HOLA! Si ya se que no esta bien que suba fics nuevos sin terminar los otros, pero es que tenia tantas ganas de ser primero en subir un fic en español de Frank y Leo que no pude aguantarme las ganas jejejeje
En fin, se trataba mas que todo de un nuevo proyecto: ya me mencionaron un par de veces, que Frank es el unico que se ha salvado del Yaoi... PUES ESO SE ACABO! Ya hace un tiempo subi un FrankJason, bueno con este ya llevare dos de las cuatro parejas con las que pienso poner a Frank muajajajajaja
Espero que les guste el cap.
Disclaimar: ninugno de los personajes me pertenece, son propiedad de rick riordan, no hago esto con fines de lucro, plagio ni difamacion. Es solo por mero entretenimiento
Así es mi Karma
Capitulo 1
Divertido, ruidoso y con una sonrisa que auguraba un buen dolor de cabeza; la primera vez que Frank pensó en Leo Valdez de esa forma no le prestó demasiada atención, después de todo, se trataba de un amigo y compañero del campamento mestizo.
Pero todo comenzó a complicarse, un tiempo después de la batalla contra Gea y sus gigantes.
Más exactamente, un mes después:
La batalla contra la misma tierra había sido difícil, no tanta por los daños al campamento, las cabañas podían repararse, sino por los compañeros perdidos en batalla. Por su puesto, Nico había hecho un excelente trabajo encargándose de los ritos funerarios para todos y cada uno.
O, al menos, para casi todos. El hijo de Hades había dejado el funeral de Leo para el último, por algún motivo que nadie más que él y Hazel conocían; pero sentía que era lo correcto, podía sentir como había algo extraño con la muerte de su compañero mecánico.
Y había acertado completamente, ya que un día, durante el almuerzo, sin ningún aviso o alguna pista de ningún tipo, un gigantesco dragón de bronce aterrizo en medio de las cabañas. Cuando todos los campistas, encabezados por Piper, Jason, Percy y Annabeth, llegaron al encuentro, vieron a Leo bajar del lomo de Festus y saludarlos como si acabara de regresar del mercado con pan y leche:
-Hola chicos, ¿me extrañaron?-Pregunto con su enorme sonrisa, mientras Festus movía la cabeza y lo miraba como si dijera "-No seas descarado-"
Piper lo abofeteo tan duro que dejo la silueta de su mano perfectamente marcada en la mejilla del rostro de Leo; Annabeth lo tiro al piso con una llave de judo; después Jason y Percy le apretaron el cuello con sus manos los dos al mismo tiempo por varios minutos, ninguno tenía la paciencia de esperar su turno para estrangular al hijo de Hefesto como había sugerido Percy. Incluso Nico estuvo tentado a cobrarle las lagrimas que le había sacado a su hermana.
Luego de que recuperara el aliento, con el cuello un poco morado, Leo se vio envuelto en el más apretado y caluroso abrazo de su vida. Estaba literalmente cubierto por los brazos de sus amigos, pudo escuchar a Jason sollozar y sentir como Piper ocultaba el rostro en su hombro y mojaba su camisa con lágrimas.
-… yo los extrañe muchísimo-Respondió correspondiendo el abrazo como pudo-Y también Festus, ¿verdad amigo?-El dragón rugió en respuesta y por un aterrador instante pareció tener intención de unirse al abrazo grupal.
Después que Leo pasara la tarde con todos sus hermanos, los cuales elogiaron su trabajo con el "Festus 2.0" como lo llamaban, y mostrándoles, no solo la esfera, sino también los pergaminos de Arquímedes, Leo decidió que era hora de pasar tiempo de calidad con sus amigos.
-Wouh, tendré que mejorar el sistema de seguridad de este lugar-Bromeo en cuanto llego al Bunker 9 y encontró a sus amigos esperándolo adentro.
-Y yo que pensé que la muerte de habría hecho madurar, aunque fuese un poco-Dijo Nico, sentado desde una de las mesas de trabajo.
-¿Eso fue una broma?-Pregunto Leo divertido-Valla, todos han cambiado tanto…-Agrego con un fingido tono de nostalgia.
-Leo déjate de eso-Intervino Jason con seriedad, aun tenía los ojos un poco rojos-Y explícanos como es que sigues vivo.
