Disclaimer: Inazuma eleven no me pertenece
Pues he decidido reescribirlo :D Gracias a los que comentaron, espero les guste como quedó.
Era una hermosa mañana de primavera, muy bonita para ser imaginada. Entre vaquitas, pollitos, avecitas, gatitos y cosas bonitas. El sol brillaba radiante y alegre mientras se alzaba sobre la cuidad que todavía dormia. Y qué mejor que acompañar aquella magnifica escena con cantos de aves. Precisamente, un pajarito volaba de lo más feliz por el cielo azul, buscando un lugar donde cantar. Felizmente lo encontró. El lugar era un bonito edificio de tres pisos, balcones, un jardín con bellas flores y una piscina y una cancha de futbol; y por decir fútbol estoy segura que te imaginarás quienes deben estar en ese edificio ¿verdad? Seguro que sí, codo codo, guiño guiño.
El pajarito se posó tranquilamente en la rama del árbol que daba al balcón de una de las habitaciones. Se acomodó solemnemente cual cantante de ópera: sacó pechito, levantó la colita, la movió a un ladito y al otro ladito, levantó la cabecita y cuando se sintió preparado, inhaló todo el aire que sus pulmones pajariles pudieron y…
—¡Fuera de mi balcón, artefacto espía!
Una pantufla salió volando por la ventana abierta y golpeó al pobre e indefenso pajarito antes de que pueda decir pío.
— ¿¡Otra vez nos invaden!?-decía una alterada Natsumi mientras observaba al pajarito volando, alejándose lo más rápido posible - Definitivamente tengo que convencer a los chicos de que estamos en peligro desde que ganaron el FFI. ¿¡Por qué no me creen!?
Sí, definitivamente era otro día normal, común y corriente para todos los chicos de Inazuma. Uno por uno se fue levantando. Definitivamente los gritos de Natsumi eran un perfecto despertador matutino. Desde que ganaron, todo hay que decirlo, cierto grupillo de personas empezaron a acosarlos como buenos fans que eran, y en una de esas un loco armo un robot-espía que se metió en literalmente la vida de todos, hasta que Natsumi lo descubrió y una ligera neuroticidad la dominó, es que la chica quería evitar ese tipo de cosas, por eso le cogió cierto disgusto a los animales pequeños. Pero bueno, eso para más rato, te sigo contando.
Goenji bostezó y se frotó los ojos, aun soñoliento. Miró el reloj de la pared de su habitación, 8:30 a.m. Refunfuñó lleno de fastidio. ¿Cuándo sería el día en que los gritos de Natsumi no lo sacaran de sus sueños? Un sueño más arruinado y voluntariamente le pagaría el psicólogo a esa chica, hasta se ofrecía a llevarla ¡Pero deja de gritar! Dejó a un lado sus pensamientos y dirigió la mirada a su compañero de cuarto: Endo Mamoru. Al parecer él aún seguía en su mundo "mágico".
—Definitivamente tiene un sueño pesado…
Después de dar un fuerte suspiro, Goenji se levantó, se estiró y se fue al baño de la habitación. Pensó que una refrescante ducha lo ayudaría a bajar el mal humor con que se había levantado.
En la cocina del edificio se encontraban las managers, a excepción de Natsumi. Aki, Haruna y Fuyuka estaban de lo más alegres, decidiendo sobre qué es lo que irían a cocinar para el desayuno.
—¡Bien!, ¿qué preparamos para desayunar?- decía una alegre Haruna, quien llevaba un bonito mandil blanco.
—Sobró mucha comida de anoche, podemos hacer un recalentado y algo extra- decía Fuyuka, que al igual que Haruna llevaba un mandil del mismo color.
—mmm ¿Qué les parece si mejor vamos al supermercado y compramos comida ya preparada? Hoy no me siento con ganas de cocinar- Aki se sentó sobre una silla y cerró los ojos para poder dormir
— ¡Hey!-se preocupó Haruna-¿Qué te pasa? Te ves muy cansada ¿Acaso no dormiste bien?
