EL PROYECTO STARGATE

(Escrito por Federico Hernán Bravo)

INTRODUCCION

Le llaman de muchas formas: "StarGate", "Puerta a las Estrellas", "Anillo de Metal", "Portal Espacial", "Generador de Agujeros de Gusano" y un sin fin de denominaciones mas que apenas arañan simplemente la verdadera naturaleza extraterrestre de aquel aparato con forma de anillo metálico, repleto de símbolos, que descansa en las profundidades del enterrado complejo militar, enclavado en el corazón de una montaña, en alguna parte de los Estados Unidos de América…

Con miles de años de antigüedad, aquella singular maquinaria alienígena abandonada a su suerte por sus misteriosos creadores, es puesta a trabajar de nuevo con la ayuda del mas potente Software de ultima generación concebido por las mentes mas brillantes de este país, con varios objetivos: explorar nuevos mundos, recorrer el Universo, desentrañar todos sus mas recónditos secretos…

…Y, últimamente, de vez en cuando, como quien no quiere la cosa, salvarnos a todos de terribles amenazas intergalácticas…

Cuando el Comité de la ONU, conjunto con el Presidente, me convocaron para evaluar las instalaciones del "Proyecto StarGate" a fin de elaborar un detallado informe que fuera puesto al alcance de la opinión publica en un hipotético futuro, en el que se decida levantar finalmente la "Veda de Información Clasificada" sobre su existencia, lo primero que pensé fue lo siguiente: "No tiene sentido".

¿De que serviría escribir sobre el más grande proyecto concebido por la historia humana si cabía la posibilidad de que por meros tramites burocráticos, mi narración sobre lo que allí se hace JAMAS vería la luz?

Reconozco que esos fueron mis primeros razonamientos.

Con un cierto dejo de fastidio y hasta casi se podía decir, de abatimiento, abordé el vehículo aéreo privado que me llevaría desde Washington hasta el complejo súper secreto donde el Programa SG se estaba llevando acabo. En total, la tarea de investigación me llevó varios días, entre entrevistas al personal militar, científico y civil de la base y la recopilación de datos. Para cuando terminé, mis opiniones iniciales respecto a mi trabajo habían cambiado drásticamente…

Daba las gracias a Dios por haberme permitido estar allí y verlo todo con mis ojos.

De regreso en casa, con mis grabaciones a tope, repletas de horas y horas de charlas con los miembros del personal del SGC, me aboqué a la trabajosa tarea de sobre cómo ordenaría y abordaría mi narración. La ingente cantidad de anécdotas, de historias, de aventuras, sentimientos y emociones que estas valientes personas volcaron ante mí, cuando la confianza entre nosotros se forjó, merecía un tratamiento digno. Reconozco que NO fue un lazo fácil de formar; aquellos héroes, hombres y mujeres del Proyecto StarGate, son en el fondo, gente sencilla y particular. La presencia de un "periodista gubernamental" como yo bastaba para amenazar, de alguna forma u otra, la "tranquilidad" habitual de sus rutinas diarias, a las cuales estaban acostumbrados. Sin embargo, por esas casualidades no tan casuales, cuando el hielo primerizo entre nosotros se derritió, vertieron sin dudar un caudal de cosas en mis grabaciones que son una perla.

Ignoro si realmente mi narración, mi informe, vera la luz alguna vez al conocimiento del publico. Lo que si no me cabe ninguna duda es que cuando alguien en algún momento del futuro lea esto, conocerá de boca de sus protagonistas las emocionantes historias que conjuntamente, forman el Proyecto más IMPRESIONANTE que el Hombre alguna vez ha abordado…

EL PROYECTO STARGATE.


CORONEL RUNDELL. SALA DE REUNIONES DEL SGC.

[Mi primer contacto en el SGC fue el Coronel James T. Rundell, veterano militar y enlace para asuntos públicos. Nos estrechamos las manos en la imponente Sala de Reuniones del SGC, donde una mesa larga de madera caoba invita a imaginarse arduos debates entre el personal militar de la base y el responsable del lugar, el General Landry. Cerca nuestro, casi a un costado, una ventana de vidrio reforzado nos deja ver el anillo de metal repleto de símbolos llamado StarGate, ubicado en una habitación contigua muchísimo mas grande, la cual alguna vez supiera almacenar, en tiempos pasados de la Guerra Fría, misiles nucleares. Rundell es un excelente conversador y no me cuesta para nada comenzar la charla con él]

Usualmente este sitio es tranquilo. No siempre, claro, pero usualmente, lo único interesante que sucede es que a veces algunos científicos se quedan dormidos en mitad sus trabajos. No, hablando enserio… Este sitio solía tener mas movimientos constantes hasta hace un tiempo atrás. Cuando combatíamos las amenazas de los Goa'ulds y los Ori, quiero decir… ¿Me imagino que ha leído usted el informe sobre ellos antes de venir aquí, verdad?

