Bueno esto es algo que se me ocurrió mientras cocinaba un postre (si lo se soy rara) pero pensé que sería buena idea escribirlo! Y ya que estoy en esto pues me arriesgo a subirlo…
Aclaraciones:
Los textos en cursiva serán conversaciones por teléfono, cartas, mensajes de texto y Flash Back.
Los textos en negrita serán mis notas finales y posiblemente cuando mencione una escena en específico.
Si tienen dudas dejen un Review (si lo merezco)
Una tarde Dulce
¿Cómo rayos se me ocurrió aceptar esa propuesta?, me arrepentí en el mismo instante en que de mis labios salió ese tan preciado sí. ¿Por qué Tsuruga-san me pidió ese favor? ¿Quién era esa chica?... me preguntaba muchas cosas de camino a casa, hoy en la tarde, Tsuruga-san se había acercado a mí, en horas del almuerzo, en la cafetería de LME y me había pedido un extraño favor.
Flash Back:
Estaba sentada en un mesa cerca de la ventana, pensando en que aun me faltaba mucho para llegar a igualar a Tsuruga-san en lo que se refiere a la actuación, y en mi camino, llegue a enamorarme de él incluso más que cuando estaba con Shotaro; hace mucho decidí que ya no valía la pena seguir tratando de vengarme, aunque ahora soy tan popular como él, no me produce ningún beneficio estar en esta situación con el…al final, como siempre lo perdone, claro la cicatriz que se formo en mi herida esta ahí, recordándome que el me hizo mucho daño, y aunque ya podía tratarlo como el amigo que siempre, o la mayoría del tiempo fue; estaba perdida en estos pensamientos, que no note que Tsuruga-san se había sentado frente a mí y estaba tratando de llamar mi atención.
-¿Mogami-san?... ¿estás bien?-movía insistentemente su mano en frente de mi rostro, y en uno de tantos llamados, volví a mi cuerpo.
-¿Ah? ¿Qué?...Tsuruga-san, ¿Cuándo has llegado?-estaba desconcertada, ¿llevaría mucho tiempo intentando traerme de vuelta de mi mundo de pensamientos?, que últimamente solo giraban en torno a lo que Tsuruga-san hacia y mi inminente enamoramiento.
-Como siempre…igual de distraída, debes tener cuidado Mogami-san recuerda que ya eres lo suficientemente famosa como para que te ataquen los admiradores-me dio una cálida sonrisa, que lograba que se me paralizara el corazón y un sonrojo se alojara en mi rostro.
-¡No es cierto! Aun me falta mucho para ser como Tsuruga-san-baje mi mirada, pues pensar en la distancia que me separaba de Tsuruga-san me ponía triste, el saber que por más que lo intentara no podría llegar a ser más que su Kohai.
-Al parecer alguien esta triste… ¿tienes algún problema con un papel? Puedo ayudarte, sabes que lo haré gustosamente- levante mi rostro y contuve el aliento, cuanto más lo veía, mas me sorprendía lo bueno que era conmigo- No es eso- mi voz sonó apagada, pero no podía decirle lo que sentía.
-Si ese es el caso, entonces esta bien-Tsuruga-san-exhaló un suspiro que pareció durar años, últimamente cada vez que me veía se la pasaba suspirando, creo que le estoy siendo fastidiosa.
-Tsuruga-san estaba aquí, ¿por qué motivo?-pregunte para aligerar el ambiente-¡Oh! Lo había olvidado, tengo que pedirte un favor, Mogami-san- su mirada estaba fija en mi rostro-Cualquier cosa que me pidas lo hare- y a mi mente vino un pensamiento de él confesándose, lo suprime antes de que hiciera efecto en mi.
-Verás, quiero que me ayudes a preparar un postre, es para una chica que me gusta, y sé que le gustan los dulces, así que quiero impresionarla y eres la única que conozco que podría ayudarme con esto-ser actriz facilitaba mucho las cosas, de otra forma hubiera roto en llanto… ¿Tsuruga-san gustaba de una chica? ¡Y encima le iba a preparar un postre!
-¡Oh! Eso es inusual…pero si, lo hare, debe ser alguien muy especial si ha tocado el corazón de Tsuruga-san-le di mi sonrisa más sincera y por dentro sentí como mi corazón volvía a romperse en pedazos-Si ella es muy especial…sé que le gustará-la sonrisa de Tsuruga-san era sincera y estaba tan feliz que soporte el dolor para no arruinar su felicidad.
