PARTE 1
Me levante muy temprano esa mañana, no es que necesite dormir muchas más, todos con 3 horas descansamos, pero no había pasado una sola que no pude seguir haciéndolo, el entusiasmo general me estaba matando. Mamá estaba preparando los últimos arreglos para nuestra fiesta de cumpleaños, de Rosalie y mía, cuando escucho que ya me había despertado y vino a felicitarme. Amó mucho a mi madre pero sus sentimientos me ahogan a veces, abrió la puerta de mi habitación de par en par, y con una cálida sonrisa me beso y abrazo fuertemente.
- Hay! Jazz, ya tienes 12 años, eres todo un hombre ¡mi hombrecito!-dijo sin soltarme. Comenzó acariciarme el rostro, siempre menciona lo parecido que soy a mi abuelo, su padre, tenía su misma mirada y facciones, además de los poderes.
Todo el mundo piensa que soy muy frío para el tipo de poderes que tengo, debería ser más sensible según ellos, pero saber los sentimientos de los demás causa lo contrario, es la única forma de soportarlo, mi familia entendía esto; mi mamá paso esa experiencia con su padre, ella sabía que aunque no lo demostrara él la amaba, y lo mismo pasa conmigo. Ella jamás escondía sus sentimientos hacia sus hijos, hacia su familia, me decía que mientras uno de los dos lo demostrara era más que suficiente.
-Cada vez que te veo estas más rubio al igual que Rose- se rió.
-Son los genes
- Bueno, bueno….dime que te gustaría hacer antes de la fiesta?- ella estaba más emocionada que yo.
- Nada, tan solo leer un rato.
-Bien, cariño-me volvió a besar, hasta que vio mi incomodad y retrocedió- lo siento.
-No hay problema- suspire, odio hacerla restringirse conmigo.
Escuchamos que Rosa se estaba despertando también,"este si que va a ser un gran día", pensé irónico.
-Vamos, cariño ¡saludemos a tu hermana!-me tomo del brazo y prácticamente me arrastro felizmente hacia el cuarto de mi hermana. Su cuarto era la representación de su personalidad, todo cubierto de cortinas blancas, muñecas de porcelana, un gran guardarropa, espejos que cubrían las paredes y una cama donde podían caber 3 personas fácilmente; aun no entiendo como podemos ser mellizos , aparte de nuestra belleza, no compartimos nada en común, mi cuarto solo había libros y una pequeña cama entre otros mueble pero nada ostentoso, aunque mamá es una gran decoradora jamás deje que tocase el mío. Todos los de nuestra especie son hermosos, pero muchos coinciden, que los Cullen somos, por decirlo de una manera, exquisitos. Rosalie le sonrió a mamá y esta se lo regreso gustosa, cuando Rose es feliz estoy de acuerdo que es la niña más hermosa que existe, pero conozco su carácter y eso le saca todo el atractivo que tenga. Mamá nos preparo nuestro desayuno, una rica taza de sangra caliente y Edward bajo a desayunar también. Él es mi pequeño hermano por un año, y aunque con Rose tenemos las facciones más perfectas, él con su mirada cautivaba, sabía manejar a los demás aunque esto no le gustase. Se sentó, mamá le beso en la cabeza y él le sonrió , y si, es el favorito.
-No es cierto!- me dijo
-Edward, por favor, intenta no leerle la mente a tus hermanos, es mala educación- Mamá le hablo gentilmente
-Mami-cuando Edward miro a Rose molesto supe que algo inadecuado iba a decir- te puedo pedir un favor?
-claro, cariño.
-no quiero ir a escoger un perro-fue tan inocente que por poco le creo. Hoy era el día en que nos iban a dar a cada uno un lobo, ninguno de nosotros quería, porque eso significaba que siempre estaría con nosotros y realmente esa idea no nos gustaba para nada.
-Rose, nunca digas perro, son licántropos –el tono de mamá fue serio-ellos merecen ser tratados con respeto. Además sabes muy bien que todo vampiro necesita su licántropo.
