¡Hola a todo mundo! Aquí les traigo lo que espero sea algo diferente a lo que todos vemos a diario en los fics de High School DxD. Siempre suelen ser repetitivos, o plagiados de otros fics de los cuales hay cientos, y ya solo quedan unas pocas ideas originales que muchos esperan poder copiar en su falta de ética.

Por ello espero que esto sea como una refrescante gota de agua en este mar seco de inspiración.

O eso debería decir. Mi anterior versión fue muy apegada a las novelas ligeras, pero ahora intentaré hacerlo de una forma diferente. Espero que puedan darle otra oportunidad a esta historia, ya que era muy poco original.

No tengo mucho más que decirles ya aclarado lo anterior, salvo que disfruten de la lectura y dejen sus reviews para saber que opinan.


Life 0: Transcender.

Una vez se dijo que todo ser capaz de pensar es capaz de evolucionar, luego se descubrió que todo ser viviente, independientemente de su capacidad de razonamiento es capaz de evolucionar si le da el tiempo suficiente.

Nosotros, los Humanos, somos prueba de ello. Nuestras mentes, antes primitivas, evolucionaron hasta volverse lo que son ahora y constantemente siguen evolucionando, creando nuevas ideas y nuevos proyectos para ayudar a prosperar nuestra civilización. Ante ello, se puede ver que la evolución es una función nata en todo lo que vive, un mecanismo para preservar, mejorar y crear lo necesario para la vida.

Pero, Si nuestros cuerpos, nuestras mentes e inclusive todo lo que nos rodea es capaz de evolucionar ¿Por qué no las almas?

Eso se creía imposible, dada la imposibilidad de siquiera probar la existencia de un alma. Pero en realidad es cierto que incluso las almas son capaces de trascender, de evolucionar. Como todas las cosas existentes, ellas son capaces de cambiar gracias a los deseos conscientes y subconscientes que adquirimos con la experiencia de la vida y con cada golpe que nos da el destino, para de esa al momento de la defunción cambiar en un estallido abrumador de vida. Las almas, y en sí cada parte del ser humano al morir cambia, cambia como el papel es doblado en origami, y al evolucionar continúan con sus historias y crean nuevas historias.

Pero ese suceso es muy extraño, pues hay una chispa en esa alma que desencadena ese suceso, una energía, un sentimiento, un deseo. Todo eso lo libera, libera la Transcendencia. Solo se han contado cuatro almas que lograron alcanzar la Transcendencia, y dos de ellos terminaron deshaciéndose al culminar su larga disputa.

Dos jóvenes, descendientes del Sabio de Ojos Anillados, alcanzaron la Trascendencia al final de sus historias. Un joven de ojos azules cuyo cuerpo encerraba el poder de Nueve Bestias y la fuerza del mundo, se enfrento a una joven cuyos ojos rojos observaban la creación y ojos anillados que controlaban lo que su vista tocaba.

Uno vestido con prendas de fulgor dorado, y la otra con espectrales vestiduras sombrías, fallecieron tras batallar incansables, pero sus almas no fueron tocadas por las heladas manos de la muerte. Ambas almas, Una manchada de oscuridad profunda, y otra vestida con plata y oro, se libraron de la asfixiante oscuridad girando en una espiral que brillaba tal que los eternamente dormidos abrieron vagamente sus ojos para admirar su hermosa luz.

Ambos viajaron entre el reino de sombras, el paraje lleno de luz, y los espacios llenos de nada sin reclamar por ninguna de las fuerzas primordiales, hasta que llegaron a los límites entre cada cosa, y penetraron la barrera invisible que divide a un mundo de otro.

Allí, ahora sujetos por las leyes de seres de fuerza casi inalcanzable y fulgor inexplicable, fueron separados y obligados a reencarnar una vez más como enemigos durante milenios. Uno vestido de fulgor dorado, y la otra con espectrales vestiduras sombrías. Una vez como en antaño, volvían a pelear hasta el cruel final, para volver años después a vivir nuevas vidas y morir por nuevas heridas.