— ¿Dormir bien?-respondió molesta- ¿No te acuerdas? Natsumi dijo que nos espían. Anoche me contó de las cosas que puede hacer un robots miniatura, y ya no pude dormir. Estuve con la escoba espantando todas las cosas que se movieran.
—Ah sí, a mi también me contó- respondieron en coro Haruna y Fuyuka-pero fuimos más inteligentes y nos tapamos con las sabanas. Así nadas nos miraba.
— ¡Cierto! ¡Las sábanas!
—Mejor dejemos eso a un lado y vámonos al supermercado- Fuyuka agarró la bolsa y el dinero mientas que Haruna levantaba a una depresiva Aki. Se dirigieron a la puerta, la abrieron y se fueron.
—Qué bonito día- decía una radiante Natsumi- esta vez voy a instalar sensores por todos lados, pero primero a desayunar.
Natsumi bajó las escaleras y se dirigió a la cocina para ser la primera en comer, que para llamar por teléfono de necesita de fuerzas, pero al no encontrar a nadie se confundió.
—Pero que falta de responsabilidad, ya son las nueve y no bajan a cocinar. ¿Qué voy a hacer ahora? Bueno, no importa. Están en vacaciones.
Justo en ese momento, Goenji se encontraba bajando las escaleras. Felizmente la ducha fría había funcionado, pero al ver a Natsumi sentada en la cocina ojeando una revista de los mas tranquila su humor se cayó por los suelos.
— ¿Qué haces ahora? - preguntó con pesadez.
—Buenos dias, Goenji- saludó sin verlo- Es solo que nadie ha preparado aun el desayuno. Así que estoy esperando.
— ¿Esperar? Pensé que ya habías aprendido a freír un huevo.
—Oye, sin molestar -Natsumi lo taladró con la mirada.
—Simplemente podrías agarrar una sartén y empezar a cocinar lo que se...
Goenji dejó media frase al aire al recordar que los estaba metiendo en una situación mortal.
— ¿¡Ah!?-Natsumi se aterró-En primer lugar, yo si puedo cocinar, pero para cosas grandes están Aki y las demás chicas.
—Pues ahora no están, se fueron al supermercado. Las vi por la ventana. Así que puedes practicar agarrando la sartén y...Creo que sigue siendo mala idea...
—¿Qué dijiste?
—Nada, nada.
—mmm...-Natsumi puso un dedo en su menton, como si pensara- Ahora que estas aquí ¿Por qué no me cocinas algo?
— ¿Tengo pinta de chef?
—Pues... supongo que si no me haces caso cocinaré…
— ¿Ves lo sencillo que era? -suspiró.
—Y no solo para mí sino para todos los muchachos.
—¡Exacto...!...Espera...n-no...-tartamudeo un aterrado muchacho- mejor cocino yo.
Goenji se dirigió al refrigerador y saco unos cuantos huevos, harina, miel, canela, leche, una cacerola y un tenedor.
—¿Te parece si hago hotcakes?
—Sí, está bien.-sonrió la chica.
—Observa con cuidado, esta receta es fácil y podrás hacerla en un dos por tres.
—Seis.
—¿Qué?
—Qué si, que si.
Con sumo cuidado, rompió los huevos, los dejo caer en una cacerola y los batió suavemente por 5 minutos, los cuales impacientaron a Natsumi.
—Ya. Lo mueves y lo mueves y te tardas años ¿Y la sal?
— ¿Sal? ¿No te dije que cocinaré hotcakes?
—Cambie de opinión, enséñame a hacer un huevo revuelto.
Goenji, un poco confundido, agarró el salero y añadió 3 pizcas de sal
— ¿Solo tres? Pero si el paladar quiere degustar...
Goenji agarró el salero, le quito la tapa y vació toda la sal al huevo-¿Así está bien?
Natsumi subió sabio sus hombros por el asco y asintió.
Goenji suspiró y siguió batiendo el huevo con delicadeza, haciendo que Natsumi se vuela a impacientar.
—Muy bien, ¿A qué hora le echas la leche?
— ¿Leche? ¿Quieres que le eche leche? Pero los huevos y la sal y la leche…
—No importa, creo que vi la receta en Internet con leche, échale la leche.
Goenji, extrañado, agarró la botella de leche y vertió 2 chorritos.