-si entiendo
Reino el malhumor por parte de nosotros, pero mamá estaba tan feliz que no lo noto. Cada vampiro tiene un licántropo, pueden pasar años pero siempre su licántropo lo elige, se convierte en su compañero de por vida; nosotros somos solitarios, no necesitamos a nadie, aunque a Rose le encanta que la admiren, pero eso no significaba que realmente necesite de cierta persona para eso. No se como padres tan amorosos como los nuestros hayan tenido hijos como nosotros. Mamá tiene a Emily y Papá a Sam, que son también, por coincidencia, marido y mujer; ellos no pueden pasar un día sin verlos, personalmente me parece molesto. Eran buenos y serviciales, pero no me gusta como olían, siempre tenemos que ponernos una crema para ignorar el aroma. Pero para ellos los licántropos no tienen mal aroma, el licántropo no apesta para su dueño.
Íbamos a la Push, era la tribu de licántropos que abastecía a varios estados. Estos eran grandes y musculosos, no se parecen a nosotros, no se pueden comparar en belleza y su piel es oscura. Era innato que vampiro tenga un licántropo, aunque nosotros somos fuertes y rápidos, el licántropo nos cuida, se amolda a nuestra personalidad; se convertía en todo lo que necesitábamos, no nos gustaba eso a ninguno de nosotros, depender de alguien más !no gracias¡.Terminamos de comer y nos alistamos para irnos, mamá estaba emocionada, vive repitiéndonos que somos afortunados, es extraño que nos imprinaran a los tres al mismo tiempo y además tan jóvenes ; ella no se imaginaba la vida sin su Emily, y ahora que estaba embarazada, se encontraba extasiada, se apenaba tener que haber vivido 50 años sin su compañía. Papá, era uno de los más grandes cirujanos de Forks y creo que de otros lugares, llegó y nos saludo tan pronto entró; El y mamá dejaron de envejecer cuando tenían unos 25 años. Muchas veces he pensado como sería mi licántropo, estos se desarrollan velozmente para poder soportar la transformación, tengo que admitirlo, es sorprendente ver como sucedía, cuando Sam y Emily nos mostraron quedamos anonadados, se convirtieron en lobos que se comparaban en tamaño a grandes caballos, se podría decir que nos asustamos.
- Bueno, niños, vamos a la Push!- dijo papá felizmente y nos subimos al auto.
- Pero papi, ¿por qué no traen los perr…- al darse cuenta lo que estaba por decir Rose, Papá la miro duramente- licántropos a casa?
-Por que Sam tiene que hacer muchas cosas como subjefe de la manada y Emily esta embarazada, prefiero que no se mueva
-¿Porqué no podemos elegirlos nosotros?
-ellos tienen un proceso para imprinarnos, son ellos los que nos eligen, pero realmente no entiendo mucho sobre eso, se lo preguntare a Sam cuando lo vea- parecía risueño
Empezamos a sentir el olor y Edward se tapo la nariz automáticamente con las manos.
-Bueno, niños, pónganse esta crema sobre sus narices –Mamá nos paso el pote con esta.
-Apestan! Por Dios!- Rose movió la cabeza molesta. Papá la reprendió con la mirada através del espejo retrovisor y ella se limito a seguir mirando al bosque. Llegamos a la Push, sus casas eran de madera y pequeñas, algunos lobos de la tribu salieron al ver que llegamos; sentí la atracción que produjimos en ellos, no lo soportaba, Edward se rio de mi cara de pocos amigos.
-No te preocupes, seguro que el tuyo va a ser tan ermitaño como vos, seguro que casi ni se van a ver- el chico se estaba divirtiendo por la situación.
- y el tuyo un sabelotodo-conteste molesto
-Basta y caminen que quiero ver como esta Emily- nos empujo Mamá.
Apenas llegamos y ya me quería ir.