-Pues… Bueno, ya saben, instale una hipodérmica en Festus para que me pusiera "la cura" y, el resto es historia antigua-Por alguna extraña razón, todos notaron como Leo parecía querer dejar el tema de lado.
-¿Y qué paso con Calip- ¡UH!-En un rápido reflejo Nico y Annabeth le dieron un codazo en las costillas a cada lado de Percy, cortándole el aire y evitando que terminara su pregunta.
Pero daño estaba hecho. Piper pudo ver, y casi sentir, un escalofrió recorrer el cuerpo de su amigo. Sin dudar un segundo se levanto y le paso un brazo por los hombros, transmitiéndole su cariño y su apoyo. Leo le sonrió y agradeció internamente.
No estaba listo para tocar el tema, no aun.
En los próximos días, Leo pudo ponerse al día con todos los cambios que hubo en su ausencia.
Primero, Jason y su nuevo puesto de Maximus Pontifex:
-¿Ósea que tienes que hacer altares para TOOOODOSSS los dioses?-Pregunto Leo.
-Si…-
-¡Hermano es genial! Puedo ayudarte, haremos las más increíbles estatuas móviles…-Mientras Leo continuaba con su diarrea verbal de ideas, Jason no pudo evitar sonreír. Había extrañado tanto a su mejor amigo-… y extremidades articuladas, ¿crees que les moleste que las haga intercambiables?
Después, se entero de que Percy y Annabeth se irían a estudiar a Nueva Roma:
-¿En serio?
-¿Qué?
-Bueno, entiendo que Annabeth quiera ir…-Explico el moreno mientras limpiaba las alas de Festus-Eres tú; ¿pero Percy?
-¡Ey!-
-No te ofendas amigo-Respondió Leo sacando una roca del tamaño de su puño-Pero no te veo sentado presentando un examen-Después de eso Leo termino siendo arrastrado a la playa por una ola gigante.
-Oh sí, eso fue muy maduro…-Comento Annabeth con sarcasmo.
-¡El empezó!-
Luego fue a visitar al hijo del entrenador Hedge:
-Valdez donde te atrevas a despertarlo juro que te mato-Y se encontró con la muy malhumorada madrina del pequeño sátiro bebe, Clarisse LaRue.
Leo solo hizo un gesto de paz con sus manos.
-Tranquila, solo le traje un pequeño regalo-Respondió el chico dejando una caja envuelta en la mesa de noche que había junto a la cuna-Es un peluche que sabe artes marciales; algo me dice que le gust-
-¡Buaahhh!-
Después de huir despavorido de una enardecida hija de Ares, la cual no lo persiguió gracias a que tenía que volver a dormir al pequeño, se topo con otro de sus amigos:
-¡Nico!-Saludo recuperando el aliento.
-Hola Leo-Junto al hijo de Hades había alguien más.
-Ey Will, que onda amigo, tiempo sin vernos-Bromeo el moreno.
-Sí, un gusto volver a verte Spok-Ambos frikis empezaron a reírse, hasta que Nico los miro confundido.
-¿De qué están hablando?
-Oh nada, solo una broma de cuando nos conocimos-Respondió Will, solo que hubo algo en como paso su mano por el cabello de Nico que hizo que Leo se llevara las manos a la boca.
-Ay dioses…-Dijo conteniendo la emoción y ocultando una sonrisa enorme tras sus manos-Entonces, ¿es cierto?
-¿Cierto?-Volvió a preguntar un confundido Nico, pasando por alto que Will comenzaba a ponerse pálido-¿Qué cosa es "cierta"?
-Pues…-Leo ignoro olímpicamente a Solace y a como este no dejaba de decirle, silenciosamente, que se callara moviendo su mano por su cuello una y otra vez-Que ustedes dos están juntos.
-¿Qué?-Y justo cuando Nico se volteo para decirle a Will si sabía algo de esos rumores, se encontró con que el rubio paralizado-Solace, ¿Qué demonios es lo que has estado diciendo?
-No he dicho nada-Respondió rápidamente el hijo de Apolo-Los demás solo asumieron que estamos saliendo.
-¡¿Qué?!-
-¿Por qué a Will lo persigue una horda de zombis?