Algo leí al respecto. Unos detallados informes sobre las amenazas hostiles de origen alienígena redactados por el Doctor Daniel Jackson y la Coronel Samantha Carter, si. Estoy familiarizado con sus nombres… aunque no dejan de asombrarme un poco.

Hijo, si a ti te asombran, deberías haber estado aquí cuando las cosas se ponían moviditas [Rundell ríe. Se acomoda en su asiento, divertido] Ya son cosa del pasado, me temo, pero en sus épocas, los Goa'ulds primero y luego los Ori no nos dejaban conciliar el sueño. Enserio. Eran justamente los días en que las cosas si que se ponían movidas… No quería estar en el pellejo de los chicos del SG-1, a decir verdad. Eran ellos los que se llevaban las peores embestidas de nuestros "adversarios" espaciales.

De lo que debo suponer, por lo que usted me dice, que jamás ha abandonado la base y cruzado por el StarGate…

Ya más lo quisiera yo. No, mi trabajo es aquí, en la vieja y querida Tierra, mas que nada. Pero no le miento si le dijera que no me quejo. Se lo repito: cuando los Goa'ulds y los Ori atacaban, las cosas se ponían muy feas…

[Rundell se reclina en su asiento. Suspira ruidosamente, antes de continuar hablando]

En los momentos de crisis, principalmente, el personal de la base adoptaba la profesionalidad que se espera de una situación semejante. No voy a mentir y no decir que no tenía miedo; lo tenía. Todos los teníamos. Si algo salía mal en las misiones SG, el destino del mundo entero dependía de ello. ¡Un solo paso en falso y adiós Tierra!

¿Alguna de esas crisis fue fundamentalmente muy traumática para usted o para el resto del personal del SGC? ¿Recuerda alguna en especial?

¡Puf! [Rundell hace un gesto de exageración con las manos] ¿Una sola crisis? Tuvimos varias, pero si tengo que citar las mas traumáticas… Si, las apariciones del Señor del Sistema Goa'uld Anubis y la llegada de los Ori a nuestra galaxia pusieron las cosas mas difíciles.

Por suerte, la sagacidad y el temerarismo del SG-1 y de los Generales Hammond y O'Neill primero, y Landry, después, nos fueron llevando por el buen camino. No sé, francamente hablando, que hubiéramos hecho si no fuera por la excelente guía de nuestros comandantes en jefe. Hammond es un genio, se lo aseguro… un estratega militar como pocos. De igual forma lo es Landry, quien trajo un soplo de aire nuevo a la base.

¿Y O'Neill?

[Rundell sonríe] Jack es simplemente, Jack. Cualquiera al que se lo pregunte, se lo dirá. Su aporte al SGC fue cortito, pero también muy bueno. Aun así, no puedo dejar de seguir destacando a la excelente conducción que ahora esta haciendo el General Landry. Es todo un maestro en cuanto a hazañas militares se refiere.

[Rundell habla con mucho orgullo de Landry… Con un cordial apretón de manos, nos despedimos. Mi camino por el SGC continua…]


GENERAL HANK LANDRY. INTERIOR DE SU OFICINA PRIVADA.

[El General Landry es un hombre mayor de aspecto bonachón. Tiene su despacho privado pulcramente aseado y un par de fotos de familiares desconocidos para mí penden de una pared. Al ver como mi mirada inquisitiva se fija en uno de aquellos cuadritos, me explica que aquella es su hija Lam, la mujer que ahora ocupa el puesto de doctora principal en la Sección de Enfermería del SGC. Landry me invita a sentarme en una cómoda silla delante de él, donde se desarrolló esta entrevista. Todo en el aire de aquel hombre exudaba respeto y profesionalidad… y un cierto recelo por tener a un periodista husmeando entre sus "chicos" aquella tarde]

Tengo que reconocerle que no me agrada la idea de esta entrevista, realmente. [dispara, a bocajarro] Se la concedo por pedido expreso de mis superiores, pero no veo utilidad en todo esto. No se ofenda, pero no es usted el primero al que le piden contar todo lo que aquí hacemos… y luego, no pasa mas de una simple inspección.

Entiendo su incomodidad, General. Lejos estoy de querer importunarlo… pero realmente su testimonio es necesario en esta investigación.

¡Esta bien! ¡Esta bien! [Landry resopla, resignado] Si no queda otra, pues… Adelante.

¿Cuáles fueron sus pensamientos cuando lo asignaron a este Proyecto?

