Aviso: Todos los personajes y lo que reconozcan pertenece a JK Rowling.

Este fic participa en el Reto Especial de Aniversario: "Almas gemelas" del foro Hogwarts a través de los años.

Pairing: Sirius y Remus (Amistad)


La familia que escogemos.

Sirius entró al dormitorio pero se detuvo en seco al ver que todas las camas estaban vacías salvo esa frente a la suya.

Tragó saliva y pensó rápidamente si debía irse; había pasado un mes sin hablar con él y en ese tiempo Remus no se había molestado en dedicarle siquiera una mirada. Las últimas palabras que le había dicho aun resonaban en su mente.

La próxima vez que quieras usar mi "peludo problema" para llevar a cabo tus planes homicidas al menos avísame, ¿quieres?

Habían salido con muchísima rabia, resentimiento y acompañadas por una mirada traicionada que lo atormentaría hasta su último aliento.

Al principio había tratado de creer lo que James decía: solo debía darle tiempo y todo volvería a la normalidad, pero la paciencia nunca había sido una de sus virtudes.

No podía sentarse a esperar a que su amigo lo perdonara por algo tan horrible como lo que había hecho. Sirius se sentía como le peor de los traidores, aunque años después descubriría que existía alguien incluso peor.

Sabía lo que tenía que hacer, lo que tenía que decir, tal vez no lo solucionaría todo, tal vez la situación no tenía solución, pero sería mejor que esperar a que la gracia divina lo arreglara o seguir soltando excusas sin sentido.

De repente Remus sintió su presencia y volteó a verlo, provocando que el corazón de Sirius latiera fuertemente en su pecho por los nervios.

Abrió la boca para decir algo pero el licántropo se le adelantó.

-Ya me iba. –Susurró levantándose de su cama.- Te dejaré solo.

-No. No lo hagas. –Soltó Sirius torpemente.- Quiero decirte algo.

Remus dejó de moverse y se volvió para verlo, pensativo y notablemente dolido. Y Después de lo que al merodeador mayor le pareció una eternidad, asintió.

-Escucho.

Sirius repasó rápidamente todo lo que podía decir, las formas en que podía hacerlo para no quedar tan mal, para no perder su imagen… Pero solo había una forma de decir aquello.

-Perdón. –Susurró, con toda la sinceridad del mundo.- Perdóname, Remus, yo… La cagué, se que lo hice pero te juro que no quería lastimarte, ni en un millón de años hubiese querido hacerlo, tú… Eres mi mejor amigo, mi hermano. Lo siento, en serio lo siento.

Remus se le quedó viendo, atónito y más pálido que de costumbre, parpadeó varias veces de manera incrédula. Sirius sabía lo que estaba pensando: era la primera vez que lo escuchaba disculparse por algo.

Perdón, te amo, te necesito, entre otras, eran frases que Sirius guardaba para momentos cruciales, no salían con cualquiera. Sabía que, sin importar lo que Remus decidiera, esta vez les había dado buen uso.

Al final, su amigo suspiró resignado y sacudió la cabeza. Las comisuras de la boca de Sirius picaron con la necesidad de elevarse.

-Eres un bastardo… -Susurró Remus.- Lamentablemente tienes razón, somos hermanos… Y eso de cagarla y perdonarse es lo que hacen las familias. –Sonrió con sinceridad.- ¿No?


NA: Se que esta situación debió haber sido mucho más larga e intensa pero para una persona que no sabe resumir, escribir esto en menos de 500 palabras fue una odisea. Mi primer Drabble y mi primer reto, espero que haya quedado decente.