-No tengo idea…-Piper y Leo estaban sentados en las gradas que llevaban al panteón comedor, ambos relajados mientras comían un helado.
-¿Leo?-Inquirió la chica con una caja alzada.
-Bueno está bien, tal vez, le dije a Nico que todos en el campamento creían que él y Will estaban juntos y que Will no había hecho nada para negarlo-Respondió el moreno con una risa traviesa-Cosa que, al parecer, Nico no debía enterarse.
-No me refiero a eso…
Por un instante Leo suspiro pesadamente y hablo con seriedad:
-Lo sé Pipes´-Dijo-Quieres que te cuente de "ella".
-Leo, sabes que puedes contar conmigo para lo que sea-Igual que la noche anterior, Piper paso su brazo por los hombros del chico-Pero no voy a presionarte para que me digas que paso, entiendo que hay cosas que necesitan un tiempo para hablarlas.
-Eres la mejor amiga de todo el mundo-Respondió Leo con su sonrisa ya restaurada-Deberías tener tu propio programa de "Doctora Corazón"
-Ajajaja-La chica encontró aquello bastante apropiado en Leo.
-No, hablo en serio…-El chico se levanto y empezó a gesticular con las manos-Se lo propondré a mi padre, serás un éxito en Hefesto TV, puedes dar consejos sobre relaciones, temas de moda, incluso podríamos llevar a algunos dioses como estrellas invitadas.
-¿Podríamos?
-Por su puesto, tú serás la estrella, pero yo seré el director técnico… Con ganancias de 80-20 claro esta…
-¿Estás seguro que quieres quedarte solo con un 20%?-Bromeo la hija de Afrodita-Si quieres puedo ofrecerte un 22%.
Esa misma noche, después de la cena, Leo prefirió colarse fuera de su cómoda habitación privada en la cabaña de Hefesto e irse a su lugar favorito en todo el campamento.
Por desgracia, ni siquiera estar rodeado de material de trabajo, de planos por empezar o su mejor amigo dragón durmiendo en la plataforma del Bunker 9 era suficiente para distraer su mente de un palpitante dolor.
De esa constante punzada en su conciencia esa que le decía que nunca nadie lo querría como el tanto deseaba. Si, tenía a sus amigos, a quienes adoraba con todo su ser y, que sabía, también lo adoraban con todo y sus malas bromas y su incapacidad para cerrar la boca a veces. Pero, había una verdad que no dejaba de golpearlo en la cara:
Que él nunca seria amado más allá que como un amigo.
Toda su vida emocional estaba formada por una cadena de decepciones y sufrimientos, uno detrás del otro. La pérdida de su madre, el desprecio de su familia, los constantes rechazos para con él de parte de cualquier chica por la que había sentido medianamente algo.
Claro, Leo siempre se fijaba en la capitana del equipo de porristas, de la modelo de la clase, de la rubia exuberante que venía de intercambio, no es como si se pusiera metas románticas fáciles. Pero siempre creía en si mismo e intentaba agradarles. Después de cada rechazo, lograba superarlo en unos días. O, al menos, eso aparentaba; siempre tendría ese recuerdo de no haber sido suficiente para una chica.
Y, a la larga lista de fracasos amoroso, podía agregar el más reciente: Calipso.
Ni siquiera quería pensar en el tema; pero no podía dejar de preguntarse si es que acaso las Moiras lo estaban torturando a propósito. Lo cual, posiblemente y considerando la suerte del mestizo, podía ser cierto.
Sus mejores amigos eran pareja, Percy tenía a Annabeth, Clarisse tenía a Chris, incluso ese sátiro bélico amante del kung fu tenia esposa, ¿Por qué el no podía tener a alguien? Alguien a quien besar, que lo besara, que lo golpeara como Annabeth a veces golpeaba a Percy cuando hacia una tontería; que lo hiciera temblar cada vez que se ponía celosa como hacia Piper con Jason; o, incluso, alguien que le lanzara una horda de zombis si le hacía molestar.