Con cada lucha el mundo quedaba en ruinas, acabando con bien y mal por igual. Los seres de menor fuerza y voluntad débil los admiraban y les temían, a sabiendas de que nunca podrían superarlos. Con el pesar cubriéndolos, ellos reconstruían el mundo cada vez con mayor esfuerzo y los obligaban a crear mayores defensas, y a entrenar mejores soldados para defenderse.

Contadas veces se pusieron de un mismo lado, derrotando a enemigos cuyo poder amenazaba la estabilidad del mundo. Ellos fueron quienes vencieron al Dragón Rojo de Ojos Verdes, y al Dragón Blanco de Ojos Azules. Ellos, quienes encerraron al Ser de Alas Negras y Cuerpo de Dragón en las profundidades del mundo helado bajo el mundo. Ellos, quienes salvaron a la Reina de Nueve Colas de su cruel captor, el Dragón Negro de Ojos Rojos, y la refugiaron en donde las líneas se unen. Ellos fueron quienes hicieron estas y muchas más leyendas en su largas vidas.

A esos problemas se le sumaban viejos conflictos, antiguos enemigos que con odio y rencor consiguieron perseguirlos a través del tiempo-espacio. El Samurái de Mirada Carmesí, La Serpiente de Mil Rostros, El Científico Invencible, La Oscuridad del de la Espiral en Máscara y muchos otros fueron derrotados y convertidos en piedra, pues sus fuerzas no les permitían morir plenamente.

Su poder, ese poder legendario, les valió un título a cada uno, y una profecía fue hecha por cada grupo de seres para presagiar su llegada. Algunos la celebraban, otros rezaban para que ese día nunca llegara. Pero todos sabían que ellos llegarían...

Cuando doce estrellas de blanco y violáceo fulgor se junten en el cielo

Y las demás llamas lejanas desfallezcan hasta desaparecer

El Heraldo de Oro, y la Armada con Sombras

Volverán a ver el mundo con sus ojos de azul y rojo espejeo

Uno con deseos de paz e igualdad

Otra con afán de gobernar en su propia paz

El mundo se sacudirá como en antaño

Y las Sombras, o la Luz, lo abarcaran todo...

.

.

.


Oh, hola. Soy Uzumaki Naruto, y esta es mi historia.

Actualmente estoy viviendo el inicio de mi juventud.

Los estudiantes con los que no estoy familiarizado dirían "¿No es ese Naruto?", haciéndome preguntarme a mí mismo cómo es que conocen mi nombre.

¿Soy popular, dices? No, al menos no lo creo.

Soy famoso por mi optimismo, y por mis bromas jejeje. Ahora me encontraba escondido detrás de un árbol viendo como Matsuda y Motohama abrían una caja con una nota que decía que esa caja tenía lo más valioso del mundo, según ellos, el porno. Jejeje, la reacción en sus rostros cuando la caja exploto cubriendo sus rostros de excremento de perro, jajaja no tiene precio.

Las chicas suelen agradecerme por hacerles esas bromas, aunque yo no entiendo mucho el porque. Yo solo lo hago para divertirme, y ellos son buenos amigos a pesar de su enorme perversidad que tiene prácticamente traumatizada a la población femenina de esta escuela. Hay quienes me dicen "No te juntes con ellos" o "Son mala influencia para ti" pero yo ignoro lo que ese trío de pervertidos hacen, yo no los juzgo y ellos tampoco lo hacen.

Ahora mismo, ya con mi dosis de risas diaria, caminaba a mi apartamento que quedaba muy cerca de mi escuela. La Academia Kuoh.

Pero ocurrió algo que me sorprendió totalmente.

—Por favor, sal conmigo.

¡Una confesión de una chica!

Eso fue raro, por que yo personalmente no buscaba eso todavía. Intente hacerme a un lado y le dije "eh, Sumimasen...eto... No estoy interesado en eso ahora así que..." e intenté irme...pero...

Antes de que pudiera irme ella se aferró a mi manga con expresión llorosa.