"Menuda tarea de mierda me han dado". [Se produce un largo y profundo silencio. Aprovecho para carraspear] Bueno, no con esas palabras, pero ya me entiende. Hacia tiempo que O'Neill había ocupado el puesto cuando me llamaron para reemplazarlo. ¿Y que podía decirles a los del Pentágono? ¿Qué no quería? Acepté y no me arrepiento ahora, pese a que pareciera lo contrario. Sabia desde un principio que era agarrar un carbón el rojo vivo, pero no soy un hombre que se echa atrás en sus decisiones. Llegué justo a tiempo, empero; al poco de hacerlo se desató el asunto de los Ori…

La amenaza de los Ori fue la más grande que el SGC y este Proyecto jamás han enfrentado. Cuando las cosas empezaron a ponerse realmente horribles, ¿sintió usted temor?

¿A que viene esa pregunta tan extraña?

Solo quiero una perspectiva personal de usted, General, no se ofusque. ¿Temió algún momento por la seguridad de todos? ¿Por la del personal de la base, por su gente? Usted es el encargado de este sitio… el comandante en jefe.

General en Jefe, mas correctamente. Si… bueno… si… Tuve temor. Temor por muchas cosas. El asunto de los Ori se estaba yendo de manos… Cuando comenzaron a llegar a nuestra galaxia para convertir al Origen, su "religión", a todos los mundos que antes habíamos visitado, hubo un momento en que pensé "¿Cómo demonios salimos de esta?" Era una constante cuenta regresiva para salvar cientos de vidas. Perdimos muchas en el proceso, lamentablemente. Quizás es lo que mas… dolor me produce. Muchos buenos chicos han caído en el combate.

[Landry se refiere aquí, mas que nada, a las vidas perdidas durante el asalto de la flota espacial a la SuperGate, cuando los navíos Ori comenzaron a entrar en nuestra galaxia. Una de las catástrofes mas recordadas de ese hecho ha sido la invaluable perdida de la astronave mejor conocida como "Prometeo"]

Los Ori eran algo que jamás habíamos visto antes. Si no eran detenidos, muchos millones de vidas más correrían la misma suerte. Fue cuando entonces empezamos la búsqueda del "Arma de Merlín". Se decía que era el único dispositivo que podría terminar con las hostilidades. Todos los esfuerzos y energías del SGC se centraron en eso, el año anterior…

[El "Arma de Merlín" es el nombre con el que se conoce al mas avanzado dispositivo tecnológico jamás construido. Su activación serviría tan solo para terminar con los mismos Ori, ya que era un arma de destrucción de Seres Ascendidos]

Tuvimos muchas, muchas frustraciones para encontrar el Arma de Merlín. Pistas que no conducían a nada; otras pistas más que conducían a una serie interminable de sucesos… No, admiro realmente la tenacidad de mis hombres. El SG-1 realmente se lleva todos los aplausos. Sin ellos, esta victoria no se podría haber llevado a cabo nunca. Solo ellos, y simplemente ellos, son los responsables de que la amenaza Ori llegara a su fin. Yo tan solo me limité a cumplir aquí con mi rol de General en Jefe.

Su modestia es respetable, General… Pero usted también ha sido un miembro valioso para lograr conquistar esa victoria. Me han dicho que usted es un maestro en cuanto hazañas militares…

[Landry ríe] ¡El viejo Rundell! Que caradura. No lo tome en cuenta. Quiere que lo ascienda a toda costa. No depende de mí, la verdad. Rundell ha estado aquí desde la época de Hammond… Es una buena persona, por supuesto, pero de adulador empalagoso ya se pasa.

[El General vuelve a reír. Le acompaño con una discreta sonrisa]

Hablando ya más seriamente, señor periodista… No soy tan gran cosa como el señor Rundell le quiere hacer creer. Se lo reitero: hice mi trabajo. Mi misión era conducir los destinos de este Proyecto. Es lo que hice. Tuve aciertos… y desatinos. Es lo usual en este tipo de trabajo, pero solo me limité a seguir mi papel en estas instalaciones.

Los meritos verdaderos, los que se tienen que llevar los laureles, son mis chicos. El SG-1… y el resto del personal de la base. No voy a desmerecer a nadie. Yo soy prescindible; a mi me puede cambiar de mi puesto la siguiente dirigencia gubernamental, pero mi gente es otra cosa. Todos y cada uno son valiosísimos en los puestos que ocupan. Todos son imprescindibles. Son necesarios, ¿me entiende? El Proyecto StarGate son todos ellos, no yo.

