Rapsody

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Confrontaciones y castigo

Corría, le dolía el pecho por la agitación y la respiración se le dificultaba a cada zancada. Iba a llegar tarde en el primer día de clases, no lo podía creer, Parvati y su estúpida demora en el baño. Despúes a Ron se le pierde el libro de Pociones 7 así que Harry y ella le tuvieron que ayudar.

Así que ahora ahi estaban, los tres corriendo como unos estúpidos en el primer dia, mientras que unos que otros alumnos de Slytherin que pasaban por ahí les miraban.

Corrieron otro tramo mas por las mazmorras hasta voltear en un pasillo a la izquierda, y bajar otras escaleras más, esquivar a un muchacho de segundo y seguir.

La castaña se ruborizó ante la bonita escena que estaban haciendo, después creyó sonreír sin darse cuenta al divisar el aula de Pociones a medio camino.

- Ya...lle...gamos...- jadeo Harry tocando la puerta con sus manos temblorosas por el maraton.

Un profesor con una mirada penetrante y pelo grasiento les abrio y con gesto adusto les indicó sentarse cerca de los pupitres de los Slytherin, Hermione sintió que su día no podría empeorar...cuan equivocada estaba.

- Veinte puntos menos para Gryffindor, señores Potter, Weasley y srita. Granger. Señor Malfoy, puede indicarles a sus compañeros que veíamos antes de su...retrso. - mencionó con esa voz que pretendía ser amable, pero que detrás de ella se ocultaban intenciones ponsoñosas.

El rubio estaba sentado exactamente detrás de Granger, ella podía sentir su aroma fresco y podía imaginar la mueca burlona del rubio detrás de ella, con esa sonrisa de autosuficiencia en su pálido rostro. Hermione sintió un escalosfríos al sentir la voz de Malfoy detrás de ella, cerca y con un tono cargado de astucia.

- Hablaba, profesor, de la poción del filtro Muertos en Vida, y sus efectos secundarios si se preparaba mal o se ingería días antes de su preparación final.

Sintió a Ron apretar los puños a su lado, y sus orejas estaban tomando un suave rosado. Lease: Problemas.

- Muy bien señor Malfoy. - dijo Snape con un tono que difería del normal entre profesor y alumno, más bien sonaba a favoritismo. - Veinte puntos a Slytherin.

Bruscamente se volvió al pizarrón y empezó a anotar los ingredientes de alguna poción, y enseñaba a la clase como debía preparase pero Hermione no podía prestar atención, pues Malfoy abrió su bocota de nuevo.

- ¿Qué pasó, Weazel? - susurraba con malicia. - ¿Te quedaste dormido? ¿Tan desagradable es dormir en tu asquerosa cabaña que prefieres estar en tus lindos doseles rojos escarlatas, suaves y mullidos cojines?

La gota que derramó el vaso. Hermione intentó poner una mano sobre la ahora roja de ira de Ron, pero no llegó a tocarla pues este se volvió tan bruscamente que Hermione pensó que se había lastimado su cintura.

- ¡Cierra la boca, Malfoy! - susurró rojo como tomate - Mejor la Madriguera que esa casona con olor a muerte y...mortífagos.- agregó con una cara de llena de asco. - Tus padres apestan a mortífagos.

Ahora Malfoy se puso rosa y quiso levantarse a reclamar, Harry tomó a Ron de las mangas para evitar que se lanzara al Slytherin, mientras que la castaña blandió la varita y unas cuerdas envolvieron a Draco y le dejaron inmovil en su silla.

El revuelto de sillas echas a un lado y el grito de los alumnos al percatarse de la pequeña riña hizo que el profesor Snape volteara y mirara la amistosa escenita: Ron, sentado a la fuerza por Harry, Draco en su asiento, con unas cuerdas alrededor y Hermione, con la varita alzada.

- Veinte puntos menos, srita. Granger. - se acercó al pupitre, donde ella estaba parada. - Detención. Esta noche, Granger, veremos que opina McGonagall sobre su alumna estrella cuando sepa que desenvaina la varita en plena clase.