—¡Te amo, Uzumaki-chan! ¡Por favor sal conmigo!

—Eto...lo siento pero...tengo novia -Dije casi forzadamente, y fue peor el ver como comenzaba a lagrimear- P-pero... -Extendí mi mano con una sonrisa- Podemos ser amigos.

Ella sonrió limpiando sus lágrimas y tomo mi mano.- Soy Amano Yuuma, un gusto.

—Uzumaki Naruto, un placer.

Ese fue el inicio de una grata amistad. Como no tengo muchos amigos, realmente me alegra el tener nuevos. Yuuma tiene el cabello negro sedoso y un cuerpo delgado. Ella era linda, y cualquiera hubiera dicho que sí, si alguna belleza se acercara y te dijera que te ama, pero yo no podía decir que sí.

Ella tenía una personalidad peculiar, era alegre y adorable. Solemos vernos después de clases, para sencillamente hablar sobre lo que hicimos en el dia y sobre otras cosas. Pero hay temas que ninguno toca...

Ella no pregunta sobre mi novia y mi familia, y yo no pregunto sobre de dónde viene o dónde vive. Pero fuera de eso, era muy agradable hablar con ella.

El tiempo voló, y unas semanas pasaron desde que nos conocimos. Caminábamos de regreso del centro comercial, cuando ella me dijo-

—Tengamos una cita, aunque sea como amigos. Por favor...

Como puso su cara llorosa, que sabe que no puedo soportar, terminé aceptando. Jeje, ella salto con una sonrisa el resto del viaje, pero me alegraba que se sintiera bien.

De hecho, cuando nos conocimos pensé que era una broma jugada por ella y sus amigos. Eso no se puede evitar, pero me alegra haberla conocido. Comencé a sentir pena por mis amigos, Matsuda, Motohama e Issei que no tenían novia o amigas femeninas. Pero no había cosa que pudiera hacer por ellos, debido a su poderoso libido.

Era mi primera cita, así que estaba listo para usar el plan que mi difunta madre me ayudo a hacer para una situación como esta.

Paso uno: Estar Presentable. Me he lavado los dientes docenas de veces desde ayer en la noche y no hay un solo lugar sin lavar. Me puse ropa limpia, y una vez preparado y con la actitud de un chico virgen, llegué al lugar del encuentro tres horas antes de lo acordado. Eso también estaba dentro del plan, según mi madre "Para dar una buena impresión"

Paso dos: Traer un obsequio. En el plan no especificaba qué, pero un modesto ramo de flores me pareció suficiente.

Llegué temprano, como rezaba el plan. Al rato me aburrí y conté un centenar de chicas que caminaban usando lentes delante de mí. Durante ese tiempo recibí un artículo raro de una persona de apariencia sospechosa. Fue una cosa de apariencia sombría con un extraño símbolo mágico y una frase escrito en él: —Tu sueño será concedido. —Yo quería tirarlo a la basura, pero decidí ponerlo en mi bolsillo porque no tenía tiempo de sobra.

Cuando Yuuma-san llegó, vestida con una adorable camisa rosa y una falda purpura, le dije —No te preocupes, yo también acabo de llegar. -Le dije como rezaban las notas de mi madre, y le ofrecía el ramo.

-¡Kya! ¡Es muy bonito, gracias! -Abrazó con una gran sonrisa el ramo, cosa que me alegro bastante.

Comenzamos a caminar tomados de la mano, cosa que no me incomodó. Después de eso, fuimos a diferentes tipos de tiendas, disfrutando de nuestra cita.

Para el almuerzo, comimos en un restaurante familiar, donde Yuuma-chan estaba comiendo un Parfait de chocolate, y yo estaba satisfecho con sólo un buen plato de Ramen. Me sentí como si entendía cómo otros adolescentes se sienten cuando van a una cita.

-¿Ahora dónde vamos? -Me preguntó con una sonrisa. Lo pensé por un momento y sonreí.

-Ya se a donde. Te encantara´Ttebayo.