[Sorprende ver a un hombre tan pulcro y eficiente como Landry hablar con tanto cariño y orgullo de sus subalternos. Cualquier otro General del Ejército se mostraría extrañadamente distante, alejado de su gente. No es el caso de Landry. Las emociones afloran a su piel cuando habla de ellos, "sus chicos", como cariñosamente se refiere al SG-1 y por extensión, al resto de la gente de esta base. Es un hombre digno de admiración y de respeto, y el más calificado para el puesto que ahora dignamente ocupa en estas instalaciones]


CORONEL SAMANTHA CARTER. INTERIOR DE UN LABORATORIO.

[El ambiente para hablar con la Coronel Carter es un laboratorio repleto de maquinaria de última generación. Computadoras, tubos de ensayo y demás son el mobiliario del sitio escogido por esta increíble mujer, cuya cabellera rubia y simpática sonrisa esconden una historia fascinante por detrás. Carter tiene un doctorado en Física Cuántica. Siguiendo los pasos de su padre, el recordado General Jacob Carter, se alistó a las Fuerzas Aéreas, en donde acumuló ella sola más de 1.000 horas de vuelo pilotando un jet F-16 Fighter en la Guerra del Golfo. Ingresó al SGC tiempo después de la primera misión a Abydos y lo hizo justo a tiempo para enfrentarse, como miembro del equipo SG-1 original, a la amenaza que supusieron los Señores del Sistema Goa'uld a la tranquilidad de nuestro planeta]

Entiendo que usted no formó parte del equipo SG original cuando viajaron a Abydos…

Estuve a punto de formar parte de ellos, si, pero… no se pudo. Cuando el Proyecto se reabrió al reaparecer la amenaza Goa'uld en nuestra galaxia, pues fui una de las primeras en enlistarme aquí.

Y también, tengo entendido de que usted es la que ocupa el puesto de "oficial científico" en el SG-1.

[Carter sonríe] A decir verdad, no lo diría con esas palabras, pero si. Ese seria, más o menos, mi rol.

¿Quizás si la llamo "Experta en Astrofísica" se sienta más a gusto? [Sonrío a mi vez. Carter asiente, pero lo hace con modestia] Su informe personal menciona muchos meritos, todos relacionados con asuntos científicos. Usted ha descubierto el funcionamiento de muchos aparatos de origen alienígena, sin contar con que ha solucionado un sin fin de conflictos que amenazaban la vida de sus compañeros de equipo. En pocas palabras, señorita Carter, es usted el "cerebro" de este equipo, ¿o estoy equivocado?

No me parece… del todo justo lo que usted dice, señor. No puedo desmerecer a mis compañeros. El Coronel Mitchell es un buen hombre, lo mismo que el Dr. Daniel Jackson, Teal'c y Vala Mal Doran. Todos formamos parte de un equipo… Que mi puesto en el grupo sea el de "oficial científico", como usted le llama, no le quita meritos al resto de mis compañeros. Todos pasamos juntos por momentos difíciles en estos diez años en los que dura el Proyecto, no se olvide.

Concuerdo con usted, no se alarme. Pero también sigo insistiendo en que muchas colaboraciones suyas fueron muy valiosas… se ha destacado mucho en asuntos tecnológicos en donde cualquier otro experto en la materia se quedaría congelado. Sin ir mas lejos, citando a su informe personal… donde mas se han destacado sus colaboraciones, han sido en temas tales como la amenaza de los Replicantes y la aparición de los Ori…

Bueno… no se que decir al respecto… [Samantha Carter, una intrépida astrofísica y una de las mujeres mas inteligentes de este planeta, se sonroja. Baja la mirada por un segundo, antes de continuar hablando. Aquello habla de la nobleza que esta menuda muchacha esconde en su interior] No quiero caer en reiteraciones, pero TODOS hemos sido (y somos) valiosos en este equipo, señor. Si no fuera por la sabiduría de Daniel Jackson descifrando idiomas antiguos o extraños, no podríamos haber desentrañado los secretos del StarGate; si no fuera por el Coronel Mitchell, ni por Teal'c, Vala y el General Landry, toda la maquinaria del Proyecto StarGate no hubiera podido funcionar. Todos marchamos al compás, como si esto fuera un reloj. Y yo… estoy muy orgullosa de pertenecer a este equipo.

[No me caben dudas de la realidad de aquellas palabras. Decido pasar a otra parte en la entrevista para relajar un poco más a esta intrépida mujer]

¿Podría explicar como funciona exactamente el StarGate? Creo que esa es un área que usted conoce y muy bien…

Modestia aparte, hay otros genios aquí que podrían explicárselo mejor que yo, pero lo intentare con todo gusto: El StarGate es un aparato que crea un Agujero de Gusano Estable, un puente desde un punto del espacio a otro. Para que funcione se deben marcar siete símbolos, como ingresar una combinación especifica, y entonces se establece un lazo con otro anillo similar ubicado en el planeta al que vamos. En total, existen una infinidad de redes StarGate en nuestra galaxia… sospechamos que existen muchas mas en otras galaxias vecinas.