Hermione sintió dentro de ella los instintos asesinos que brotaban contra el profesor, pero la imprsión, y el sentimiento de injusticia se hizo presente, asi que simplemente se quedó sin habla, sorda ante los gritos de protesta de sus amigos y de Gryffindor, mientras que Malfoy era desatado por el profesor y este amenazaba con castigo para Ron, quien había perdido otros viente puntos más por sus protestas.

Veremos quien acusa a quien, pensó la castaña al ver a Malfoy sonriendole como si no hubiese roto ni un plato.

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- ¡Malfoy comenzo todo!

- ¡Te recuerdo que yo no saque la varita, Granger!

Los gritaban a McGonagall se escuchaban hasta fuera del despacho, al mismo tiempo, desquitandose, y peleando por ser el primero en hablar, Snape estaba detrás, con los brazos cruzados, Minerva estaba comenzando a estresarse ante esos dos inmaduros.

- Basta...

- ¡¿Quién se metió con quien primero!?

- Señorita Granger...señor Malfoy...guard-

- ¡No tengo la culpa que Weasley viva en un coladero! - interrumpió Malfoy.

Hermione hizo un sonido de astío y Minerva sacó la varita los silenció a ambos de un movimiento y sin pronunciar el hechizo.

- BASTA YA!

Ambos se llevaron las manos a la boca.

- ¡Por Merlín, parecen dos niños de preescolar! - exclamó furibunda. - Como el señor Malfoy también contribuyo, tendrán castigo...AMBOS - aclaró ante las mudas protestas de ambos.- limpiando los calderos, al modo muggle.

Malfoy dibujó en el aire con su varita diciendo:

- "Es tu culpa!"

Hermione le emulo.

- "NO es cierto, hurón!"

- "¡¿A quién llamas hurón, sangre sucia!?" - entonces se acercó y Hermione le abofeteó por llamarla así.

Se desató Troya.

Solo se veian dos cuerpos rodando por el suelo, tratando de dañar cualquier pedazo de piel a la vista, colores rubio y castaño, carmin y verde se entemezclaban, Minerva soltó un grito de asombro, mientras que Snape tomaba de los brazos a Draco, ella intentaba sacarla tomandola de la cintura.

Draco soltó una extraña mueca, como si gritara, Hermione le había mordido.

- Basta...Bast-!

- Auuu!! - Draco piso a Snape en un descuido y sin querer.

Hermione pateaba a Draco mientras este se defendia como podía, ambos tenían la piel con rasguños y moretones. Hermione lo tomaba de la corbata y el estaba con el pelo despeinado y con las mejillas sonrosadas, su camisa estaba rasgada.

Ella no estaba mejor, pues su capa estaba torcida y el pelo más enmarañado que de costumbre.

- He dicho...BASTA!!

Los separó poniendo una barrera con su varita.

- No puedo creer su comportamiento, Srita Granger, usted, prefecta...! - y miro a Malfoy - Y usted también debe comportarse como el hombre que es!

Ambos jadeaban y se lanzaban miradas furibundas.

- Por esta muestra de comportamiento de brutos barbajanes, el castigo se alarga. - Ambos la miraron con sorpresa. - Ayudarán a Hagrid con las clases con los niños de primero. Y LIMPIARAN, sin magia el precinto de animales de Hagrid.

Esta vez a Hermione se le fue el color.

Eso era más de lo que pensaba, Draco estaba igual, odiaba limpiar, odiaba los animales, pero sobre todo, odiaba a Hermione Granger!

Notas:

Bno, es mi primer fiction,...tenganme paciencia u.u porke esrtudio y trabajo asi que tardare un pokitin en subir capt..

Si me ekivoko corriganme en la ortografia . !

Que pasará en esos castigos?

Se matarán el uno al otro?

O será que los "tiernos" animales de Hagrid los matan antes?

Dejen criticas constructivas n.n!!

Byeee