Pero Leo no tenía a nadie así, estaba solo, sin-
-¿Leo?-
-¡KYA!-Un segundo después Hazel vio como Leo se levantaba del suelo, junta la silla que se había llevado con él-Hazel…
-Perdón-Se disculpo de inmediato la morena-Oh cielos, créeme que en serio detesto usar estos mensajes iris, nunca sabes que está haciendo la otra persona-
-Sí, es una pega-Leo hizo una anotación mental para no ayudar con la construcción del templo a Iris, al mismo tiempo se limpiaba la cara con las mangas de su camisa.
-Pero apenas me dijeron que estabas de regreso no pude evitar venir corriendo a las termas y llamarte.
-¿Termas?-Leo vio como del otro lado Hazel estaba en una especie de salón con una piscina de agua caliente-Ah claro, vapor… Y, ¿Cómo has estado?-
-Eso debo preguntarlo yo-De inmediato el ceño de Hazel se frunció-Pensaba recriminarte y gritarte por desaparecer de esa manera, no tienes idea de cómo nos sentimos Frank y yo…
-Lo ciento-
-Eso no importa ahora-Tan rápido como Leo se había caído, ahora Hazel cambiaba su expresión a una más preocupada-¿Por qué estabas llorando, Leo?
-Eh…-Maldición, se había aguantado todo el día, no quería que ninguno de sus amigos lo viera llorar-N-no es nada.
-Leo…-Hazel hizo una pequeña pausa, sabía que esas lagrimas tenían un nombre pero no quería que su amigo se sintiera peor-¿Qué harás el resto del verano?
Aquella mañana se antojaba notablemente tranquila y muy prometedora, el cielo azul brillante, suaves y esponjosas nubes, una brisa fresca; Frank sabía que aquello era presagio inequívoco de que algo iba a salirle terriblemente mal.
Mientras salía de su casa, como Pretor podía tener ese lujo, no podía dejar de preguntarse qué clase de Karma estaría pagando esta vez. Pero prefirió dejar de lado ese tema y disfrutar de aquella paz, mientras durara.
-Buenas días Pretor Zhang-Le saludaban todos los que pasaban junto a él, que iba de camino al comedor a desayunar.
-Buenos días-Y el respondía con un gesto de la mano y una sonrisa nerviosa.
Ya había pasado un mes, y Frank aun no se acostumbraba a su nuevo rango como Pretor de la duodécima legión Romana.
A su llegada, penas había puesto un pie en el campamento, y ya las cosas le habían salido mal; había provocado una estampida de unicornios, enfermado al elefante de guerra, causado un domino humano en la marcha de la cohorte… En fin, la lista era bastante larga.
Pero después de la guerra contra Gea y sus gigantes, de que el pasara por su radical transformación de complexión chico regordete a jugador de rugby profesional, de su ascenso a Pretor, todos en el campamento Júpiter habían dejado de tratarlo como a un inútil bueno para nada, ha hacerlo con un respeto que rayaba en lo absurdo; al menos cuando lo comparaba con su llegada.
-Buenos días Reyna-Saludo llegando a la mesa donde se sentaban los líderes del campamento.
-Buenos días, ¿dormiste bien?-Frank adoraba que su relación con la chica hubiera mejorado tanto; si, seguía siendo la misma Reyna seria y tenaz de siempre, pero ahora se trataban con naturalidad. Incluso podía decir que eran buenos amigos.
-Sí, gracias-Mientras las Auraes le servían su habitual ración de panqueques y jugo de naranja, el chico no pudo pasar por alto que alguien lo miraba, pero no pudo identificar bien quién.
-Me alegra oír eso-
-"Sagrado Marte"-Ya tenía la suficiente experiencia como para saber que cada vez que Reyna preguntaba por el estado de alguien, era porque iba a darle muy malas noticias-¿Qué sucede?
-Hace un momento Hazel vino a hablarme-Respondió Reyna con calma, sabia de la situación de su colega y de la centurión, no quería tocar un tema sensible así que prosiguió-Me informo que hoy alguien llegaría al campamento…
-¿Alguien?-Pregunto confundido y evitando pensar en Hazel-¿Legado o Semidiós?
-No, es más una especie de intercambio entre nosotros y el campamento Mestizo-Explico mejor la Pretor-Le di mi aprobación porque, bueno, no suena tan mal; pero no estoy muy segura, aunque se trata de un viejo amigo tuyo.
