South Park y sus personajes no me pertenecen, son idea intelectual de Trey Parker y Matt Stone.

No sé si bien esto puede definirse como Lime o no, pero me tomaré la libertad de definir-lo como tal, así que... disfruten


Jealousy

Un golpe seco. La palma contra el mármol blancuzco del lavamanos. Se sobresaltó y dio un respingo en su lugar agitándose inevitablemente, observó al pelinegro cabizbajo frente suyo. ¿Qué hizo para que ese se comportara así? Intentó alargar la mano para asegurarse de que estuviera bien pero el pelinegro alzó la cabeza sobresaltándolo nuevamente, tembló al sentir su penetrante mirada.

Hizo rechinar los dientes mientras observaba al menor. Gruñó inconscientemente, estaba algo alterado y furioso. Se acercó haciendo que el otro se encogiera en su lugar y cerrara los ojos con fuerza. Bufó.

-¿Y? ¿Qué le respondiste? –Ladeó la cabeza con la mirada fija en el muchacho.

-¿D-De qué? –Titubeó ante la sorpresiva pregunta abriendo ligeramente los ojos. Negó rápidamente. El pelinegro mayor alzó una ceja confundido.

-¿No qué? –mencionó irritado.

-Yo… no supe qué contestar… -bajó la mirada previniendo lo que haría el otro. El pelinegro soltó de nuevo un bufido.

-¿No le rechazaste? –El pelinegro menor negó. –Pero tampoco aceptaste… ¿o sí? –la mirada fría seguía. Volvió a negar. Gruñó.

-Stan… -nuevamente estaba irritado, más bien, nunca dejó de estarlo.

-N-No me dio tiempo de r-responder –

-Ah, claro –masculló.

-¡Es la verdad! –Alzó un poco la voz haciendo que resonara en el lugar, pero se arrepintió con solo ver la expresión en Craig. Tembló.

El pelinegro se inclinó sobre Stan mirándole intensamente, no podía evitar enojarse, pero… ¿por qué su novio últimamente estaba siendo el blanco de las declaraciones de cualquier tipo? Estaba pensando seriamente en ponerlo bajo llave en algún lugar lejos de todos estos oportunistas, oportunistas porque aprovechaban cuando él no estaba con el pelinegro menor para llevárselo por ahí y hacerle quien sabe qué cosas. Con sólo pensar en lo que podrían hacerle con lo despistado que a veces era, sintió cólera y frustración. Gruñó sobre los labios del contrario y este jadeó, sacándole una sonrisa pícara.

Pestañeó pasando la lengua por sus labios y presionó con suavidad los labios del otro sellándolos en un dulce beso, que se volvió desquiciante, abrumador, apasionado, cargado con sentimiento de su parte. Stan correspondió jadeando con urgencia y alzó los brazos rodeando con estos el cuello de su amante, acarició su cabello y lo haló al sentir la lengua de Craig en su cavidad bucal intentado encontrar su músculo para juguetear. Las manos del mayor le recorrieron lujuriosas hasta detenerse en su cintura y alzarlo sin romper el beso colocándolo sobre el lavamanos. El menor cruzó las piernas en su cintura para acercarlo, y jadeó por la cercanía. Se separaron por falta de aire con la respiración agitada y las mejillas ligeramente rosadas. El pelinegro se pasó nuevamente la lengua por los labios. Stan le miraba agitado, se mordió el labio y sonrió abrazando fuerte a Craig, sobresaltándole un poco pero haciéndolo sonreír.

-No puedes ponerte así con cada chico o chica que se me declara –le susurró al oído acariciándole el pelo con delicadeza.

Soltó un suspiro frustrado, eso lo sabía, pero no podía evitarlo, diablos.

-Lo sé –Stan rió al escucharle.

-…Te amo Craig –besó con ternura su oreja, arrancándole una tierna sonrisa al susodicho.

-Y yo a ti Stan… y yo a ti –lo apretó contra sí recargando la cabeza en su hombro dejando un beso en su cuello provocando una risita nerviosa en el otro. Era obvio que continuarían en lo que se quedaron.


Y listo, quedó bonito, algo incoherente pero está presentable(?)

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