Fuimos a una tienda de ropa, donde comenzamos a revisar todo tipo de ropa. Como la mayoría era de mujer, no había mucho que pudiera decir.

-Ne, Naruto. ¿Se me vería bien? -Preguntó Yuuma con un hermoso kimono violeta con flores blancas.

No pude evitar imaginármela, y asentí repetidas veces haciéndola reír.- Jiji, entonces me lo llevaré. Será un recuerdo de nuestra amistad.

Ambos sonreímos, antes de que ella volviera a hablar.- ¡Vamos! ¡Quiero ver la lencería!

Me tomó de la mano mientra yo la dejaba ser con la cara colorada. Ella era así, un espíritu libre que adoraba burlarse de mi.

Estábamos en el parque que se encontraba lejos de la ciudad, ya que según ella le quedaba de camino a su casa. El cielo estaba oscureciendo, y salvo nosotros no había nadie. Yuuma-san ya estaba lejos de mí, de pie delante de la fuente.

—Hoy fue divertido.

Eso es lo que dijo mientras sonreía.

Maldita sea, ella es tan linda. El ambiente alrededor de ella emite un buen ambiente. Pero algo me da mala espina, y retrocedo medio paso.

—Hey, Naruto-kun.

¿Qué sucede, Yuuma-chan?

—Hay algo que quiero hacer para celebrar nuestra primera cita.

¡¿Qué?! ¡Esto no estaba en el plan! Todavía hay algo que me da mala espina, no sé como explicarlo.

—Ummm, ¿Qué es lo que quieres?

Aaaah. El tono de mi voz es profundo. Ella debe pensar que estoy pensando en cosas pervertidas. ¿Metí la pata? Pero Yuuma-chan todavía estaba sonriéndome, y ella me lo dijo con una aterradora claridad...

—¿Morirías por mí?

... Ummm. ¿Huh?

—¿Ummm? Eso... ¿Huh? Lo siento, ¿Puedes repetirlo otra vez? Creo que hay algo mal con mis oídos.

Debo haber oído mal. Eso debe ser. Retrocedí unos cuantos pasos, esto se esta poniendo raro. Así que le pregunté de nuevo, pero...

—¿Morirías por mí?

Lo dijo otra vez, mientras se reía. La frase que no tenía sentido alguno. Mi sonrisa habitual se fue, siendo reemplazada por un rostro serio. Esto no es normal, Yuuma.

¡BASS !

Alas negras aparecieron de su espalda. Sus alas negras estaban haciendo ruido y luego, unos momentos después, tocaron el suelo.

¿Qué es eso? Yo sé que Yuuma es linda como un ángel, pero esta aura oscura no puede ser la de un Ángel. No parecía ser una actuación. Sus alas negras hacían juego con la oscuridad de la noche. No se que pensar, pero no dije nada.

Sus lindos ojos cambiaron a unos fríos y tenebrosos, dignos de esa aura de maldad que la envolvía. Pero podía percibir tristeza en ellos.

—Fue divertido el corto tiempo que pasé contigo. Fue como jugar con un niño pequeño. -La voz de Yuuma era muy fría. Su tono era el de un adulto. Su boca mostraba una fría sonrisa, pero parecía un poco forzada.

¡BUZZ!

Se oyó un ruido mucho más pesado que el de sus alas. Esa cosa estaba haciendo un montón de ruido y apareció en su mano. Esa cosa se parece a una lanza. ¿Está brillando? De hecho, eso es una lanza.

Luego, se oyó el sonido del viento seguido de un desagradable Slash. Algo se sintió como si perforara mi estómago. Me di cuenta que la lanza que Yuuma tenía estaba penetrando a través de mi estómago. Ella me apuñaló, pero ¿Por qué? Traté de retirar la lanza pero desapareció. La única cosa que quedó fue un gran agujero en mi estómago y una gran cantidad de sangre saliendo de él.