-¿Amigo mío?-Frank cada vez estaba más confundido-¿Percy?-Bueno, seria genial ver a su tátara tátara tátara tátara tátara tátara tío, o simplemente su "hermano" para abreviar, de nuevo. Tal vez podría ser Jason, o incluso Nico, su cuñado.
-No… Se trata de Leo Valdez-
De no haber sido Reyna la que le dijo a quien debía esperar, Frank hubiera pensado sin ninguna duda que eso de que Leo llegaría ese mismo día a Nueva Roma no se trataba de nada más que una broma. Pero se trataba de su compañera Pretor, sabía que la puertorriqueña jamás jugaría con la muerte de un compañero, aunque se tratara de uno tan molesto como lo podía llegar a ser Leo.
Y allí estaba, parado en medio de la vía Praetoria, con los brazos cruzados y esperando solo los dioses saben qué:
-"¿Entonces era esto lo que mi Karma quería cobrarme?"-Pensó un poco confundido; pero lo veía poco probable, es decir, se trataba de Leo un amigo y compañero. Si, uno que disfrutaba de hacer bromas a costa de él, pero, increíblemente, Frank se sentía un poco nervioso.
Él, además de Hazel, había sido el único en estar enterado del plan del moreno para sacrificarse y eso lo…
-¡Frank!-Pero sus pensamientos se vieron interrumpidos por la llegada de alguien más.
-Eh, hola Hazel-Su saludo le salió un poco forzado; pero no podía evitarlo, su situación con la chica no podía hacerlo de otra forma-Eh, entonces ¿es cierto?
-Sí, me sorprendí tanto cuando Piper me aviso-La morena, por otra parte, lucia fresca y relajada; cosa que hizo sentir un poco mal al chico.
-¿Y, te dijo a qué hora pensaba llegar?-Pero necesitaba parecer normal. A su pregunta vio como la centurión miraba el reloj de su muñeca y suspiraba:
-Dijo que llegaría a las doce en punto-Respondió-Y que nos tenía una sorpresa, así que les pedí a los chicos de las torres que no dispararan a nada a menos que recibieran la orden.
"Sorpresa" y "Leo" sin duda dos palabras que en una misma oración podrían orillarte a querer echarte en posición fetal y rezar a los dioses por que pasara lo mejor.
-Au…-Frank casi podía sentir la jaqueca acercarse.
-Y, falta un minuto-Hazel no apartaba sus ojos del reloj mientras que el Pretor evitaba por todos los medios mirar a la chica. Lucia tan guapa, pero…
De un instante a otro Frank pudo notar como una sombra pasaba justo sobre ellos. Alzo la vista al cielo y no pudo evitar que una sonrisa enorme surcara sus labios mientras todos en el campamento escuchaban el potente rugido de un dragón de bronce de diez toneladas descender del cielo, con lo que parecía ser un collar de flores hawaiano gigante:
-Claro…-Debía darle crédito al hijo de Hefesto, siempre sabia como sorprenderlo. Había extrañado eso-"Esperen, ¿lo extrañe?"-Pero no tuvo tiempo a responderse, junto a Hazel se encargo de mantener a todos los romanos en calma anunciando que no se trataba de un ataque.
-¡Adivinen quien llego!-Para cuando Festus aterrizo justo en medio de la vía, la mitad de la legión ya estaba formando un círculo alrededor, espadas y escudos en mano-Wauh, en serio deberían mejorar su comité de bienvenida; en vez de espadas, unas magdalenas. Seria súper.
-No ha cambiado nada-Frank ignoro por completo el tono de ensoñación con el que le había salido su comentario; la razón, se quedo dolido de ver como Hazel corría a abrazar a saludar al moreno.
-¡Auh!-Bueno, primero a abofetearlo y luego a abrazarlo-Ok, merecía eso…-Mientras Frank se acercaba a pudo notar como el hijo de Hefesto iba vestido con bermudas y una camisa hawaiana florida. Seguramente robada al señor D.
Los colores eran muchos, brillantes, incluso algo molestos… Pero indudablemente Leo se veía muy bien.
-"No pensé eso"-Prefirió atribuir su pensamiento a que todos habían creído muerto al moreno-Eh, hola.