-¿Solo dos?
— ¿Quieres leche? Mira como le echo leche- Goenji agarró todo el frasco y lo vació en la cacerola- ¡Me va a salir rico esta sopa de huevo!
—Sí...sí…continúa.-Natsumi volvió a subir los hombros por el asco.
Con el humor ya desecho, Goenji nuevamente se puso a batir la extraña mezcla de huevo, sal y leche. Si se le ocurría a la chica volver a interrumpirlo con "Y la…"
— ¿Y la canela? Yo vi que...
Ese fue el punto. Goenji soltó es cucharón y fue directo hacia Natsumi con un un rostro sonriente.
— ¡Canela! ¡canela al huevo que le acabo de echar sal! ¿¡puede un ser humano comer así!?
—¡Pero, Goenji! yo vi una receta que dice que así se comen los huevos en Francia.
—Pues agarra tu avión y vete a Francia a comer tu encanelado de huevo.
—Págame el pasaje.
—Te compro el avión.
—¿Y si me compras el aeropuerto?
—El país mejor.
Por razones de no querer aburrirte querido lector, dejaremos esta discusión aquí y veremos que están haciendo los demás chicos.
El pajarito se sintió muy ofendido. ÉL, que solo quería llenar de música el ambiente, había sido golpeado por una pantufla voladora proveniente de una adolescente con delirios. AH NO, eso lo iba a tolerar, se vengaría de la forma más cruel y vil que un pajarito podría hacer. Todos sus pensamientos pararon al ver otro balcón. Se posó en él, nuevamente levantó la colita, la movió a un ladito y al otro ladito, levantó la cabecita y cuando por fin se sintió preparado, inhaló todo el aire posible y…
— ¡Un nuevo día para jugar fútbol!-*Plaf* El pajarito recibió un fuerte pelotazo de parte de Endo que lo dejo inconsciente. Endo se dio cuenta de su terrible error y trató de reanimar al pajarito.
— ¡Pajarito! ¿¡Qué hago!? Reacciona...heee… ¡Ya se! Ayer vimos una película con Hiroto de una princesa que cantaba y los animales eran felices. ¡ujum! Ahhhhhh...
Apenas dijo la primera silaba, el pajarito abrió enormemente sus ojos y salió rápidamente de su habitación. Endo se relajó y recogió la pelota para ponerse a practicar dando pelotazos a la pared.
—Quien pensaría que si funciona. La vida es buena.
Se encontraba Hiroto apoyado en su balcón. Tenía los ojos cerrados, pensativo. Era extraño, hoy no podía quitarse esos pensamientos perturbadores de su cabeza. Suspiró otra vez, últimamente se preguntaba por qué las chicas se desmayaban cada vez que él pasaba por su costado ¿Tendría una enfermedad?, ¿las asustaba? Lo que más triste le ponía era que se desmayaban en un radio de cinco metros, eso era más triste. Ayer vio una película con Endo donde una princesa se desmayaba por comer manzana. ¿sería el perfume de manzana que usaba? Después de pensarlo lo tiró a la basura y decidió crear un movimiento de "no queremos a las manzanas". Suspiro hondamente otra vez y al momento de abrir sus ojos apareció el pajarito muy furioso.
—Hola pajarito-dijo mientras se acercaba lentamente a él- mira qué bonito eres ¿Me puedes cantar algo? Estoy triste.
El pajarito, creyendo estar en un lugar seguro y apto para cantar, se poso solemnemente delante del chico. NUEVAMENTE levantó la colita, la movió a un ladito y al otro ladito, levantó la cabecita y cuando se sintió preparado, inhaló todo el aire posible y…
— ¡HIROTOOOOO!- Midorikawa entro violetamente a la habitación golpeando la puerta, provocando que Hiroto se asustara.
— ¡Qué!-El chico se volteó rápidamente, haciendo que en el acto golpeara al pajarito y este cayera al suelo-¡Midorikawa como haces eso!…¡Ah! pajarito perdón yo no quise…
El pajarito se levantó todo mareado y se fue volando como pudo. Pensó que irse de ese lugar sería la mejor cosa que pudiera hacer.