El puente tendido entre un StarGate y otro es totalmente seguro, siempre y cuando el flujo de energía no se interrumpa ni nada obstruya la salida del otro extremo. El viaje a través del Portal es instantáneo; usted entra en un extremo y sale por el otro al mismo momento. En verdad, no entraña ningún peligro para sus átomos y moléculas… Principalmente, el anillo es como una "computadora" muy sofisticada. Reintegra cada patrón molecular y atómico transportado por él al viajar a otro planeta con una perfección envidiable.

En los informes que leí, se mencionaba una sensación de frío al cruzar el Portal al principio de las exploraciones SG…

Usted bien lo ha dicho. [Carter asiente] Eso sucedía al principio. El sistema se fue corrigiendo con el paso del tiempo. Lo mínimo que puede pasarle al viajar por el StarGate es un leve mareo, más que nada, si es su primera vez cruzándolo.

¿Todos los planetas que ustedes visitan se parecen a la Tierra?

No es que se parezcan a la Tierra, pero tienen puntos en común. Los Ecosistemas propicios para la Vida, tal y como la conocemos, tienden a ser similares al nuestro. Eso es algo que, de todas formas, no ha impedido que más de una vez aterricemos (por darle un nombre) en algún mundo con características que distan mucho de nuestra Tierra. Antes de hacer cualquier viaje, mandamos una sonda de exploración robotizada, una MALP. Comúnmente toma muestras de oxigeno y demás que nos sirven para luego decidir si vale la pena correr el riesgo de ir allí y los peligros que podríamos encontrar… o no.

Entre esos peligros, estaban los Goa'ulds…

Solo para citar algunos, claro. Los Señores del Sistema mas que nada, eran los principales focos de "amenaza" que desvelaban nuestras noches, en aquellos tiempos.

¿Su situación femenina en el equipo SG-1, en donde es mas predominante la participación masculina, alguna vez le generó algo de angustia o malestar? ¿Se sintió sola siendo la única mujer del SG-1?

Bueno… este… No soy la única mujer en el SG-1 [Carter carraspea, incomoda]

Hubo un tiempo en que lo fue, ¿verdad?

Podría… decirse que si… pero no tiene nada que ver… [Se remueve en su asiento, un poco incomoda] ¿Es necesario que conteste a todas sus preguntas?

Solo a las que desee contestar, mas que nada. Le pido perdón si la incordie con lo que dije…

¡Oh, no, no, no! No pasa nada [Se apresura a decir] Si, hubo una época en la que… fui la única mujer del equipo. Y no, no me sentí NUNCA menos por ser mujer, si esa es la pregunta que me ha hecho, señor. En realidad, siempre me sentí… un par con mis compañeros.

¿Se lleva bien con Vala Mal Doran, su nueva co-equiper femenina en SG-1?

¡Claro! Vala es… Bueno, Vala es… un tanto peculiar. Es una buena mujer, un tanto… singular, pero es buena, se lo aseguro. Debería conocerla.

Seguramente lo haré. Volviendo a su rol en el Proyecto StarGate… He leído en su informe que usted ha estado ligada sentimentalmente al General Jack O'Neill… ¿Es esto cierto?

[La pregunta descoloca un poco a la Coronel. Enarca las cejas, asombrada]

¿Eso ponen en mi informe personal?

Bueno, es lo que "sugieren".

Ya. Pues… bien… Hum… No es tan… tan así… Es decir, Jack era… es… un buen hombre. Es una persona MUY valiosa para el SGC, pero… pero yo… él y yo nunca… Es decir, no hemos estado… [Busca desesperada las palabras justas. Mueve sus manos, un tanto nerviosa] Dios… Esto… no hemos intimado nunca.

Vaya…

¡No me malinterprete! Lo que quiero decir es que… Lo de "estar ligada sentimentalmente" no lo debe usted tomar de la forma en que cree. Jack es un buen tipo y él y yo nos vimos envueltos en muchos peligros en común… pero solo fuimos compañero de equipo. Eso es todo.

[Hay un deje de melancolía en aquella respuesta de "Eso es todo". Me hace pensar en una situación no del todo conclusa entre la Coronel y el General O'Neill. No es mi intención hurgar demasiado en cuestiones personales, pero decididamente este tema nos trae una veta inesperada en una mujer como Samantha Carter. No solo es una de las mujeres más brillantes del país, sino también una de las más humanas de este Proyecto. Antes de despedirme de ella, le hago una última pregunta: ¿Cuál fue el momento más doloroso que tuvo que atravesar, en estos diez años de servicio en el SGC? Se tarda unos momentos para responder y cuando lo hace, fija su mirada en la mía. Sus ojos están llorosos]

Sin duda, hubo muchos momentos… no muy gratos. El más doloroso para mí fue la perdida de Janet Fraiser, la anterior Doctora principal que teníamos. Era, más que nada una gran profesional, pero ante todo, era mi mejor amiga…


DOCTOR LEE. INTERIOR DE SU LABORATORIO PRIVADO.