-¡Ah!-Tan rápido como pudo Leo se oculto tras Hazel-Lo ciento, por favor no te conviertas en un tiranosaurio rex para comerme…
-Valdez-Ni siquiera se habían saludado y ya Leo le estaba tomando el pelo-No puedo convertirme en un dinosaurio…-De todas formas hizo la nota mental para intentarlo luego.
-¿Entonces un león?-Negó con la cabeza-¿Oso?
-Si no dejas eso, lo considerare-Por más que intento, no pudo sonar amenazante. De todas formas Leo dejo de bromear y se paro frente al canadiense.
-Me alegra volver a verte, Frank-Saludo el moreno, un poco más serio.
-Lo mismo digo…-El más grande le extendió la mano en señal de saludo. Pero Leo la ignoro:
-Oh por favor, amigo volví de la muerte-Dijo con tono dramático-Un apretón de manos no es suficiente…
-¿Entonces qu-
Y antes de terminar la frase, Frank ya estaba rodeado por los delgados brazos de Leo. Fue un abrazo tan precipitado, que de no ser tan grande, seguramente el Pretor se habría dio de espaldas. Pero en vez de eso se quedo pasmado unos segundos. Los brazos de Leo en serio eran cálidos, y si, estaban en california posiblemente a más de treinta grados, pero Frank no pudo dejar de pensar en eso.
-Perdón por haberlos preocupado-Escucho un susurro, tan suave, que seguramente el había sido el único en escucharlo.
-Está bien…-Susurro el también mientras correspondía el abrazo-Estas vivo, eso es lo importante…
-Sobreviste-Reyna dijo con un tono estoico-Felicidades.
-Y quisiera mantenerme así-Murmuro Leo, de forma que solo Hazel y Frank lo escucharan. Luego de la peculiar llegada de Leo, el chico fue escoltado por sus amigos hasta el Principa, o "-Ese edificio enorme que parece tribunal-" como lo había llamado Leo, para que se presentara con la otra Pretor. Claro que ya se conocían, pero dadas las circunstancias anteriores, Frank considero que sería sano que Leo intentara otra vez con su colega; para, llevar las cosas en paz.
-Entonces…-Leo ya empezaba a pensar que Frank solo lo había hecho por venganza; Reyna en verdad daba miedo, eso sin incluir a sus dos perros mecánicos que parecían ansiosos por comprobar si Leo era su nuevo juguete rechinador-La razón que te trajo, montando un dragón de acero gigante, a Nueva Roma, es…
-Sí, yo…-Necesito de todo su esfuerzo mantenerse concentrado para dar la respuesta que había ensayado-Quería disculparme, por los daños que ocasione en mi anterior visita, y ayudar en todo lo posible para mejorar la ingeniería en Nueva Roma. Un "lo siento" de mi parte, y un "Trabajemos juntos de ahora en adelante" de parte de los griegos.
-Ya-Reyna noto como sus perros gruñían en señal de que el moreno no estaba siendo honesto del todo-Frank, Hazel, por favor déjennos solos un momento-Dijo mirando a los romanos. Los cuales no pusieron objeción alguna, a pesar de las miradas de pánico que les dirigía Leo.
-Eh…-El chico parecía dispuesto a salir corriendo en cualquier momento.
-Siéntate-Leo vacilo un momento, pero decidió que lo mejor era no replicarle a la pretor. Reyna estiro la mano y destapo el frasco que usualmente mantenía lleno de golosinas en la mesa-¿Un chocolate?-Dijo lanzándole uno con envoltura al moreno.
-G-gracias-El hijo de Hefesto estaba cada vez mas confundido. Pero, tomo el chocolate como buena señal.
-Ahora…-Esta vez Reyna se relajo y expuso en un tono menos rígido-Lo que acabas de decir, es cierto, así que en nombre de mi parte y en nombre de Nueva Roma, acepto tus disculpas; llevémonos bien a partir de ahora-Leo suspiro aliviado al ver una pequeña sonrisa en los labios de la chica-Además es una buena forma para fomentar la cooperación entre ambos lados; he oído que eres jefe de cabaña en el campamento Mestizo; eso, junto con el dragón, me da ciertas expectativas sobre tu trabajo.
