Capitulo 1: crónica de cómo una astrofísica y el Dios del Trueno se enteraron que iban a ser padres

Jane estaba preocupada, hay muchas cosas que una mujer de ciencia puede pronosticar, pero esto sí que no se lo esperaba, sostenía con temor esa delgada decima varita que por decima vez le daba un resultado positivo, mas a ella no le parecía así.

Estaba en la cúspide de su carrera que iba a hacer ahora que esto se le presentaba en el camino este obstáculo tan grande, se había cuidado para que esto no ocurriera, ¿Qué pasaría ahora? ¿Qué le diría a Thor?

Su teléfono sonó:

― ¿Diga?

―Jane, voy para tu casa, ¿ya te hiciste las pruebas? ― pregunto su asistente y amiga.

―si Darcy ya lo hice―respondió mientras se subía los pantalones.

― ¿Qué tal?

―no son buenas noticias

―llevare helado de chocolate― colgó.

Se miro al espejo y se levanto la blusa para poder ver su aplanado vientre. Tenía que ser una maldita broma, se bajo la blusa y salió del baño camino de un lado a otro, haciendo cuentas en su cabeza. Se sentó un segundo, y luego se volvió a parar, casi agradeció que Thor se encontrara en una misión, así ella podía intentar buscarle una solución al problema. Pero, ¿Qué se podía hacer?, ni loca le haría daño, si bien era un contratiempo nunca le haría daño a aquella prueba del amor que ella y el dios del trueno se profesaban.

Solo le quedaba asimilarlo. Escucho la puerta abrirse.

―Toc toc. ―dijo una Darcy sonriendo a medias entrando en el departamento.

―Darcy, estoy muy preocupada. ― hablo una preocupada Jane, llevándose las manos temblorosas a la boca.

―no te preocupes― intento consolar a su amiga dejando el helado en la mesa y corriendo a abrazarla― todo va a salir bien.

Jane rompió en llanto, mientras su amiga le repetía que no había problema y que todo iba a estar bien. Ya más calmada Jane se sentó en el sofá, mirando al vacio, Darcy preparaba un té, así podía tranquilizarla un poco. Le tendió una taza con el aromático y humeante liquido, Jane la tomo en silencio y la bebió igual.

― ¿Cuando llega Thor? ―pregunto Darcy

―el viernes

― ¿Qué has pensado?

―lo voy a tener Darce, no estaba en mis planes, pero ya está aquí.

―A Thor le encantara.

― ¿Tú lo crees? ―dijo Jane, incrédula.

―por supuesto, se emocionara y estoy segura que será un excelente padre.

Jane se sintió más aliviada, y viendo a su alrededor, seguramente tendría que encontrar un lugar más grande para vivir. Se llevo una mano a su aun plano vientre y por primera vez desde que lo supo, sonrió.

Jane esperaba impacientemente en la sala de espera de aquel consultorio, frotaba sus manos frenéticamente. Darcy la miraba divertida, la gran astrofísica Jane Foster se encontraba realmente aterrorizada en aquella salita con revistas de maternidad en la mesa de centro y ni se diga del empapelado de las paredes o los dispersos cuadros algunos de bebés, otros de mujeres amamantando.

―Jane Foster―dijo una mujer rubia con el rostro amable, no debía de pasar los cuarenta― puede pasar.

―gracias―dijo a la mujer mientras caminaba seguida de Darcy

Entraron a un cuarto, casi en su totalidad blanco, una mujer morena con el cabello, aparentemente rizado, recogido en elegante moño, les sonreía sentada detrás de un escritorio.

―buenos días, Señorita Foster―dijo amablemente― soy la doctora Amanda Green, tomen asiento por favor.

―gracias doctora, ―dijo Jane, mientras ella y Darcy se sentaban.

―en que puedo ayudarla―pregunto la doctora

―Bueno―comenzó Jane algo nerviosa― tuve algunas semanas de retraso, me hice una prueba casera y…

―se hizo una docena―intervino Darcy

―bueno, ― prosiguió Jane intentando pasar por alto el comentario de su amiga. ―salió positivo a embarazo.

―bien, acompáñame a la habitación que hay detrás y te hare una ecografía para saber el periodo de gestación.

Jane la siguió esta vez sola e hizo todo lo que ella le indico, se recostó y solo fijo su atención en el monitor.

―mira, ese es tu bebé― dijo la doctora señalando una pequeña mancha en el monitor ―bien aproximadamente debes tener unas siete u ocho semanas. Todo parece bien, le diré a Bárbara que te asigne la siguiente cita en dos semanas, también voy a pedir que te hagas exámenes de sangre para ver tu salud y te daré la medicación adecuada.

