Disclaimer: para que no me acusen de plagio o cualquier otro cosa tengo que decir que: Rurouni Kenshin y su seximente chaparro pelirrojo no me pertenece.


Quiero un Hijo

Notas de Autor:

Feliz día de San Valentín guapuras, espero que la estén pasando muy bien.

Por: Miss Bunny-Bany. [Dedicado a Rogue, Dei-chan, Suany-sama y Icecream Kuraki]

Contendrá OoC


Acto único.

아들

"Quiero un hijo"…

"Quiero un hijo"…

Ante esta "extraña" petición la joven se coloró completamente ¡¿qué era lo qué quería?! ¿Estaba soñando? ¡¿Cómo podía pedirle esto?! Sabía perfectamente que era su cumpleaños, pero ¿pedirle un hijo? ¡Esto ya era algo extremo! ¿No podía pedirle algo más… "normal"?

La mujer cambió drásticamente su expresión de sorpresa a una de molestia ¿quién se creía para pedirle semejante barbarie? Idiota. Se acercó al joven pelirrojo que aun no dejaba de sonreír ante su "petición" y le propinó un fuerte golpe en la mejilla que resonó por toda la casa.

—¡Idiota! ¡¿Sabes lo que me estás pidiendo?! —preguntó exasperada, con su cara fruncida igual a las líneas que se forman en el caluroso desierto.

—Por supuesto, sino no te lo estuviera pidiendo —Fue la simple respuesta del sujeto abofeteado frente a ella. La doncella oscureció muchísimo más la mirada logrando que el sujeto se asustara con su expresión ¿Había dicho algo malo? Que él recuerde pedir un hijo como regalo no era tan malo ¿o sí?

—P-pero… —Nuevamente el pudor invadió sus mejillas por esas "relajadas" palabras—. ¡No e-estamos casados! Yo… Simplemente no puedo —La muchacha arrugó la falda de su vestido nerviosamente, sencillamente no podía cumplir su "deseo".

—Tranquila, no ahora. Esperaré, es que… Quiero tener una familia —El joven le acarició tiernamente la mejilla de la chica.

—¡Tonto! Sabes que soy ahora tu familia ahora ¿no te conformas con eso?

—No —murmuró, levantándose y agarrando por la cintura a su prometida.

—¡S-suéltame! —Exigió, tratando inútilmente de zafarse del abrazo del hombre.

—No —La abrazó con mucha más fuerza—. Quiero un hijo —Volvió a repetir con pereza.

—Sigues con eso —suspiró resignada, era un tonto—. No podemos —Aclaró.

—Entonces quiero uno virtual."Watashi no ai".

Sí, era un completo tonto, pero Kaoru sabía perfectamente que era su querido y estúpido idiota. Eso le quedaba muy claro.

Fi n

아들