-Oh, no tienes idea de lo que he pensado-De inmediato Leo adopto su comportamiento normal-Mejoras en su sistema de vigilancia, un sistema de circuito cerrado para las torres vigías, una mejor puerta para la entrada, u-
-¡Pero…!-Atajo Reyna antes de que la diarrea verbal del moreno empezara a molestarla-Se que esas son solo excusas para venir a quedarte con nosotros una temporada. Y no tengo objeción para tu estadía, pero quiero conocer la razón que te trajo.
De inmediato Reyna noto una caída en el ánimo de Leo. Cosa que la desconcertó bastante, por lo poco que le conocía y lo que había escuchado, el chico no era de los que dejaban que su entorno les quitara la sonrisa de la cara. Lo cual le indico a la Pretor que cualquiera que fuera el motivo de Leo, no era ninguna tontería.
-Eh, yo…-Por su lado, el moreno no estaba muy seguro de que decir. No quería mentir a Reyna, con o sin galgos, pero tampoco podía decirle-Yo… Necesitaba distraerme-Finalmente dijo, a la vez que se rascaba la nuca-Un, cambio de aires como dijeron Piper y Hazel… Yo, después de la explosión, fui…-Se mordió la lengua-Perdona, no puedo decirte mis motivos, es que-
-Está bien-Interrumpió-Con lo que has dicho es suficiente; no soy quien para obligarte a decirme tus problemas…-La chica se levanto y Leo la imito. Mientras caminaban hacia las puertas Leo pudo notar como los galgos ya no estaban tan a la defensiva, incluso Argentum dejo que le rascara las orejas.
-¿Entonces…?-Pregunto una vez llegaron a la salida. Leo pudo ver como Frank y Hazel se acercaban a ellos.
-Tengo algunos asuntos que arreglar con el senado sobre tu estadía, nada serio-Agrego al ver que Leo abría la boca-Tu encárgate de instalarte, Hazel puede ayudarte con eso; además, dale un recorrido y explícale todo-Agrego dirigiéndose a la centurión.
-Por su puesto…-Justo cuando la pretor se daba vuelta para irse Leo la atajo antes:
-Reyna, eh… Gracias-Fue todo lo que dijo. Y para sorpresa de todos, la chica le respondió con una sonrisa.
-Disfruta tu estadía, Leo-
-Wauh-El primero en hablar fue Frank-No pensé que fueras tan bueno convenciendo.
-Amigo ya me conoces-Y Leo volvía a hacer gala de su personalidad extrovertida-Nadie puede enojarse con esta sonrisa-Por increíble que parezca, Frank no pudo estar más de acuerdo con esas palabras-Entonces, centurión Levesque, mencionaron algo sobre un "recorrido".
-Claro, Leo, tú sig-
-No-Frank ni siquiera fue consciente de que casi lo había gritado sino hasta que los otros dos lo miraron extrañados-Digo… Eh-Se aclaro la garganta-¿Hazel, no mencionaste que debías supervisar las practicas de la quinta cohorte?
-Pues, si…-Respondió la chica-Pero, no importa, Dakota puede encargarse solo.
-Es mejor que vallas tú-Rebatió el asiático; por alguna razón, una vocecita en su cabeza le decía que no dejara a la morena con el hijo de Hefesto-Yo puedo encargarme de llevar a Leo.
-Oh, bueno si tú lo dices-Hazel no puso objeción alguna, solo se despidió de los chicos y fue a cumplir con sus obligaciones como una líder de cohorte.
-Wauh… El mismísimo Pretor Zhang se ofreció para darme el recorrido de bienvenida; oh no soy digno-Leo empezo a hacer reverencias muy sobre actuadas mientras Frank intentaba reprimir la sonrisa que esto le provocaba. No sabía porque, pero, saber que pasaría un buen rato con Leo caminando por el campamento Júpiter, lo ponía de muy buen humor.
Continuara…
Se estaran preguntando, "¿porque no lo hizo como un one shot, como suele hacer?"
Bueno la respuesta es muy simple... Dejan muy pocos reviews en los One Shots! jejeje asi que este pequeño fic sera de tres caps! ademas quiero saber sus ideas con respecto a la pareja y a que soy pionero con este par jajajaja -y los que me faltan- jejeje
en serio, me muero por leer sus opiniones.
Nos leemos chicos!