[Al igual que la Coronel Carter, el Dr. Lee ha elegido como sitio para la charla el interior de su laboratorio privado en el SGC. Aquí es donde se observan los aparatos más extraños y de aspecto más alienígena de todos los que he visto en la base. Lee es el siguiente genio en el organigrama del SGC y me muestra, orgulloso, las ultimas modificaciones que le ha hecho a un traje de exploración SG]

Todos nuestros trajes están hechos de Kevlar. Son lo mejor de lo mejor, pero aun así no son eficaces para detener un disparo de energía de una Lanza Jaffa. Estoy trabajando en las modificaciones apropiadas que permitirían a un hipotético sujeto que usara uno de estos nuevos trajes, sobrevivir a un encuentro desagradable con esta o cualquier otro tipo de variante de estas armas Goa'ulds.

Por ejemplo, esto [Lee me muestra una plancha de metal oscuro y flexible, engarzada en un chaleco antibalas] Un polímero de cerámica, resistente al calor, que detendría la descarga y... cabe perfectamente en este chaleco. Se lo colocaremos a este maniquí de pruebas y vera usted que quiero decir…

[Lee viste a un maniquí con el chaleco. Se vuelve hacia un ayudante de laboratorio que, solicito, espera su orden. El asistente asiente y ante la señal de su jefe, toma una Lanza Jaffa entre sus manos y abre fuego. Un relampagazo de luz se desata en la habitación. Sale humo del maniquí y pese a que el chaleco esta intacto, el plástico del que estaba hecho el muñeco se ha derretido. Lee parece entre avergonzado y abatido ante tamaño fallo en su exhibición]

Este… Bien, como le decía, es experimental, je.


DOCTOR HOFFMAN. SALA DE CONTROL DEL STARGATE.

[El Dr. Hoffman es nuevo en su puesto. Ha entrado aquí hace poco, pero es el encargado de familiarizarme con la Sala de Control del StarGate, un momento después de que mi entrevista con el Dr. Lee se volviera fallida. Delante de un cristal, en aquella sala llena de monitores de computadoras que siempre están encendidos, se ve un mapa estelar. Hoffman me explica que son las listas de planetas visitados y conocidos a lo largo de nuestra galaxia. Hay muchos operarios en aquella sala, los más destacados son Siler y Davis, quienes me saludan con cordialidad cuando Hoffman y yo entramos. En ningún momento, la actividad cesa, pese a mi presencia en aquel sitio. Todos están constantemente trabajando en algo y pasándose informes]

Esta es la Sala de Control del StarGate. Principalmente, la "cocina" de este sitio. Dado que el Anillo no dispone de un Dispositivo de Llamada, el que normalmente activa a los StarGates extraplanetarios, hemos debido construir un suplente. Estas computadoras que usted ve aquí son las que controlan los procedimientos normales cuando se enciende el Portal. Siete símbolos son colocados, uno a uno, en su lugar y entonces se establece el puente espacial. Las PCs aquí controlan todo eso y el movimiento circular neumático del aro al activarse. Todo esta fríamente calculado.

¿No existe margen de error?

Bueno, el StarGate no deja de ser una maquina, pese a lo impresionante de su envergadura. Hubo casos en los que han sucedido… incidentes… pero así como han sucedido, pues se han remediado.

Fascinante. ¿Y todas esas luces parpadeantes? Por ejemplo, ¿para qué son esas de ahí? [Señalo un panel de control repleto de luces intermitentes]

Ah… esto controla el máximo consumo de energía necesario para generar agujeros de salida. Curiosamente, en nuestro estudio de los StarGates, hemos descubierto que el nuestro usa un diez por ciento más de energía que los demás. Estos monitores se encargan de que las pérdidas sean mínimas al conectarlo. Creemos que está relacionado con la forma en que los cristales que alimentan al Portal absorben la energía eléctrica. Pero... también intentamos descubrir qué tipo de fuerza hace que produzcan una forma de energía de más pureza y rendimiento.

Increíble, doctor. Me preguntaba si podría ver el StarGate en funcionamiento…

Justamente, podrá hacerlo, va a salir un equipo de exploración SG ahora mismo. Observe con atención...