-(Risas) Tsuruga-san esta enamorado, ¿Verdad?-agradecía inmensamente haber elegido estudiar actuación- muy bien, mañana es sábado, dime si estas disponible y yo me encargare de los ingredientes- Gracias, claro esta bien, en la tarde como a las cuatro, ¿te parece?-Al parecer estaba muy entusiasmado con la idea del postre.
-Si, me parece bien, ¿tienes la receta?, para comprar los ingredientes mañana en la mañana- extendí mis manos esperando tan dichoso papel- Mogami-san, ahora mismo no lo traigo conmigo, Yashiro-san te lo dará antes de irme a las tres, ¿sí?
-Esta bien, a esa hora estaré con Sawara-san, dijo que necesitaba verme- me levante de la mesa, me lleve mi bandeja con la comida intacta, no había probado bocado por estar soñando despierta, y el hambre que tenia se esfumo cuando Tsuruga-san dijo todo aquello.
-Mogami-san ¿no piensas comer?-la expresión de Tsuruga-san cambio repentinamente a una de preocupación, lo entendía, yo muy raras veces me saltaba las comidas, y lo hacia solo cuando algo andaba mal.
-No, es muy tarde, y tengo que ir a trabajar, así que comeré algo ligero por el camino-me sentí incomoda, creo que los hábitos alimenticios de Tsuruga-san se contagiaban.
-Haz un buen trabajo-me deseo con una voz que no supe interpretar, ¿estaba preocupado, enojado o feliz?
El día finalizo sin mayores problemas que regaños dirigido hacia mi, estaba desconcentrada, aquella conversación me dejo en las nubes y con una opresión en la garganta, quería llorar, pero si lo hacia, ¿con que excusa podría salir?, mi nueva grabación estaba yendo bien hasta hoy, el director Nakamura se molesto mucho y me mando a casa, la próxima semana tendría que llegar y esforzarme al máximo, no podía dejarme vencer, ya me había pasado una vez y lo supere, ¿Por qué no hacerlo ahora? Además Tsuruga-san me regañaría si mi actuación se estropeaba por culpa de mis emociones… ¿por qué no podía sacármelo de la cabeza? mis esperanzas estaban rotas y aun así me torturaba con esto. Luego de que me mandaran a casa antes de tiempo, fui a la oficina de Sawara-san, al menos el me dio una buena noticia, me querían para participar en un drama y yo sería la protagonista, me lleve el guion a casa, estaba feliz pero no tenia ánimos de demostrarlo, cuando esperaba el elevador, me tope con Yashiro-san.
-¡Oh Kyoko-chan!, ¿ya te vas?, menos mal que vine antes, toma, aquí te manda Ren, ¡no sabia que ahora se mandaban cartas de amor!-por alguna extraña razón Yashiro-san sonreía de una manera que me daba escalofríos- ¡te equivocas! Es solo un favor, no malinterpretes las cosas, no veas cosas donde no las hay- esas palabras salieron con un filo que no esperaba que se filtrara en mi voz- ¡Lo siento!, estoy un poco molesta Yashiro-san-hice una reverencia, tome el sobre y salí corriendo, si el elevador había llegado no importaba, quería huir y en este momento las escaleras de emergencia eran una buena opción.
Luego de esa repentina huida, camine hacia el parque central de Tokio, y me senté en la fuente, hoy era un día caluroso y la brisa que soplaba en ese lugar era refrescante… me hacia olvidar muchas cosas y recordar muchas otras. Cuando llegue al mundo del espectáculo, mi única meta era vengarme de Shotaro, muy pronto comenzó todo a cambiar, conocí a Tsuruga-san y empecé con la actuación para encontrarme a mi misma, al momento de decir cambiar mi vida, jure no volver a enamorarme, ya lo había hecho y todo había acabado cruelmente, y en todo este asunto, mi corazón se rompió en mil pedazos, nunca pude encontrarlos nuevamente; pero alguien más si, Tsuruga-san, con su amabilidad, con su sonrisa del emperador de la noche, con sus regaños, palabras de apoyo, logró lo que yo sola no hubiese podido, armar de nuevo mi corazón destrozado, aquellos pedazos diminutos que eran casi imposible unir de nuevo, Tsuruga-san los remplazó completamente…lo agradecía, gracias a ello era capaz de interpretar papeles que al principio eran tan difíciles.