Me estaba mareando y mi vista estaba empeorando, pero logré mantenerme en pie. Escuché pisadas acercándose. Una suave voz llegó a mis oídos, y elevé la mirada. Era Yuuma, que me veía con una gran tristeza. ¿Por qué?

—Lo siento mucho, Naruto-kun, pero tenía que hacerlo. Eras una amenaza para nosotros, así que decidimos deshacernos de ti. Si yo no lo hacía, también sería eliminada. Si deseas guardar algún rencor, entonces odia a Dios que puso el Sacred Gear dentro de ti. Realmente disfruté del tiempo que pasamos juntos, Naruto-kun...No espero que puedas perdonarme, yo tampoco lo haría.

-¿Na...ni? ¿Sacred...qué? ¿Qu...e eres?...

Fue entonces que caí al suelo sin fuerzas, no pude decir más o hacer más. Oí sus pasos alejarse de mí.

Al mismo tiempo, mis ojos se estaban poniendo borrosos. El agujero en mi estómago debe ser fatal, sin embargo no sentía dolor alguno. Sabía que estaba en un estado realmente malo, porque sentía que estaba a punto de perder la conciencia.

Se debe sentir bien si pierdo la conciencia. Pero si eso sucede, ciertamente moriré. ¿Hablas en serio? ¿Voy a morir a esta edad? Ni siquiera he vivido la mitad de mi vida todavía.

¡Me niego a morir´Ttebayo! ¡Aún hay mucho que quiero lograr! Pero no puedo hacer mucho.

Muchas cosas dentro de mí fueron desapareciendo junto con mi conciencia.

¿Qué va a suceder en la escuela mañana? ¿Estarán Motohama, Issei y Matsuda en shock? ¿Llorarán por mí? Jajaja, no, ni en un millón de años...

Todavía no estoy listo para volver a ver a mis padres, siento que no he hecho lo suficiente para poder verlos a la cara.

Mi mano todavía se podía mover. Toqué mi estómago y acerqué mi mano para verla. Es rojo, rojo carmesí. Toda mi mano está roja. Todo esto es mi sangre.

Entonces me acordé de esta chica.

La hermosa chica de pelo color rojo carmesí. Cada vez que la veía, mis ojos se sentían atraídos por su pelo rojo carmesí.

Si me iba a morir, desearía hacerlo siendo abrazado por una hermosa chica como esa.

Mis ojos perdieron cada vez más su brillo, la oscuridad y el frio me envolvían.

¿Es, finalmente, el fin?

Una sensación extraña recorrió mi cuerpo, un poderoso escalofrío que aclaró un poco mi visión.

A mi alrededor se encontraban cuatro seres vestidos con capas y capuchas negras sin ningún distintivo. Todos eran iguales, y todos me veían.

Uno habló con voz rasposa, casi podría decir que estaba molesto por algo.- ¿Están seguros de que es el correcto? Parece un simple humano...

Otro asintió.- Si, las lecturas no fallan. Además, si fuese normal ya hubiera muerto. Comencemos.

Todos asintieron y comenzaron introducir en mi cuerpo unas gemas de color verde, morado y gris. ¿Qué es esto?

Uno de ellos notó mi mirada confundida y acarició mi frente. Su voz era femenina, suave como la tela pero cargada de sabiduría.- Tranquilo. Debes tener muchas preguntas, pero tu MP te las responderá. Por ahora...descansa.

Se desvanecieron tan rápido como llegaron, casi como si fuesen espejismos. ¿Estaré enloqueciendo? ¿O es solo la cercanía a la muerte?

Contemplando un cielo negro sin estrellas, me quedé allí esperando el fin.

Tú eres mi portador, ¿No?

De repente, alguien apareció frente a mí, junto con su voz. No puedo decir quién es, ya que mis ojos están muy borrosos. Solo podía distinguir un color violeta, como el de los ojos de Yuuma, pero mucho más profundo...

Esta bien, no tengas miedo. ***** te ayudara...

Un extraño escalofrío recorrió mi cuerpo, seguido de un extraño alivio.

Lo último que vi, un brillo multicolor alejándose de mi...