— ¡Midorikawa, no hagas eso me asustaste y también al pajarito!
—Tú lo golpeaste yo no -respondió con desinterés- no te proyectes conmigo.
—Bueno, olvídalo. ¿Qué se te ofrece?
—¡Ya no puedo más!
—¿Qué cosa?
—Ese vacío sigue en mi, no se con qué llenarlo, lo he intentado todo y no puedo más.
—Tranquilizate -le animó -seguro que el desayuno está listo pronto.
¿Midorikawa con problemas emocionales? Faltaba más, el chico solo tiene hambre, como si no lo conocieras...
—Pero Aki, Haruna y Fuyuka se fueron al supermercado hace media hora y todavía no vuelven .
—Baja a la cocina, de seguro hay comida en el refrigerador. Creo que sobró de la cena.
—Es que abajo Natsumi y Goenji se están peleando y dan mucho miedo.
Hiroto se alarmó e inmediatamente agarró de la mano a Midorikawa y bajaron a la cocina.
Al llegar, encontraron a todos los chicos mirando la discusión con interés. Cada pregunta que Hiroto hacía sobre la discusión de esos dos, recibía la misma pregunta: "Ya estaban peleando cuando bajamos y no podemos acercarnos porque sí". Hiroto y su acompañante se sumaron a la multitud de espectadores para presenciar el acto.
—¿¡Y si me compras el continente!?
—¿¡Y si te compro el planeta!?
—¡ Es que no entiendes! ¡En Francia las recetas son así!
— ¡Estamos en Japón y comes lo que hay!
— ¡Pero por qué me gritas yo no te hecho nada!
— ¡Siempre estas levantándome temprano con tus ideas persecutoria de que nos espían! ¡Quiero dormir en vacaciones!
— ¡El único que se levanta eres tu! ¡nadie se queja!
—¡Déjame dormir!
— ¡Dejen de discutir!- Fubuki se acercó y se puso en medio de ambos- no resolverán nada así. Dense las manos y hagan las paces.
Al no recibir respuesta, Fubuki los tomo a cada uno de los brazos y los junto es un abrazo, dejándolos completamente atónitos a ambos y provocando las risas de los demás chicos-Así, no discutan. Tómense las manos y se quedarán asi toda la mañana.
— ¡Eso no!-dijeron a coro los dos muchachos.
—Yo se que si. O le digo al entrenador que estas poniendo cámaras por todas partes y que tu no quieres levantarte temprano.
Los dos suspiraron y se fueron como Fubuki los había dejado: "con las manitos tomadas como niños buenos."
—Fubuki, eres un genio-Midorikawa corrió para darle un abrazo, Fubuki abrió sus brazos para recibirlo, pero para su sorpresa el abrazo era para el refrigerador.
—Vamos a ver que hay, me muero de hambre- Kageyama corrió hacia el refrigerador y lo abrió. Los chicos se acercaron y empezaron a comer lo que encontraban.
Justo en ese momento, llegaron las tres managers con sus bolsas de compras. Las tres se veían muy ilusionadas, cosa que provocó curiosidad en los chicos.
—Adivinen-dijo alegremente Aki- tendremos vecinos.
— ¿Vecinos?-dijeron a coro los chicos.
—Sí, ¡qué emoción!
—Eso es imposible- en ese momento aparecieron Natsumi y Goenji- mi padre dijo este lugar era solo para nosotros.
—Bueno Natsumi, pero…espera… ¿Por qué tu y Goenji están así?
—Larga historia…no preguntes- Goenji se veía realmente irritado.
—Está bien. Por cierto, en este momento se están acomodando.
— ¿Cómo se llaman?- Dijo Endo- Tal vez jueguen futbol.
—Ya los conocen.
— ¿Qué?
—Haruya Nagumo y Suzuno Fusuke-dijeron en coro la chicas.
INAZUMA ELEVEN LEVEL 5
Pueeees…qué rara era xD Esto lo escribí cuanto tenía 13 años creo, ahora tengo casi 20 y puedo decir, sin pecar de presuntuosa, que he mejorado. Espero traerles el cap dos muy pronto. Aunque ya no da risa D:
