Davis camino por el bosque mientras observaba al cielo por entre los árboles. La batalla contra MaloMyotismon había dejado al Digimundo en un estado de somnolencia casi abrumador, a su parecer. Sus amigos habían decidido ir al Digimundo a ayudar en la reparación de los daños que la Batalla Final había generado, incluso los mayores se habían presentado para darles una mano, pero mientras caminaban por el bosque él decidió dar un paseo por su propia cuenta y, como era de esperarse, acabo perdiéndose –bueno, lo hice otra vez- suspiro resignadamente –los chicos me matarán, eso seguro-. El jovencito caminó hasta un pequeño lago casi sin darse cuenta y se detuvo a ver su reflejo. Allí estaba la persona más torpe que él recordaba conocer –hola, amigo- saludo desganadamente mientras una mirada triste surcaba su rostro -¿Qué piensas hacer ahora? ¿Qué camino tomarás?

-¿te refieres al bosque o a la vida?- pregunto una voz profunda detrás de él, Davis giro para toparse con un árbol digimon que lo miraba fijo. Tenía un bigote hecho de hojas sobre sus gruesos labios de madera y dos hoyos negros con pupilas resplandecientes doradas que le daban el aspecto de un anciano sabio

-¿Qué quieres decir? Espera, ¿y quién eres?

-mi nombre es Cherrymon- sonrió el digimon –y me refiero a que, en la vida, hay muchos caminos por los cuales una persona puede ir. Me pregunto qué camino tomaras tú- Davis observo atentamente al digimon antes de hablar de nuevo

-¿eres un digimon?- Cherrymon rio un poco como respuesta, lo que ocasiono que Davis se sonrojara y mirara en otra dirección –por supuesto que es un digimon, que pregunta tan tonta. Tonto- se dio un golpe en la cabeza

-¿Quién te ha dicho que eres tonto?- pregunto Cherrymon

-casi todo el mundo- suspiro Davis

-oh, vamos- dijo Cherrymon –seguramente tus amigos no te llaman así

-¿bromeas? ¡Ellos son quienes más me dicen de esa manera! Yolei solo sabe gritarme y regañarme cada vez que hago algo. Los mayores creen que soy el niño más inmaduro y torpe. Principalmente Matt y apuesto a que habla bastante seguido de eso con su novia, Sora; Cody es más pequeño que yo y siempre me ve y trata como si fuera tonto. Mimí nunca me ha dicho que sea tonto pero su actitud cada vez que me ve dice eso y más. Kari, TK y Ken, bueno siempre se ríen de todos los comentarios despectivos que hace Yolei o de las indirectas de Cody. Aunque no lo digan, yo sé que todos ellos piensan que soy un tonto

-¿lo dices en serio?- pregunto Cherrymon mientras Davis miraba al piso – ¿y esas personas tan malas son a los que llamas tus amigos?

El grupo de los Niños Elegidos se había movido por el bosque como si de un enjambre se tratara. Yolei y Mimí habían charlado todo el tiempo sobre una cosa y los demás solo habían sabido respaldar sus comentarios porque, bueno, los hechos eran los hechos -¡ese tonto no debió separarse de nosotros!- grito Yolei exasperada

-¡¿cuán tonto puede llegar a ser para no saber que debía mantenerse junto a nosotros?!- gruño Mimí. La niña mayor no lo admitiría, pero se sentía terriblemente angustiada al pensar que uno de los niños más jóvenes estaba perdido y solo en ese lugar sin siquiera su digimon para defenderlo

-si se iba a separar, por lo menos se hubiera llevado a Veemon- gruño Matt, en verdad quería creer que Davis estaba a salvo, después de todo Myotismon ya estaba muerto, pero el Digimundo era un lugar peligroso con o sin Myotismon

-espero que este bien- dijo Veemon

-¡allí está!- grito Izzy de pronto señalando al frente. Todas las miradas se dirigieron al frente para descubrir a Davis parado delante de un árbol digimon. El corazón de Matt se detuvo un segundo al ver a aquel árbol parlante

-¡Cherrymon!- exclamo Gabumon

-¿quién?- pregunto Kari

-hace tres años ese digimon engaño a Matt para que se volteara en contra de sus amigos y tratara de matarlos- explico Gabumon. Todos dirigieron sus miradas al frente para ver como Davis susurraba algo y luego bajaba la mirada, una atmósfera de absoluta tristeza y desolación manaba de su persona –creo…que quiere hacerle lo mismo a Davis

-no si yo lo evito- dijo Tai y comenzó a correr hacia el lugar, mientras corría pudo ver como Davis musitaba algo, le hablaba al árbol mientras unas lágrimas brillantes caían al suelo. Esto dejo a Tai paralizado. De pronto cayó sobre sus rodillas y Tai trago duro, Cherrymon extendió una de sus ramas y la coloco en la barbilla de Davis para alzarle la cabeza y que lo mirara. Una siniestra sonrisa se plasmaba en su cara.

De pronto un destello paso a toda velocidad junto a Tai y el joven reacciono finalmente para ver como Matt se acercaba a toda marcha hacia Davis, un solo pensamiento se había anidado en la mente del joven rubio Tenia que apartar a Cherrymon de Davis.

-eso hago- fue la respuesta que musito Davis a Cherrymon antes de bajar la mirada –pero muy en el fondo siempre he sospechado que ellos no me quieren. Me toleran porque soy un elegido también

-vaya, eso debe doler- dijo Cherrymon

-dímelo a mí, y ahora que nuestra misión termino, ¿Qué voy a hacer?- Davis bajo la mirada y dejo caer sus lagrimas –mi compañero digimon se quedará aquí con los de su especie, mis amigos y yo iremos a la Tierra y…ellos…ellos…- Davis cayó al suelo de rodillas y comenzó a llorar –ellos van a olvidarme

-oh, no digas eso- dijo Cherrymon mientras usaba una de sus ramas para alzar la cabeza del jovencito mientras le sonreía siniestramente –tal vez lo que necesitas no es consuelo, sino algo más

-¿cómo qué?- pregunto Davis con los ojos llorosos

-¡Davis!- repentinamente Matt llegó donde él estaba y lo tomó bruscamente del brazo para alejarlo del digimon. Cherrymon le dirigió una mirada amenazante mientras el mayor arrastraba al pequeño lejos del ente -¿Qué demonios crees que haces?- le escupió Matt zarandeándolo de los hombros

-yo…

-miserable…- ambos se giraron al oír aquella voz llena de rabia y se toparon con Tai completamente hecho una furia, el joven miraba directo al árbol digimon y tenia los puños apretados tan fuertemente que incluso había empezado a sangrar un poco –si le has hecho daño…- el joven hablaba con un veneno y una furia palpables mientras se acercaba al árbol digimon. De pronto Matt pareció comprender y miro a Davis sorprendido a la par de asustado

-¿te lastimo?

-¡claro que lo lastimo!- grito Tai asustando a Davis, pero Matt no lo soltó, en vez de eso le tomo con más fuerza y le forzó a mirarlo pidiéndole con la mirada que le respondiera -¡mira que está llorando!

-Matt…- balbuceo Davis mientras parpadeaba sorprendido -¿cómo es…?- trago saliva y volvió a intentarlo -¿Cómo es que están aquí?

-bueno, te buscábamos- balbuceo Matt como respuesta

-oh, ya veo- respondió Davis apartándose de Matt y secándose los ojos –perdonen que me separara

-no importa- respondió Matt y palpó la cabeza de Davis con cuidado –nos preocupaste

-los que llamas tus amigos- dijo Cherrymon –han venido por ti, ¿no te alegra?

-¡no te atrevas a dirigirle la palabra!- grito Tai, Kari se acerco a Davis mientras observaba a su hermano

-Davis…- llamo la chica y él giro la cabeza para verla mientras Matt le soltaba -¿estás bien?

-¿Dónde rayos estabas?- pegunto Yolei –estabas haciéndote el tonto, ¿verdad?

-no tiene necesidad de hacerlo, él es tonto- dijo Mimí falsamente ofendida. Cherrymon esbozó una sonrisa siniestra al ver como Davis giraba la cabeza y respiraba hondo para serenarse

-Davis- llamo el árbol digimon y el niño lo miró –si necesitas hablar con alguien, siempre estoy aquí

-él no te necesita- siseó Tai, Davis abrió los ojos sorprendido antes de mirar al digimon

-sería agradable tener alguien con quien charlar- dijo Davis y sus amigos lo miraron

-Davis, créeme que no es buena idea- le dijo Joe

-para mí lo es- respondió el niño del Valor y la Amistad –él habla conmigo sin llamarme tonto a cada minuto- escupió con todo el veneno que pudo reunir en su voz, sus amigos se sorprendieron al escuchar aquello

-Davis…- llamo Tai

-vendré a verte después- le dijo el jovencito a Cherrymon y el gran árbol asintió

-Davis, él no es tu amigo- le dijo Tai

-¿y tú sí?- pregunto Davis, Tai le miró sorprendido antes de responder

-¿Qué se supone que significa eso?

