Dragon Ball Z no me pertenece. Es propiedad de Akira Toriyama.

(Actualizando/corrigiendo los capítulos...)


PROLOGO: UN NUEVO MIEMBRO

Un año después de la derrota del maligno Buu y de que Goku regresara a la vida…

Todos los guerreros Z se encontraban reunidos en una pequeña sala, algunos se encontraban sentados, otros de pie, recostado en la pared alejado de todos en el caso de Vegeta. Goku caminaba de un lado a otro, Gohan trataba de tranquilizar a su padre, Goten se encontraba ansioso por saber noticias, Trunks le daba apoyo a su amigo ya que hace escasas semanas había estado en la misma situación

– Porqué no te tranquilizas Goku, estoy segura de que todo saldrá bien – Le dijo Bulma, quien tenía en brazos a una preciosa bebe de dos semanas muy parecida a ella. Su segunda hija Bra.

– Sí papá, hazle caso a Bulma, verás que mamá estará bien – Le dijo su primogénito.

– Es que se han tardado bastante, y me preocupa que hayan entrado tantos médicos con ella, ¿y sí estuviera teniendo algún problema? – Decía un preocupado Goku, cosa que sorprendió a los presentes.

– ¡Ay Goku, no seas pesimista! Chichi es muy fuerte ya ha pasado por esto en dos ocasiones, no veo porqué tendría que complicarse – Trató de tranquilizar Bulma.

– Sí, tienes razón – Admitió Goku aunque todavía preocupado.

En esos momentos sale el medico que atendía a la esposa del Saiyajin, atrayendo la atención de todos los presentes.

– ¿Quién es el esposo de la señora Chichi? – Preguntó con calma el doctor.

– Soy yo, mucho gusto me llamo Goku – Le extiende la mano – Dígame cómo está ella, ¿cómo está mi esposa?

– Bueno la señora Chichi está muy bien, un poco cansada por el esfuerzo, pero perfectamente.

– ¿Y mi hijo? – Decía un ansioso Goku.

– Querrá decir hija, felicitaciones señor Goku, tuvo una hermosa y sana niña.

– ¡UNA NIÑA! – Gritó Goku por la noticia.

– Una hermanita ¡Que bueno! Mamá debe estar muy contenta siempre quiso una nena – Dijo Goten emocionado.

– Sí, debe ser lindo tener una hermana – Admitió Gohan.

– Felicitaciones Goku, debes estar muy emocionado – Le dijo Bulma.

– Sí, sí lo estoy pero es extraño tener una hija, aun así estoy muy contento. Dígame Doctor (dirigiéndose al mencionado), puedo ver a mi esposa y a mi niña.

– Sí, por supuesto.

– Yo también quiero ver a mi hermanita – Pidió Goten.

– Sí, yo también – Le siguió Gohan.

– Está bien, ustedes que son su familia pueden entrar, pero procuren no hacer mucho ruido, pues ya les mencione que la señora Chichi debe descansar.

– Sí, está bien – Dijeron los tres al mismo tiempo.

Mientras se dirigían hacia la habitación donde se encontraba Chichi, Goku reflexionaba la gran novedad, que suponía, era el tener una hija.

Una niña… es extraño, pero debe ser lindo tener una hija. Vegeta hace poco tuvo una y también se sorprendió, creo que siempre estamos esperando que sean niños, pero esta vez fue una niña ¡Ja! Estoy súper contento por Chichi, desde que nos casamos que deseaba tener una hija, ahora sí debe estar completa, y yo….bueno yo estoy emocionado, va a ser toda una experiencia criar a una mujer, espero Chichi me deje entrenarla y ver si es fuerte. Sí, va a estar bueno.

– ¡Papá! ¿Vas a entrar o no? – Le dice su hijo mayor, sacándolo de sus pensamientos.

– ¿He? Sí ¡Jajaja! – Dijo Goku con una mano detrás de su cabeza.

El primero en entrar fue él, seguido de sus hijos, allí en la cama se encontraba su mujer con su pequeña hija en brazos. Para Goku fue la escena más hermosa que allá visto, se acercó a ella.

– Mira Goku, nuestra niña, ¿no es linda? – Le dijo su esposa muy contenta.

Goku se acerca para observar a su hija más de cerca, quedando cara a cara con ella, era una bebé muy linda, lo miraba con sus pequeños ojos negro profundo.

– ¡Es muy linda Chichi! sobre todo porque se parece a ti – Le dice dulcemente.

– ¡Ay Goku que cosas dices! – Chichi se sonrojó ante el comentario de su esposo.

– La verdad, eso digo. Gracias, gracias por hacerme padre de nuevo, y por hacerme tan feliz, te amo Chichi – Goku le da un tierno beso a su mujer, quien le corresponde dulcemente.

Sus hijos se sonrojan ante la escena de sus padres, pero están contentos de ver cuanto se quieren.

– Gohan, Goten porque no se acercan y conocen a su hermana.

– Si mamá – Dijeron a la vez.

– Es muy linda mamá, papá tiene razón es igual a ti – Decía Goten observando a su pequeña hermana.

– Sí, es verdad ¿Puedo cargarla? – Preguntó Gohan.

– Por supuesto hijo, pero ten cuidado.

– Claro madre.

Gohan carga a la pequeña, quien lo miraba con curiosidad. La pequeña estiró su diminuta mano y acarició el rostro de Gohan, inmediatamente se puso a reír.

– Veo que le gusta estar en tus brazos hijo – Decía su madre.

– Sí… Hola linda, soy tu hermano mayor, Gohan, eres una bebé muy linda, te quiero mucho y te voy a cuidar siempre hermanita – La pequeña Son reía y reía con las caricias de su hermano mayor, le agradaba estar con él.