[A través del vidrio de la tronera, la Sala de Embarque del StarGate es bien visible. Un grupo de gente no muy numeroso aguardaba allí. Eran soldados con mochilas y demás equipamiento científico. Algunos llevaban armas listas para cualquier eventualidad. Puede que los Ori y los Goa'ulds estén derrotados, pero las amenazas hostiles de origen alienígeno jamás cesan. En la Sala de Control se dictan órdenes; se empiezan a apretar botones y teclear comandos en las computadoras. No pasa mucho para que una voz que anuncia "Símbolo Uno. Ingresado" se deje oír, al comenzar a moverse el impresionante anillo de metal. Todo concluye un rato después con los siete símbolos, las coordenadas del planeta a visitar, ingresados en su lugar y un estallido de luz similar a un chorro de agua. El Portal esta abierto y uno a uno, el equipo de exploración SG cruza a lo desconocido. El StarGate colapsa pasado unos segundos y la luz se desvanece]

¡Impresionante!

Como vera, el equipo ha dejado la Tierra. Mantenemos constante comunicación con nuestros equipos "allá afuera" de tanto en tanto. Las ondas de radio atraviesan el agujero espacial en ambas direcciones y cuando abrimos el StarGate para charlar con los viajeros, jamás hemos tenido ningún problema para hacerlo… salvo que las condiciones atmosféricas del mundo alienígeno visitado nos lo impidan, claro.

[La entrevista con Hoffman es corta. El doctor es solicitado en otra tarea. Antes de despedirme de él, soy escoltado hacia el despacho privado del Dr. Daniel Jackson. Era hora de hablar con otro de los principales miembros del SG-1 cara a cara]


DOCTOR DANIEL JACKSON. INTERIOR DE SU OFICINA PRIVADA.

[La oficina de Jackson es grande. Repleta de libros sobre egiptología y demás civilizaciones antiguas, de estatuas y estantes, urnas y frascos, vasijas y hasta una autentica momia en el interior de una vitrina, me siento como en un Museo de Historia. Jackson, un hombre joven de cabello corto y de lentes de montura metálica, me invita a hojear unos ajados pergaminos de una perdida Dinastía, mientras charla conmigo. Su tono es amistoso y profesional. Sorprende saber que uno esta ante el hombre que descifró la clave para la activación, en la primera misión SG, del Portal]

Usted es un veterano en el SGC, Dr. Jackson. Sus teorías sobre las Pirámides y la civilización egipcia han sido el pináculo para la exploración SG…

No es tan así. En realidad, en mi época de investigador "por mi cuenta", mis colegas me relegaron a uno de los "locos" de la egiptología. El tiempo terminó por darme la razón a mí, así que… [Se encoge de hombros] Y sobre que mis investigaciones fueron "el pináculo para la exploración SG" yo solo les di una manito, nada más. Ellos hicieron el resto [Sonríe]

Usted ha sido protagonista de muchísimas historias que han ocurrido aquí. En algunas ocasiones, hasta su integridad física y mental han estado en peligro. Es usted muy temerario…

La paga lo vale. [risas] Nah, nada que ver. ¿Temerario yo? Creo que usted debió leer esos informes mentirosos donde me pintan como Indiana Jones. No lo soy. Me gusta mi trabajo, me apasionan las civilizaciones antiguas, los idiomas… Creo que soy el que más disfruto con todo esto.

Una confesión inesperada, Dr. Jackson, teniendo en cuenta que uno pensaría que lidiaría con esto como una carga.

Lo es, pero si vamos a ver el lado positivo, yo lo he disfrutado. Al menos, una parte… Creame, otras preferiría que JAMAS hubieran ocurrido.

Doctor, hay muchas cosas que me encantaría preguntarle, pero la que mas me obsesiona y que leí en su informe personal, es la parte en la que dicen que usted estuvo muerto…

Ahm... no, no estuve exactamente muerto, como usted lo entiende, señor.

¿Podría explicármelo?

Bien, es difícil. La palabra clave no es "muerto". Yo fui "Ascendido". Es un proceso en el cual, el cuerpo humano se convierte en energía pura y se desliga de la materia. Tan solo los Antiguos y mas tarde nos enteramos, los Ori, han podido hacerlo. Digamos que cierta "amistad" de por allí me ayudó a Ascender, con lo cual mi "muerte" fue evitada…

Me interesa mucho esa parte relativa a los Antiguos y a los Ori. Leí informes respecto a ellos, pero me gustaría tener, de primera mano, una impresión de todos ellos. ¿Quiénes son exactamente los Antiguos?

Pues, con mis palabras, una pleyade de Seres Ascendidos que alguna vez fueron como usted y como yo, pero que tuvieron la suerte de ser mas evolucionados. Tanto física como mentalmente. Ellos fueron los verdaderos constructores de los StarGates, tanto los de nuestra galaxia como los que seguramente habrá desperdigados por todo el Universo. Amenazados por un gran peligro, muchos de ellos (casi todos) decidieron Ascender, pasando al siguiente Plano de la Existencia, en un modo doble de sobrevivir y continuar evolucionando.