-te estoy preguntando si eres mi amigo

-¡por supuesto que lo soy!

-¿en serio? Entonces dime, ¿Qué problema tengo en casa actualmente?- Tai se quedo paralizado al oír eso, Davis dirigió su mirada a los otros antes de continuar -¿alguno lo sabe?- nadie respondió –por supuesto que no y eso es porque no les importa. No hablan conmigo más que del Digimundo y, cuando lo hacen, siempre soy el tonto del que se ríen

-¡Davis!- espeto Sora –eso no es verdad

-¿no?- rio Davis -¿Qué fue lo primero que hicieron al ver que no estaba? Adivinaré, y corrígeme si estoy mal, dijeron: ¿Dónde está Davis? Respuesta: ¡ese TONTO se separó! Y lo dijo Yolei, ¿no es así? ¿Quién la respaldo? ¿Mimí? ¿Palmon? ¿Todos los demás?- la joven se quedo callada mientras miraba al piso, eso fue justo lo que sucedió

-nos preocupamos- musito Kari

-no mientas, Kamiya- escupió Davis y Kari lo miro impactada –se fastidiaron porque tenían que buscarme. No se preocuparon por mí, se preocuparon por el tiempo que perderían…

-¡ya basta!- grito Matt –Davis, lo que Cherrymon te haya dicho no es verdad

-él no me dijo nada, él escuchó lo que tenía que decir, lo que tú no haces- acusó Davis mirando fijo a Matt

-Davis…- balbuceo el rubio. Cherrymon vio la oportunidad y la aprovechó, deseaba voltear a Davis contra sus amigos y ocasionar un conflicto entre ellos ¿y qué mejor manera de hacerlo que logrando que el niño lo considerara su amigo en vez de a sus amigos? –Davis…yo…

-Davis- hablo el árbol digimon –ha sido un día largo para ti, ¿Por qué no te vas a casa y te tranquilizas? Tal vez mañana puedas hablar con tus amigos de manera neutral. Para arreglar esto- Davis le miraba fijo y los otros niños miraban a Matt expectantes, ¿no había dicho él que Cherrymon era malo? Entonces, ¿Por qué ayudaba a Davis? Finalmente el joven rubio movió la cabeza indicando negación, no comprendía lo que pasaba

-puede que tengas razón- musitó Davis –te veré después- Cherrymon sonrió aún más y decidió que debía ganarse la confianza de Davis de manera veloz y eficaz, así que decidió decirle sobre un rumor que circulaba por la zona

-Davis, antes de que te vayas debes saber, hay un intruso en esta zona, si decides separarte de tus amigos debes cuidarte de él, ¿entiendes?

-¿un intruso?- pregunto Yolei

-así es, hay una criatura que no debería estar aquí vagando por el lugar, tengan cuidado

-comprendo- dijo Davis y comenzó a alejarse –gracias, Cherrymon. Nos vemos- los otros niños miraron a Davis caminar antes de ir tras él pero, a pesar de saber que iban detrás suyo, él no aminoró la marcha.

-¿Davis?- llamo Kari, él respondió sin mirarla

-¿qué?

-¿de verdad no crees que seamos…?

-creo que si no fuera un niño elegido no sabrías ni mi nombre. Punto- sentenció él justo en el momento en que llegaron al televisor para marcharse. Mientras sacaba su digivice TK se adelanto y lo miro a los ojos

-¿realmente piensas eso?- desafió el rubio, Davis miro al chico frente a él directo a los ojos antes de responder, TK tuvo que retroceder al reconocer una mezcla de emociones desagradables dentro de sus ojos: ira, dolor, miedo, soledad, traición

-el único de ustedes al que considero mi amigo es Veemon, es el único al que me molesta dejar atrás ahora que todo acabo. El resto de ustedes me harían un tremendo si… . - el veneno en su voz y el tono enfadado fueron más que suficiente para dejar ver a los niños que hablaba en serio. Con esas palabras dichas Davis abrió la puerta del Digimundo y se marcho.