmée, ¿se puede saber qué es lo que intentabas hacer? - le reclamó mi marido en voz de grito. - La verdad, no fue una idea brillante atacar a un vampiro siglos mayor que tú. - Mi hija nos contempló con el seño fruncido, un gesto que la hacía parecerse enormemente a su padre.

- Nos estaba insultando, me sorprende que no me apoyaran. - Lo que a mí me sorprendía es que hilara respuestas con tanto sentido y respeto en tales situaciones.

Me arrodillé frente a ella y le toqué la frente y luego el cuello, en un gesto tan antiguo como el hombre para expresar el buscar signos de calentura o algún otro factor que afecte los procesos cerebrales, pero presentándolo en forma de ironía*.

- ¿Estás segura de que te sientes bien? - le susurré en tono cariñoso con un toque de amor, deslizando mi mano para acariciarle el cuello. - Amún es mucho mayor que tú, por lo que le debes respeto - comencé en tono comprensivo sin que pareciera sermón - , eso sin contar que es amigo de la familia. Y lo es no por lo que salga de sus labios, sino por la persona que sabemos que él es. Es un momento de tensión, todos decimos cosas de las que nos arrepentimos luego; si él piensa de verdad lo que dijo, eso significa que nosotros estamos fallando como amigos. - A este grado, todos los vampiros allí presentes (incluyendo a Amún) nos miraban extrañados. No les presté atención, ya que mi pequeña necesitaba una explicación y no un regaño. - Y, aunque no fuera un amigo, - dije, cambiando el tono a bromista, - fue muy irresponsable atacar a alguien con mucha más experiencia en combates, espera unos años y verás. - Como ella se relajó, sentí que era el momento justo para decir lo necesario sin molestar a nadie, pero haciendo entender a todos. - Solo quiero que te disculpes, cielo, para que no existan rencores, ¿de acuerdo? - mi pequeña (no tan pequeña) solo asintió y salió de la habitación, no sin antes disculparse con Amún en un tono formal y sincero.

Sabía que había hecho lo correcto al darle un consejo, una explicación con bromas a un regaño sin saber las razones de mi niña.

En cuanto cayó la noche, Nessie y Jacob se fueron a dormir a la cabaña. Yo subí a nuestra habitación en la casa grande, había sido un día cansado, en especial por el peso de las miradas después de mi charla con Renesmée.

Edward me alcanzó cuando yo estaba contemplando el bosuque desde el gran ventanal, con gesto ausente. No sé por qué, pero él se quedó en la puerta, desde donde comenzó a hablar.

- ¿Cómo se te ocurrió hablarle así a la niña? Creí que la regañarías - dijo con gesto maravillado.

- Sí, yo... sólo recordé algo... de hace muchos años - susurré melancólica.

- ¿Qué sucedió? - preguntó con curiosidad.

- Hubo un problema en el colegio en donde iba, fue antes de que yo cumpliera diez años, tal vez tenía nueve u ocho, no lo recuerdo. Dos niñas hicieron de las suyas provocando a la directora, el problema fue que las tres éramos de nuevo ingreso y teníamos voces parecidas. Para no meterse en problemas, me acusaron a mí de la travesura, yo le dije a la profesora Novak la verdad, que yo no era la culpable; pero no me creyó, mandaron traer a Renée, yo creí que mi madre me escucharía, pero ese día estana enojada porque teníamos una nueva deuda con el banco, y dijo que le estaba haciendo perder el tiempo.

"Llegó a preguntar qué hice, pedir disculpas a la profesora y a llevarme a casa con un reporte de mala conducta. En lugar de pedirme una explicación, me regañó, me dió un discurso sobre autoridad - tomé aire, intentando evitar los dolorosos recuerdos - y una bofetada. Desde ahí aprendí a no jugar con las personas, no importa la relación que tengas con ellas. - Suspiré. - Pero eso no es lo que me preguntaste; se me ocurrió porque eso es lo que me habría gustado que hiciera Renée. - Imaginé que no era lo que él se imaginaba, entonces continúe hablando, más para mí misma que para él: - Recuerdo que las niñas se disculparon conmigo al día siguiente, cuando cieron mi rostro, - me volví y le dije: - Quedé con un moretón en todo esto, - y le mostré le lado derecho de la cara. Volví a contemplar el bosque, hasta que recordé por qué quería hablar con él.

"Estoy algo sedienta - no había cazado hacía tres semanas - ¿me acompañas?

Sólo recibí un rápido asentimiento. Cuando pasé por la puerta, Edward me rodeó los hombro sen forma protectora, y así salimos de la casa hasta que comenzamos a correr.

Terminé más que satistecha, cuando me dicponía a regresar, mi marido me tomó del brazo y me atrajo hacia sí en un abrazo.

- Lo siento - parecía con ganas de llorar - nunca imaginé que hubieras vivido algo así.

- No te preocupes, ya no importa - me soltó y me tomó de la mano. - Entonces, ¿qué vamos a hacer con el asunto de Renesmée?

Su rostro volvió a ser el de siempre.

- No lo sé, tu discurso surtió efecto, pero estoy segura de que no lo habría hecho por algo que se le ocurriera, tiene que haber sido por lo que le dijo alguien, alguine capaz de golpear al momento de enojarse. - Me lanzó una mirada cargada de significado.

- ¿Jacob? - pregunté, recordando su carácter al hablar de Sam cuando me dejó. - ¿Cómo podemos combatirlo?

- No lo sé, pero sí sé que me voy a asegurar de que no esté a 200 metros a la redonda de mi hija.

- Las dos manadas nos ayudarán, la única manera es que Jake no salga de la reserva y que Renesmée no vaya a ninguna parte que no sea a la cabaña y la casa grande, y que el trayectó lo haga siempre acompañada.

- Esa es buena idea. Ven, vamos, estás agotada.

No lo decía en sentido literal, pero era cierto.

Todos me miraron cuando entramos. Pero las miradas que más me pesaron fueron las de Esme y Carlisle, que se habían visto particularmente afectados por mi relato.

Les dediqué una sonrisa para calmarlos.

Me aseguraría de que Renesmée no pasara por los mismos sentimientos que yo había afrontado.


* En mi país decimos de broma ¿Te sientes bien? si alguien dice o hace algo ridículo.


Seguro dirán: ¿A esta qué le pasa, con tantas historias que le falta terminar y nos sale con una nueva?

Pero sí, esta historia es basada en un hecho real que me sucedió a mi en la primaria, y si leen la "Guía oficial de la saga Crepúsculo" verán que Renée er auna madre muy irresponsable.

No estoy segura de cuántos caps van a ser, pero me lo pueden decir con sus reviews.

Little Hope: Me ha ayudado mucho tu compañía, así que decidí hacer esta fic en tu honor.

A tu salud.

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