¿Y los Ori?

Lo mismo, pero estos en vez de confiar en la Ciencia, lo hacían en la Religión. Una idea retorcida de la Religión, le aclaro. Los Ori, una vez Ascendidos, se autoproclamaron como dioses. Aunque pareciera que pudieran serlo, lo cierto es que ni ellos ni los Antiguos lo son en verdad. Tan solo son seres que viven en un nivel superior de la existencia, nada más.

Estas entidades, ¿influyen en nuestro mundo o lo tienen prohibido?

A los Antiguos poco y nada les interesa lo que pasa aquí. Contados con los dedos de la mano son las intervenciones que tuvieron con nosotros. Los Ori, muy por el contrario, solo han intervenido para cambiar genéticamente a un grupo de sus seguidores para convertirlos en Priores, especies de sumos sacerdotes o monjes de su falsa Religión, encargados de esparcirla por la galaxia. Los Priores eran el brazo armado de los Ori, quienes tenían prohibido efectivamente intervenir de forma directa, dado que si lo hacían, los Antiguos también lo harían a su vez, pero para luchar contra ellos…

Apasionante. ¿Dónde quedamos nosotros, los pobres seres mortales, en mitad de este conflicto intergaláctico, doctor?

En un no muy buen lugar, me temo. Pero por suerte y después de tantos sacrificios, la amenaza Ori ha finalizado… esperemos que para siempre.

[Jackson se refiere, como no podía ser de otra manera, al incidente titulado "El Arca de la Verdad", acaecido hace poco. Aquel incidente significó el final de los Ori y su religión]

Doctor Jackson, a una de sus colegas le pregunté cual fue el momento más doloroso que debió atravesar en los diez años de servicio en el SGC. Me imagino que usted también tendrá muchos de ellos, pero ahora me gustaría, si puede hacerlo, que me diga cual de todos ellos fue el más triste…

El mas triste…

[Por primera vez de lo que va la entrevista, Jackson suspira y toma asiento. Se saca los lentes de la cara y se masajea los ojos. Mira distraído, luego, una estatua egipcia femenina colocada cerca]

La muerte de mi esposa, Sha're.

[Sha're era una bellísima joven alienígena nativa del planeta Abydos. Jackson la conoció en la primera misión SG. El amor nació entre ambos en esa aventura y luego se casaron. Su secuestro posterior a manos del Señor del Sistema Goa'uld Apophis fue el puntapié inicial para que Jackson se incluyera en el SG-1. Sha're encontraría un triste final mucho tiempo después… y esto era algo que a todas luces, Daniel padecería en silencio hasta el día de hoy]

¿Cómo se continua después de la muerte del ser amado en un lugar como este, Dr. Jackson? ¿De donde se saca fuerzas para seguir metido en este baile después de tamaña pérdida?

Es una buena pregunta. Después de su muerte, pensé que nunca más podría recuperarme. Creo que nadie piensa que se puede seguir adelante luego de la perdida de un ser querido. Lo cierto es que si se puede. SE DEBE. La Vida sigue. ¿Qué ganaría con encerrarme en mi dormitorio y no levantarme jamás de la cama, negando la realidad de los hechos? Sha're estaba muerta y seguiría muerta. Me dolía pensar en esto, pero nada de lo que hiciera cambiaria los hechos. Cuando aceptas la realidad, estas dando el primer paso…

Luego, claro, están los amigos. [Sonríe, lentamente] Aquí, en el SGC, tengo unos cuantos y ya viera, señor, cuan valiosos son. Me ayudaron un montón. No me da vergüenza reconocer esto. Tanto Carter como O'Neill en su momento, así como Teal'c y hasta el General Hammond… es gracias a todos ellos que salí adelante. Se lo debo a ellos… a ellos y a este fascinante lugar, que no deja de sorprenderme día a día.

Doctor, le admiro. Es usted un gran hombre.

No diga esas cosas, amigo. Se hace lo que se puede. Enserio. Somos un grupo aquí, cuidamos el uno del otro. Si no hacemos eso… pues no tendría sentido embarcarse en estas aventuras. La Vida sigue… y uno tiene que seguir adelante. Además, sé que Sha're esta en paz… No soy particularmente Creyente, pero he visto tantas cosas que… bien… Tengo que admitir que hasta es posible que en efecto, Sha're esté en paz tal y como yo lo siento que lo está, en lo mas profundo de… de mi interior.

[Un gran hombre, Daniel Jackson, sin duda. No solo es sabio de mente sino de espíritu. La experiencia, me imagino, lo hizo ser así]