Recordar todo esto hacía que mis emociones se descontrolaran completamente, hace tres años que estoy en el mundo del espectáculo, hace un año vencí a Shotaro cuando había decidido olvidar mi venganza, y hace tres años que me enamore de Tsuruga Ren, ¡soy patética! No lo note, sino hasta hace poco, con ayuda de Moko-san, hubiese preferido no darme cuenta, siempre supe que yo no podría alcanzar a Tsuruga-san, pero al estar consiente de que mi admiración por el trabajo de mi sempai iba más allá de eso, era de cierta forma horrible, de improviso caí en un profundo abismo; yo tenia la esperanza de poder acercarme a Tsuruga-san con mis habilidades actorales, pero ahora estaba frustrada, mis nuevos sentimientos me hacían volverme pesimista en extremo… apreté muy fuerte mis manos, de alguna forma eso ayuda a aliviar el creciente dolor en mi pecho, en ese instante me di cuenta que aun llevaba el sobre con la receta de Tsuruga-san. Verlo me recordó el porqué de mi reciente malestar…esto contenía algo que iba a parar en las manos de la chica que había robado el corazón de Tsuruga-san, y lo peor de todo, es que yo tengo que ayudarlo a conquistarla… decidí abrir el sobre, vería la receta, compraría los ingredientes, me iría a descansar al Darumaya y al día siguiente ayudaría a mi sempai a subir un escalón en donde yo ya no podría tenerle, porque si soy sincera conmigo misma, estoy segura que esa mujer deberá ser muy especial y buena para Tsuruga-san y si no lo es, me encargaré de hacer que se arrepienta de haberlo rechazado.
Abrí el sobre, y me sorprendió lo que estaba escrito, era la receta para hacer un Mousse de chocolate, era mi favorito, era tan delicioso, el sabor en tu boca, esa dulce sensación de flotar cuando lo pruebas… ¡un momento! ¿A esta chica le gustaba el mismo postre que a mí?, esto no podía ser peor, la ventaja en todo esto era que yo sabía hacer este delicioso mousse así que seria realmente fácil hacerlo; me anime un poco, al menos haría suficiente mañana y comería, esperaba que eso sea suficiente para olvidarme del destino de ese postre y los sentimiento de Tsuruga-san.
Fin del Flash-Back
Eran las 5 p.m. cuando llegue al Darumaya con todas las cosas para mañana, me sentía terrible, mis pies pesaban más de lo usual, y yo quería llorar pero decidí no hacerlo, aunque yo sufriera, por el bien de Tsuruga-san sonreiría, no tenía hambre, así que subí directamente a mi habitación, Okami-san subió a preguntarme si deseaba algo.
-Kyoko-chan, ¿estas bien? ¿Quieres comer algo?- me pregunto, por su tono note que estaba preocupada, ¿tan mal me veía? Debía solucionarlo.
-Estoy bien, ahora mismo no tengo hambre, gracias por preocuparse-di mi mejor sonrisa y supongo que me creyó puesto que bajo a atender a los clientes; seguiría los consejos de la madre Shotaro, bajaría ayudaría a Okami-san, trabajaría hasta que cerrará, todo con una sonrisa, ¡eso haría! Después de que todo acabará mañana, yo sonreiría como si todo estuviese bien.
El resto de la tarde paso tan rápido que no me di cuenta, los clientes del Darumaya estuvieron muy animados, y me hacían reír a cada rato, así que sin darme cuenta fue fácil olvidarme de mis problemas, luego de que cerrará el local con ayuda del Jefe, me di una ducha y evite por todos los medios pensar en lo ocurrido hoy, lo que pasaría mañana y como tendría que vivir mi futuro. Fui a la cama a eso de la 11 p.m. y los recuerdos me invadieron, los bloquee todos, me dormí casi enseguida, lo ultimo que recuerdo de esa noche fue las lágrimas que salieron de mi ojos con mi ultimo pensamiento: "mañana Tsuruga-san sería de otra mujer".