– ¡Yo también quiero cargarla! – Dijo Goten.

– No sé hijo, aun eres pequeño.

– ¡No es justo mamá! Yo quiero cargar a mi hermana como lo hizo Gohan – Decía enfadado.

– Te prometo que cuando regresemos a casa y sea un poquito más grande podrás cargarla.

– Está bien – Se resignó el pequeño niño.

– Y tú, Goku, ¿no piensas cargar a tu hija?

– ¿Yo? Es que es muy pequeña. Me da un poco de miedo Chichi.

– No tienes porque, anda tómala.

Goku con mucho cuidado tomó por primera vez a su hija, era la pequeña más linda que había visto, era su hija, su niña. Se prometió a sí mismo siempre cuidarla, le daría todo el cariño que se merecía, estaría siempre para ella. No sólo para ella, se prometió ser un mejor padre para Gohan, para Goten y para su pequeña hija. Sus hijos lo necesitaban, y él estaría ahí siempre para ellos.

– Hola mi niña, soy papá, ¿sabías que eres muy linda? No, no sólo eso, eres la MÁS linda, y claro porque te pareces mucho a tu mamá. Te quiero mucho hija, siempre te cuidaré te lo prometo – Goku mecía tiernamente a la niña quien se quedó dormida en el cálido pecho de su padre.

– Chichi, ¿cuándo saldrán de acá?

– Creo que para mañana ya estaremos en casa.

– ¡Que bueno! Porque ni Gohan, ni Goten, y mucho menos yo, sabemos cocinar tan bien como tú – Chichi rio.

– Lo sé, pero ahora mi prioridad es mi hija, así que se tendrán que cocinar por un tiempo.

Pobre de mi cocina. Se lamentó Chichi en pensamientos.

– Pero….pero, yo te ayudaré a cuidarla, no tienes que preocuparte por eso – Decía un angustiado Goku que ya se veía comiendo lo que él y sus hijos podían llegar a hacer.

– Lo sé cariño, lo sé – En ese momento Chichi dio un gran bostezo.

– ¿Estás cansada? – Preguntó su esposo.

– Sí, creo que mientras ustedes estén acá y cuidan de la niña descansare un poco – Chichi en otra circunstancias jamás le pediría a su esposo que cuidara de una bebé recién nacida, pero el cansancio pudo más. Se recostó en la cama y en un minuto ya estaba dormida.

Ya había pasado un día y la familia Son con su nuevo miembro, se disponían a ir hacia su hogar.

Allí, en la casa de la montaña Paoz estaban todos reunidos para darle la bienvenida a la pequeña niña.

Goku con su hija en brazos y su familia, llegaron sorprendidos de ver a todos ahí.

– ¡Que sorpresa! Gracias por esta fiesta de bienvenida – Decía Chichi muy contenta.

– No es nada Chichi, como ayer no pudimos conocer a tu hija, decidí que lo mejor era hacer una fiesta sorpresa para recibirlos – Decía una emocionada Bulma – Pero mira que preciosa es, es igualita a ti Chichi.

– Sí, Goku me dijo lo mismo.

– ¡Hola linda! – Bulma hablándole a la bebe – Yo soy Bulma una muy buena amiga de tus padres, casi como tu tía ¡Ay Chichi es tan dulce! Seguramente ella y Bra serán muy buenas amigas.

– ¡Sí! Espero así sea Bulma.

– Mira Vegeta, ¿no es linda la hija de Goku? – Le grito Bulma.

– ¡Hump! – Fue lo único que respondió el príncipe.

– ¡Aashh! Siempre tan expresivo – Mientras Bulma y Chichi hablaban y planeaban las vidas de sus hijas…

– Oye Goku, quien diría que algún día tendrías una niña.

– Es cierto Krilin, pero déjame decirte que estoy muy contento.

– Sí, puedo verlo, me alegro por ti amigo.

– Gracias amigo…

De regreso con las mujeres….

– Oye Chichi ¿Cómo le pondrás a la niña? – Preguntó Número 18.

– La verdad no había pensado en ello, pero quiero llamarla como mi madre, Milk.

– Es un nombre muy bonito – Dijo Bulma.

– Sí, pero todavía no lo he consultado con Goku.

– ¿Qué no has consultado conmigo? – Decía Goku que en ese momento se había acercado a ellas.

– El nombre de nuestra hija, yo quería ponerle el nombre de mi madre, sí estás de acuerdo.

– ¿Y cual era?

– Se llamaba Milk.

– Pues me parece bien, es un lindo nombre. ¿Qué te parece hija? ¿Te gusta ese nombre, te quieres llamar Milk? – Le decía mientras jugaba con ella, la niña no hacía más que sonreírle a su padre.

– Tal parece que sí le gusta – Dijo Bulma.

– Entonces te llamaras Milk, mi linda Milk – A Chichi le caían lágrimas de emoción al ver el comportamiento tan cariñoso de su esposo para su hija, pero es que él era así, siempre les brindó cariño a sus hijos, sabía muy bien lo mucho que amaba Goku a sus hijos, eso la hizo sentir orgullosa del marido que tenía, del hombre a quien tanto amaba.

– ¿Te sucede algo Chichi, porque lloras? – Le dijo Goku, quien observaba a su esposa con preocupación.

– No es nada Goku, es sólo que soy tan feliz, te amo.

– Yo también soy muy feliz al tenerte, me has dado lo más maravilloso que tengo, mis hijos, y sobre todo tu amor. Te amo – Goku le da un tierno beso a su esposa en los labios, después de eso se escucharon muchos aplausos, se habían olvidado de los presentes. Goku y Chichi se dieron vuelta muy sonrojados.

Después de aquel día, los guerreros llevarían una vida tranquila por muchos años. Hasta…


Gracias por el tiempo en leer...