Al salir de la habitación una emocionada Darcy miraba a Jane, mientras la doctora le daba las últimas indicaciones y la felicitaba por su embarazo.

Jane se mantuvo callada de camino a casa, Thor llegaba mañana y aun no había planeado que o como decirle. Darcy se canso de esperar a que su amiga hablase.

― ¿quieres comer algo?

―no tengo hambre

―recuerda que tienes que comer por dos

―lo sé, pero no tenemos hambre ― y sonrió

― ¿Cómo se veía? ― pregunto Darcy

―como una manchita en la pantalla

―vaya que profunda eres Foster, ―dijo Darcy riendo― felicidades esperas una manchita.

Ambas rieron, llegaron al departamento de Jane no sin antes y a petición de Darcy, hacer una parada para rentar algunas películas, se le había ocurrido bajar la tensión de Jane viendo comedias relacionadas con el embarazo, y así entre risas, palomitas y situaciones cómicas en la televisión, se fue el jueves.

A la mañana siguiente Jane despertó con un mareo, se sentó en la cama y espero a que el mareo parara. Se levanto con precaución y fue al lavabo, se quedo ahí algunos minutos y se lavo la cara con agua fría. Fue a la cocina y Darcy se encontraba ahí, había decidido quedarse hasta que llegara Thor, la chica estaba haciendo huevos revueltos.

―Buenos días ―saludo Jane

―Buenos días ―respondió y al verla frunció el ceño― ¿Qué ocurre, te sientes mal?

―solo estoy un poco mareada― dijo mientras se sentaba en la mesa

Darcy le sirvió el desayuno, y también se sentó, le dio un sorbo al café y se sintió mejor, apenas dio un bocado al platillo y la nausea volvió más fuerte, corrió al baño. Darcy la siguió y le recogió el cabello, era casi como cuando se iban de copas, Jane siempre había sido muy sensible al alcohol, pero cuando Thor se fue sufrió mucho y le pedía que salieran a beber casi todos los fines de semana.

Jane se levanto tiro de la cadena y se lavo los dientes y la cara.

―iré a prepararte un té y tu deberías descansar un rato. ―dijo Darcy

―Si mamá ―dijo Jane con sarcasmo y una sonrisa― pero Thor va a llegar y tengo que estar presentable.

―el glamour ante todo, ― respondió Darcy divertida―iré a prepararte el té de todos modos, no puedes andar con el estomago vacio.

―Gracias

―De nada

Jane se dio un baño, el agua caliente parecía relajar todos sus músculos, salió envuelta en una bata y abrió su closet. Se puso sus típicos jeans, una blusa de tirantes azul, sobre esta una camisa a cuadros gris. Se calzo sus botas de piso cafés y se sentó en su peinador comenzó a cepillarse el cabello, lo dejo suelto. Se maquillo lo más natural posible, no solía usar maquillaje, pero no quería se notara su palidez.

Unos fuertes pasos se escucharon la entrada del departamento, Jane corrió a la sala esperando que Thor entrara, comenzó a sentirse mal, el rubio entro con una sonrisa en el rostro y no había dado ni tres pasos al interior del departamento cuando una enérgica Jane grito:

― ¡ESTOY EMBARAZADA!

Dicho esto puso los ojos en blanco y se desvaneció, Thor llego a tiempo antes de que se estampara en el piso.

― ¡Jane! ― dijo alarmado― ¿Qué ocurre?

Darcy que había visto todo desde la cocina corrió al botiquín para conseguir alcohol y una torunda de algodón. Volvió a la sala donde un Thor agitaba levemente a Jane que reposaba en el sillón. Lo quito gentilmente, mojo la torunda con alcohol, apenas la iba a llevar a la nariz de Jane cuando Thor la detuvo.

―no le voy a hacer nada malo― dijo

― ¿Qué dijo Jane? ―pregunto Thor un poco desconcertado

―a eso, pues que felicidades grandote, serás padre. ― respondió Darcy con una sonrisa y luego se volvió hacia Jane.

Un sonido sordo se escucho haciendo temblar el suelo del apartamento, una asustada Darcy vio a Thor en el piso, evidentemente inconsciente. Si no le hubiera dado un susto de muerte, Darcy Lewis se habría reído.

Se me ocurrió esta idea y no podía dejarla pasar.

Espero que sea de su agrado :D

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