El día siguiente expresa exactamente lo contrario de como me sentía, No había nubes en el cielo y el sol resplandecía, una brisa fresca soplaba y hacía que me sintiera miserable; ayude en el Darumaya toda la mañana y parte de la tarde, a eso de las dos, subí a arreglarme, puesto que aunque yo no tardaba mucho, la distancia entre donde me encontraba y el departamento de Tsuruga-san era grande cuando no se iba en auto, intente no pensar en la ironía del asunto. Me di una ducha rápida, hacia calor, cuando salí del baño opte por ponerme una falda corta con vuelos azul claro, un blusa blanca acompañada de un sweater blanco tejido y unas sandalias bajas de color blanco, los colores claros eran apropiados para el calor que estaba haciendo, me sentía cómoda y fresca, empecé a meter mi teléfono, mi brillo labia, un cepillo para el cabello, banditas para heridas (nunca se sabe lo que pueda ocurrir) y otras cosas más en un bolso que hacia juego con mi falda, cuando me dirigía a la cocina para buscar los ingredientes para el mousse sonó mi teléfono.
-si, habla Kyoko-conteste la llamada sin mirar el número telefónico.
-Kyoko-chan, soy Kanae-su voz sonaba un poco preocupada.
-¡Moko-san! Que alegría, ¿Cómo estas? ¿Te va bien en Okinawa? ¿Cómo va tu trabajo? Te extraño tanto… espero que vuelvas pronto-me emocione, Moko-san se había ido hace dos semanas a Okinawa y no me había podido comunicar con ella, esto era estupendo.
-Kyoko-chan, necesito un favor, así que no empieces a divagar como siempre-su tono de resignación era absoluto.
-¡Estoy tan feliz! ¿Dime que necesitas? Sabes que lo haré- mientras hablaba iba recogiendo los ingredientes- Moko-san me ha llamado, ¿ocurre algo malo?
-En teoría, si, por eso necesito que me ayudes- su voz ahora era de enfado.
-¿Qué ocurre?, me estas preocupando- mi alegría había dejado paso a la preocupación.
-Escucha atentamente, hoy llego a Tokio, y olvide llamar a mis hermanos para avisarles de mi regreso y pues no hay espacio en mi casa…así que eres la única a la que podía pedirle este favor… ¿me podría quedar contigo esta noche?- supuse que si hubiese tenido a Moko-san al frente estaría sonrojada hasta mas no poder, pero me alegraba completamente de que ella iba a quedarse conmigo esta noche, pero tendría que pedirle permiso a Okami-san y al Jefe.
-Moko-san, no sabes que feliz me haces, por supuesto que puedes, ¿a qué hora llegas? ¡Estoy tan feliz!-nuevamente mi alegría había vuelto.
-llegaré a eso de las 7 p.m. y creo que estaré en el Darumaya a las 8 p.m. ¡esto es horrible! Siento causarte estas molestias- Moko-san estaba apenada, pagaría por ver su cara.
-Esta bien, después de todos somos amigas, además me has permitido quedarme en tu casa, eres bienvenida al Darumaya cuando quieras… bueno debo colgar, tengo un trabajo que hacer, prepararé todo para tu llegada- debía apresurarme.
-Gracias Kyoko-chan, sabía que podía contar contigo- por alguna razón imagine que ella sonrió al decir esas palabras, y yo me sentí como si flotara, Moko-san era mi primer y mejor amiga en el mundo.
Luego de eso hable con Okami-san y el Jefe, me dieron su aprobación, estaba tan agradecidas con esas personas, las apreciaba realmente, eran tan buenos; prometí llegar a eso de las 7 p.m. para arreglar mi habitación para Moko-san, salí para la casa de Tsuruga-san, tenia tiempo de sobra, pero decidí darme prisa, de alguna forma la llegada de Moko-san hizo que mi dolor fuera relevado a un segundo plano, mientras caminaba pensaba en todas las cosas que le contaría a Moko-san pero todo lo bueno llega a su final, me quede sin pensamientos positivos y di paso a la realidad, a la verdad que me apuñalaba el corazón de una forma cruel.
En mi camino al departamento de Tsuruga-san, paso algo que no había previsto, y es que de repente y sin saber de donde salieron se me acercaron varias personas a pedirme autógrafos y fotografías, acepte porque eran pocas, pero luego aparecieron más y más, llegaron los paparazis, me sentí acosada, las preguntas, llamados de mi nombre por todos lados, definitivamente yo no estaba acostumbrada a esto, esto era acoso, tantos flashes de las cámaras y gritos hicieron efecto en mi y comencé a sentirme mareada, estaba rodeada, no sabia que contestar y más importante como salirme de aquel lío.
Hola! Bueno este es mi primer fic que publico, estoy súper nerviosa porque no se si le guste alguien, sé que es muy corto pero no quería que el primer capi fuera muy largo. T.T si les gusta déjenmelo saber a través de un Review, acepto de todo menos insultos! jejeje
